Que tal, bueno este TS es una colaboración con mi amigo resdio, sinceramente el casi escribio todo, pero yo le di la idea ^^U, espero q les guste

-Aclaraciones-
Lo escrito en cursivas son los recuerdos

Preludio de muerte

Una noche más de Halloween, tratando de conciliar el sueño, siempre es lo mismo cada año. Cierro los ojos y pretendo sumirme en mis sueños por segundos, pero miles de gritos…, gritos de dolor y desesperación de sus víctimas resonaban en mi cabeza, no me dejaban en paz desde el año en que lo conocí, al saber su pasado, creí que podría regenerarlo, ¿pero ahora? después de años de no verlo… después de aquella amenaza. Pareciera que me observa todo el tiempo, viendo cada movimiento para disfrutar cuando regara la primera gota de mi sangre.

No sé por qué, pero un escalofrió invadió mi cuerpo; me sentí helada, mis huesos comenzaron a dolerme, me desespere de no tener un sueño tranquilo. Desperté entre lamentos y gritos, sudando, recordando que me pasaba, debía olvidarlo pero..., ¿Cómo? salí de mi habitación, estaba aterraba estar sola. Mi esposo había tenido que salir de la casa, rogaba en mi interior para que regresara rápido, me sentía indefensa; quería salir huyendo, no podía. Mi miedo era casi palpable, cada rincón sin luz, me provocaba terror, estaba al punto de un colapso psicológico, comencé a respirar con dificultad, pero como una salvación, como caído del cielo, oí la puerta principal abrirse.

Olvidándome de mis miedos, baje con rapidez al primer piso, fue cuando escuche algo romperse; corrí para reconocer que se había pasado; tal vez aquel jarrón suizo que mi madre me dio como regalo de bodas, no me importaría, solo quería ver a mi marido y sentirme protegida.

-¡Sakura!—me grito mi esposo con dificultad, me preocupe.

Termine de bajar las escaleras, vi a mi esposo; su playera blanca, ahora era roja; se encontraba sangrando. Tenía que ser un sueño pero sabía que no lo era, así que corrí hacia él; le quite la playera para ver las heridas en su pecho. Tres puñaladas habían sido más que suficiente para dejarlo en mal estado, aunque sabía de medicina, no podía concentrarme, era claro que no habían dañado sus órganos vitales, pero moriría si el sangrado no se detenía.

-¿Qué te sucedió?—no dejaba de verlo con terror, sentía como si mi corazón fuera a detenerse en el momento que el dejara de hablar

-¡Vete!—respiraba con dificultad y yo seguía tratando de calmar mis nervios

-¿Quién te hizo esto?— las lagrimas recorrieron mis mejillas, estaba aterrada; no podía tranquilizarme

-¡Ah!—se quejó del dolor—Sakura—hablo débilmente

-No te fuerces—lo abrace con todas mis fuerzas, no podía verlo así, lo necesitaba

-El…el—tosió sangre en abundancia

-No hables, te llevare a un hospital—no soportaba verlo así, tenia que hacer algo o podría perderlo

-No llegare con vida—agrego, deseaba matarme las esperanzas que tenia, que era tan importante como para perder las ganas de vivir de esa manera, o que había sucedido para que me dijera esa palabras llenas de miedo

-¿Quién fue la bestia que te hizo esto?—Quien lo haya hecho no podía tener corazón

-¡Huye!—me grito antes de caer inconsciente por la pérdida de sangre

No pude resistirlo más, lo abrace con las pocas fuerzas que aun sentía y mis lágrimas cayeron sobre su rostro, aun podía sentir su respiración sobre mi pecho.

-¡Jajajajajajaja!—una carcajada me estremeció—Que tierna escena—reconocí la voz de inmediato

Voltee para confirmar mi sospecha y allí estaba el, sobre el umbral de la puerta. Su figura, sus orbes azulados que alguna vez me dieron tanta confianza, ahora me provocaban terror.

-¡Vamos!—exclamo—Así saludas a tu ex novio, di algo—extendió sus manos, mientras profanaba mi casa, no podía quitarle la vista de encima, pero esa sonrisa llena de placer, me agobiaba

Trague un poco de saliva y sin dejar de abrazar a mi marido, le pregunte—T…tu—tartamudee un poco-¿Tú le hiciste esto a Sasuke?—me temía la respuesta, mi respiración si aun se podía; se agitaba mas, con solo verlo experimentaba el verdadero sentido del terror

-Sería un regocijo decirte que si lo hice, pero…-hizo una pausa que provoco un silencio sepulcral entre nosotros dos—Yo no lo hice—sonrió hipócritamente

-¡Mientes!—me arme de valor para enfrentarlo—Nos tienes celos, por eso lo hiciste—

-¡Hmm!—hizo una mueca ocultando su sonrisa—La señorita Haruno—se mofo en silencio al pronunciar esas palabras—Perdón… La señora Uchiha, se arma de valor y enfrenta a un antiguo asesino—me miro retándome, sabia que no podía quedarme con los brazos cruzados

Coloque sutilmente a Sasuke sobre el suelo, me levante y me dispuse a darle una cachetada, pero sobre la parte baja de mi espalda sentí el frió metal entrar en mi cuerpo, un dolor inimaginable me lleno, grite, solloce mientras él se regocijaba al verme quejarme del dolor. Logre voltear para ver a mi atacante. Unos grandes orbes perlados, me sorprendió verlos, nunca la creí capaz de tal atrocidad.

-¿Hinata?—aquella a la que alguna vez considere mi amiga, era la que me había apuñalado

-¡Jajajaja!—carcajeo aquel hombre del que años atrás creí estar enamorada-¡Bellísimo!—continuaba riendo, el muy maldito se burlaba de todo—La amiga tierna y noble acaba con la poderosa y respetada señora Uchiha—se acercó a Hinata—Esto es digno de una noche de Halloween—

-¿Por qué?—mire a los dos, mientras me hincaba por el dolor-¿Por qué Naruto…, Hinata?—

-¿Por qué preguntas cuando tú tienes la respuesta?—oí a Hinata hablar con tanta frialdad, sin miedo.

La chica tímida, de la cual nunca se esperaría una cosa tal malvada, había desaparecido. Me empecé a sentir débil, mis parpados se hicieron pesados, mi vista empezó a nublarse y mi audición disminuyo considerablemente, no lograba oír lo que hablaban. Sin pensarlo caí al lado de mi marido, lo vi inconsciente o tal vez muerto, todo esto era mi culpa, los dos tenían razón, yo tenía la respuesta a mi propia pregunta. Cerré los ojos para recordar como lo conocí, como llegue a esto y responderme a mí misma.

Hace algunos años atrás

Universidad de Konoha

-¡Chicos!—hablaba el aburrido profesor—Tenemos a un alumno nuevo—lo que faltaba otro raro más— ¡Por favor! Denle la bienvenida al señor Uzumaki—el profesor abrió la puerta del salón

Allí estaba Naruto, rubio de ojos azules, mirada fría, pero trataba de compensarla con su amable sonrisa, era tierno, amable, honesto y amigable. Yo como la presidenta del grupo, le tuve que mostrar las instalaciones de la universidad, al principio era molesto, una chica de la alta sociedad, proveniente de una familia multimillonaria, como se podría rebajar a enseñarle a un chico común y corriente sin apellido de abolengo.

Una semana fui, por así decirlo, su guía turística en la universidad, me costó admitirlo con mis amigas, pero en verdad era un chico que te robaba la sonrisa y poco a poco me hice su amiga, me encantaba estar con él, me gustaba verlo sonreír. Cuando le preguntaba por su familia, se quedaba callado o cambiaba el tema

El tiempo paso, yo era su única amiga y el no parecía tener ningún problema con eso. Nadie más en la universidad le hablaba, se hizo de una fuerte rivalidad con uno de mis pretendientes, Uchiha Sasuke, había tenido un noviazgo fugaz con él, su actitud de niño mimado me molestaba. Siempre molestaba a Naruto llamándolo un perdedor, idiota, Naruto pasaba de él y eso le molestaba, varias veces lo defendí, pero podía notar una furia incomparable en Naruto.

Cierto dia, Ino entro a sacarme de la biblioteca de la escuela, diciéndome que Naruto y Sasuke se estaban agarrando a golpes, me sorprendí mucho. Naruto era muy tranquilo y siempre se calmaba, pero Sasuke debía de haberle dicho algo para hacerlo llegar a los golpes. Cuando llegue al lugar en que estaban peleando, me imagine a Naruto completamente derrotado, golpeado o algo peor, pero mi sorpresa fue mayor al ver a Naruto de pie, con algunos golpes, mientras que Sasuke con el pómulo inflamado y el labio roto, sangrando abundantemente de su boca. El rostro y la sonrisa de Naruto eran diferentes, parecía disfrutar ver a Sasuke así, me lleno de terror, pero Sasuke no se quedó tranquilo, lo miraba desafiante, se notaba algo de miedo en su rostro, pero su boca y su orgullo era mucho mayor.

-¡Asesíname!—grito-¡Mátame como mataste a tus padres!—no comprendía lo que Sasuke decía, pero Naruto estaba furioso, lentamente se acercó a Sasuke, se llevó su mano a su bolso.

Sin pensarlo tome sus manos, el me volteo a ver y se tranquilizó. Estaba molesta con Sasuke y le advertí.

-Deja de inventar rumores ridículos—una rabia descomunal me llenaba por dentro

-No son rumores—se levantó ayudado de sus amigos—El idiota acaba de salir de prisión, asesino a su familia cuando tenía diez años, es un asesino peligroso—voltee a ver a Naruto, el simplemente miraba cabizbajo

-No es cierto—Naruto se defendió—Si fuera un asesino te hubiera aniquilado desde hace tiempo—sonrio

-Ya deja de inventar estupideces—mire molesta a Sasuke—No vuelvas a molestar a mi novio—sin pensarlo lo dije, pero si así era la única manera de mantener alejado a Sasuke de Naruto no me arrepentiría o eso creía

La multitud de estudiantes se dispersó, Sasuke se tragó su orgullo y se retiró. Mire a Naruto con preocupación, lo tome de la mano y me lo lleve fuera de la universidad, las palabras de Sasuke resonaban en mi cabeza, quería saber si era verdad. Por alguna razón Naruto no hablaba de su familia y la idea del asesinato me parecía la explicación.

Llegamos a una cafetería cerca de la universidad, pedimos un café cada quien y con mi pañuelo limpie los golpes que tenía a causa de Sasuke. Lo mire fijamente y el me miro de la misma manera, no sabía cómo preguntarle si era cierto lo que Sasuke había dicho. Me quede callada, no tenía nada que hablar mi mente quedo en blanco.

-¿Quieres saber si es cierto?—Naruto hablo con absoluta sinceridad

-No te puedo mentir—sonreí—Aunque Sasuke es un arrogante, orgulloso y hablador, algo de cierto tienen sus palabras—

-Es verdad—me sonrio, pero yo me llenaba de curiosidad

-No te quiero creer—le reclame, pero sus ojos me miraban con sinceridad

-Imagino que recordaras del incidente en el pueblo del remolino—

-Algo, no mucho—lo mire con extrañeza

-Se habló poco—suspiro—Todo el pueblo fue asesinado en un solo día, desde niños hasta los más viejos, nadie quedo con vida—

Mire con asombro a Naruto, el había matado a todo un pueblo, pero porque razón, no le encontraba lógica, como un chico tan noble y sincero había podido llevar a cabo tal atrocidad

-Se lo que te estas preguntado—interrumpió mis pensamientos—Esa gente me trataba muy mal, empezando por mis padres—apretó su puño con furia—Me llene de odio y asesine a todos sin pensarlo, uno a uno los fui matando, lenta y silenciosamente—me aterro su manera de describir las cosas

Me explico detalle a detalle como los asesino, desde los más pequeños hasta los más viejos, todos mientras dormían, si uno se despertaba el los asfixiaba y posteriormente los mataba aunque ellos pidieran perdón. Cuando me narraba como asesino a sus padres, sentí dolor en sus palabras, yo no podía seguir escuchándolo, no me gustaba verlo tan triste, sin pensarlo lo bese y calle su relato. Él se sorprendió mucho, pero termino correspondiendo mi beso, ante la falta de aire nos separamos.

-Perdón…-le dije

-Yo debería de pedirte perdón—me sonrió

-¡No!—murmure casi en silencio, ahora estaba claro me había enamorado de él o eso pensaba—Lo que dije hace rato, quiero que sea realidad—le sonreí con mis mejillas sonrojadas

El simplemente me sonrió y me beso, sus labios me parecieron dulces, una sensación inigualable, pero yo tenía miedo, tenía algo de miedo al estar con un posible asesino.

-Naruto—le hable con seriedad a lo que él se sorprendió—Prométeme una cosa—

-La que tú quieras—me sonrió como solo él sabe hacerlo

-Prométeme que nunca más vas a volver a asesinar a alguien—le tome de las manos y le miraba con preocupación

-Te lo prometo—sonrió—Es una promesa de por vida—me beso sellando así su promesa

/

-¡Hey! ¡Despierta!—Naruto me golpeaba suavemente en mis mejillas—No es divertido si te quedas inconsciente—el muy bastardo sonreía al decirme eso

Abrí los ojos y allí estaba el semihincado, estaba a la altura de mí, parecía que me había desmayado y ellos me habían colocado sobre el sillón de mi sala. Lo primero que hice fue buscar a mi marido, logre visualizarlo sobre el otro sillón, empecé a creer que estaba muerto y como si me leyera la mente dijo:

-Tranquila—miro a mi marido—Aun está vivo, es débil como todos los Uchiha, pero se aferra como perro a la vida—sonrió macabramente

-¡Imbécil!—le grite—Mi familia y su familia estarán detrás de ustedes—le amenace, tenia esperanzas que retrocediera

-¡Ja!—sonrió hipócritamente Hinata—Querida amiga, tu familia y la del cerdo Uchiha son historia—sonrió de medio lado y sus ojos se abrieron demostrando una locura

-¡Mentira!—no quería creer que eso fuera cierto

-¡Oye! No taches a Hinata de mentirosa—hablo con hipocresía, me sujeto con firmeza de la ropa—No ves que ella es tierna y noble, jamás miente—me golpeo en la cara, se levantó y se acercó a Hinata solo para besarla apasionadamente—Tus padres te mandan saludos—pronuncio con satisfacción, esculcó en sus bolsillos y saco dos anillos llenos de sangre, los reconocí con solo brillar, eran los anillos de compromiso de mis padres—Te mandan un souvenir y un saludo, pero…-me lanzo los anillos—Pronto los veras y no creo que sea necesario gastar mi saliva—

-¡Maldito! Me prometiste que jamás volverías a asesinar a nadie—le mire con lágrimas en mis ojos

-¡Hey!—reclamo—Yo no mate a nadie, aun mantengo mi promesa—sonrió—Todo fue perpetrado por Hinata, ella los asesino… a tus padres, a los Uchiha, aunque le tuve que dar una ayudadita con Itachi, pero ella lo finiquito—volteo a ver a Hinata que le veía con ojos de amor, esos ojos con los cuales yo le vi hace tiempo—Hubieras visto la cara de súplica de Itachi, quien lo diría el chico de mirada inexpresiva y aparentemente sin sentimientos, clamo por su vida y frente a una chica—carcajeo estridentemente, nunca había visto tal locura en él, era un maldito maniático—Pero…-continuaba riendo—La cara de tu marido al verme le supero, parecía haber visto a un fantasma, creyó que lo mataría, pero Hinata se encargó de apuñalarlo…¡Te hubiera gustado verlo correr!—el muy bastardo me explicaba todo con lujo de detalles

Para mi suerte alguien toco la puerta de mi casa, la salvación mía y de mi marido había llegado sin pensarlo grite por ayuda.

CONTINUARA...

Bueno…

Mañana coloco la segunda parte

Espero sus reviews

Bye ^^