Hola a todos! Vengo con una nueva historia de amor SwanQueen jajaja espero que les guste y tranquilos que el otro todavia no esta terminado pero lo terminare! Sin mas rodeos, os dejo que disfruteis y me deis una oportunidad porque me gusta mucho esta historia. Besos!
CAPITULO 1: Bienvenida Regina Mills
Era lunes de día, pero Emma caminaba por las calles en dirección a su casa después de una noche de fiesta con los amigos. Llevaba una falda corta de cuero, unas medias negras bastante transparentes, un mini top de cuadros tapado por una chaqueta de cuero negro, botines negros con cordones atados, el rímel un poco corrido y los rizos rubios largos sueltos.
Cuando llego al frente del portal de su casa, vio como en la habitación de su hermano Neal había luz, seguro que ya estaba vestido para ir a clase. Emma miro al suelo desesperada, como ese chico podía ser su hermano. Eran simplemente polos opuestos. Mientras que Neal era buen hijo, buen estudiante y buena persona, Emma era todo lo contrario, eso pensaba ella.
La rubia le tiro una piedra a la ventana de su hermano y este en seguida vio a Emma. Esta le hizo el gesto de siempre y Neal obedeció poniendo la música muy pero que muy alta como casi todas las mañanas para que su hermana pudiera entrar en casa sin que su madre se enterara.
Emma subió las escaleras para después entrar en su habitación no sin antes susurrar un gracias a su hermano que metía los libros de la escuela en la mochila. Se quitó la ropa y se vistió el uniforme de la escuela para luego desmaquillarse con una toallita y volverse a poner un poco de maquillaje. Bajo de nuevo las escaleras para meterse en la cocina para beber una taza de café y salir otra vez por la puerta pero su madre le cogió de la mano.
-A dónde vas-se puso seria Mary Margaret.
-Pues al infierno, tu qué crees?
-Hija, estas muy delgada tienes que desayunar y...
-Mama déjame.
-Ayer me llamo el director otra vez.
-Que pesado... Entonces quieres que le recuerde que tengo padre y que estas casada con él?
-Em te aseguro que si llama otra vez... De esta no vas a pasar... Te juro que te mando al internado y...
Pero no pudo terminar la frase porque Emma le cerró la puerta en toda la cara con fuerza. Espero a que su novio Killian viniera con el coche para ir al colegio.
No muy lejos de ahí, Regina se levantó al escuchar su despertador sonar. Estaba como nueva, había dormido horas seguidas y su humor no era de perros como sus padres que les escuchaba desde su habitación gritarse el uno al otro sobre cosas que Regina no entendía muy bien. Se puso el uniforme, se dio cuenta de que a la falda le habían añadido más tela para que fuera más largo y en seguida le vino la cara de su madre a la cabeza.
Se maquillo y salió de su habitación metiendo dos libros en la mochila. Bajo las escaleras hasta la cocina y cogió las tijeras para cortarse la falda aún más corto del que estaba antes de que su madre le cosiese más tela.
-Regina que le hiciste a la falda!-le grito Cora al ver a su hija enseñando tanto las piernas por la falda mientras cogía dos tostadas.
-No mama, que le hiciste tú.
-No voy a dejar que te vayas como una prostituta al instituto.
Regina la miro con cara de asco, le dio un mordisco a una tostada y dejo las sobras encima de la mesa para joder a su madre. Metió café para llevar y salió de casa escuchando a su madre gritarle, pero no le hizo caso.
-Adiós señorita Mills.
-Adiós Johanna-le sonrío a su criada.
Entro en el garaje y cogió la moto para ir al colegio.
-Creo que nunca hemos ido tan temprano al colegio-se río Emma sentada en la parte del copiloto mientras Killian conducía.
-Es verdad...-se río el también.
El semáforo se puso en rojo y pararon. Segundos después una moto se paró a su lado. Emma giro la cabeza y se atraganto con su propia saliva al ver esas piernas que tenía la conductora de la moto. Estuvo unos segundos contemplando su belleza hasta que escucho la voz de Killian.
-Regina Mills...-susurro mirándola embobado.
-Que?
-Que es Regina Mills.
-Que?
-Es la hermana pequeña de Zel, la que se fue a Hawaii a estudiar con su padre por problemas con la madre.
-Si, ya se quien es Regina Mills.
Emma negó con la cabeza. Empezaba a cabrearse y no sabía porque. Esa no podía ser Regina, donde había quedado esa niña monja y tímida?
-Como sabes que es ella si lleva casco?
-Bueno querida, esas piernas nunca se olvidan.
-Si nunca las enseñaba.
-Bueno digamos que la vi cuando volvió.
-Dios mío es una cría...
-Em, tiene 17 años, tampoco es una cría...
-Pues eso, un año menos... Y dos que tú.
Enfadada, giro la cabeza para no ver la cara de su novio y esta vez se fijó en los ojos de la chica ya que era lo único que podía ver de su cara por el casco. Sus ojos, que ahora la miraban, eran color chocolate. Preciosos. Perfectos. Hermosos. Podía también ver como su melena larga morena salía del casco. El semáforo pasó de estar rojo a verde y Regina acelero la moto para perderse en la carretera.
-A qué esperas?-se enfadó Emma al ver que su novio no aceleraba el coche.
-Dios con que humor te has despertado?
-No me he despertado...
Killian decidió ignorar a su novia y acelero el coche hasta llegar al colegio. Al aparcar el coche vio la moto de Regina.
-No me esperes, entra-le dijo Emma borde y Killian le hizo caso.
Sin pensarlo dos veces, saco las llaves de casa de la mochila y empezó a rayarle la moto a la chica de ojos hipnotizantes. Cuando acabo le dio una patada de rabia tirándolo al suelo y entro tarde a clase. Sintió que toda la clase le estaba mirando y murmurando cosas por lo bajito. Se sentó al lado de su mejor amiga Ruby y saco el libro para apoyar su cabeza y dormir. El profesor ya no le hacía ni caso, le salía mejor dejarla ahí dormir, si no, no haría más que molestar a la clase. Cuando sonó el timbre del recreo las dos se sentaron en el gran césped mientras veían a Killian y a sus amigos jugar al baloncesto.
-Se puede saber por qué me mira todo el mundo hoy?
-Ahora que no está Zelena aprovecho. Sabes que Regina se lío con Killian este sábado?
-Regina Mills?
-Si ha vuelto a la ciudad.
-Ya lo se la he visto-puso cara de asco-Es imposible, Killian no salió el sábado.
-Emma creo que necesitas ver esto.
Ruby saco su móvil y le enseño una foto que claramente había sido colgado en twitter por alguien. La rabia empezó a crearse en Emma de repente y se levantó con lágrimas en los ojos directa al campo de baloncesto. Delante de todo el mundo le empujo con fuerza hacia atrás.
-Eres asqueroso Killian. Con ella? en serio?
-Vamos Emma... No me digas que tú tampoco te has liado con nadie con lo que eres.
Emma no aguanto más y le dio un manotazo en toda la mejilla para largarse de ahí corriendo a los baños. Al entrar empezó a golpear todas las puertas que veía y a gritar maldiciendo a Killian por haber sido un hijo de puta. Lo que no se dio cuenta es que Regina estaba pintándose los labios pero en seguida puso los ojos en la rubia que estaba montando un espectáculo.
Cuando Emma se apoyó en un lavabo para contener las lágrimas que no paraban de salir de sus ojos, se dio cuenta de que había alguien más. La miro a los ojos primero y Regina al devolverle la mirada supo quién era. Después bajo hasta sus labios y se mordió el suyo para seguirle hasta las piernas que entonces donde sintió dolor fue entre sus piernas. Como es que aquella diosa era Regina Mills?
-Estas hasta en la sopa!-grito saliendo del baño enfadada.
-Emma?
Ella estaba enamorada locamente de Killian y este siempre le hacía menos caso, solo la usaba por su físico y el estatus de rebelde que tenía la rubia le ponía. Emma al principio también salía con él porque era mayor que ella y guapo y popular. Pero hacía tiempo que el capricho había llegado a niveles incontrolables y pensaba que no podría seguir sin él.
Su vida era un caos y no le deseaba a nadie. Su padre, Gold era un borracho que nunca estaba en casa y cuando estaba pegaba a su madre. Mary Margaret llevaba con cáncer varios años y la rubia lo pagaba todas las desgracias con su madre por no saber cómo afrontar la situación. La insultaba, le faltaba el respeto y no le hacía ningún caso. Sus notas eran pésimas y si no mejoraran la meterían en un internado. Lo único que la mantenía con ganas era su hermano Neal, sus mejores amigas Ruby y Zelena, y Killian. Habría que descartar al último.
Regina llego a casa cansada después de una tarde en el gimnasio y se tiro a la cama cogiendo el Iphone. Tenía varios Whatsapps de Killian, que pesado. No le dejaba en paz ni dos horas. Decidió ignorarle ya bajo las escaleras para sentarse con sus padres en la mesa.
-Que tal tu primera semana Regina?-le pregunto Cora secamente, por simple educación.
-Bien, normal.
-Tienes amigos?
-Los de siempre me han tratado muy bien y hemos olvidado los problemas del pasado y...
-Hija no se habla cuando estamos comiendo-le corto la madre.
-Estaba muy bueno mama-se levantó Zelena recogiendo el plato de su mesa, Regina la imito.
Regina subió las escaleras para meterse en su habitación y ponerse el pijama para después meterse en la cama con el portátil Mac. Empezó a ver Anatomía de Grey mientras hablaba con sus amigas de Hawaii por el Iphone.
Echaba de menos Hawaii, allí tenía sus amigos y vivía su vida con su padre. Había tenido problemas con Cora y entre las dos habían decidido que se fuera con su padre que estaba de negocios. Pero le habían hachado del trabajo y era hora de volver a la vida normal.
Recordó lo que paso en el baño y con la curiosidad, buscando y buscando encontró el Instagram de Emma gracias al de Zelena y estuvo observando sus fotos. Dios, no la recordaba tan perfecta. Era hermosa y tenía un cuerpo de infarto, muchos followers y muchos likes. De repente se sintió tan mal por haberse liado con Killian, en algunas fotos vio como salía liándose con él con comentarios como "para toda la vida", "gracias", "eres el único", "eres el mejor", "te quiero"... Ahora entendía toda la escena del baño. "Muy bien Regina, has empezado con buen pie"
Corrió a la habitación de su hermana y al abrir la puerta la vio sentada en la cama con el libro de matemáticas. Salto encima de su hermana mayor y la abrazo muy fuerte.
-Lo siento, lo siento, lo siento... Yo no lo sabía...
-Que pasa Gina?-Zelena empezó a preocuparse.
-Killian... Emma...
-No entiendo que quieres decir...-la soltó para que la mirara a los ojos.
-Me líe con Killian...
-Joder Regina.
Bienvenida
