Todos los personajes de Rick Riordan. Yo esta vez los uso para matar el aburrimiento.
— NOMBRE COMÚN —
Nunca me había gustado el nombre de Sumarbrander.
Espada del verano, puff, que original el tipo que me forjó, en serio. Odio ese nombre todavía más después de que mi ex señor Frey me cambiase por esa cosa estúpida llamada "amor". ¡Por favor! Yo también he babeado por alguna que otra espada femenina, ¡pero nunca había dejado de luchar contra ellas, en nombre de Frey! No, pues el Dios Don Fornicación se lo pierde, ¿quién es tan idiota para dejar atrás una espada que lucha sola y que después no pide sus merecidos reconocimientos? De nada, Frey, en serio, de nada.
Pero ahora, esta Magnus. Ese chico no había dejado de fliparlo desde el primer momento en que me había llamado (tuve que escuchar de nuevo ese nombre de Sumarbrander. ¡Dyuuuh!) y aun así yo, como buena espada (y también porque estaba hasta la empuñadura de estar en el fondo del mar) había acudido al llamado de ese hijo de Frey que no tenía ni una jodida idea de lo que estaba haciendo y que era obvio que necesitaba la ayuda de una espada decente lo más pronto posible. Nota: pena que yo no era una espada decente. Tal vez por eso el chico acabó muerto poco después. Upps, cosas que pasan.
Aun así, puede que fuera porque sentí algo de empatia para con Magnus o simplemente estaba aburrido y necesitaba a alguien con quien hablar tras tanto tiempo de silencio, pero decidí embainar mis prejuicios para con mi nuevo amo y ahora lo agradezco bastante.
Jack.
Ese es el nombre que Magnus me había puesto. Es mio, no me lo gastes demasiado. No me lo puso porque tuviera un significado especial, solo fue el más decente que se le ocurrió, pero me gusta que se refiera a mi con un nombre propio de humanos, de alguna forma suena como si desde el inicio el chico no me veía como un arma (después de que descubriera que yo tenía vida propia, claro), si no como un posible camarada o incluso amigo (además, no sabéis lo locas que se vuelven las lanzas de las valquirias si eres una espada legendaria con nombre humano. Grrr)
Es simple, los días de Sumarbrander quedaron atrás, ese viejo armatoste se quedó en el fondo del agua infinita, ahora solo respondo al nombre que le dio Magnus.
— Hey, Jack —y hablando del rey de los nueve mundos.
— ¡Hey, Señor! —dije mientras yo solo me desenfudaba, sin sorprenderme porque Magnus no estuviera en medio de un campo de batalla ni pareciera tener ganas de luchar— ¿A quién me cargo ahora?
— A nadie, solo quiero saber porque un tipo que no conozco asegura que yo, o que más bien, mi espada, tiene la culpa de que su daga de bolsillo ya no quiere cortar nada.
Upps.
— Te confundes de Jack, hay muchos en el mundo.
Recuerdo una vez, Magnus estaba en Midgar y alguien por la calle dijo "Jack" yo creí que me llamaban y me desenfunde en frente de un montón de mortales atónitos. Habría sido gracioso ver a Magnus intentado explicar eso... Si no hubiera sucedido más de una vez. En verdad que Midgar esta infestado de Jack's.
— No me jodas, ¿si? ¿Cuántos Jack's son espadas discotequeras parlantes? —vale, que mal momento para ser único.
— ¡Hey, que hermoso día!
— Es de noche...
— ¿En serio? Es que no tengo ojos, sabes...
— ¡JACK!
Sí, amo mi nuevo nombre. Aunque no me saca de estos apuros por el libertinaje que Magnus me permite tener. Pero ningún nombre es perfecto.
Y esa daga era una inútil. Lo merecía.
