Ola gente!! aqui molestando con otra absurda historia~ 8D!
esta vez, es de Hetalia...muy bien, explicare ahora la cosa, esto es un UA y USA x Mexico xD! hare destacar que me gusta el USA x UK ~~!
por lo que esto, lo considero cierta blasfemia xD en fin, aqui México es una chica de nombre María Magdalena Carriedo Vargas xD, la historia
se situa como en la canción de "cantarella" , etc. etc. advierto que habra lemmon y un poco de yaoi! uwu
Me disculpo por mi mala ortografía! 8D
Y...gracias por leer uwu!


Capitulo 1
"Tu mirada con la mía"

Fiesta tan absurda no había como esa, entre nobles de varias naciones; gente importante, "fina" por abreviar aquello.

Era IRRITANTE tener que soportar personas de esa clase social, sintiendose las personas más importantes del mundo...bueno, él no se quedaba atrás y hacia galardón de su vida; charlaba sobre sus viajes por Europa al lado de su hermano adoptivo Arthur y más cosas que hacia con este mismo, aparte de sus otros conocidos que le hacían de vez en cuando un "pequeño" pero costoso regalo o detalle.

Siempre lo mismo con esa gente. Tratando de ver quien tenía más, o alguna doncella u caballero por ahí tratando de conquistar a algún soltero con buenas posiciones económicas, ese era el único atractivo en ese tipo de reuniones: "el dinero"

- ¡Alfred!, no te había visto por aquí,¿no gustas beber algo junto a mi? ya sabes, como compañeros de copa por un rato...nada más que eso.- y ahora hacia su aparición una de aquellas doncellas dotadas de belleza infinita pero con tanto cerebro como una vaca, nah...la vaca era más inteligente, ciertamente. En fin, ahí estaba él...Alfred F. Jones...intentando ser..."conquistado", probablemente era la quinta u sexta vez que intentaban eso, claro quedaba, que todas esas habían fallado ya que Arthur bien le explico aquellos fines que tenían las jóvenes hermosas.

-Por ahora no, más tarde tal vez , ya te buscare yo- le contestó a aquella chica de forma fría pero sin dejar de ser cortes, le miro seriamente y sonrío al ver como se alejaba la dama algo indignada por el rechazo tan directo que le dio. Dio un sorbo a la copa de vino que llevaba en la mano y festejo internamente por deshacerse de otra molestia. Claro que lo distrajo de vanagloriarse a si mismo cierto español ,que siempre estaba alegre; que le tomó por el hombro para que se percatara de él.

-¿Por qué tan serio? Estas más amargado que lo normal, ya te pareces a tu hermano~- le saludo sonriente, aquello que había dicho fue de lo más estúpido pero cierto...¿y qué? no era su culpa que aquellas reuniones fueran tan absurdas y aburridas.

-¿Yo como Arthur? ¡Ni en sueños te pienses eso!- contestó animado, ya le iba a regresar sus palabras, vería que no era amargado en lo más mínimo , hasta agrego una sonrisa divertida.

- Venga, ¡así me gusta! - la dio unas palmadas en la espalda muy satisfecho de haberle sacado ese lado, probablemente esas reuniones no eran tan malas después de todo, había una que otra persona agradable con quien conversar - Ya que estas sonriente y radiante como siempre que estas fuera de este lugar¿te podría pedir un enorme favor?¿si?¿si?

- Dependería ¿qué puedo hacer por ti? - dio otro sorbo a su copa y lo miro dudoso.

-Digamos que apenas fue admitida mi pequeña María en estas reuniones y digamos no se siente muy cómoda... - junto las manos como si le rogara que le hiciera el favor, él solo lo continuo viendo con cierta intriga - ¿le podrías hacer compañía? - dejo la incógnita con eso, ¿nada más hacerle compañía? no era mucho y aparte no tenía cosa más interesante que hacer...

-Trae para acá a tu pequeña, yo la cuidare - acepto a fin de cuentas, pues si...¿qué perdía con eso?

El español sonrío alegre de que aceptara y fue corriendo por la chica, al momento de regresar , para sorpresa de él, la "pequeña María" era ya toda una joven echa y derecha, exceptuando su aire y expresión infantil que hacia notar a leguas que odiaba estar en la reunión.

- Gracias Alfred, ¡te debo una! - dijo el español cuando dejo a la chica al lado del americano y se retiro corriendo por su lado, despidiendose con la mano de ambos.

Observo a su compañera de reojo desde la copa de vino y cuando finalizo su trago, volvio a la tarea de verla mejor.

Era una chica de poca estatura, no podía medir más de 1,60, ojos castaño que reflejaban un aire de alguien bastante animado y alegre, piel poco morena, cabello castaño oscuro...lo portaba atado en dos trenzas pero estaba algo despeinada.

Su vestido era largo y negro ,sin ningún adorno, hacia mostrar sus hombros desnudos y su cuello era cubierto por un collar marrón con finas decoraciones de flores .

No estaba mal...y bueno¿que hacía pensando de esa forma sobre esa chica?

-¿Qué tanto me ves? - la voz de la chica lo estremeció, parecía que su forma de inspeccionar no era demasiado discreta.

- Solo observo a quien debo cuidar - contesto seguro de si, aunque eso era lo que estaba haciendo...según él.

-Pues deja de hacerlo, me incomoda- bastante directa era esta chica, hasta había olvidado las formalidades...no pudo evitar sonreír por haber encontrado a alguien así en una reunión tan absurda, le quedaba muy claro que se divertiría con esa peculiar joven. -¿Q-qué? ¿P-por qué sonríes así? - que ella se percatara de que estaba sonriendo de una forma algo extraña y la mirara tan profundamente, le provoco más gracia y no se privo del lujo de reír, causando que se apenara más aun su acompañante.

Varias personas cercanas a ellos, se habian percatado de su risa y claramente los miraron de forma extraña, Alfred detuvo su risa al momento de notar como les miraban mal y eso.

-¿Quieres salir un momento conmigo? - le dijo con aire seductor casi en su oído, quería alejar ese ambiente incomodo; la rodeo por la cadera con un brazo para tenerla más cerca, no sabia exactamente porque lo hacía pero le gustaba aunque en el fondo esperaba que la chica lo rechazara con algún golpe, cosa que no hizo para su suerte.

-Si me sueltas, lo haré con gusto - contesto con el mismo tono que uso él,estaba hecho, saldrían de ahí. Ya quitando esa posición que tenían, la tomo de la mano gentilmente, para dirigirla al jardín que se encontraba en esa casa, de seguro estarían más cómodos lejos de tantas molestias.

Después de recorrer un gran pasillo con varios ventanales que daban afuera , llegaron al dichoso jardín, era esplendoroso, tenía varios rosales y enredaderas por todos lados, también se agregaba una mesita color plata con una silla, quedando cerca de los rosales.

-Buen lugar has elegido - ella se había dirigido inmediatamente a los rosales, para admirarlos de más cerca, se acerco a una rosa en especifico, la cual arrancó con delicadeza y sonrío para si. Él solo se sonrojo al ver la sonrisa de María, le pareció de cierta forma hermosa, aquí de nuevo se olvido de ocultar sus actos y esta se percato de su sonrojo, a lo que respondió con otra sonrisa - Me siento estúpida , se me había olvidado preguntarte tu nombre...y...

-¿Importa si sabes mi nombre? - le interrumpió, acercandose a ella para ver con más exactitud lo que hacia. A su pregunta, la chica solamente negó aquello con un movimiento de su cabeza, aceptando que daba lo mismo saber o no esa información - Esto entonces sera...¿la ultima vez que te voy a ver? - agregó desviando la mirada al cielo.

- Si en tu casa hay flores como estas...- eso parecía un si muy indirecto, pero le bastaba para ilusionarse.

-No hay tan bellas como estas, pero puedo...llevarte a lugares maravillosos - dijo emocionado y agradeciendo a los cielos que a su hermano le encantara viajar, con esto se trataba de asegurar que se volvieran a ver - si es que quieres, claro esta.

- Por mi bien...-suspiro , como pensando que decir a continuación - ¿Y si viajo contigo...sabré tu nombre?

- Probablemente...

- ¿Sabes el mío?

- María , ¿o no?

- María Magdalena Carriedo Vargas, quiero que lo recuerdes bien.

- Lo haré~ pero tengo una duda ¿eres algo de Antonio?

- Sí, soy algo así como su hija. - Alfred iba a agregar algo pero en ese momento había aparecido el "Rey de Roma" o en otras palabras, el español, que regresaba para reclamar a su "pequeña", los dos chicos voltearon a verlo disgustados por haber interrumpido su "interacción" tan amena que tenían , pero no podían ir contra Antonio así que se dieron una mirada final a modo de despedida...y cada quien fue por su lado.

Él se quedo solo en el jardín, sosteniendo la rosa que había cortado rato atrás y esta le dio antes de retirarse con su "padre". Sonrío como idiota viendo al infinito y alzo la rosa al cielo como si se la estuviera ofreciendo.

- Nuestras miradas ,se lograron cruzar en este mundo tan cerrado - canturreo, aquella linea era lo poco que sabia de una canción que a veces escuchaba desde la boca de Arthur y al final esa parte se termino por grabar en su mente...claro estaba, que lo iba a usar para ese momento.

¿A caso él estaba sintiendo algo por esa desconocida?


Bien, si les gusta..me alegro xD
y si no, pues ya que uwu!
agradezco de nuevo porque lean xD!-da tomates- lamento de nuevo mi mala ortografia!