Viajes y Remembranzas

Un día como cualquier otro en Hong Kong, en el cielo el sol brillaba con esplendor, corría una suave brisa y los pétalos de cerezo caían magníficamente cubriéndolo todo con su manto rasado.

El joven sonrió.

Aquel espectáculo era maravilloso, pero para él era mucho más especial.

Si alguien hubiera visto su expresion al contemplar este suceso realmente se habría sorprendido. Si bien aquel joven había cambiado ese semblante malhumorado que lo caracterizaba, este fue reemplazado por una expresión melancólica y triste, por eso era raro verlo sonreír.

Su misterioso viaje que lo mantuvo fuera casi una año y medio, había sido una sorpresa para todos en su salón. Pero lo más sorprendente había sido el cambio en el carácter de aquel muchacho.

Aunque decir que su carácter había cambiado no quiere decir que el antiguo Shaoran Li desapareció por completo.

Seguía siendo un chico solitario, casi no hablaba con nadie y por lo tanto no tenia ningún amigo, bueno casi ningún amigo...

-¡¡¡Shaoran!!! ¿Se puede saber porque no me esperaste?- Una hermosa chica de largos cabellos negros y hermosos ojos color ámbar se dirigía a toda velocidad donde el se encontraba.

-Se supone que hoy es un día muy especial, comenzamos el primer año de preparatoria y prometiste que nos iríamos juntos al instituto, ¡cómo puedes ser tan desconsiderado conmigo, no lo puedo creer!- Decía esto con ojitos llorosos mientras llegaba a su lado.

-Lo siento, pero no es mi culpa que te hayas retrasado, no pensaba llegar tarde el primer día de clases. Pero en vista que  lograste alcanzarme y aun no llegamos, creo que podré cumplir mi promesa- dijo  esto tratando de ocultarle a su prima la expresión de tristeza que denotaban sus profundos ojos marrones, pero con ella esto no resultaba, le conocía demasiado bien como para pasar ese detalle por alto, es mas, era la persona que mejor le conocía después de Ella.

-Estabas pensando en ella ¿Verdad?- Pregunto recuperando su respiración normal después de la carera que acababa de dar.

-Sabes que siempre lo hago, pero si, estaba pensando en Sakura-chan, con su flor  favorita cayendo como suave nieve rosa por todos lados, es un poco difícil no hacerlo-Su expresión cambio radicalmente para decir -Bueno, será que mejor nos demos prisa o  en verdad llegaremos tarde- y apuro el paso con Meiling siguiendole en silencio por el sendero de cerezos en flor.

~~~~~~~~~~~~~~~~~~~Aeropuerto deTokio, Japon~~~~~~~~~~

-¡Estoy muy nerviosa! ¡Estoy muy nerviosa!- decia una hermosa joven caminando de un lado para otro cerca de un grupo de personas que la observaban con una gota en la cabeza.

-Será mejor que te calmes, o vas ha hacer un agujero en el suelo, monstruo- dijo su hermano mayor con mirada maliciosa.

-¡Te he dicho que no soy ningún monstruo!- grito la chica provocando que varias personas se voltearan a ver al grupo.

-Lo siento- dijo la chica bajando el tono de voz, visiblemente avergonzada. -Pero... -

-Tu hermano tiene razón Sakura-chan, debes tratar de tranquilizarte- dijo su padre sonriendo como siempre.

-Lo ves, te lo dije monstruo- Su hermano remarco mucho la ultima palabra.

-Grrrr HER-MA-NO- dijo Sakura levantando el puño y con una vena resaltando en su frente.

-Touya deja a tu hermana en paz- Yukito tan conciliador como siempre.

-Ay Sakura-chan, te vez divina cuando te enfadas- Tomoyo cámara en mano (cuando no) enfocaba a Sakura mientras esta con una gota ¡Enorme! en la cabeza suspiraba ya resignada a la manía de su mejor amiga.

-Todavía no puedo creer que estemos a punto de tomar un vuelo para pasar un año completo allá- su expresión volvía a ser la de una persona en extremo nerviosa- Aunque me pregunto cuál será su reacción cuando nos veamos nuevamente, ha pasado mucho tiempo y la verdad creo que las cosas ya no serán como antes, tengo un poco de miedo- esto ultimo lo dijo como un susurro sin embargo Tomoyo logro escucharle con mucha claridad.

-No te preocupes, estoy segura que Li-kun  estará muy feliz de volverte a ver y me encantara grabar su expresión de sorpresa al verte entrar a su clase- sus ojitos brillaban por la emoción.

"Atención, Atención, todos lo pasajeros del vuelo 315 hagan favor de abordar por la puerta numero 6"

-Muy bien ese es nuestro vuelo- el Sr. Fujitaka Kinomoto se levanto del asiento tomando su equipaje de mano mientras Touya, Tomoyo, Sakura hacían lo mismo y Yukito terminaba de comer su ultimo pastelillo y luego los seguía.

-¡Tomoyo! ¡Tomoyo!- cuando estaban en la fila para abordar, llego una mujer bastante agitada, gritando el nombre de Tomoyo a los cuatro vientos, tras ella venían otras cinco mujeres vestidas de negro y con gafas de sol. -¡Tomoyo-chan!- dijo cuando estuvo a su lado y la abrazo efusivamente.

-¡Mamá!- dijo la chica algo confundida- ¡¿Qué haces aquí?! Digo pense que tenias una reunión muy importante y no podrías venir- su madre aun la apretaba contra sí.

-Como crees que te dejaría ir sola a Hong Kong y mas encima a cargo de este tipo- miraba a su hija con ojos de madre tierna(ç_ç), pero al mirar a Fujitaka su expresión cambio a mirada asesina (¬_¬).

-¿Qué dice mamá?- Tomoyo se sentía algo incomoda con la actitud de su progenitora ante el padre de su mejor amiga.

- Lo que quiero decir, es que me voy con ustedes a Hong Kong –

- ¡¡¡Que!!! – grito de Tomoyo, imaginando su vida, con su madre criticando al Sr. Kinomoto, todos los días, durante un año completo, no era posible, ¡¡NO PODIA SER!! – Pero mamá ¿y tu trabajo, la compañía, tus reuniones? No puedes irte así como así- Intento desesperado para que su pesadilla premonitoria no se volviera realidad.

- No te preocupes Tomoyo-chan, todo esta listo lo he estado preparando desde que supe de sus intenciones de pasar un año allá, no te lo dije porque quería que fuera una sorpresa -.

- Pero, pero, pero... - Tomoyo con ataque de pánico

- O es que acaso ya no quieres la compañía de tu madre, te dejo sola con este tipo solo por unas horas y ya te lavo el cerebro y te puso en mi contra- Ojitos llorosos y haciendo pucheros.

- ¡Mamá!, Sabes bien que eso no es verdad, es solo que tu decisión me tomo por sorpresa- Tomoyo ya había aceptado la realidad, no podía cambiar la situación, y al intentarlo solo la estaba complicando mas, resignación.

-  Señora Sonomi– Sakura se había atrevido a intervenir...

- Dime querida – Sonomi ya tranquila le sonreía.

- Creo que debemos abordar, solo nos esperan a nosotros- una gota corrió por su cabeza, y al igual que los demás, la que había mantenido durante la "conversación" anterior aumento su tamaño considerablemente.

- Claro pequeña- ajena a todo la Sra. Sonomi se dirigió tranquilamente hacia la puerta de embarque.

- Haaahhh- suspiro generalizado por parte de nuestros amigos.

- Lo lamento mucho Fujitaka-san - Tomoyo hace una leve inclinación. 

- No te preocupes, desde que me case con Nadeshico-chan siempre ha sido así  y realmente ya predí la esperanza de que la situación varíe- el Sr. Fujitaka respondió con su sonrisa característica y siguió a Sonomi, los demás también abordaron sin mas contratiempos.

El viaje se desarrollo con relativa normalidad exceptuando que la Sra. Sonomi criticaba al Sr. Fujitaka y el pobre Yukito, que era su compañero de asiento tuvo que escuchar todos sus reclamos y con su cortesía habitual se limitaba a sonreír y tratar de calmar a la cada vez más sulfurada señora.

Además que Kero, ya  medio afixiado dentro del bolso, pues con la conmoción Sakura se había olvidado completamente de él, había salido como pudo, enfadado y gritándole a Sakura que como podía ser tan desconsiderada, ella hizo todo lo posible por tranquilizarlo, pero no lo consiguió hasta que Tomoyo llego al rescate con una bolsa de dulces, que dejo algo contento al guardián, y termino de tranquilizarlo con la promesa de hacerle un gran pastel en cuanto se instalaran en casa si prometía portarse bien el resto del viaje... aparte de eso, nada anormal.

¢¢¢¢¢¢¢¢¢¢¢¢¢¢¢¢Instituto Gu Tai Ching¢¢¢¢¢¢¢¢¢¢¢¢¢¢¢¢¢                                    

Shaoran se sentó con gesto cansado en su pupitre, curiosamente cuando había regresado de Japón su ubicación había sido la misma que tenia allá, con Meiling a su lado y los dos bancos frente a ellos vacíos, de esta manera quedaban algo aislados del resto del grupo, pero eso no impedía que Mei fuera la chica más sociable del curso, todo lo contrario a Shaoran, quien aparte de saludar cuando llegaba, solo hablaba con los demás lo estrictamente necesario. Shaoran miro el banco de enfrente, pensando que estaría haciendo Sakura, y ese pensamiento le llevo a recordar, su hermosa sonrisa, sus brillantes ojos verdes, su vivacidad, su eterna alegría... Paf!

Un golpe en su brazo le bajo de su nube tan bruscamente que quedo algo confundido, hasta que vio a su prima sentada a su lado viéndole enfadada, mientras le susurraba que pusiera atención en la clase Shaoran murmuro un 'lo siento' y puso atención, ni siquiera se había dado cuenta cuando entro el maestro, cuando pensaba en Sakura no se daba cuenta de nada.

Llegó el descanso y Mei se fue a almorzar con un grupo de amigos, Shaoran quedo solo y se fue a sentar bajo un árbol de cerezo, SU árbol de cerezo, esa parte del jardín le encantaba, iba allí a almorzar todos los días, solo, pues aunque Mei siempre lo invitaba a ir con su grupo el siempre se rehusaba, sabia que al resto de sus compañeros no les caía muy bien, demasiado serio, no hablaba y según ellos era  "raro", nunca le habían visto salir con alguna chica que no fuera Mei, y desde algún tiempo ni eso, pues sus responsabilidades  iban creciendo en medida proporcional a su edad y no le dejan tiempo para citas, salidas y ese tipo de cosas, además Mei necesitaba hacer su vida, conocer chicos y Shaoran sabia que con el siempre a su lado, esto era bastante difícil. Otra razón y quizá la más importante era que Sakura siempre seria la dueña de su corazón y aunque jamas le volvería a ver seguiría fiel a su dulce recuerdo, si sus compañeros supieran este motivo de su continuo rechazo a las demás chicas seguramente  no pensarían tan mal de él, y sobre su actitud callada, pues mientras sus compañeros hablaban sobre su cita de la tarde anterior, de un programa de televisión o del ultimo éxito musical el no podía contarles sobre el hechizo nuevo que estaba practicando, el antiguo manuscrito que intentaba descifrar, su entrenamiento de artes marciales o el interesante libro de hechicería del siglo XI que leía todas las noches, no avanzaba mucho, porque apenas leia unas lineas y caia dormido, extenuado por su entrenamiento, y todas las obligaciones que le correspondian como futuro jefe del clan Li, pero aun asi le parecía un libro realmente interesante.

Luego de acabar de comer, se aboco a su hobby favorito, aparte de la magia, que le gustaba bastante y no encontraba que fuera una obligación causa por la cual era bastante bueno en ella; y de pensar en su flor de cerezo, su hobby favorito era dibujar, esta era una aptitud que el no conocía tener y la descubrió mientras copiaba los grabados

de un libro antiguo que él conocía muy bien, lo que le preocupaban eran las hermosas ilustraciones que complementaban el texto pero decidió intentarlo, cuando termino la primera quedo asombrado de si mismo, era prácticamente una fotocopia de la imagen original, estaba fascinado y poco a poco   lo convirtió en su hobby personal, no se lo comento a nadie y guardaba muy bien sus trabajos, no sabia la razón pero no quería que nadie se enterara de su talento en este arte.

- ¡Que hermoso dibujo!- Shaoran se sobresalto un poco, no había sentido la presencia de alguien acercándose. 

- Lo siento creo que le asuste- El se volteó para ver que quien era la persona que le estaba hablando y se encontró con la hermosa figura de  una joven rubia de ojos azul claro que le sonreía abiertamente.

- No se preocupe solo me sorprendió un poco, no le oí acercarse creo que estoy muy distraído últimamente- no le iba a decir  que no la "sintió" acercarse, eso seria muy difícil de explicar, le respondió con una media sonrisa.

Esta situación ya le estaba entrando a preocupar, desde un tiempo a esta parte se concentraba demasiado en algo y dejaba de prestarle atención a lo demás, en cualquier otra persona esto no pasaría de un simple chascarro, pero en  él era una situación peligrosa, si esa chica fuera uno de sus enemigos él estaría muerto y apenas se habría dado cuenta, hace poco mientras practicaba con uno de sus primos se distrajo por un segundo, y el corte que estaba cicatrizando en su hombro izquierdo es la prueba de lo peligroso que resultaría un error como ese en una batalla real. 

-En verdad es un dibujo muy hermoso, llevo poco tiempo en Hong Kong pero creo que ese parque no es de aquí ¿verdad?- La chica miraba con curiosidad el dibujo que nuestro amigo estaba terminando antes de que ella llegara.

-Es verdad, este parque no es de Hong Kong- "Me pregunto si algún día volveré a verlo", en la hoja se podía observar un hermoso parque de juegos rodeado por lo que parecía un gran bosque, lo que más resaltaba era un tobogán con forma de pingüino que poseía una corona dorada en la parte superior de la cabeza. Shaoran volaba entre sus pensamientos, recordando las fantásticas  aventuras de las cuales el gran rey pingüino había sido inmutable testigo.

- ¿Y de donde es?- al  parecer la chica no dejaría en paz a nuestro artista, pero a este en realidad no le molestaba en lo absoluto, es mas por una extraña razón se sentía muy cómodo a su lado, como si la hubiera conocido hace mucho tiempo y no hace tres minutos.

- Se encuentra en Japón, en una pequeña ciudad llamada Tomoeda al norte de Tokio (la verdad no recuerdo en que dirección se encontraba, jeje) La conocí en un viaje de intercambio que hice hace cuatro años, y en verdad me encanto, es hermosa y muy tranquila "bueno si no hay una carta Clow suelta o esta Hiraguizawa rondando por ahí" es magnifica las personas son muy amables, me habría gustado quedarme allí " y no solo porque la ciudad me fascinó... Sakura", pero mis responsabilidades y deberes eran mas importantes que mis deseos y mi familia me obligo a regresar a Hong Kong.

- Es una lastima por lo que me dijo parecía ser el paraíso en la tierra – durante el relato de Shaoran la joven se había sentado a su lado, podríamos decir que bastante cerca.

- Pues si, este parque que dibuje se conoce como El Parque Pingüino, en honor a él – dijo indicando el tobogán en su dibujo – y esta rodeado por un bosque enorme al que llaman el bosque de los espíritus -.

- Espíritus – repitió la joven poniéndose un poco pálida.

- Si, según lo que dicen todas las almas de los alrededores que dejaron algo pendiente se congregan ahí-

- Entonces no es tan maravilloso como me dijo al principio– la joven estaba un poco mas pálida que hace unos segundos, y con cara de haberse encontrado con uno de los mencionados fantasmas hace pocos segundos.

Cuando Shaoran, que estaba coloreando una parte del bosque, se volteo a ver a su compañera no pudo evitar reírse ante la expresión de esta.

- De que se esta riendo – dijo ella con un tono algo enfadado y las mejillas sonrojadas por la vergüenza ante su reacción infantil frente al tema de los fantasmas – No debe ser nada divertido ir caminando por ahí y encontrarse con una de esas cosas.

- Lo siento, es que su expresión fue muy divertida-  dijo mientras intentaba dejar de reírse y ella se ponía mas roja.

- Además me hizo recordar a otra persona que solía tener esa misma reacción frente a las historias de fantasmas – cuando dijo esto aun reía, pero la expresión divertida que había en sus ojos momentos antes se había borrado.

- ¿Solía? No me diga que esa persona... – dejo su frase en el aire

- Oh no, santo cielo, ni Dios lo quiera – se puso un poco pálido ante la perspectiva de que algo malo le pasara a Ella.

Vaya se ve que esa persona es muy importante para usted – en este comentario se noto un poco de ¿decepción?, "Pero que rayos me pasa, apenas y lo acabo de conocer".

- no sabe cuan importante es para mí, le aseguro que seria el hombre más feliz del universo si pudiera tenerla a mi lado – el ni siquiera había notado el tono de decepción en la voz de ella.

RIIIIIIIINNNNNNNGGGGGGGGGG... El timbre que indicaba el final del descanso había sonado.

Shaoran se puso de pie de inmediato y le ofreció su mano a la joven para ayudarle a que también lo hiciera.

- Fue un placer hablar con usted señorita... - no supo como continuar, había hablado de sus cosas mas personales con esa joven, cosas que solo Mei sabia ¡¡Y ni siquiera sabia su nombre!!

- Jessica, Jessica Stevenson, y lo mismo digo joven...-

- Li, Shaoran Li, a sus ordenes- Dijo mientras hacia una reverencia.

-OH, lo siento, creo que aun no me acostumbro a todo el protocolo que utilizan en oriente para las presentaciones y la comunicación entre las personas- dijo un poco sonrojada.

- No se preocupe, el sistema no es tan estricto con las personas extranjeras, no así con las personas que si son de aquí. Y debo decirle que a veces tanto protocolo me resulta aburrido- Dijo esto ultimo pensando en la forma en que se referían a el sus sirvientes, algunos que le triplicaban la edad y le llamaban señor, incluyendo a su querido Wei, a quien varias veces había tratado de convencer que dejara de llamarle "Joven Shaoran" y le llamara solo por su nombre de una buena vez, pero no había caso.

- Sé que es una descortesía, pero tengo la extraña sensación de que seremos muy buenos amigos, podría llamarme por mi nombre y dejar de tratarme de usted- ella se detuvo frente a la puerta del salón y le miro a los ojos.

Al principio Shaoran se sorprendió, levanto las cejas, abrió los ojos y la boca un poco, pero luego sonrió abiertamente.

- Aunque parezca extraño, tengo la misma sensación que tu Jessica, y espero que hagas lo mismo, disculpa vamos en el mismo salón ¿verdad?-

- Así es, compartimos la misma clase- ella también sonrió, ya tenia un amigo en un lugar donde prácticamente no conocía a nadie.

- Entonces después de ti- dijo shaoran mientras abría la puerta y hacia un ademán con la mano que indicaba lo mismo que había dicho.

Aeropuerto Internacional de Hong Kong.

-¡Ya llegamos!- este grito de felicidad no se hizo esperar en los labios de Sakura apenas atravesaron la puerta de

 desembarque.

-La verdad no sé porque estas tan feliz monstruo, el mocoso no te ha escrito en tres años, yo que tu no esperaba nada bueno de este estúpido "reencuentro" como lo llaman ustedes- Touya estaba tratando de molestar a su hermanita menor pero se dio cuenta demasiado tarde que esta vez si se le había pasado la mano.

-¡¡Y tu crees que no he pensado en eso!! Durante mucho tiempo me dormí pensando en el motivo por el cual Shaoran dejo de escribirme, mis pensamientos fueron desde que dejado de amarme hasta que algo malo le había pasado, pero decidí dejar de pensar en eso porque estoy segura de que el tiene una buena explicación para hacer lo que hizo acabamos de llegar al lugar donde puedo aclarar todas mis dudas y tu lo primero que haces es decir uno de tus estúpidos comentarios y si quieres que te sea franca ya estoy harta de esa actitud tuya, si no querías venir pudiste perfectamente quedarte en Japón y no venir a arruinarme la vida- todo esto lo dijo derramando lagrimas y tratando de contener la ira y la tristeza que luchaban por hacerse presentes.

Touya se quedo paralizado, al igual que los demás, jamás pensaron ver a la dulce y siempre sonriente Sakura enfadada en serio.

-Vamos Sakura, Touya solo intentaba molestarte, no te lo tomes tan en serio – Yukito había sido el primero en reaccionar y trataba de calmar a la joven –Tu lo conoces bastante bien para permitir que uno de sus comentarios te afecte de esta manera-

-Lo sé Yukito, pero no comprendo como puede actuar de esta forma con algo que es tan importante para mí- Sakura ya comenzaba a calmarse, Yukito le había abrazado y acariciaba su cabeza cariñosamente.

Mientras tanto un poco más apartados de ellos Tomoyo, su madre y el Sr. Fujitaka conversaban.

-No sabia que la situación fuera tan seria- La madre de Tomoyo aun estaba sorprendida por la reacción de Sakura con su hermano.

-Debo confesar que yo tampoco lo sabia- Fujitaka también estaba sorprendido y a la vez muy preocupado pues si bien sabia que ese viaje y su traslado a la universidad de Hong Kong habían hecho muy feliz a Sakura no conocía cabalmente la razón de tanta alegría, es mas cuando recibió la noticia que la gran universidad de Hong Kong había solicitado sus servicios, estuvo meditando el asunto bastante tiempo, pues si bien los beneficios eran muchos, el precio por pagar era también bastante alto, debería mudarse desde el lugar donde ya tenían una vida hecha, sus amigos, su casa a un lugar donde prácticamente no conocían a nadie, un cambio bastante drástico y cuando comento la situación con sus hijos se encontró con que Sakura lo apoyaba al 100% y estaba fascinada con la idea aunque le dolía tener que dejar a Tomoyo pero entre las dos se encargaron de convencer a la Sra. Sonomi de que Tomoyo fuera con Sakura a cargo del Sr. Fujitaka y entonces su felicidad había sido completa. Solo ahora podía vislumbrar la verdadera razón de su hija para estar tan feliz: un chico. Su pequeña Sakura estaba enamorada pero ¿De quien? ¿Desde cuando? Por la discusión anterior sabia que el muchacho había dejado de escribirle a Sakura desde hace tres años y eso solo significaba que se conocían de mucho antes, ¿Cuanto? Cinco años, y el ni siquiera lo sabia es verdad que durante algún tiempo ella se estuvo comportando de manera algo extraña pero el se lo atribuía a que estaba creciendo nunca se le paso por la mente algo así. Su pequeña Sakura estaba completamente enamorada de un chico del cual él ni sabia que existía.

Pero como pudo obviar algo tan importante como eso, él que siempre había velado por el bienestar de sus hijos a toda costa y ¿por qué Sakura no le había hablado del asunto? Temor, no eso no él jamás había dado motivos para que sus hijos le tuvieran miedo, vergüenza, era una posibilidad Sakura siempre se avergonzaba con facilidad, o era que suponía que él no aceptaría al muchacho, Touya no se había referido en muy buenos términos a él y su hijo no solía juzgar mal a las personas pero tratándose de un pretendiente de Sakura su actitud podría deberse simplemente a los celos de hermano mayor, sin duda ya era hora de tener una charla muy larga con su hija. Pero primero...

- Ya se esta haciendo muy tarde, será mejor que pidamos un taxi que nos lleve a casa debemos acomodar nuestras cosas y nos queda mucho trabajo por delante.

Preparatoria.

Los alumnos se retiraban a casa después de un largo y agotador día de estudio Shaoran era uno mas y caminaba hacia su departamento, desde hace un año vivía solo en un departamento a unas cuantas cuadras del instituto había sido su decisión después de todo sus hermanas ya estaban casadas y cada una tenia una casa y una familia propia, su madre con los asuntos del concilio pasaba la mayor parte del tiempo viajando por los diferentes países de oriente y por lo tanto no pasaba tiempo en casa, a Shaoran esto no le importaba mucho en realidad, pues desde pequeño siempre había estado al cuidado de Wei y su madre era solo una autoridad a la que veía escasas veces, la respetaba por supuesto pero el cariño que se supone debía tener por esa distinguida mujer que lo había traído al mundo en realidad no existía. En vista de esto decidió aprovechar los años que aun le quedaban con un poco de libertad, por decirlo de alguna manera aunque esa libertad no era tal, teniendo en cuenta que cuando cumpliera los veintiún años debía tomar el lugar que le correspondía como líder del clan Li, además de casarse y habitar junto a su recién formada familia la mansión señorial en la cual había nacido y crecido, como era tradición ancestral. Además dicha mansión quedaba bastante lejos de su instituto y digamos que a él nunca le gusto mucho la idea que siempre lo anduvieran paseando en limosina por todo Hong Kong así que decidió pedir la autorización de su madre para tener una especie de departamento de soltero donde llegar a alojar durante la semana, los fines de semana y las vacaciones las pasaba en la mansión. Su madre en un comienzo no estaba muy de acuerdo pues pensaba que esto afectaría el desempeño y el entrenamiento mágico de su hijo además que no contaría con protección frente a posibles ataques y después de lo ocurrido hace dos años esto le preocupaba, si bien su hijo aun no ocupaba ningún puesto importante dentro del circulo de hechiceros su gran potencial mágico y de combate sumado al hecho de ser el ultimo descendiente directo del gran Mago Clow y próximo jefe del clan de hechiceros más poderoso de oriente hacían de él alguien que con el tiempo podía ser un verdadero problema para ciertas personas que lo verían como un obstáculo en sus ambiciones y que por lo tanto buscarían acabar con el antes de que se desarrollara por completo y se volviera demasiado fuerte para poder enfrentarlo con éxito en el futuro. Esto era lo que había ocurrido hace dos años y aunque Shaoran había manejado la situación bastante bien y el traidor había sido detenido por el joven y condenado por el concilio a reclusión perpetua en una prisión especialmente diseñada para estos casos, antes de ser doblegado por el chico dejo en él una profunda inquietud que le llevo a tomar una decisión demasiado drástica con respecto a su vida.

Pese a todo ya había pasado un año y no había ocurrido nada de lo que su madre tanto había temido y podía disfrutar de la tranquilidad de su departamento que no tenia nada de pequeño, no por nada era miembro de la familia más poderosa y rica de Hong Kong. Su departamento estaba ubicado en el ultimo piso de un edificio de cinco.

Llego a su departamento y abrió la puerta, ¡por fin en casa! lo primero que haría después de dejar su maletín escolar y cambiarse ropa seria preparar una suculenta cena, se moría de hambre y no le importaba cenar mas temprano que de costumbre, una de las ventajas de vivir solo es que no tenia que seguir un horario estricto, pero por su naturaleza seria y responsable Shaoran no solía abusar de estos privilegios. Se dirigió a su habitación y busco en el ropero algo que ponerse, eligió un pantalón color beige claro y una polera manga corta de hilo después fue a la cocina mientras pensaba que cenaría "okonomiyaky al estilo sureño", porque había pensado en ese platillo lo más normal era que cocinara algo de comida china, genial se le había antojado comer el platillo favorito de un muñeco de felpa que rayos, busco en la alacena los ingredientes y para su decepción se encontró con que no había nada de nada y entonces se dio cuenta que desde que salió de vacaciones de verano no había visitado su departamento, sus maletas se las había llevado uno de sus sirvientes esa mañana y la mucama que le hizo el aseo durante su ausencia no tenia necesidad de comprar nada por lo cual la alacena estaba tal como él la había dejado antes de irse, completamente vacía.

-Bueno no hay mas remedio tendré que ir a la tienda por los víveres- tomo una chaqueta, su billetera y salió en dirección a la tienda donde podría encontrar lo que necesitaba con mas urgencia, iría al mercado otro día.

La calle a pesar de la hora 18:30 se encontraba casi vacía y Shaoran caminaba con paso rápido pues en verdad se moría de hambre y quería llegar a casa lo más rápido posible pues  aunque era el primer día de clases le habían dado mucha tarea eso sin contar con el libro de historia de la magia que debía terminar de leer para el examen de los ancianos, entonces escucho:

- Ya les dije que no,  será mejor que me dejen en paz- la voz de la chica provenía de un pasaje aledaño a la calle por la cual transitaba Shaoran y parecía estar asustada.

- Vamos preciosa solo será un pequeño paseo, ya veras que los cuatro nos divertiremos mucho- este comentario no le gusto nada a Shaoran quien comenzó a sospechar que unos tipos debían estar molestando a una chica y por lo que escuchó debían ser tres sin pensarlo dos veces se encamino al lugar de donde provenían las voces.

- Será mejor que se larguen no estoy loca como para ir con ustedes a alguna parte además... - la chica había hecho acopio de todo su valor y trato de mantener la voz firme cuando dijo esto pero fue interrumpida por otro de los tipos.

- Que conste que te lo pedimos por las buenas, ya que no quisiste pues ahora te vienes por las malas-

- Deja a mi hermana en paz sabandija- una voz infantil se hizo presente enfrentándose al hombre-

- Quítate maldito mocoso- Shaoran llego justo a tiempo para ver como el sujeto arrojaba a un chico de unos siete u ocho años contra la pared mientras que otro intentaba sujetar a la chica por las muñecas.

- Será mejor que dejen a la señorita en paz- una voz potente se hizo escuchar en la calle sorprendiendo a los tipos que no se habían percatado de la presencia del muchacho.

- Mejor te largas, sino quieres que te rompa la cara, nadie te invito a nuestra fiesta- el que había dicho esto era el que había tirado al niño contra la pared.

- Por que no lo intentas, aunque no creo que seas tan valiente de enfrentarte a alguien de tu tamaño- al tipo el ultimo comentario no le gusto nada y se abalanzo sobre Shaoran con la clara intención de querer golpearle la mandíbula movimiento que Shaoran esquivo con facilidad para propinarle un golpe en la boca del estomago que lo dejo fuera de combate al instante.

- Uno menos alguien mas quiere intentarlo- los tipos estaban furiosos y uno de ellos saco una navaja.

- Vaya, vaya pero que valiente, yo que tu no amenazaría a alguien con ese objeto si no sabes como usarlo- el tipo se acercó a él rodeándolo y no directamente como el otro, cosa que puso en guardia a Shaoran. Estocada a la derecha que Shaoran esquivo con facilidad pero el siguiente movimiento no lo alcanzo a esquivar correctamente ya que un grito de la chica desvió su atención  y el hombre pasó a rozar con su pie el hombro izquierdo de Shaoran y aunque no le dio directamente fue suficiente para que su herida se abriera y comenzara a sangrar según lo que pudo sentir al tibio contacto de la sangre sobre su piel, dos golpes no necesito mas que eso para dejar al tipo de la navaja fuera de combate también, y  el tercero al verse solo y a sus compañeros inconscientes por culpa de ese chiquillo le bajo el pánico y se alejo corriendo del lugar Shaoran se relajo y se volteo a ver a la chica para preguntarle si se encontraba bien y enorme fue su sorpresa al ver que esa chica era...

Continuara... 

Notas de mi(o sea la autora ^^):

Hola mi nombre es Lady Kaoru y este es el primer fic que escribo, por mucho tiempo solo fui una lectora mas pero me decidí a escribir esta historia que desde hace bastante tiempo me andaba rondando por la cabeza y pues aquí esta el primer capitulo. Sinceramente espero que la hayas disfrutado tanto como yo lo hice al escribirla y cualquier comentario o consulta la puedes hacer a través de un review o bien escribirme a ladykaoru_2@hotmail.com estaré muy feliz de contestarte.

También quiero aprovechar de hacer un par de agradecimientos a algunas personas que me ayudaron y me apoyaron de forma especial cuando este proyecto recién  se estaba forjando a Crysti que aunque dudo que alguna vez leas esto fue una de las primeras en leer un par de paginas de mi historia, a Felipe por ser tan buen amigo y prometo que el siguiente capitulo será en honor a ti, a NightWalker por soportar mis locuras en el msn jajajaja y muy especialmente a Saito por apoyarme de esa manera y alentarme con sus palabras, a Carmen y Laura por ser las primeras del mundo de fics en leer una buena parte del primer capitulo y las primeras en alentarme y un ultimo agradecimiento a ti claro por tomarte la molestia de leer todo esto ^^ realmente ¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡MUCHAS GRACIAS!!!!!!

Nos vemos el próximo capitulo...