Lucha, cae, se levanta y sigue luchando. No se rinde, preserva. Aprende, entrena, perfecciona. Algunas veces cambia su técnica, planea otra estrategia, pero intenta ser mejor que ella.
La ve y quiere superarla. Debe hacerlo, lo intenta y lo seguirá tratando hasta conseguirlo. Se niega a creer que ella solo tiene ese potencial. Debe poder dar mas.
Kagami tiene su mejor rival.
Es fuerte y por eso ella debe serlo mas. Mejora y ella también lo hace. Sucesivamente iban avanzando y Kagami no debía detenerse. Nunca debía rendirse.
Todos los días era una competencia, no descansaba, su único deseo era superarla.
Era difícil, pero no imposible.
Era su mayor competencia, era la única que debía vencer. Esa rival digna que veía todos los días, a través de un reflejo.
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No hay mayor rival que ti mismo, ¡Supérate!
