Disclaimer: Dragon Ball es de Akira Toriyama.


ANTE LA ADVERSIDAD


—tengamos esperanza—


I


Ella


Después de la noticia menos deseada, la muerte de un ser demasiado querido como para ser olvidado, uno siente el golpe dependiendo de su manera de ser, de la relación que tuviera con quien ya no está, de mil factores que, en quinientas palabras, sería imposible enumerar. El golpe se siente, pero el dolor no brota sino cuando uno no sólo ve y siente la ausencia; cuando uno la vivencia con todos sus sentidos.

Ella. Chichi cocinaba un banquete para Gohan y para el pequeño o pequeña que no paraba de crecer en su vientre. Permanecía anestesiada, lejos de las remembranzas que, sin dudas, serían capaces de desmoronarla al aparecer. Probó un sorbo de la sopa que preparaba al mismo tiempo que otros tres platillos, todo iba normal, hasta que un frío la cubrió y un escalofrío la hizo tiritar. ¿Por qué? Entonces, los cinco sentidos, junto a sus recuerdos y a su más profundo sentir, le hicieron vivenciar lo que ocurría: Goku solía asomar por detrás de ella y apoyarle la quijada en el hombro derecho. Lo hacía y le preguntaba: ¿qué vamos a comer? Así, lo evidente se manifestó, la puntada en el pecho y el suspiro ineludible: lo extraño, lo amo, lo necesito.

¡Lo necesito, maldita sea…!

La cuchara cayó al piso y el silencio bramó su dolor en nombre de ella. Chichi intentó frenarlo, en vano, al taparse la boca con una mano. Pero cuando las lágrimas asomaron sobre los bordes de sus ojos, la realidad le recordó su existencia:

—¿Qué estás preparando, mamá?

Giró: Gohan estaba junto a ella y le sonreía como un adulto. Qué admirable era ese niño que tanto había vivido y que tan fuerte se mantenía pese a todo. Chichi le devolvió la sonrisa; verlo le había devuelto el alma al cuerpo, la había instado a retornar al presente y alejarse de los inevitables recuerdos del pasado que la sujetaban tan fuerte y la sumían en tan penosa desdicha. Así, se repitió lo que siempre se repetía cuando retornaba del recuerdo: Goku se ha ido y lo extraño, lo amo, lo necesito, ¿pero qué más puedo hacer sino seguir aquí? Gohan me necesita y quien viene en camino también. No puedo quedarme atrás, desmoronarme; tengo que creer.

Tengo que seguir.

Puso una mano de Gohan sobre su vientre. Su sonrisa de leona, una guerrera sin igual, hizo resplandecer el rostro de su hijo.

—Preparo mucha, mucha comida para los tres, cariño: para nosotros tres. —Y apretó más la mano de Gohan sobre su vientre.

Gohan apretó el vientre, también.

—¡Genial, mamá!

En el gesto de muchachito, ella vio al hombre, al recuerdo. Le habló mentalmente: te extraño, te amo, te necesito, pero ellos también. Aún tengo mucho por hacer, mi Goku; aún tengo mucho por lo cual luchar en nombre de los dos. Así que dame fuerzas y no me dejes caer.

Ayúdame a luchar por esta esta familia, mi amor.


Palabras: 490


A Luni, mi gordo, por hacerme tan feliz. Siempre vas a estar conmigo. Siempre.


Dragon Ball © Akira Toriyama