Disclaimer por motivos obvio he de decir que ni9nguno de estos personajes son de mi pertenencia ( mas quisiera seria millonaria) pero bueno todos sabemos que son propiedad de la gran( superior) Jk. Rowling.

La vida da muchas vueltas llevándote a sitios inesperados como a star con el que una vez fue tu peor enemigo, si unos años antes alguien hubiese dicho esto quizás no no las hubiésemos creído, mucho menos los protagonistas de esta historia, cuando el decidió cambiarse de bando, cuando empezaron a conocerse mejor sencillamente todo fue perfecto, encajaron de una forma que no muchos pensarían fue así como poco a poco el se fueron convirtiendo en amigos, y bueno ahora era muchísimo mas que eso todo era sencillamente perfecto ahora…

-Buenos días dormilona-Le saludo un rubio, tomando asiento en la hermosa mesa que tenían en la cocina

-Hola- le contesto ella aun dormida, mientras tomaba asiento en la mesa

-¿No piensas despertarte?

-Estoy cansada

-No lo dudo- dijo yendo hasta la cocina a traerle su café lo que la muchacha agradeció con un beso bastante apasionado pero a la vez cargado de amor

-¿Vas a trabajar hoy?

- Creo que si, ¿porque?

-Pensé que pasaríamos el fin de semana juntos

-Todavía no me han llamado

-¿Te quedas?-Se levanto y lanzo sus brazos alrededor de el cuello de el

-Si- contesto mientras unía sus labios a los de ella suavemente, mientras la subía solo un poco

-Te amo-susurro ella bajito una vez que el se alejo de sus labios

-Y yo a ti preciosa-Dijo uniendo sus labios en un nuevo beso pero mucho mas intenso esta vez, la subió lo suficiente para poder ubicarla sobre la mesa donde segundos antes estuvieron tomando café de forma tranquila, dejo sus labios para encargase de su cuello mientras ella desordenaba su perfecto cabello rubio suavemente las delicadas manos de la pelirroja descendieron hasta la camisa de el fue encargándose de soltar botón por botón con mucha cautela disfrutando de los suaves toques de el, la atmosfera era mas que excitante, pero no podía ser perfecto escucharon el sonido del teléfono, Ginny maldecía el día que había dejado que la convencieran de haber comprado ese maldito teléfono por querer intentar una vida normal, cuando Ginny iba a decir algo Draco la callo con sus labios

-Ignóralo que es maldita maquina atienda- le dijo el mientras seguía repartiendo besos

-¿Draco, Ginny? ¿Están?-sonó la voz desde la contestadora, una muy familiar ahora mas que nunca maldecía el haberle comentado a su padre sobre el teléfono y sus funciones

-Es mi madre-dijo la pelirroja en su oído mientras las manos de el se encargaba de acariciar cada pedazo de su piel descubierta

-Ignórala- dijo el muy concentrado

-Si hay alguien allí atienda- siguió sonando la voz

-Por Merlín Draco no puedo estar en esto mientras mi madre habla por la maquina –dijo y suspiro, mientras se apartaba y bajaba de la mesa, para dirigirse hacia aquel aparato

-Al fin, que se supone que hacías Ginevra?

-Nada mamá me duchaba

-Si claro, mira necesito que vengas esta tarde-sentencio de una vez

-Esta bien-dijo mas ida que consiente de lo que su madre decía, podía escucha runa voz a lo lejos

-Ginevra contéstame ¿estas allí?

-si si mamá-dijo esta mientras caminaba para alejarse de Draco que besaba su cuello, y se habían encargado de desabrochar todos los botones de la hermosa camisa Armani, que ella vestía como pijama que obviamente le pertenecía a el, escucho como su madre hablaba de algún asunto familiar, pero le era imposible mantener el hilo con Draco recorriendo su pecho con sus dulces labios, ella trataba de no gemir, incluso de separarse de el pero a tenia acorralada contra la pared de su departamento sin dejarle mucha salida-Hija te dejo- dijo por fin la Sra. Weasley –Esta bien nos vemos- dijo ella y colgó por fin dejándose llevar por esas emociones, tiro el teléfono y tomo a su novio por el cuello besándole de forma pasional, el retrocedió hasta que ambos estuvieron en el sofá, ella sobre el, la camisa Armani ya había caído al piso, Draco estaba a medio desvestir, y Ginny solo estaba cubierta por una leve pieza de ropa interior negra pero esta vez no fue el teléfono si no la chimenea.

-Draco- se escucho la voz

-¿Mama?-dijo el mirando por encima del hombro de Ginny

-¿Hijo? No puedo verte –dijo la misma voz femenina

-¿Que sucede mamá?-le pregunto el saliendo debajo de ginny y arreglándose un poco, y acercándose un poco a la chimenea la verdad era que Ginny quería que se la tragase la tierra

-Oh, lamento mucho interrumpir hijo –se disculpo la mujer al comprender la situación

-Ya no importa-dijo el apartando el tiempo-¿Que sucede?

-Te necesito en la casa ahora, hay ciertos problemas- dijo a mujer, el suspiro maldita sea la hora en a que había decidido hacerse cargo de la fortuna familiar

-Pero mama- empezó el pero ella lo corto-Estoy segura que Ginny puede esperarte unos momentos hijos

-Hola Narcisa- saludo la pelirroja muerta de vergüenza, no era la mejor forma de saludar a su suegra

-Hola cariño-dijo ella con una sonrisa-Te robare la diversión por un rato querida- ahora si las mejillas de Ginny habían igualado al color de su cabello-Tratare de no demorarlo mucho-dijo y guiño un ojo, por suerte ya ella no podía sonrojarse mas

-Mama- la reprendió Draco viendo a la pelirroja –Gin mi camisa- ella la tomo y se la lanzo, el la atajo y empezó a abrocharla mientras desaparecía por la chimenea.