South Park es propiedad de Trey Parker y Matt Stone
The game of the deadly sins
LUJURIA
{KennyxStan}
Recargó el rostro en su mano pasando la mirada por el cuerpo del muchacho sobre la cama y, momentáneamente, se perdió en sus sucios pensamientos sonriendo lascivamente. Con un suave arqueo de cejas observó al chico en la orilla de la cama, se inquietó con la curvatura de los labios del contrario, que, simplemente no demostraban nada bueno. De forma arisca retrocedió en la cama hasta la orilla contraria, quedando de espaldas al rubio.
Habían estado toda la tarde elaborando y desarrollando el proyecto de clase que se les asignó, al final lo terminaron satisfactoriamente, aprovecharon para tomar un descanso, pero quién diría que el rubio se pondría caliente.
-Stan –escuchó su nombre salir de forma de sutil a través de los labios rosados y carnosos del rubio. Tembló ligeramente y se le erizó la piel incontrolablemente.
-¿Sí? –continuó de espaldas al otro. Rió nasalmente admirando la espalda del pelinegro. Con cautela se apoyó en la cama y gateó hasta llegar al otro, sorprendiéndolo cuando, con la misma cautela, pasó sus brazos alrededor de su cintura apegándolo hacia sí. Sintió la tensión que de pronto tomó el otro y volvió a reír. Apoyó la barbilla en el hombro del tenso muchachito y se acomodó de tal forma que Stan quedara entre sus piernas. Sintiendo el dulce aroma que el pelinegro despedía se relajó completamente, pero esos pensamientos continuaban en su mente, opacándola poco a poco, nublándole, poseyéndole.
-Hoy estás apeteciblemente encantador –le dijo con voz ronca cargada de morbo, provocando que el calor subiera a las mejillas del pelinegro. No le dio el tiempo necesario al chico para reaccionar y comenzó a dar suaves lamidas en su cuello blanquecino, los temblores no se hicieron esperar, Kenneth podía sentir cómo se le erizaba la piel al muchacho. Sonrió clavando con suavidad los dientes en la piel haciéndolo jadear de sorpresa.
El roce del aliento caliente del rubio contra su oído le había hecho estremecer, el tono que el muchacho había usado era diferente esta vez, era un poco más sugerente de lo común, parecía urgido, apurado. Sin dudas estaba más pervertido de lo normal. Volvió a jadear al sentir las traviesas manos del oji-azul pasearse por su cuerpo con tremenda lujuria cargada. Le detuvo con suavidad apresando esas traviesas manos entre las suyas, hizo una leve presión y suspiró.
-K-Kenny, hoy estás más raro –mencionó con cierto titubeo. La inseguridad en la voz del pelinegro le incitó para lograr concretar el encuentro que quería tener. Haló levemente de sus brazos logrando soltarse con facilidad.
En un abrir y cerrar de ojos ya se encontraba apresado entre el cuerpo del rubio y la cama. Le miró con temor; los ojos del rubio estaban completamente opacos, era un azul tan profundo y atrayente. A través de su mirada, sin querer, transmitió aquellos pensamientos pecadores al cuerpo del joven bajo suyo. Stan se incorporó levemente llegando a rozar los labios sedientos de contacto del rubio haciéndole perder la cordura que lo tenía contenido.
-Te daré tan duro que no podrás sentarte en una semana –gruñó sobre sus labios, con la calentura subiendo a cada segundo.
-Pervertido… –selló sus labios en un candente y demandante beso que dejó desprender la lujuria de ambos cuerpos en aquella pequeña habitación.
{Lujuria: deseo desordenado por el placer sexual}
Y ... tadah~ dejen sus reviews si esto merece seguir o no ~
Kami fuera ~
