Si no queréis spoilers no leáis el fic, tiene unos cuantos del capítulo uno de la tercera temporada, pero ahora que os he dicho esto, ahora es vuestro turno, leerlo o no, eso ya cae bajo vuestra responsabilidad.
John miró a Sherlock sin saber que podía hacer allí, había aprendido a vivir sabiendo que estaba muerto, había rehecho su vida, hasta ese momento todo iba bien.
— ¿La versión corta? – Preguntó el detective mirando al suelo cabizbajo y John asintió – no estoy muerto.
John empezó a recordar el momento en el que encontró, el "cadáver" del detective empapado de sangre y muerto en el suelo del hospital, para que todo fuese una mentira.
— Tú… sabes… estabas muerto –la voz de John no eran muy calmada, estaba cortada por la impresión.
— John, lo siento – John se levantó y contuvo sus ganas de pegar al detective, pero poco tiempo le duraron, que le pegó haciendo que les sacaran del restaurante.
Después de intentarle explicar a John quien había estado implicado en su falsa muerte, como había sido todo y de una nariz sangrando, se despidieron, hasta que se volvieron a ver cuándo John se había cortado el bigote, que tanto había odiado Sherlock desde un principio.
— En tu funeral hablé – comentó John con el semblante triste.
— Lo sé, estuve allí – respondió el menor de los dos.
— Pedí por favor que no estuvieras muerto – comentó John mirando a Sherlock a los ojos.
— Y tus súplicas se han cumplido, estoy a tu lado – Sherlock se acercó al médico, que pudo notar como la respiración de este se aceleraba.
Sherlock se encontraba mal por cómo había sorprendido a John con su regreso, que debía arreglarlo.
— Vamos – cogió la mano del médico y se lo llevó por la puerta trasera – te voy a llevar a un sitio.
— Sherlock, la prensa – dijo el médico algo desconcertado – te esperan.
— Que esperen, solo quiero estar contigo – aquellas palabras calaron hondo en el médico que se sintió alagado.
Corrieron hasta que llegaron a una calle poco transitada, Sherlock necesitaba hacer una cosa, así que apoyó a John contra una pared, se fue acercando al médico y le besó, mientras tenía sus manos apoyadas en la pared.
John correspondió el beso, le gustaba como sabían los labios del menor, le gustaban mucho.
Sherlock agarró a John y se lo llevó hasta la orilla del Támesis, le gustaba pasear por allí entre tanta gente sin ser visto ni reconocido por nadie.
John era genial y tenerlo a su lado aún más, le gustaba sentirle cerca.
Sherlock se había portado mal, pero había sabido arreglar su error con aquellas palabras y sobre todo el beso.
Ambos se querían y se notaba, estaban hechos el uno para el otro.
He escrito esto porque necesitaba relajarme y el Johnlock es algo que me relaja, así que dejar review.