Helo aqui otro de mis fics en este una antigua historia de amor se hace presente en la vida de los titanes solo para complicar las cosas las mentiras y la obsecion seran sus adversarios unidas a un nuevo y seductor enemigo.
Teen Titans no me pertenece si fuera asi habria mas locuras y mas R&R
SUEÑOS
En la noche oscura, la luna llena iluminaba con su tenue luz aquel hermoso paisaje lleno de árboles las estrellas le hacían compañía mientras debajo de un sauce llorón a orillas de un hermoso lago era el escondite de dos amantes.
-No debería estar con vos joven caballero, ambos sabéis que esto no seis correcto, nunca debí de haber aceptado vuestra proposición
-Y si embargo habéis venido a vuestro encuentro decidme si no haberlo hecho porque vos queríais verme a solas tanto como yo a vos entonces ¿porqué hacerlo?
Al escuchar esto la joven rápidamente se dio la vuelta y agacho su cabeza – porque me atormentáis con preguntas sin sentido aun cuando tenga razón y hubiese venido porque siento algo por vos ambos sabemos que no puedo estar a vuestro lado ya que yo…-no termino la ultima frase ya fue bruscamente interrumpida por el joven quien la abrazo por detrás mientras el hablaba
-No decirlos ya que para mi es como si vos clavara un puñal en mi corazón al recordad que le pertenecerá a alguien mas, por favor perdonadme si con mis insensatas palabras os he confundido pero desde que os vi por primera vez lo supe mi corazón ha sido robado por el mas bello ángel caído del cielo
-vuestras palabras seis dulces y alegadoras en verdad joven caballero pero no se si créelos os he de admitir que cuando lo vi también mi corazón fue flechado pero aun así no os puedo corresponder
-Me indigna el que vos dudéis de mi amor pero mas me alegra lo que sintáis mi bello ángel ahora que se que vos sentid lo mismo que yo nada me importa ni siquiera la muerte que se que me darán si saben que os amo
-No decid eso joven caballero ya que si vos muere mi corazón se marchitara de tristeza
-Entonces mi bello ángel no os diré nada que vos no queráis que diga ni haré nada que os lastime o que no quiera que haga os ofrezco mi total y completa devoción
-¿En verdad vos me ama tanto?
-Por supuesto y aun mas, por vos seria capaz de ir hasta el lugar mas recóndito del infierno arriesgando mi vida y peleando con la maldad misma con tal de volver a tener esos hermosos ojos violetas que adoro
Ella se quedo quieta escuchando cada palabra que salía de la boca de su enamorado cerro los ojos y se resguardo en el pecho de el aspiro profundamente y sintió el fresco aroma a durazno que poco a poco se iba impregnando en sus ropas, el la abrazo con un poco mas de fuerza esperando protegerla aspiro profundamente su cabello castaño sintiendo el aroma a lavanda que tenia este se mordió el labio inferior mientras ella se daba la vuelta para quedar frente a frente ambos se miraron a los ojos, miraron sus almas, poco a poco la distancia entre ambos fue disminuyendo mientras que ella rodeada con sus manos su cuello, el rodeaba su cintura; siendo guiados por los que sus corazones les rogaban que hicieran ambos cerraron los ojos sintiendo la suave respiración del otro cada vez mas cerca eventualmente sus labios se rozaron el beso era suave, lento ambos lo disfrutaban, como aquel regalo prohibido que finalmente se puede tener la oscuridad era su única aleada en esta batalla donde el amor, la muerte y la obsesión se harían presentes.
La luna, bella y radiante luna que con sus pálidas ráfagas de luz iluminaba la oscura habitación llena de libros y estatuas extrañas, la joven de piel pálida que se encontraba durmiendo en aquellos aposentos se movía de un lado a otro de su inmensa cama, dormía si pero no descansaba no era por que su sueño le asustara o algo por el estilo de hecho el sueño que ahora tenia era agradable para cualquiera pero ella no era cualquiera ¿verdad?; era simplemente que su "sueño" por así llamarlo le producía un extraño sentimiento le parecía demasiado real casi como si lo estuviera viviendo aunque eso parecía ser imposible. Finalmente despertó abruptamente sentándose a horillas de su cama aun podía sentir el fresco y apenas detectable aroma a durazno que se había impregnado en su piel y en sus labios el dulce y prohibido sabor de aquel beso se rozo con sus dedos los labios mientras cerraba los ojos aun recordando esa sensación que la hacia estremecer, pronto recordó que solo se trataba de un sueño una ilusión algo que no era real sacudió la cabeza y pensó en olvidarse de lo sucedido pero antes tendría que ir por un vaso de agua para refrescarse, así pues comenzó su camino hacia la sala común pero antes de que pudiera llegar a su puerta esta se abrió de pronto dejando pasar al joven petirrojo el cual sin querer tropezó con un libro cayendo sobre la chica; ambos se encontraban en una situación muy embarazosa para cualquiera ya que era una noche de verano Raven utilizaba una pequeña bata morada de tirantes mientras que Robin simplemente dormía con sus boxers, Robin miraba sorprendido a su amiga y compañera ella se veía tan hermosa siendo su piel tocada por los rayos de luna percibió el suave aroma a lavanda que inundaba la habitación el aroma a ella solo duro unos instantes antes de que Raven cansada de estar en esta situación decidiera terminarla; poco después ella se encontraba acomodándose la pijama y el cabello mientras le daba la espalda a su líder sin voltearlo a ver retomo su camino original pero no sin antes aclarar algo con el petirrojo.
-Si no te importa cuando regrese no quiero verte en mi habitación me gusta poder dormir sola
Fue todo lo que le dijo para luego ir a la sala común, mientras que el seguía mirándola aun sorprendido sobandose la mejilla que aun tenia la marca de color rojo de la mano de la chica, poco después mientras ella tomaba un poco de agua volvió a su mente el recuerdo de lo sucedido asía unos instantes cuando teniendo al petirrojo tan cerca pudo captar su aroma ese que asía minutos antes del "incidente" se encontraba impregnado en su cuerpo aun cuando esto pudiera resultar imposible ella sabia que era verdad.
-Aroma a durazno- dijo para si casi en susurro al terminar de beber el líquido vital.
