Claim: Juvia L.
Palabras: 500, sin notas, sin disclaimer, sin titulo, solo el texto.
N/A: Juvia es mi personaje favorito de Fairy Tail. Principalmente por que me recuerda a mi cuando stalkeaba a algun chico. Ademas de que es un personaje con una gran historia para explotar y que siempre se puede utilizar para cualquier historia. Admito que me costo escribir algo K+ y hasta dudo que esto lo sea. Si algun moderador cree que hay que aumentar el Rated, lo hare.
Disclaimer: "Fairy Tail es propiedad de Hiro Mashima. Este Conjunto de Drabbles participa en el reto: Mes de apreciación: Julio 2015 - Juvia Loxar del foro: Grandes Juegos Mágicos"
Subgenero: Casa de los espantos
"Ninguna sabana te protegerá en la oscuridad"
Juvia se encontraba en la puerta de la mansión. Era una vieja construcción de madera podrida del siglo pasado. Su antiguo morador murió misteriosamente y desde esa fecha comentan que su espíritu anda por las noches reclamando.
"¿Dónde está mi cuerpo?"
—Son solo cuentos de lugareños asustadizos, Juvia no se asustara.
Al ingresar pudo contemplar el lugar. Un extenso hall con una gran escalera que daba al primer piso era lo primero que podía verse. Se encontraba en ruinas, lleno de moho y telarañas por doquier. Camino y el piso rechinaba quejándose por sus pesadas botas. El viento soplo fuerte por una de las ventanas rotas y creyó oír un lamento. Un portazo la alerto y corrió hacia atrás. Al llegar ante la puerta oyó un clic, el pestillo fue echado. Giro el pomo pero este se encontraba trabado. Dio un paso hacia atrás y se cayó al piso con un pesado sonido metálico. Del orificio salió un pequeño chorro de sangre que la empapa. Juvia grito con fuerza y una risa onírica se escucho por los rincones del lugar.
—¿Quien anda ahí?
"Juvia cálmate" Pensó mientras caminaba hacia el primer piso. Abrió la puerta que se encontraba a su derecha, dando a un pasillo oscuro. Encendió una lámpara y camino. La iluminación era tétrica y poco podía ver. Sintió cosquillas en su rostro y se rasco con los dedos. Noto una especie de gel y al retirarlo, comprendió que había aplastado una araña. Al alzar la vista, cientos de arácnidos cayeron sobre ella.
—¡Auxilio, Gray sama proteja a Juvia!
Se zarandeo las arañas y pronto de la desesperación se convirtió en agua. Allí los insectos comenzaron a introducirse en su cuerpo. Juvia lanzo un poco de agua para todos lados y logro esparcirlos por doquier. A pesar de su nerviosismo, logro incorporarse a toda prisa y corrió por el pasillo.
La puerta del fondo se abrió de un portazo. Un cuerpo putrefacto se abalanzo sobre ella, traspasándola y cubriendo de agua todo el lugar. Los labios calcinados se movieron erráticamente y una cacofonía de terror broto.
—¿Dónde está mi cuerpo?
Un espectro se encontraba tumbado en una cama destruida por el tiempo. La observaba en silencio y le señalaba el cuerpo putrefacto que se acercaba a la hechicera elemental de forma errática. El puño le brillo y golpeo a Juvia con tanta fuerza que la dejo inconsciente.
La hechicera elemental se incorporo. Recordó el golpe que la dejo inconsciente y se toco la sien. No había ningún dolor. Comprendió que se encontraba en una habitación normal y Gray sama se encontraba allí.
—Te he rescatado Juvia, menos mal que llegue a tiempo. He sanado la mansión, ahora larguémonos juntos.
—Juvia está feliz de que la haya rescatado.
Juvia se incorporo y camino hacia la puerta. El pomo se cayó y un sonido metálico se oyó por todos lados. Del orificio brotó sangre. La puerta, el piso y las paredes se pudrieron a toda prisa.
—¡Aquí está mi nuevo cuerpo!
