Yo, durmiendo tranquilamente, las olas revolotean y el sol golpea suavemente en mi cara...

Chelsea: Maria, levantate.

-No quiero.

Chelsea: ¡Vamos! ¡Es hora de que presentes el fic del reto!

-¿Del reto?

Chelsea: ¡Si, ahora muevete!

-Está bien, pero baja esa sartén.

*Bostezo*

¡He aqui yo! ¡Vaya, mi one-shot mas largo hasta ahora! ¡Me tomo cuatro días escribirlo!

ANTES DE LEER ESTE FIC, LEER EL ONE-SHOT : TU SONRISA escrito por HinataBueso93.

www . fanfiction s / 11055008/1/TU-SONRISA

Si no lo lees primero se nota que te gusta el spoiler.

El presente One-shot participa en el reto nº 6 de Mundo FanFiction NaruHina: I hate Valentines... but I love to keep it white"

Continuacion del fic de HinataBueso93: TU SONRISA.

¡Aprovecho para darle las gracias a Namroy Namikaze por la continuacion de mi fic! ¡Muchas gracias, realmente me gusto! Aunque me hubiera gustado saber cual era la historia original.

¡Fic dedicado a HinataBueso93!

¡Wow, son muchas palabras las de este one-shot! Creo que me deje llevar demasiado...

Chelsea : ¿Por qué no me sorprende?

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Ilumina Mis Días

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Continuación del one-shot: TU SONRISA

Por HinataBueso93

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¡Esta continuación la hice yo!

Por: MariaTheCharmix

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25 Diciembre 1999

"Hyuga Hinaby

3 de abril de 1972- 23 de octubre de 1999

Madre y esposa amada por familia y amigos."

-¡Hola, nos vemos otra vez!

-Na… ¿Naruto…kun?

-¡Hola, Hina-chan!

La ojiperla sonrió, algo extrañada. Era navidad después de todo, ¿qué hacía aquel chico rubio en un cementerio en épocas de nieve como estas? Dirigió sus aperlados ojos hasta los brazos del chico, en los cuales reposaban varios ramos de flores. Hinata los miró con detenimiento, eran amarillas y bonitas. ¿Qué clase de flor seria?

-Son girasoles… ¿te gustan?

Hinata asintió, al ver la belleza de aquellas flores. Naruto sonrió, y se acercó a la tumba de la madre de Hinata, inclinándose ante ella.

-Señora Hyuga, le he traído un pequeño regalo de navidad. No se preocupe, Hinata-chan dice que son bonitas así que estoy seguro de que a usted también le gustaran.

Hinata quedó anonadada. ¿Le estaba dando flores? No creyó que aquel chico rubio y simpático pudiera aliviar su tristeza de esa forma, él hizo posible que ella saliera de la oscuridad de haber perdido a su madre, y le enseñó que en el futuro habría días más soleados.

Él era su luz.

-¿Sabes, Hina-chan? –habló Naruto, aun con dos pequeños ramos de girasoles en sus brazos, los cuales eran seguramente para sus padres –Ahora mismo deben haberse dado cuenta de que desaparecí del orfanato, seguramente las hermanas me regañaran cuando regrese.

-¿O-Orfanato?-preguntó Hinata algo curiosa. Cierto, él no tenía padres.

-Soy huérfano. Mi padre y mi madre murieron, pero nadie se hizo cargo de mí. Por eso, yo… no tengo a nadie… Sasuke-teme es la única persona que ha sido mi amigo hasta ahora y…

No era necesario decir más palabras. Ya todo estaba dicho.

-¿Hina-chan?-preguntó Naruto sorprendido al ver a la pequeña ojiperla abrazarlo.

-Ahora tienes una nueva amiga, Naruto-kun. Y mientras me sea posible… nunca te dejare solo. –dijo Hinata, sorprendida de no haber tartamudeado al decir eso. Naruto solo pudo sonreír.

El rubio miró la tumba de la madre de Hinata de forma decidida.

-Señora Hyuga, ¡le prometo que nunca dejare que nada lastime a Hinata!

La ojiperla se sonrojó un poco, separándose del rubio.

-¡Siempre la protegeré! ¡Es una promesa! –dijo Naruto, con una sonrisa llena de felicidad.

-Gracias….-casi se pudo escuchar susurrar al viento.

…0…

-¿Shion?

Aquel día en el que Shion beso a Naruto, después de aquella escena en la fuente del parque, Shion salió enfurecida de allí. ¿La razón? No había necesidad de preguntarlo, era obvio. ¡Ella, una de las chicas más codiciadas por los chicos de la Universidad de Konoha, había sido rechazada por Uzumaki Naruto! ¡Y por la rarita de la Hyuga! ¡¿Quién se creía esa chica para apropiarse de su Naruto-sempai de esa forma?!

-Oye, Shion.

Esa chica no era nada especial, con su cabello largo y con su estúpida timidez. Naruto definitivamente tenía que estar confundido acerca de sus sentimientos. ¿Quién en su sano juicio se enamoraría de alguien como ella? No es justo.

No es justo. No es justo. No es justo. No es justo. No es justo. No es justo. No es justo. No es justo. No es justo. No es justo. ¡No es justo!

No solo era Naruto. Kiba, Shino, Neji, Sasuke… ¡Incluso Sasuke! ¡¿Cómo puede estar la Hyuuga rodeada de chicos tan guapos?! ¡Ella no era nadie! ¡¿Por qué siempre los chicos más populares de la universidad están preocupándose por ella?!

No… definitivamente eso tenía que cambiar.

-¡Shion!

-¡AH!-se sobresaltó la chica, llevándose con sus manos el almuerzo para terminar regado en el suelo.- ¡¿Qué crees que haces?!

-¡Eso debería decirlo yo!-le reclamó Ino, quien estaba a su lado en una de las mesas de la cafetería de la universidad- ¡Mira el desastre que has hecho! ¡Te he estado llamando desde hace un buen rato!

-¿Qué quieres?-le contestó Shion sin ánimos.

-Vaya, que carácter el tuyo. Te estaba contando que pronto será el día blanco, ¿crees que algún chico te de algo? Espero que Sai-kun responda a mi confesión.

-Tú diste chocolates ese día, Ino. Yo no.-contestó Shion aburrida.

-¿Pero no te le confesaste al idiota de Naruto el día de San Valentín?

-¡No le digas idiota!-gritó Shion enfurecida, golpeando la mesa con fuerza y llamando la atención del lugar.

-Psss, baja la voz. –susurró Ino avergonzada. –Además, tú eres la presidenta del club de fanáticas de Naruto, ¿o no? Ten un poco de dignidad.

-"El club de fanáticas… podría serme útil ahora… "-pensó Shion emocionada y levantándose rápidamente de la mesa, caminando decidida hacia la salida de la cafetería.

-¡Shion! ¡¿A dónde vas?! –preguntó Ino gritando hacia la dirección por donde Shion caminaba.

-¡A recuperar el amor de Naruto-sempai!-gritó la chica, llamando la atención de nuevo.

¿Quién diría que la dulce y tierna Shion podía ser tan escandalosa? Porque Shion era una chica dulce y buena a los ojos de muchos, pero una verdadera arpía por dentro. Su bondad y dulzura fingida solo son armas para conseguir sus objetivos. Pero muy pocas personas conocían la verdad sobre aquella chica… Shion y Hinata, ambas vistas como personas sinceras, nobles y puras de corazón.

Pero solo una de ellas lo era.

-¿El amor de Naruto?-se preguntó Ino confundida. –Pero él es novio de Hinata, ¿verdad?

Ino era una de las pocas personas que conocía en realidad a Shion. Sólo queda rezar por que las cosas no se salgan de control.

-Empieza la prueba, Hyuga Hinata.-susurró Shion, saliendo de la cafetería.

.

…0…

.

-¿El equipo de futbol?

-Asi es, Naruto-san. Como verá, nos falta un jugador ya que se lesionó en el partido anterior y pensamos que usted seria indicado para ayudarnos. ¡Sólo será por una semana hasta que nuestro otro jugador se recupere! Las prácticas serán al final de clases, al atardecer, en el campo de futbol.

-Pero yo soy bueno en Tenis, ¿entiendes? TE-NIS.

Sasuke, quien estaba a su lado, le dio un golpe en la cabeza mientras Sakura rodaba los ojos.

-¡¿Qué crees que haces, teme?!

-Hump. Naruto, ¿acaso vienes de otro planeta o que? No seas grosero. –protestó Sakura al lado de Sasuke. ¿Desde cuando se habían aliado esos dos? Ah claro, son novios…novios…Hinata… San Valentín… día Blanco…

¡¿Día Blanco?!

-¡No puede ser!

¡Maldición, el día blanco era la otra semana! ¡Se le había olvidado por completo!

-¡Ay! ¿Por qué me golpeas, Sakura-chan?-se quejó adolorido Naruto en la cabeza, y Sasuke apuntó con el dedo al pobre chico que aún esperaba. Naruto se volteó hacia el chico, y respondió –Nunca he jugado mucho el futbol, pero si crees que te seré de utilidad entonces lo intentaré.

-¡¿De verdad?! ¡Gracias, Naruto-san! ¡Gracias, gracias! Le diré a Gai-sensei, ¡estará muy feliz! –y tras decir eso, el chico salió esfumado de ahí.

Hubo un silencio sepulcral por unos dos minutos.

-… ¿Gai… sensei?

-….

-….

-….

-¡JAJAJAJAJAJA DOBE ERES UN IDIOTA JAJAJAJAJAJA!

-¡CALLATE TEME! ¡NO, GAI-SENSEI NOOOOOO! –se quejó Naruto, jalándose los cabellos con exasperación.

-No entiendo.-dijo Sakura confundida. -¿Por qué tanto escándalo?

-Verás, Sakura-chan… Gai-sensei es…

"¡Bien muchachos, ahora mil flexiones! ¡Hagan que su espíritu arda!"

-Y también está ese chico…-murmuró Sasuke.

"¡Vamos, Naruto-kun! ¡Encendamos nuestra llama de la juventud!"

-Ni modo, aun así no te puedes retractar Naruto.-dijo Sakura seriamente.

-¡Pero Sakura-chan!

-¡Le diste tu palabra a ese chico y vas a cumplirla!

-S-Si…-suspiró Naruto derrotado.

-Dobe, anímate.

-Sí, Naruto. Hinata podría ir a verte jugar. ¿No te gustaría eso?

-Hehe… ¡Hehehehehe! –empezó a reírse Naruto avergonzado y sonrojado.

-¡Baka Naruto! –gritó Sakura, y de un puño lo mandó al piso. -¡Pervertido!

-No estaba… pensando… eso…-logró articular Naruto.

-¡Na-Naruto-kun!-se oyó una vocecita acompañada de varios pasos corriendo hacia él. Esa vocecita solo podía pertenecerle a su linda novia.

El corazón de Hinata dio un vuelco al ver a Naruto en el suelo, con una Sakura iracunda frente a él. Era normal que Sakura lo golpeara a veces, pero aun así ella no se acostumbraba. La ojiperla se arrodillo al lado del rubio apresuradamente, dejando caer de paso los cuadernos que llevaba en la mano. Hinata tomó con una de sus manos una de las mejillas del rubio, quien estaba algo desorbitado.

-Creo que te pasaste, Sakura. –agregó el Uchiha.

-¿Ups? Lo siento, Hinata. – le dijo Sakura, pero la chica no contestó. Toda su atención estaba en Naruto.

-Naruto-kun, contéstame por favor.-rogaba Hinata arrodillada frente a Naruto en medio de un desorden de cuadernos. Por otro lado el rubio empezó a enfocar las cosas a su alrededor, y reconoció a aquel ángel arrodillado ante él.

-Hi-Hinata… ¿Qu-qué pasó…?

-¡Gracias a Dios, estás bien! –suspiró Hinata aliviada, para luego abrazarlo. Naruto le devolvió el abrazo, manteniéndola entre sus brazos por un momento, y luego con la ayuda de Hinata se levantó. –Controla tu fuerza, Sakura-chan.-dijo el rubio a lo que la pelirrosa sólo bufó, y luego Naruto notó el gran camino de cuadernos tirados por todo el pasillo - ¿Y eso?

-¡Aaaahhhh!-exclamó Hinata, y se abalanzó a recoger los cuadernos rápidamente. Naruto se arrodilló y empezó a ayudarla, con una sonrisita en su rostro.

-¿Hina-chan?

-Los deje caer por accidente cuando te vi tirado en el piso…-dijo Hinata mientras seguía recogiéndolos.

-¡ERES ADORABLE, HINA-CHAN!-exclamó Naruto feliz, y la aprisionó entre sus brazos haciendo que los cuadernos que ella había recogido cayeran al suelo. Hinata se puso nerviosa, pero rápidamente su rostro formó una sonrisa y correspondió al abrazo mientras Sasuke y Sakura miraban la escena conmovidos.

-Hinata… sí que ha mejorado la vida de ese rubio idiota.-murmuró Sakura.

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-"¡Qué cree que hace esa inútil con Naruto-sempai! ¡Vas a pagarlo caro, Hyuga!"-pensaba Shion iracunda al ver la escena desde lejos. De repente sus pies se toparon con un cuaderno.

-¿Hum? ¿Qué es esto?-levantó el cuaderno y lo abrió. Entonces vio algo escrito en la primera página.

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Diario de Hinata Hyuga

Por favor no leer.

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Y una sonrisa maliciosa se formó en el rostro de Shion, y se alejó velozmente de ahí con el cuaderno en sus brazos. Se encargaría de que la ojiperla…

No tuviera un feliz día blanco.

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-¡Hinata! ¡Hinata! ¿Irás a verme a jugar futbol en las canchas después de clases?

-¿Futbol?-pregunto Hinata confundida. –Pero si tú juegas tenis.

-Gai-sensei le pidió ayuda.-le comentó Sasuke.

¿Gai-sensei? Ahora se compadecía de su novio.

-¡Estaré ahí todos los días, Naruto-kun!

Y Naruto no podía estar más feliz.

…0…

Naruto había resultado mejor en el futbol de lo que se esperaba.

-¡Naruto-san, vamos, tu puedes!

-¡Naruto-san, detén el balón!

-¡Muchacho, haz arder tu llama de la juventud!

El balón iba directamente hacia él. Corrió hacia el balón con la intención de detenerlo, pero…

-¡Naruto-kun, tu puedes!

Esa voz de ensueño lo hizo mirar hacia las gradas, donde su linda novia lo veía jugar emocionada.

-Hina-chan…

Tan linda, tan hermosa, tan….

-¡Cuidado!

¡Plaffffff! El balón le dio directamente en la cara al rubio.

-¡NARUTO-KUN!

-¡NARUTO-SAN!

Hinata bajó como rayo las escaleras y llego como pudo hasta Naruto, mientras que los otros integrantes del equipo de futbol corrieron hacia él.

-Estoy bien…-alzó el pulgar débilmente en señal de aprobación y con una sonrisa en su rostro, pero cayó desmayado.

Cuando le dijeron que detuviera el balón… no se supone que lo detuviera con la cara.

…0…

-Lo siento mucho, Naruto-kun. Fue mi culpa.

-No es cierto, ¡fue a mí a quien se le ocurrió detener el balón con la cara!

-¡No-no-no mientas! Te-te distraje y yo… tal vez sea mejor si no… si no vuelvo a ir…-murmuró Hinata triste, cubriendo sus ojos con su flequillo. –Fue mi culpa, lo siento mu-

-¡Si tu no vas a verme yo dejare de jugar!-le dijo Naruto serio, deteniendo su caminado y parándose frente a Hinata.

-Pe-pero yo… soy muy poca cosa para alguien como… como tu… tan maravilloso… solo te… afecto… te hago daño…

-No digas eso…

-Pe-pero es verdad, yo-

Naruto simplemente tomo su rostro entre sus manos y juntó sus labios con los de ella, besándola dulce y tiernamente, beso que ella correspondió aunque aun estaba acostumbrándose a besar. Cuando el aire se les acabo, se separaron sin ganas y él juntó su frente con la de ella.

-No vuelvas a decir eso…

-Pe-pero…

-Tú no eres poca cosa. Eres la persona más maravillosa y especial que he conocido en toda mi vida, y desde pequeños siempre hemos estado juntos. Siempre fui un idiota porque no me di cuenta del tesoro que tenia al lado. No puedes culparme de que me guste observarte y pensar todo el día en ti.

-Na-Naruto-kun…-murmuro Hinata sonrojándose.

Naruto la atrajo hacia su pecho, y la aprisiono en sus brazos con un poco de fuerza, abrazo que ella le correspondió.

-Naruto-kun… se ve muy bien jugando…

-¿Entonces seguirás yendo a verme?-pregunto Naruto, con un hilito de esperanza en su voz.

-S-si. Pero por favor no detengas el balón con la cara otra vez.

-No lo haré.-dijo Naruto sonriendo, y la abrazó más fuerte.

…0…

-Qué raro, mi diario no está. – notó Hinata, ya de noche y en su habitación. - ¿Dónde lo pude haber dejado?

"Ojala que solo este perdido y que nadie lo haya encontrado."

-¿Tú sabes dónde está, Hanabi? –le preguntó a su hermana, la cual leía un libro encima de la cama de Hinata.

-No.-dijo la menor.

-Qué raro… ¿Dónde estará?

…0…

Naruto tenía otro problema: El día blanco.

Cuando Hinata le dio esos chocolates aquel día –o intento dárselos ya que cayeron al suelo, pero aun así se los comió- se prometió a si mismo que le daría el mejor regalo a Hinata en el día blanco. Incluso se lo estuvo repitiendo a si mismo durante varios días, e incluso lo apunto en varios lados. ¿Cómo se le pudo olvidar algo tan importante como eso?

-"Pe-pero yo… soy muy poca cosa para alguien como… como tu… tan maravilloso… solo te… afecto… te hago daño…"

Esas palabras aun estaban haciendo mella en él. No le gustaba que Hinata se viera a sí misma como alguien inferior. ¿Cómo demostrarle a Hinata en el día blanco que ella era lo mejor que a él le ha pasado en la vida?

Tenía que pensarlo muy bien. Algo tenía que ocurrírsele.

No quería algo simple como flores o chocolate. Bueno, tal vez las flores servirían pero Hinata definitivamente merecía algo mejor. Pensó y pensó sobre que podría hacer. Entonces recordó a su padrino Jiraiya, quien lo llevo un par de veces en sus viajes. El ero-sennin estaba escribiendo un libro llamado "Lugares mágicos de Konoha" en ese entonces –lo cual era sorprendente, el viejo normalmente no escribía nada más que novelas pervertidas – y lo llevó a él como secretario para documentar los lugares más mágicos y hermosos de la ciudad de Konoha.

Entonces recordó un lugar…

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-¡Vaya, que bonito lugar ero-sennin!

-¡Je, que esperabas de mí, el Gran Jiraiya! Bueno, anota las características de este lugar muchacho.

-Me pagarás, ¿verdad?

-¡Ya te dije que sí! Muchacho desagradecido, estás viviendo en un apartamento que yo pago y aun así… -refunfuñó esto último el peliblanco

-¡Oye Ero-sennin! Este lugar es mas para niñitas…

-¿Qué dices, Naruto?

-Si, bueno, hay demasiadas luciérnagas y la luna se refleja en el lago, también hay varias flores alrededor… es para niñitas.

-¡Ni se te ocurra escribir eso en mi libro muchacho! Debes admitir que es el mejor lugar que hemos visto.

-Bueno, creo que tienes razón… -murmuró el Naruto de en ese entonces 12 años, el cual miraba el lugar embelesado.

-Debes saber, muchacho, que soy una de las pocas personas que conoce este lugar. Y ahora tú lo conoces también.

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Ahora que lo recordaba… ese lugar era hermoso, en medio del bosque a las afueras de Konoha, tenía un lago junto con una cascada de la que caía hermosa agua cristalina, las luciérnagas alumbrando el lugar y hermosas flores alrededor… ¡Era el lugar perfecto para llevar a Hinata! ¡Podría hacerle un picnic nocturno, y así demostrarle cuanto la quiere!

El rubio se dirigió hacia uno de los cajones de su mesa de noche y sacó una cajita.

-En la noche la llevare a un picnic romántico, hehehehe…. Pero en el día… le daré esto…

Naruto abrió la cajita. Allí residía un colgante, cuya cadena era de oro, y sostenía un corazón de un color rosa cristalino, y detrás de aquel corazón había una letra "H" grabada. Porque él había tenido en mente el día blanco durante muchos días, y durante los primeros días, poco después de que Hinata se convirtiera en su novia, el rubio había comprado aquel colgante en una joyería, con la intención de entregársela a Hinata en el día blanco.

-Ahora si voy a demostrarte cuanto te amo, Hina-chan…-dijo Naruto con una sonrisa boba en su rostro.

Y esa noche Naruto se quedó dormido rápidamente. Debía dormir bien si quería preparar la sorpresa, ¿no?

…0…

-¿Dices que quieres llevar a mi hija a un picnic romántico la otra semana? –pregunto Hiashi levantando una ceja.

Naruto no había asistido a las clases de la mañana al día siguiente. Había decidido que en ese tiempo convencería al padre de su novia para que la dejara ir a aquel mágico lugar al cual él quería llevarla. Irían por la noche y al bosque, así que era mejor comentárselo al patriarca Hyuga.

-Así es. Es una sorpresa para Hinata, ella no debe enterarse.

-Ya veo… Tú siempre estabas rondando la tumba de Hinaby durante varios días cuando eras pequeño. ¿No hacias todo eso solo para ver a mi hija, verdad? Te he visto visitar la tumba de Hinaby muchas veces, incluso en varias de esas ocasiones Hinata no estaba contigo…

Naruto bajó la mirada y sonrió un poco. Desde que la madre de Hinata había muerto y el la había visto llorar en el cementerio la primera vez, el había ido a ver la lápida de la mujer Hyuga durante varias ocasiones junto con las de sus padres, Minato y Kushina. Al pequeño se le había hecho costumbre visitar en el cementerio a tres tumbas en particular…

Minato Namikaze

Kushina Uzumaki

Hinaby Hyuga

-Diría que no a ese viaje si no fueras tu, Uzumaki. Durante todos estos años has estado al pendiente tanto de mi esposa como de mi hija. –dijo Hiashi con los ojos cerrados y el ceño fruncido.- Esta es la mejor forma de devolverte el favor. No le diré nada a Hinata. Solo cuida… bien de mi hija.

Naruto sonrió feliz. Convencer al Hyuga había sido más fácil de lo que pensaba.

…0…

Algunas cosas no se ven todos los días. Como ver a Shion en su casa con su club de fans, escribiendo en muchas carteleras.

-A ninguna chica le gusta que expongan sus secretos…-murmuraba Shion escribiendo cosas en múltiples carteleras. –Alguien tan frágil como tú podrá romperse con esto… y Naruto-sempai ya no querrá estar cerca de ti… Digo, ¿Por qué molestarme a exponer algunas verdades sobre ti si puedo exponerlas todas? Ahora que se que tu y Naruto-sempai se han estado viendo desde pequeños… ¡Vas a pagarlo aun más caro!

Las demás chicas a su alrededor tenían una cara tan o más sicópata que la de la misma de Shion. Todas querían vengarse de la Hyuga, porque les había robado su más preciado tesoro.

-Con esto, Naruto-sempai estará a salvo de esa mujer.- decía una de las chicas del club de fans.

-Una mujer tan debilucha no puede estar con Naruto-sempai…

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Febrero 11, 2015

Querido Diario.

Últimamente Naruto-kun es muy popular. Fui tan feliz al saber que había ganado el campeonato de tenis de hace unas semanas, y cuando quise acercarme a felicitarlo no tuve el valor, ya que muchas chicas se lanzaron hacia él cuando el partido termino. Sentí envidia y celos, pero sé que eso está mal. Naruto-kun es amable y fuerte, merece todas las chicas que quiera, ¡No! ¡No quise decir eso! Quiero decir que… solo quiero que él sea feliz incluso si yo no lo soy. Naruto-kun incluso tiene un club de fans, y a veces eso me entristece… Además a Naruto-kun le gustaba Sakura-san antes de que ella saliera con Sasuke-kun… Envidie a Sakura-san en el fondo muchas veces porque ella tenía la atención de Naruto-kun, pero aun así no tuve mas remedio que aceptar la realidad... Yo siempre velare por la felicidad de Naruto-kun, incluso si él no me ve como nada mas que amiga, yo siempre estare ahí para el, porque mientras Naruto-kun sea feliz yo también lo seré.

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-"Naruto-kun, Naruto-kun, Naruto-kun" , ¡todo el diario esta lleno de esas estupideces! ¡Naruto-sempai solo nos pertenece a nosotras! ¡No lo soporto!-rugia Shion- Vamos a avergonzar a la chica frente a toda la universidad, ¿Entendido?

-¡SI! –gritaron las chicas al unisono.

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Mayo 13, 2014

Querido Diario.

Soy muy débil, muy frágil… Naruto-kun merece a alguien mejor que yo… Me clavare eso en el corazón incluso si me duele… de ahora en adelante. Solo seré… su amiga…

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Hinata escribió cosas así en su diario… hasta el 23 de octubre del 2014. Ese día, Hinata decidió volver a tener fe.

-¿Quién diría que la Hyuga envidiaría tanto a Sakura Haruno?-murmuró Shion con una sonrisa maléfica en su rostro.

…0…

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Por otro lado, Naruto iba mejorando en las prácticas de futbol.

Hinata siguió asistiendo a ver a Naruto los entrenamientos, hasta que la semana se cumplió.

Naruto fue invitado a unirse al equipo de futbol.

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Pero él rechazó la oferta.

Quería caminar con Hinata a casa cuando fuera el atardecer.

Por eso decidió no unirse al equipo de fútbol.

Él… prefería pasar el tiempo con Hinata.

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Sin embargo ninguno de los dos se dio cuenta que Shion tenía sus propios planes.

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Así, llegó el día blanco.

…0…

Los primeros rayos del sol surcaron la habitación de una peliazul que todos conocemos bien. Ella, un poco aturdida y desubicada, abrió los ojos lentamente para encontrarse con la imagen de su habitación. ¿Qué hora era? No lo sabía ni le importaba, ella solo quería seguir durmiendo… no tenía que ir a la universidad de todas formas…

Se levantó de un golpe.

-¡Voy tarde!-gritó al ver la hora en el reloj. ¡Claro que tenía que ir a la universidad, ella no podía permitirse faltar a sus clases! A la velocidad de la luz se arregló e incluso sin desayunar salió corriendo de su casa.

-¿Hinata? –preguntó Hanabi aturdida. Hinata rara vez corría de esa forma.

-¡Hinata! ¡No has desayunado! –escuchó la voz de su padre, la cual se alejaba a medida que ella corría. Ya no había tiempo para eso.

Sin embargo en su carrera a la universidad chocó con alguien, cayendo al suelo.

-¡Ah! ¡Lo siento mucho! –exclamó ella apenada.

-¿Hinata?

-Neji-niisan.

-Oye, Hinata, ¿podemos hablar? ¿Por qué hay tantos chicos detrás de ti? Naruto, Kiba…

-¡Neji-niisan, no tengo tiempo para eso! ¡Debo irme! –exclamó ella, y salió en su carrera de nuevo.

-Hmp… No soy tu niñera…-dijo Neji mirando por donde Hinata se había marchado.

Aunque quisiera negarlo, Neji es un sobreprotector con su prima.

Hinata, sin mirar a su alrededor pasó corriendo a toda velocidad, y entró a su salón rápidamente, mientras que el profesor le regaló una mirada fugaz de enojo por haber llegado tarde. Pero entonces, notó algo raro. Muchos la miraban extraño, hablando entre ellos y alejándose. Para su suerte las clases de la mañana terminaron rápidamente.

Al mediodía, Naruto aun no había llegado. Tal vez estaba ocupado con el club de tenis, o quizás otro chico le había pedido otro favor, así que no había rastros del rubio.

Pero la gente la seguía mirando extraño, señalándola con el dedo y poniendo una cara de desprecio.

…0…

-¡¿Qué es esto?!-gritó Naruto furioso.

Cuando Naruto llegó a la universidad en la mañana, se encontró con la peor de las sorpresas.

-Estos volantes han estado circulando entre los estudiantes.-explicaba Kiba preocupado. -¿Quién podría hacer semejante cosa?

-¡Mas te vale que no hayas sido tu, saco de pulgas!

-Naruto, cálmate. –dijo Neji a su lado. – Debemos encontrar al responsable.

Naruto miró el volante una vez más.

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Hinata Hyuga es una falsa.

La chica modelo de la Universidad de Konoha no puede valerse por sí misma, es una rarita que odia a todos y a cada uno de nosotros en su interior.

Ella misma conoce su valor.

Como prueba de su maldad ha privado a nuestro compañero Uzumaki Naruto de unirse al equipo de futbol, y nuestro amigo ha cedido a causa de la falsa bondad de la Hyuga.

Su corazón es negro, por eso no se acerca a los demás a menos que sea para causarles el mal.

Porque nos odia a todos.

Por eso nunca habla con nadie, siempre está allí, odiándonos en silencio.

¡Aún podemos detenerla!

Una de las personas a las que Hinata Hyuga mas envidia es nuestra bondadosa compañera: Sakura Haruno.

Por su seguridad no se acerque a Hinata Hyuga, antes de que sea tarde.

.

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-¡Alto! ¡Naruto, ¿A dónde vás?! –gritó Kiba al ver a Naruto alejarse.

-¡A partirle la cara a quien hizo esto!- gritó Naruto enojado.- Espero que Hinata no haya visto esto aun… aunque es probable que ya lo haya hecho.

Neji agarró del brazo a Naruto, deteniéndolo.

-Te dije que te calmaras, Naruto. Entiendo lo que sientes –decía Neji mientras el rostro de Naruto mostraba rabia –pero debes tener cuidado. Hoy es el dia blanco, asi que no hagas una estupidez que pueda arruinar el día.- el rostro de Naruto se suavizó al escuchar eso.

-Neji, tu…

-Mi tío me conto sobre tus planes con Hinata. Lo acepto solo porque eres tú, pero más te vale no meterte en una pelea ahora porque le arruinarías el día a mi prima.

-Pero… ya se lo están arruinando…

-Entonces no lo empeores más.

-¡Un momento! ¡¿Qué vas a hacer con Hinata, Naruto?! –gritó Kiba molesto.

-No te interesa, chucho asqueroso.

-¡¿Qué dijiste, baka-naruto?!

-Ya es suficiente. Vamos a encontrar al culpable. Kiba, encárgate de distraer a Hinata. Naruto y yo buscaremos al culpable.

-¿Y por que no puedo ir yo con Hinata?-preguntó Naruto confundido.

-Porque con la rabia que tienes Hinata notara que algo anda mal. Además eres tan idiota que hablarías de más. Sé que no podemos evitar que Hinata se entere porque lo hara en algun momento, pero evita que ese momento llegue si puedes, Kiba.

-De acuerdo, lo haré.

-¡Ya hemos perdido mucho tiempo! ¡Vámonos, Neji! Hay que encontrar al maldito ese…

-¿Y si es mujer? Tu no le pegarías a una mujer. -preguntó Neji empezando a caminar junto a Naruto.

-No necesito golpearla entonces. No me importa, haré que se arrepienta. Nada de lo que dice en ese volante es verdad. Nada es verdad.

-Lo sé Naruto, lo sé.

…0…

La gente siguió mirándola raro a lo largo del día.

-Disculpa, ¿podrías prestarme un borrador? –le preguntó Hinata amablemente a uno de sus compañeros de clase.

-Yo… eh… lo siento, no tengo.

-Pero ahí tienes uno.

-No te lo prestaré, lo siento. Ahora vete por favor.

Hinata, confundida por todas las actitudes de la gente se sentó en su asiento derrotada.

-Ya déjalos Hinata, son unos engreídos.- decía Kiba a su lado.- Tal vez cancelaron la pizza en la cafetería o algo así.

-Ummm… quien sabe. Todos parecen enojados conmigo. Y no sé nada de Naruto. Hoy es el dia blanco y ni siquiera ha venido. ¿Lo has visto, Kiba-kun?

-Si, lo vi hace un rato. Al parecer todos los comités de deportes lo estaban acosando para que les ayudara en sus equipos.

-Ya veo… Naruto-kun es grandioso…

Kiba se había encargado todo el día de esconder los volantes de los ojos de Hinata.

-Oye, Hyuga.

-¿Si?

Tres chicas, con tono amenazante, se pararon frente a ella.

-Te veremos al final de clases. –y tras decir eso, se marcharon de allí.

-¿Qué fue eso? ¿Querrán que les ayude con alguna tarea?

-"Ah, Hinata, eres tan inocente a veces… será mejor avisarle de esto a Naruto…"

En otra parte de la universidad, Naruto y Neji habían encontrado a una de las responsables. Debían darse prisa, el día estaba a punto de terminar y pronto los estudiantes saldrían de sus clases. Naruto reconocía a esa chica, ella era parte de su "club de fans".

-¿Tú planeaste todo esto?-preguntó Naruto enojado.

La chica iba a responder, pero Neji la interrumpió.

-Tú ayudaste a hacer todo esto. ¿Pero quién está dirigiendo todo esto? Sé que no eres tú.

La chica sonrió con altanería.

-Naruto-sempai no merece a una chica como esa. ¿Qué no leíste toda la verdad en esos volantes?

-No hables de Hinata como si la conocieras. Ella es la persona más maravillosa que conozco.

-Te equivocas, Naruto-sempai. Ella siempre ha estado celosa de Sakura-san solo porque estuviste enamorado de ella mucho tiempo. Quien sabe que pensara de nosotros… o de ti.

Naruto iba a abrir la boca para gritarle, pero Neji dijo algo que lo dejó helado, y a lo que la chica palideció.

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-Fue Shion, ¿verdad?

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Enseguida, llegó la hora en la que las clases terminaron y todos salían de sus clases. Pero al salir de su clase, Hinata se encontró con algo que no se esperaba ver. Los estudiantes se arremolinaban alrededor de aquellos carteles pegados por todos lados alrededor de la universidad. Hinata se abrió paso entre la multitud y logro llegar a uno de los carteles.

Se quedó de piedra.

Esos eran escritos de su diario. Sobre todo aquellos en los que expresaba que tan débil se sentía ante los demás, que se sentía inferior a Sakura y la envidiaba por tener la atención de Naruto, y su obsesion por el rubio. Tambien habían varias páginas extras que ella nunca escribió, en donde decía que odiaba a todos sus compañeros y que por eso no le hablaba a casi nadie.

-"¡Naruto idiota! ¡¿Qué pasó con encontrar al culpable?!"-pensó Kiba preocupado.

Ahora las miradas de odio se habían intensificado más, al igual que los rumores. Todos la estaban mirando con desprecio. Sakura simplemente veía la escena sorprendida junto a Sasuke.

-N-No… no-no…. No es verdad… yo… -fue lo único que pudo balbucear ante las miradas acosadoras de todos.

Y salió corriendo, abriéndose paso entre la gente.

-¡HINATA! –gritó Kiba, y salió en su persecución.

Hinata corrió y corrió por los pasillos, hasta salir del edificio y aproximarse a la entrada. Pero al llegar allí la multitud era mayor, y aquellos carteles cubrían casi cada centímetro de las paredes de la universidad. La gente la rodeó, y le impidió la salida.

-N-No puedo creerlo… Hinata-san… -decia Shion inocentemente, haciendo estallar asi la ola de comentarios.

-Eres despreciable Hyuga-san.

-Alejate de mi de ahora en adelante por favor.

-¿Quién se cree que es? Ni porque fuera mejor que nosotros.

Por otro lado Kiba intentaba atravesar la pared de personas que lo apartaban de Hinata sin éxito.

-Eres una maldita.

-Te odio.

-Si nos odias tanto no regreses por aquí.

-Ni porque fueras tan bonita. No te creas tanto.

-Es una falsa.

-Si, una falsa.

-Hyuga-san es una mentirosa.

Y los rumores continuaban incrementando, y la gente la rodeó aun más.

-¡No es cierto! ¡Eso no es verdad! ¡Yo nunca…! ¡No los odio! ¡No odio a Sakura-san!

-¡Mentirosa!

-¡Si, mentirosa!

Entonces allí, abriéndose paso entre la multitud, vió a Naruto, con Neji a su lado. Los ojos de ambos estaban desorbitados de la sorpresa.

-"Naruto-kun… Neji-niisan… también me están mirando… me están… ellos también… creen en todas esas mentiras…".

Entonces Naruto se asustó al ver las lágrimas de Hinata salir de sus ojos como un mar de dolor. Y ella, con toda la fuerza que tenía, rompió el círculo de hostigamiento y huyó del lugar.

Hinata había malinterpretado los ojos de sorpresa de Naruto y de Neji.

Entonces Naruto no pudo más, y se paró en medio del círculo.

-¡Son unos estúpidos! ¡Hinata no me obligo a abandonar el equipo de futbol! ¡Yo no quiero estar en el equipo de futbol!

Silencio.

-Todo esto… todo esto… ¡Shion lo inventó!

Todos empezaron a murmurar confundidos, por otro lado Shion estaba de piedra.

-Na-Naruto-sempai…

-¿Qué? ¿Alguien como ella?

-Shion-san es muy dulce y amable, ella no haría algo como eso.

Naruto iracundo, se paró frente a Shion y le arrebató el bolso.

-¡Devuelveme eso, Naruto-sempai! –rogó Shion.

Naruto, furioso, rebuscó entre el bolso de Shion mientras todos lo miraban expectantes y Shion era retenida por Neji.

-Naruto-sempai, eres muy cruel…

Sin embargo Naruto encontró lo que estaba buscando, y lo sacó a la luz.

-¡Aquí está! ¡Esto es de Hinata, ¿no es asi?! –gritó, y tiró el bolso a los pies de Shion.

-Entonces dinos –dijo uno de los estudiantes - ¿Qué razones tendría Shion-san para escribir todo eso?

-Ella me besó en San Valentin… y yo la rechacé. Porque yo amo a Hinata.

Silencio de nuevo.

-Déjame confirmar a mí que lo que dices es cierto. –dijo uno de los estudiantes parándose frente a Naruto. –No querrás que todos vean el diario. Sólo lo veré yo, y confirmaré si es verdad.

Naruto dudó por un momento.

-¡Si, que lo dejen ver!

-¡Digannos la verdad!

-¡Muestrenle el diario!

Naruto aceptó. El chico se acomodó las gafas, y revisó las páginas del diario, pero se sorprendió al ver que la Hyuga era en realidad bondadosa de corazón. Siempre se reprimía a si misma por sentir cosas como la envidia, siempre pensaba en los demás… ella no odiaba a nadie.

-Es verdad. Naruto-san no miente. Hyuga-san es inocente. –terminó por decir el chico, y de repente todos se sintieron apenados. Pero empezaron a mirar a Shion con odio.

-Shion, esto… nunca te lo perdonaré. Nunca te perdonaré que hayas lastimado a Hinata.

Shion solo bajó la mirada, ocultando la mirada bajo su flequillo. Entonces la verdadera personalidad de Shion salió a la luz.

-"Hinata, Hinata, Hinata"…Naruto-sempai no merece a alguien tan patética como ella… ¡No te das cuenta que yo soy mejor que ella! ¡DEBERIAS AMARME A MI! ¡NO A ESA IDIOTA!

Shion se quedó helada. Mierda, había gritado.

Entonces todos conocieron a la verdadera Shion.

-Naruto, vete. Asegurate de entregarle el diario a Hinata. Tú eres el único que puede mejorar su dia. –le dijo Neji.

-No hace falta que me lo digas.

Y salió corriendo de allí.

…0…

Hinata se encontraba llorando, sentada en el suelo y recostada en el pequeño muro de aquella fuente en la que Naruto la besó por primera vez. Ese había sido el momento más feliz de su vida. Pero al recordar los sorprendidos y acusadores ojos de Naruto sobre ella, le costaba pensar que él también la consideraba una persona falsa.

No le importaba llorar ahí, en una fuente, en un parque público. Ya no le importaba nada. Hundió la cabeza entre sus rodillas y lloró desconsoladamente.

De repente sintió una mano cálida sobre su cabeza. Alzó su cabeza un poco y con miedo para ver de quien se trataba.

-Mira. Recuperé tu diario.

Hinata volvió a hundir su cabeza entre sus rodillas.

-Aléjate.-dijo Hinata con la voz cortada.

-No lo haré.

-¡Vete!

-…

Hinata, al no escuchar ruido alrededor, pensó que Naruto se había ido. Empezó a llorar de nuevo, con un poco más de fuerza esta vez.

-No llores, Hina-chan.

Hinata al escuchar esa voz, levantó la cabeza un poco. Naruto no se había ido, estaba allí, arrodillado frente a ella con una expresión de preocupación en su rostro.

-Es cierto que sentí un poco de envidia de Sakura-san… pero nunca la odié…

-Hinata…

-Es cierto que no hablo mucho con los demás…

-Hina-

-Es cierto que estado enamorada de ti mucho tiempo pero…

-Oye, Hina-chan

-Todos me ven como una persona falsa, cruel y de corazón oscuro… entre ellos tú…

-¿Qué…?

-Naruto-kun también cree que soy una persona falsa. Me estaba mirando igual que todos me miraban… crees que te odio, que odio a todos… pero no es verdad, yo te amo… y todos son mis compañeros… yo no… yo no… los odio..-dijo esto sollozando un poco de nuevo.

-Hinata…

De repente sintió como era abrazada por un par de cálidos brazos.

-¿Cómo puedes pensar si quiera que yo pensaría algo así de ti? Estuve todo el día con Neji buscando al responsable de los rumores sobre ti, y cuando supimos que era Shion e íbamos a confrontarla… ya habías sido rodeada. Enfrenté a Shion justo después de que te fueras.

-Pero… tu mirada…

-Estaba preocupado por ti, Hinata-chan. No era de odio. Si llegaste a sentir envidia de Sakura-chan no es algo malo, yo siempre estaba detrás de ella y nunca te vi como algo más que una amiga. Es normal que estuvieras un poco celosa.

-…

-Es cierto que eres tímida, pero eso no te hace una mala persona. Siempre estas dispuesta a ayudar a quien lo necesite, y eres una persona dulce y bondadosa.

-…

-Y lamento no haberme dado cuenta mucho antes de lo que sentías por mí. Fui un completo idiota por eso.

-…

-Shion quería vengarse porque te elegí a ti en vez de a ella. Ella ya nos ha hecho suficiente daño a ambos Hinata, sobre todo a ti. Pero sin importar lo que ella u otras personas digan o hagan… no me alejaré de ti.

-… ¿Lo dices en serio?

-Si. –dijo, reforzando el abrazo.

-¿De… de verdad?

-Si.

-¿No crees… en todas esas mentiras?

-No.

-¿En… en verdad? –preguntó, con un hilo de esperanza en su voz.

-Si. Vamos, abrázame, que me gustan tus abrazos.-dijo Naruto, sonriendo un poco.

Hinata, poco a poco, posó sus manitas en la espalda del joven, y cuando se acostumbró, lo abrazó con un poco de fuerza, suspirando un poco debido al llanto y cerrando los ojos ante la sensación cálida que sentía. Se quedaron así por un buen rato, sintiéndose cómodos con la compañía del otro.

-Eso está mejor.-dijo Naruto suavemente, sintiéndose cómodo.

Un considerable tiempo después, se separaron.

-Bueno, Neji se quedó restaurando tu reputación en la universidad, y ya todos conocen a la verdadera Shion… todo estará bien.

-Naruto-kun… ¿Cómo supiste que fue Shion quien lo hizo? –preguntó Hinata mientras Naruto borraba los rastros de lágrimas con sus dedos.

.

.

-Por tu cara veo que no me equivoco. –dijo Neji mientras Naruto aun estaba sorprendido. Si había sido Shion… entonces todo tiene sentido.

La chica se quedó sin palabras.

-Eres parte del club de fans de Naruto. Un grupo tan numeroso como el club de fans podría haberse encargado fácilmente de regar rumores por toda la universidad para manchar el nombre de Hinata. Los volantes tampoco deberían ser problema, ¿verdad? Y como la presidenta del club de fans es Shion, todo tiene sentido… quien lo diría … de alguien como ella…

La chica intentaba balbucear algo, pero le costaba trabajo.

-N-No importa si-si lo saben… Shion-san tie-tiene el arma secreta para acabar con la reputación de Hinata Hyuga.

La chica intentaba sonar atemorizante, pero no lo estaba logrando para nada.

-Naruto… ahora que lo pienso, Hanabi me conto que Hinata había perdido su diario hace varios días…

-¿Qué?

-Estoy seguro de que Shion tiene algo que ver…

La chica se quedó hecha una estatua de hielo, pero lentamente sonrió egocéntricamente, viendo el reloj. Naruto y Neji se quedaron confundidos ante esa acción. Luego las voces de los estudiantes empezaron a hacer presencia por toda la universidad con mas intensidad que antes.

-Ha llegado la hora de salida… ya no pueden salvarla…

Y tras decir eso, salió huyendo de allí.

-¡Oye, vuelve aquí! –gritó Naruto, intentando ir tras ella, pero no lo consiguió ya que Neji lo tomó del brazo. -¡Suéltame, Neji!

-Hora de salida…

-¿Qué?

-¡Naruto, vamos a la entrada de la universidad! ¡Siento que algo malo esta por pasar!

Naruto se asustó, y ambos empezaron su carrera hacia el lugar.

.

En su carrera, notó que habían muchos carteles en donde estaban escritas páginas de una especie de diario. Supo de inmediato que era el diario de Hinata, pero había algo mal… varias de esas páginas decían cosas crueles, como que Hinata los odiaba a todos, a excepción de Naruto. También decían algunas otras mentiras despreciables. Supo de inmediato que era una gran mentira. Alguien había modificado la verdad solo para hacer quedar a Hinata como una persona despreciable.

-¡Maldición! ¡Quién haya hecho esto me las va a pagar! –gritó Naruto, quien se había detenido para observar los carteles.

-¡Naruto, apurate! ¡Tenemos que ir a la entrada! ¡Hinata puede estar en problemas! –y antes las palabras de Neji, un Naruto iracundo emprendió su carrera de nuevo.

Al llegar al lugar, se sorprendió al ver a la enorme multitud rodeando a Hinata.

-¡No es cierto! ¡Eso no es verdad! ¡Yo nunca…! ¡No los odio! ¡No odio a Sakura-san! –escuchó a Hinata gritar.

-¡Mentirosa!

-¡Si, mentirosa!

La gente la había acorralado. ¡Maldición, tenía que ayudarla y desenmascarar a Shion! Naruto y Neji, ambos, empujaron, se estrujaron pero lograron llegar al frente, donde vieron a una Hinata muy asustada siendo juzgada por todos.

-"Hinata…"

¿Qué le pasaba? ¿Por qué no podía caminar hacia ella? ¡Está sufriendo! Pero sus pies parecían adheridos al piso. Solo se quedó mirándola con un gesto de preocupación.

Los ojos de ella se llenaron de lágrimas de un momento para otro, y ella salió corriendo de allí rompiendo como pudo el circulo de personas.

.

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-L-Lo siento…

-Ya deja de disculparte, tú no tienes la culpa.

-Dudé de ti…

-Es cierto, lo hiciste.

-Lo siento, Naruto-kun…

-Entonces haz algo por mí.-dijo él con su sonrisa contagiosa llena de felicidad.

-¿Q-Qué cosa?

-¿Me acompañarías a un picnic nocturno, Hina-chan?

-¿Q-Qué…?

Naruto sacó la cajita en donde estaba aquel colgante. Se lo extendió a Hinata y con una sonrisa le dijo:

-¡Feliz día blanco, Hinata!

-¿Pa-para mi…?

Naruto asintió. Hinata con un gesto sorprendido, tomó la caja entre sus manos y la abrió. Pero en cuanto lo hizo, sus ojos se llenaron de lágrimas.

-¿Qué pasa? ¿Muy feo? ¡Ah! ¡Si que soy un idiota! ¡Creí que te gustaría! ¡Lo siento mucho, Hinata! ¡Te compraré cualquier otra cosa, pero no llores por favor!

-Es hermoso… -logró articular ella.

-¿En verdad te gusta? –preguntó Naruto. Ella asintió sonriendo. –Ya no llores más, por favor. –le dijo, limpiando las lágrimas con sus dedos.

-Estoy llorando de felicidad… Gracias Naruto-kun…-dijo, y lo abrazó. -¿Iremos de picnic?

-Si. Y se que te gustará.

-Pe-pero mi padre… tengo que pedirle permiso.

-Ya me encargué de eso.

…0…

-¡Que hermoso!

-¿Verdad que si?

Hinata estaba maravillada ante la belleza del lugar, tanto que sus ojos casi se hacían estrellitas. Naruto la apegó a él por la cintura, mientras veía también embelesado el lugar.

Comieron, se rieron, y juntos se acostaron en la hierba, observando las estrellas y pensando en lo bello que podría ser el futuro.

-Himawari…

-¿Himawari? –pregunto Naruto.

-Significa girasol… como los girasoles que le dejaste a mi madre esa navidad. Si un dia… nosotros… bueno… pues….

-¿Uh?

-Llegaramos a tener una hija… me gustaría ponerle Himawari…

Naruto pensó. ¿Hijos de él y Hinata? Seguro que sería maravilloso… un mini-Naruto y una mini-Hinata corriendo por ahí, seria maravilloso.

-¿Naruto…kun?

-Me encantaría…-dijo Naruto, y la atrajo hacia él para besarla mientras las estrellas aun seguían resplandeciendo con furor.

…0…

10 años después….

-¡Hinataaaaaaaaaaaaaa!

-¿Naruto-kun? Es domingo, ¿Por qué gritas tanto?

-¡Bolt se comió mi ramen de edición limitada!

-Vamos, Naruto-kun, puedes comprar más….

-Pero….

-O podría cocinarte un poco.

-¡¿De verdad?! ¡Te amo, Hinata! ¡Tu ramen es el mejor!

Y Naruto le dio un gran beso a su esposa, para luego sentarse en la mesa impaciente.

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-¡Mira nii-chan! ¡Es un girasol! ¡En la tumba de la abuelita!

-Pero si esta todo marchito y negro…

-¡Yo creo que es hermoso!

-Estas loca, Himawari… pon las flores en la tumba de la abuela de una vez.

-¡Si!

Himawari se acercó apresuradamente a poner los girasoles que había comprado frente a la tumba de su abuelita. Y leyó la placa una vez más.

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"Hyuga Hinaby

3 de abril de 1972- 23 de octubre de 1999

Madre y esposa amada por familia y amigos.

Nosotros también te queremos : Bolt y Himawari."

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-Me pregunto si no te meterás en problemas por haber escrito eso en una tumba… y con marcador rojo…

-¡La abuelita no se molestara! ¡Estoy segura! Porque ella nos ama tanto como nosotros la amamos a ella.

Y alli arriba en el cielo, habia una hermosa mujer peliazul que miraba a sus nietos con nostalgia y felicidad. Su hija habia conseguido a un esposo maravilloso el cual habia estado con ella en los momentos tanto dificiles como felices, y habia dado a luz a dos hermosos hijos, a los que ya queria como unos nietos a pesar de no estar alli. Ahora ella estaba rodeada de personas maravillosas, y Hinaby se sentia en plena felicidad al saber que su hija era feliz. ¡Y claro, tambien era feliz porque tenia unos nietos hermosos!

Después de todo... Himawari no estaba equivocada.

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FIN.

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-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-

¡Ay mi kokoro! D: D: D: D:

Me encargue de usar esta separacion: "…0…" asi como en el fic de HinataBueso-sempai. Para hacerlo mas realista.

El nombre del fic de HinataBueso93 es "Tu sonrisa" y el mio es "Ilumina mis días"

Asi se complementan ambos titulos. Además porque Naruto salvó a Hinata de la oscuridad. Asi lo veo yo.

Chelsea: Tienes un punto de vista raro...

No lo creo. Intente mantener las personalidades de los personajes lo mas intactas posibles con respecto a la historia de HinataBueso-sempai , pero no se si lo habre logrado.

¡Estare esperando tu review, HinataBueso93!

¡Ustedes tambien lectores! ¡Estare esperando todos sus reviews!

¡Espero que les haya gustado! Chelsea, en serio, baja esa sarten.

Chelsea: Sé que en algun momento dirás algo estupido. Sólo tengo que esperar...

¡Pronto esperen... un fic basado en hechos reales de mi vida! Promete ser un long- fic Naruhina, pero denme tiempo.

Y me gusto la escena de alla arriba con Bolt y Himawari... ay mi kokoro!

Soredewa, minna-san! Matta ne! :D :D :D

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Por cierto Chelsea, con esa sarten pareces Kushina en cierta forma...

¡Pum! *sartenazo*

Chelsea: ¡Sabia que dirías algo estúpido!

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