PRETTY CURE ALL STARS
LA GRAN BATALLA DE LA LUZ
Por: Escarlata.
Pretty Cure pertenece a TOEI ANIMATION.
Nota: Éste Fanfiction no está ubicado en la línea temporal de las películas de ALL STARS, pero sí al final de cada serie. Las líneas temporales usadas serán casi las mismas que en ALL STARS.
Parte 1 El Festival de L'Ecole des Cinq Lumieres
Mañana sería el gran día. Luego de muchos preparativos, dolores de cabeza en la organización del evento, noches de vigilia revisando materiales e incluso peleas entre los miembros del Comité Escolar; finalmente todo estaba listo para el primer "Gran Festival Interescolar de L'Ecole des Cinq Lumieres". Sería un gran evento con siete preparatorias invitadas, contando a los anfitriones serían ocho, y entre las actividades principales estaban: exposición de trabajos de los Clubes de Arte, Concurso de Proyectos de Ciencias, Torneos Amistosos de Fútbol, Básquetbol y Softball; presentación de cuatro obras de Teatro presentadas en conjunto por cuatro pares de Preparatorias, un Concierto Vespertino al Aire Libre de los Clubes de Música Ligera y, para cerrar con broche de oro, la presentación en vivo de Kusagano Urara, la Idol de la sección de Secundaria de L'Ecole des Cinq Lumieres.
Serían dos días de mucha actividad.
Sin contar, claro, que habría puestos de comida en una zona específica de la escuela; de entrada sabían que Otaka-san no se daría abasto con tantas chicas ahí. Nada estaba fuera de lugar, nada faltaba, todo estaba absolutamente contemplado. Todo tenía que salir bien.
- Buen trabajo – dijo Natsu llevando bebidas a las seis cansadas estudiantes y a un profesor fulminado.
- ¿Vendrás al Festival? – le preguntó Koji luego de dar un trago a su jugo.
- Claro que iré, tonto, iría aunque no lo preguntaras – contestó el joven con un gesto poco alegre.
- Yo estoy de actriz invitada en la obra de teatro que escribió Komachi-san – anunció Urara con gran emoción. – Pensé que no podría ayudar porque sigo en la Secundaria, pero me alegré mucho cuando me invitaron a formar parte del grupo.
- Nosotras también estamos en Secundaria y aun así ayudamos – dijo Nozomi con un gesto entre agotado y alegre. – No podíamos dejar solas a Karen-san y a Komachi-san.
- Sin contar que a mi me pidieron ayudar en el equipo de fútbol – murmuró Rin, aun más cansada que el resto de sus amigas debido al intenso entrenamiento para el torneo amistoso.
- Nozomi-san y Kurumi podrán disfrutar el festival por completo, nosotras aun tenemos que estar atentas a los eventos, así que diviértanse – sonrió Karen. – Y luego del partido y los ensayos de la obra Urara-chan y Rin podrán pasarla bien.
- ¿Y Shiro? – preguntó Natsu luego de notar la ausencia del joven mensajero.
- Ayudando a Otaka-san con todos los preparativos de mañana – respondió Urara. – Van a necesitar mucha comida, así que lo tienen ayudando. Mañana le darán un descanso para que pueda disfrutar un poco el festival.
Como ex presidenta del Consejo Estudiantil de la sección Secundaria de L'Ecole des Cinq Lumieres Karen tenía casi la obligación de ayudar de nueva cuenta en el consejo de la sección Preparatoria. Y así lo hizo, no tenía necesidad de que nadie le dijera nada, podría aspirar al lugar de Presidenta hasta tercer grado, mientras servía como ayudante y vaya que sabía lo que hacía. Como respiro para Karen las decisiones importantes no las tomaba ella, además de que Komachi la había acompañado al Consejo y seguía a su lado como siempre desde que eran amigas. Aunque aun no tenían ni medio año en primer grado de la sección de Preparatoria eran dos elementos de mucha ayuda en el consejo. Komachi, como era de esperarse, pidió de nuevo el lugar como encargada de la biblioteca. Simplemente amaba los libros.
Nozomi, Rin y Kurumi ahora estaban en tercer grado y Koji seguía siendo el profesor encargado de su clase, mientras que Urara recién había pasado a segundo y se las había arreglado para seguir con su carrera artística y no descuidar sus estudios. Era el orgullo de las chicas, eso ni dudarlo. Mientras Nozomi al menos ya sacaba calificaciones aprobatorias, para alivio de Koji, Rin seguía prendada al deporte, aunque se le veía bastante interesada en aprender más de flores y números para poder hacerse cargo del negocio de la familia. Kurumi iba bien en el colegio, atendiendo cosas en el Cure Rose Garden y constantemente ayudando a Coco y a Nuts como era debido; aunque su costumbre de pelear con Nozomi por chocolate o cualquier otra tontería no había disminuido ni un poco.
Pasaron el resto de la tarde descansando hasta que fue hora de volver a casa.
Al día siguiente todos llegaron temprano al Festival para terminar detalles, preparar las cosas y tener todo listo en el área designada para la comida. Alrededor de las nueve de la mañana varios autobuses de diversas escuelas comenzaron a llegar y cada uno de ellos traía grupos numerosos de chicas además de los equipos y aditamentos que iban a requerir para sus actividades y presentaciones. El espacio para tanta gente no era problema, habían acondicionado salones de clases para que se quedaran a dormir, así como áreas de campamento afuera para las que tuviesen humor de quedarse bajo las estrellas.
Serviciales como eran, las alumnas de secundaria se prestaron a ayudar con los detalles finales antes de disfrutar las actividades sin horario específico, como la muestra de Arte. Habría un reconocimiento especial para la obra que tuviera más comentarios positivos, estos se estaban contando en tabletas de opiniones a la salida de la sala de exposición en los que las visitantes podían dejar su impresión de la exhibición y de la obra que más le gustara. Para dejar todo más justo se trabajaron con pseudónimos y no con nombres completos ni datos de la escuela de la que venían.
Cabía mencionar que había un cuadro en específico que estaba causando buena impresión, un óleo de una tal "Ala Plateada".
Luego de la ceremonia de apertura se dio comienzo a los partidos de la primera ronda de manera simultánea. Ese día habría dos partidos consecutivos para los equipos con racha ganadora. Al día siguiente sería la gran final de fútbol, Softball y básquetbol. Los equipos se habían preparado mucho para poder resistir el agotamiento físico que les esperaba. Entre partido y partido tendrían dos horas de descanso.
- ¡Vamos, Rin-chan está a punto de jugar! – les apuraba Nozomi. – ¡Quiero estar en primera fila!
- ¡Es tu culpa, querías comer algo primero y ahora vamos tarde! – se quejó Kurumi de los jaloneos mientras Urara se divertía mirando de reojo cómo en otras canchas se preparaban para jugar.
Al llegar a la cancha donde jugaría la primera ronda la escuela local descubrieron que estaba lleno, aun así Rin alcanzó a verlas a lo lejos y les saludó con ambos brazos y una sonrisa. Decidieron quedarse donde estaban, además podrían ver el otro partido que se llevaría a cabo en la cancha frente a ellas. Tal vez no era un lugar tan malo, pero sería incómodo gritar y animar a su equipo y a su amiga desde tan lejos.
- Rin-san va a ganar, chicas, no debería preocuparles eso – dijo una voz conocida a sus espaldas.
- ¡Masuko-san!
- En lugar de eso, deberían de fijarse en los rivales que les espera a nuestro equipo – continuó mientras miraba a las otras jugadoras frente a ella a través de la lente de su cámara. – He escuchado que hay equipos muy buenos y… – se calló al ver algo que la sorprendió bastante – ¡Es ella!
De pronto la emoción de Masuko llamó más la atención de Nozomi, Urara y Kurumi.
- ¿De quién hablas, Masuko-san? – preguntó Nozomi con curiosidad y mirando a todos lados sin saber qué buscar.
- ¡Ahí, mi querida Nozomi! – rodeó a la chica por el cuello y señaló con cámara en mano a una chica de cabello castaño y corto, apariencia varonil y ligeramente alta y delgada. Vestía uniforme claro y terminaba de hacer calentamiento junto con el resto del equipo. – Mis contactos no mintieron, la Preparatoria de Verone trajo a su mejor arma.
- ¿Esa chica? – Kurumi no parecía muy convencida pese a la buena apariencia de la susodicha.
- Es guapa – comentó Urara – y parece en muy buena forma.
- ¡Ah, mis queridas, no saben lo que dicen! – la fotógrafa seguía emocionada. – Hablo del As de los deportes de la Preparatoria de Verone, ella juega oficialmente en el equipo de Lacrosse, pero ayuda en los clubes deportivos que la piden y siempre coopera con la victoria. ¡Les presento a la alumna de primer grado de la Preparatoria Verone, Misumi Nagisa!
Ciertamente Nozomi y las chicas no estaban tan impresionadas. Los silbatos dieron comienzo a los partidos y vieron a Rin haciendo de las suyas en la cancha y dando muy buenos pases para que las demás jugadoras aprovecharan los tiros y anotaran. Ni bien habían empezado los partidos cuando sonó en coro el grito de gol anunciando un tanto, pero no en la cancha donde Rin jugaba, si no en la que quedaba frente a Nozomi, Urara y Kurumi.
Volvieron su atención al partido frente a ellas y vieron que la autora del gol había sido nada menos que la chica que Masuko había mencionado: Misumi Nagisa. Se quedaron viendo el partido frente a ellas y la chica anotó dos goles más en cuestión de diez minutos, para luego de otros diez minutos hacer cambio de jugadoras. Era una estrategia para no agotar demasiado a sus jugadoras clave, era una buena técnica a pesar de que los partidos solo duraban cincuenta minutos.
Verone se coronó con la victoria mientras en la cancha vecina la escuela local también se hacía con el pase a la siguiente ronda.
Terminaron los partidos y Nozomi y las chicas fueron a felicitar a Rin por el buen juego y a llevarla a comer un poco antes del siguiente partido. La pelirroja tenía que recuperar fuerzas y eso solo lo lograba comiendo por montones. Luego de comer fueron a la exposición artística donde Natsu y Koji miraban los cuadros con particular interés.
- ¡Rin ganó en la primera ronda! – anunció Nozomi a los chicos con una alegría inmensa y con un brazo rodeando el cuello de su mejor amiga.
- Oh, vamos, solo es la primera, deja que pasemos a la final – se quejó Rin con una risilla y un sonrojo.
- ¡Felicidades, iremos a ver el siguiente partido, Karen y Komachi se unirán a nosotros también! Te apoyaremos – dijo Koji con evidente alegría, mas su atención se fijó en el cuadro que tenía enfrente, mismo que Natsu no dejaba de ver.
Las chicas también miraron el cuadro. Era un óleo grande, brillante y lleno de vida, el escenario era un árbol de proporciones inmensas flotando sobre un paisaje verde. Era un cuadro espectacular, aunque sin quitarle belleza el resto de las obras en la sala, pero ese en específico era sobrecogedor. El cuadro se titulaba "Nuestro Hogar" y había sido pintado por una tal "Ala Plateada".
- Es un paisaje familiar – dijo Kurumi, cuya atención también había sido atrapada por el cuadro. – Se parece mucho a…
- La Tierra de las Fuentes – completó Natsu.
Por la manera en que lo dijo las chicas adivinaron que se trataba de alguna tierra o reino mágico que ellos conocían.
- Tenemos amigos ahí, pero no pensé que alguien pudiera plasmar tan bien ese reino en una pintura – murmuró Koji. – La persona que dibujó esto seguramente debe ser…
- No me sorprendería – murmuró Natsu. – Ellos también tienen sus guerreras.
Nozomi, Rin y Urara no entendieron, Kurumi sí pero no dijo nada, seguía viendo el cuadro con embeleso y genuina emoción en sus ojos. Con las obras sin más identificación que título y pseudónimo era imposible saber a qué escuela y alumna pertenecía ese cuadro que los tenía hipnotizados. Seguramente Karen y Komachi sabrían, pero en ese momento estaban ocupadas y atendiendo otras cosas como parte del Consejo Estudiantil.
El flash familiar de una cámara captó su atención, era Masuko Mika de nuevo al tanto de todos los eventos posibles, quería tener todo listo para la edición especial del Festival del Periódico Escolar.
- Veo que se divierten – canturreó la chica fotografiando el cuadro del árbol. – No quiero adelantar nada, pero parece que "Nuestro Hogar" se va a llevar el reconocimiento especial de la exhibición con mucha ventaja. Ah, sí, y apenas empezó el Concurso de Proyectos de Ciencias, deberían ir; escuché que "La Reina del Conocimiento" está participando también y va con todo para ganar, seguro será divertido verla. – Informó con bastante soltura. – Kokoda-sensei, a usted lo esperan como parte del jurado, recuérdelo, debe estar ahí.
- ¡Es cierto! – gritó Koji y salió corriendo en dirección al teatro de la escuela que en ese momento servía para la presentación de los clubes de ciencia.
Sin otra cosa por hacer y sin muchas ganas de ver proyectos de ciencia, las chicas fueron a la zona de campamentos a que Rin terminara de descansar para su siguiente partido. Algunos clubes deportivos también descansaban y comían un poco. A muy pocos metros de donde ellas se habían acomodado se veía a un Club de Softball de uniforme naranja echarse ánimos y vitoreando por la siguiente victoria, habían pasado a la siguiente ronda y por comentarios al azar supieron que al equipo que habían derrotado era al de casa. No muy buena noticia, pero los ánimos de esas chicas se contagiaban a cada grito.
- ¡Vamos a ganar la que sigue, estoy a tope y jugaré con todo! – exclamó una voz en exceso alegre. – ¡No las decepcionaré por haberme elegido titular, lo prometo!
- Tranquila, Hyuga, aun falta como una hora para el siguiente partido – dijo una de las alumnas superiores. – Termina de comer y descansa.
- Capitana, ¿puedo ir a buscar a Mai? – pidió Saki con una respetuosa inclinación. – No he hablado con ella desde que bajamos del autobús y… bueno… seguro está con el Club de Arte y…
- ¿Y todavía te sorprende que en la escuela digan que tú y Mishou parecen eternas enamoradas? – preguntó la capitana en tono de broma, haciendo reír a las demás chicas y sonrojar a Saki. – Anda, ve, regresa a tiempo para que comencemos a calentar. No te puedo negar esa petición cuando siempre regresas con más energía luego de que hablas con ella. Anda, no tardes.
- ¡Sí, gracias!
En su apuro, Saki corrió sin fijarse bien a dónde iba y terminó por tropezar y caer encima de Nozomi y Kurumi. Rin alcanzó a quitarse y jalar a Urara consigo.
- ¡Dolió! – exclamaron las tres accidentadas.
El equipo de Softball solo suspiró, a veces a Saki se le salía la torpeza en el lugar menos indicado.
- ¡Lo siento mucho! – exclamó Saki apenas se les quitó de encima. – No me fijé por dónde iba, lo siento mucho. ¿No se lastimaron?
- Seguimos vivas, tranquila – le calmó Nozomi con una alegre sonrisa.
- Ten más cuidado la próxima o no vas a llegar a ese partido – se quejó Kurumi y notó que a la chica se le había caído algo, ésta también lo notó y estaba por levantar una especie de llavero cuando Kurumi se le adelantó. – Ten.
- ¡Gracias! – tomó su accesorio, se inclinó a manera de despedida y salió corriendo de nueva cuenta.
- ¡Qué chica tan simpática! – dijo Nozomi. – Espero que le vaya bien en el torneo.
Kurumi se había quedado quieta y pensativa. Ese accesorio tenía una presencia familiar que percibió a la primera, ahora estaba segura que se trataba de un espíritu de la Tierra de las Fuentes, pues éste igualmente reaccionó al toque de Kurumi. Lo que quería decir que esa chica era una de las dos Pretty Cure que protegían esa zona, ella sabía de qué guerreras se trataba: la "Brillante Flor Dorada" Cure Bloom y la "Resplandeciente Ala Plateada" Cure Egret. Rápidamente unió hilos y lo supo, esa chica, Hyuga, era Cure Bloom, mientras que su amiga Mishou Mai que mencionaron las demás jugadoras era Cure Egret, la artista detrás de "Nuestro Hogar", solo la otra guerrera podría conocer la Tierra de las Fuentes de manera tan detallada y plasmar todo en un cuadro.
La chica sabía de esas guerreras, sabía que eran guardianas muy versátiles con habilidades increíbles que solo podían liberarse con todo su potencial cuando las dos estaban juntas y en armonía. Lo comentaría a Coco, Nuts y a las chicas cuando tuvieran oportunidad de reunirse más por la tarde, no era lo suyo explicar lo mismo varias veces.
Koji se encontraba en primera fila con el resto de los jueces calificando los trabajos y presentaciones. Si tenía que ser sincero no estaba del todo impresionado por los proyectos presentados hasta ese momento, si tenía que confesarlo estaba un poco aburrido y estaba seguro que no era el único que deseaba que el evento acabara pronto. Llegó el quinto turno de presentación y entró el Club de Ciencias de la Preparatoria Verone.
El experimento tenía una buena apariencia, eso tenía que admitirlo. La introducción de la presentación la hizo la Presidenta del Club para después dar paso a la mente detrás del proyecto: una chica de pelo largo y oscuro, casi negro y tez blanca. Cuando la chica comenzó a hablar captó la atención de todo el público en cuestión de un minuto. Explicaba todo de manera tan clara, poderosa, sencilla y aun así dejando en claro de qué iba el proyecto que fue todo un deleite escucharla.
El joven profesor lamentó que las chicas no estuvieran ahí, incluso ellas habrían entendido a la perfección toda la teoría detrás de ese proyecto en apariencia sencillo llamado "La Basura y Nosotros". Para el final del evento ya todos sabían quién iba a ganar. Verone se quedó con el primer y único premio del concurso y no fue para menos, había sido una presentación muy buena y un proyecto bien trabajado y cimentado.
Luego de anunciar al ganador, entregar el premio y dar el evento por terminado el teatro comenzó a vaciarse. Koji tomó sus cosas, listo para ir al partido de Rin como lo había prometido, cuando notó que la chica de pelo negro iba en dirección suya. Se quedó quieto y notó que la chica pasó de largo para reunirse con alguien más.
- ¡Buen trabajo, Honoka! – exclamó la otra chica recibiéndola con un abrazo breve y luego tomando sus manos. – Al menos no apareció el menú de Akane-san ésta vez – dijo con una risilla que hizo sonrojar a su amiga.
- ¡Nagisa!
- ¡Solo bromeaba!
Koji las miraba de reojo. Ellas tenían algo curioso que llamaba su atención, tenían una chispa, una energía curiosa y familiar. Una presencia fuerte. Sintió que alguien se paraba a su lado, era Natsu y éste también había percibido algo en ellas. Intercambiaron miradas un segundo y asintieron. En ese momento alguien pasó corriendo a su lado con cámara en mano.
- ¡Misumi Nagisa y Yukishiro Honoka, las Estrellas de Verone! – exclamó Masuko Mika con evidente emoción. – ¿Puedo tomarles una fotografía y hacer una breve entrevista para el periódico escolar? – preguntó con una enorme sonrisa. – Prometo que durará poco, sé que Misumi-senpai tiene un partido en un rato más.
El par intercambió una mirada y luego asintieron a la reportera.
- ¡Muchas gracias! – les tomó una fotografía primero. – Antes que nada, felicidades por el premio en el concurso, Yukishiro-senpai.
- Gracias – respondió con una sonrisa pequeña y alegre.
- Y felicidades por ganar el primer partido, Misumi-senpai, espero que todo vaya bien en el que sigue. Una final entre nuestra escuela y la suya sería todo un honor.
- Lo mismo digo – dijo Nagisa con una sonrisa bastante atractiva y alegre.
Mika preguntó cosas sencillas como sus impresiones sobre el evento en general, qué actividades eran las que más esperaban, qué harían después de que terminara la participación que les tocaban y si querían dejar un mensaje a los lectores.
- Ya terminó mi participación, me toca animar a Nagisa en el siguiente partido y en el de mañana si pasan a la final. Ningún oponente debe tomarse a la ligera – dijo Honoka con la misma voz serena, calmada y clara con la que hizo su presentación.
- Jugaré con todo lo que tengo, es la manera de mostrar mi respeto al siguiente equipo. Haré lo que pueda para pasar un buen momento jugando y ganar – fue la respuesta de Nagisa sin dejar su sonrisa de lado ni las manos de Honoka.
- ¿Y su mensaje para los lectores sería…?
- "La esperanza y la desesperación siempre van de la mano, siempre habrá momentos buenos y malos…" – comenzó Nagisa con un tono un tanto más respetuoso, como si estuviera citando a alguien más.
- "… pero siempre hay que mantener la fe, porque mañana será un buen día." – finalizó Honoka con el mismo tono solemne.
Masuko se quedó quieta unos segundos repitiendo la frase mentalmente, luego sonrió.
- Muchas gracias por la entrevista, prometo que tendrán una copia del periódico en Verone en los próximos días. – apagó la grabadora de mano y se inclinó respetuosamente ante ellas. – Muchas gracias, con su permiso.
La reportera salió corriendo, Nagisa y Honoka caminaron casi tras ella para salir del teatro a paso un rápido, el partido comenzaría en breve y Nagisa tenía que reunirse con el equipo. Debido a la prisa con la que salieron Koji y Natsu no tuvieron tiempo de acercarse un poco más para poder percibir mejor la energía que salía de ellas. De todos modos tendrían suficiente tiempo para darles un vistazo, iban a los partidos de todos modos.
Ya en las canchas estaba por dar comienzo la segunda ronda. Ahora sí Nozomi y compañía pudieron encontrar un buen lugar para apoyar a Rin. Los silbatos dieron comienzo a los partidos y pronto se escucharon gritos, aplausos y el constante ir y venir del balón a punta de patadas. No muy lejos se escuchaba más alboroto por los partidos de Softball así como los constates golpes del bat contra las pelotas. Los partidos de básquetbol pasaban con más discreción al ser en el gimnasio.
Luego de veinte minutos de partido el equipo local iba con una ventaja de tres goles, mismos de los que el equipo contrario no parecería recuperarse. En la cancha vecina Nagisa Misumi planeaba jugar todo el partido y la prueba de sus palabras en la entrevista sobre jugar con todo por respeto a sus oponentes eran los tres golpes que ya había metido por su cuenta. Alumnas de Verone que veían el partido decían que esa demostración atlética era más que nada para impresionar a Honoka Yukishiro que ahora sí miraba el partido de cerca.
Aprovechando el medio tiempo de cinco minutos Nozomi se disculpó con Rin por no poder ver el resto del partido.
- Hay alguien a quien quiero ver jugar, parecía una persona muy interesante y quiero verla de nuevo – dijo con una sonrisa y ese gesto suave y emocionado al que nunca le había podido negar nada.
- De acuerdo, de todos modos el partido bueno es el de mañana, en ese sí te quiero los cincuenta minutos, ¿entendido, Nozomi? – aclaró Rin con una sonrisa inmensa.
- ¡Entendido, Rin-chan! – enseguida miró a sus amigas. – Iré a ver el partido de Hyuga-san.
- ¿La chica que dicen que se cayó sobre ustedes? – preguntó Shiro, que al fin disfrutaba su descanso del trabajo en la cafetería.
- Voy contigo – dijo de inmediato Kurumi, dio una mirada rápida a Koji y a Natsu y asintió. Estos entendieron el mensaje escondido en aquellos ojos. – ¿Vamos, Koji-sama, Natsu-sama?
- Vamos, parece divertido. Hay que ver cómo juega el equipo que sacó al nuestro – rió Koji y se llevó a su amigo con jalones.
- Puedo caminar sin ayuda, ¿de acuerdo? – se quejó Natsu con la mala cara de siempre. – Shiro, seguramente tú querrás venir también, ¿verdad?
La mirada seria, más sería que de costumbre, de Natsu puso en alerta a Shiro. El chico asintió y fue con ellos.
En las canchas de Softball todas las alumnas hacían escándalo por el gran partido. Saki Hyuga sacó a otra bateadora gracias a su fuerte brazo y a esos tiros poderosos, lo que dejó fuera a las corredoras que las oponentes tenían en base.
- ¡Hyuga-san, ánimo! – gritó Nozomi a todo pulmón llamando la atención de la aludida.
Saki miró al público y reconoció a la chica, luego de eso agitó su guante a modo de saludo y regresó al juego de inmediato.
Mientras Nozomi se entretenía con el partido, Kurumi les explicó lo sucedido cuando la chica se tropezó con ellas y pudo tocar el accesorio de ésta. Contenía un espíritu de la Tierra de las Fuentes, así que esa chica y su amiga dibujante, que por cierto estaba cerca de la banca de su equipo y animando a Saki a viva voz, eran las Pretty Cures guardianas de ese reino.
- ¡Nozomi-san, veo que tienes muy buen ojo! – exclamó Masuko que literalmente apareció de la nada junto a la chica.
- ¡Woa!... ¡Masuko-san!
- Buenas nuevas, al parecer en básquetbol nuestro equipo podrá pasar a las finales de mañana – tomó una foto al partido frente a ella. – El de fútbol aun está por verse, pero éste de Softball tiene al As de tercer grado de la Secundaria Yuunagi.
- ¿Es de secundaria?
- Así es, la pidieron prestada en el nivel Preparatoria de la misma escuela, o mejor dicho creo que ella pidió ayudar al equipo, tendré que preguntar. Al parecer la preparatoria estaba algo corta de gente en sus clubes y tuvieron que pedir varios alumnos de su sección de secundaria.
El partido terminó con el triunfo y el pase a la final del equipo de Softball de Yuunagi. En cuanto a fútbol la gran final sería L'Ecole des Cinq Lumieres contra la Preparatoria Verone. En básquetbol el equipo de casa también pasó a la final, pero el oponente final parecía muy duro de vencer.
Lo mejor vendría al día siguiente, en una de las dos obras que se presentarían mañana saldría Urara, además de tener el concierto de cierre.
El final del día se fue con el sol, pero no así las actividades nocturnas como la cena y la fogata en la explanada. Nozomi y sus amigas al fin se enteraron de boca de Koji que Saki Hyuga y su amiga artista eran dos Pretty Cure, que sería buena idea darse una oportunidad de conocerlas antes de que se terminara el festival.
- ¡Vamos a conocerlas y sé que será divertido! – exclamó Nozomi con obvia emoción. – ¡Está decidido!
Continuará…