Bien, he vuelto con una nueva historia y esta vez sera un Rin y Len... esta vez hare sufrir a Rin, realmente esta historia salio de la nada, iba en el auto de mi mama, estaba escuchando musica (mi mama) y paso una cancion de algo sobre el aborto... y entonces me dije ¿porque no hacer un fic con una Rin embarazada y con una vida horrible?... ¡y asi es como salio toda esta historia!
DISCLAIMER: Vocaloid no me pertenece, pero la historia si es mía… ¡salió de mi imaginación!
CAPITULO 1: MISERABLE VIDA.
PROLOGO.
Kagami Rin, ese es mi nombre, soy una chica "normal"... en realidad, no. Tengo 16 años, vivo con mi padre y asisto a la preparatoria.
Miserable. Esa es la palabra para definir mi vida. Toda mi vida he estado buscando el sentido de haber nacido. Realmente me he rendido, estos 16 años que he estado viva han sido miserables. Una mierda, si, una mierda. Mi madre me abandono dos días después de haber nacido, se largo con su amante, al menos eso dice mi padre. Mi padre, la peor persona que he conocido en TODA mi vida. Soy maltratada física y psicológicamente por él. Violada. Si, fui violada por mi propio padre y lo peor… estoy embarazada. Tendré un hijo de mi propio padre. Eso ha sido mi salvación y a la vez mi perdición. Salvada de los maltratos de mi padre, al parecer no le molesta que su hija tenga un hijo suyo, en realidad es feliz. Perdida, siempre lo he estado, pero ahora en la escuela todos creen que soy una zorra. Si, aun voy a la escuela, explique mi situación- o la mayor parte -, les dije que fui violada, mi padre fue muy cínico para aceptarlo- aunque, no dijo que fue el – y que aun quería estudiar- cosa que es cierta -, perdí a mis "amigas", en realidad nunca lo fueron al parecer, los chicos creen que soy una chica "fácil", si saben a lo que me refiero. Aunque, no culpo al niño/a que llevo dentro de mí, en realidad lo amo, es lo único que me hace sentir feliz y no me importa si es hijo de mi propio padre. ¡Oh! Me olvidaba, todo el asunto de violación, maltrato y demás por parte de mi padre ha logrado traumarme hasta el punto de odiar con toda mi alma a los hombres y obviamente les temo. A los chicos no les importa, en realidad a nadie le importa. Es por eso que aun no entiendo el sentido haber nacido, bueno solo he logrado obtener un punto… tener a mi hijo/a. y si se preguntan ¿Por qué no abortar antes?... bueno, la respuesta es: no porque no tenga una feliz vida, le quitare la oportunidad de vivir a alguien como venganza. ¿Darás en adopción?, NO. ¿Acaso lo abandonaras?... NUNCA, no quiero ser como mi madre. Protegeré a este pequeño ser que llevo dentro, hasta con mi vida si es necesario.
Protegeré a la única persona que me hace feliz en este horrible mundo.
Espero ser feliz con él/ella, por primera vez en mi miserable vida.
(Rin POV).
-oye mira esa es la "zorra" de la clase 2-A.- una chica le "susurro" a su amiga mientras caminaba delante de ellas.
-¡oh!, si llámenme zorra, al fin de cuentas no me importa.- conteste con sarcasmo dentro de mi mente… como siempre.
Como ya dije, asisto a la preparatoria… embarazada y tengo que soportar a las "inocentes chicas".
-dicen que se acostó con su padre.- respondió la otra chica.
-No están del todo equivocadas, después de todo no son tan idiotas como creía.- conteste reflexionando lo dicho por la chica.
-no entiendo como no la han expulsado… es una deshonra para la escuela.- contesto una tercera voz.
-miren quien habla.- conteste con sarcasmo.
Seguí caminando sin impórtame una mierda la "conversación" de esas tontas chicas.
Llegue a mi salón: 2-A, la clase con chicos más sobresalientes en las materias, la verdad no es por alardear pero, soy el mejor promedio de la clase… ¡já!, ahí tienen la razón de porque no me han expulsado.
Cuando abrí la puerta todos se me quedaron viendo, hicieron una mueca de repudio mezclado con desilusión y siguieron haciendo lo que antes hacían. La verdad, me sorprendió la desilusión… ya estoy acostumbrada a ser repudiada.
Me dirigí a mi asiento que era el ultimo asiento de la última fila. El asiento de lado estaba vacío. Después de 10 minutos aproximadamente la campana sonó dando a entender que era el momento de iniciar las clases.
Un profesor de cabello azul, con una bata y extrañamente una bufanda azul entro seguido de dos chicos rubios, bueno, una chica y un chico. Supongo que son los de nuevo ingreso. La verdad, me importa una mier… debería dejar de hablar así. El profesor les dijo algo a los chicos.
-mi nombre es Kagamine Lenka, es un gusto estudiar con ustedes, espero llevarnos bien.- dijo muy feliz la chica.
La envidio. Ser feliz y "normal", cuando yo nunca lo he sido verdaderamente.
Después fue turno del chico.- mi nombre es Kagamine Len, es un gusto, espero ser amigos.- se presento calmado pero aun así feliz.
¿Recuerdan que odio a los chicos?, bueno odio mucho más a los tipos como él, siendo felices y despreocupados, reflejando inocencia, inofensivo a primera vista pero en su interior puede ser MUY peligroso. Lo sé de sobra.
-muy bien, pueden tomar asiento, señorita Lenka.- la chica le puso total atención.- puede sentarse a lado de la señorita Kagami Rin, Rin por favor levante su mano.-
Levante mi mano con un poco de pereza, la chica me sonrió, yo solamente le di una expresión de "no me interesas", la chica llamada Lenka si no mal recuerdo se dirigió al asiento a lado mio, me miro y se sorprendió al verme con… ya saben, después me dio otra sonrisa. Voltee a ver la ventana evitando verla.
-Len, puedes sentarte a lado de Mikuo, por favor levante la mano.- el mencionado la levanto.- gracias.
Len se dirigió al asiento que se encontraba en la segunda fila en el cuarto asiento, a lado en la tercera fila se encontraba Mikuo.
-bien, clase, abran sus libros de física en la pagina 157.- hablo el profesor y comenzaba a anotar cosas en el pizarrón.
Busque mi libro en mi bolso y… no estaba… espera… ¿¡DONDE RAYOS ESTA MI LIBRO!?
Busque y busque pero no lo encontré, dirigí mi mirada al asiento de una chica de cabello aguamarina, Miku, la verdadera zorra de la escuela, hablo en serio. Ella volteo a verme con una sonrisa burlona, la fulmine con la mirada. Ignore su cara de satisfacción y mire al profesor, bien, ¿ahora como le digo que la maldita de Miku tiene mi libro?
-pro-profesor.- hable lo suficientemente alto para que pudiera escucharme, aunque con algo de nervios.
-¿Qué pasa Rin?, ¿te sientes mal?- pregunto en tono preocupado.
El único hombre en el que confió es el, se comporta como mi padre, al principio dudaba de él, pero con el tiempo supe que era alguien que se preocupaba por mi… tal vez después de todo mi vida no sea TAN miserable.
-etto… no, lo que sucede es que mi libro… no lo traje.- conteste dudando en si decirle la verdad, se que él me creería pero, solamente le traería problemas.
-¿no lo has traído?... ¿Por qué?- pregunto dudoso.
-se me ha… olvidado… en casa.- hable lentamente tratando de sonar convincente… falle.
-está bien, pero me gustaría hablar contigo durante el descanso.- todos en el salón tenían una sonrisa de victoria.- por lo pronto júntate con algún compañero.
¿Eh?... pero… él sabe que yo… que yo…
-¿quieres compartir libro conmigo?- me pregunto una dulce voz a mi lado, voltee y vi a Lenka con una amble sonrisa.
*suspiro* tendré que aceptar… nadie más se ofrecerá.
-está bien.- le dije fríamente.
Acerque mi silla a la suya y comenzamos a leer, paso la clase y durante todo el tiempo Lenka tenía una sonrisa, yo simplemente me dedique a leer.
*sonido de la campana*
Todos salieron del aula como si su vida dependiera de ello. Me quede sola… bueno, casi sola. El profesor dijo mi nombre y yo asentí, me acerque a su escritorio, lo mire, me miro, me sonrió y yo le devolví la sonrisa.
-tenemos que hablar sobre el asunto de tu libro… ¿sabes quién lo tiene?- me pregunto suave pero firme.
-eh… pues… n-no, no, Kaito-sensei.- le respondí nerviosamente.
-Rin, sabes que puedes confiar en mi… ¿verdad?- asentí rápidamente.- bien, entonces dime y te ayudare.-
-bue-bueno… creo que lo tiene Miku.- respondí lentamente.
-*suspiro* Miku de nuevo, bien, hablare con ella… no te preocupes ¿está bien?- me dijo al ver una mueca de preocupación en mi rostro.
-es-está bien… sensei.- conteste resignada.
-bien, ¿Qué te parece si te invito un helado?- pregunto alegremente como un niño de 5 años.
-no, gracias sensei, no tengo antojo de helado.- conteste con una sonrisa.
Miro hacia mi barriga que era de un tamaño medio y sonrió.- ¿y a ti, pequeño, se te antoja?- pregunto como un padre haría.
Como si el bebe entendiera dio una leve patada.- el no quiere sensei.- conteste con una gota en la cabeza y una sonrisa nerviosa.
-mmm… está bien, lo pasare por hoy, pero para la otra no te salvas ¿ok?- asentí a su "amenaza".
Otra de las razones por la cual me llaman "una cualquiera" es porque mantengo una buena relación con el profesor, claro que como profesor, aunque bueno, también como amigo. Pero lo que los demás no saben es que Kaito-sensei está casado, su esposa se llama Meiko y la verdad la conozco y es muy simpática… mucho más cuando esta ebria. Nótese el sarcasmo. La aprecio mucho, se comporta como mi madre… después de todo hay algunas personas que se preocupan por mí, ¿verdad?
Me dirigí a mi asiento y comencé a comer mi obento*, la chica llamada Lenka se encontraba con su hermano Len platicando, volteo a verme (Lenka), me sonrió e hizo ademan de levantarse… se levanto. Vino a mi asiento y me saludo.
-¡hola Rin-chan!, ¿puedo comer contigo?- bien… esta chica es rara.
-hmp.- conteste secamente.
-lo tomare como un sí, ¿puede Len-nii-chan comer con nosotras?- pregunto inocentemente.
-no.- conteste rápidamente, me miro con confusión.- etto… prefiero que solo seamos las dos.- trate de explicar amablemente.
-mmm… como quieras.-volteo a ver a su hermano y grito.- ¡lo siento, Len-nii-chan, será para la otra!- Len solo hizo un movimiento y después se retiro.- bien, dime, ¿cuántos meses tienes?- pregunto con una sonrisa.
-¿eh?... ci-cinco meses.- conteste confundida.
-cinco… vaya, solo 4 mas y serás madre… felicidades.- contesto alegremente.- ¿Quién es el padre?-
-no lo sé.- mentira, si lo sé… pero no puedo decirlo.
-oh… lo siento… ¿co-como sucedió?- pregunto dudosa.
-violación.- conteste fríamente… la verdad, no quiero parecer como si me importara, pero en realidad si me importa… mucho.
-¿e-en se-serio?- pregunto con voz quebrada.
Levante la mirada con curiosidad, todo este tiempo veía mi obento.
Note como se le cristalizaban sus ojos de color azul cielo.
Comenzó a derramar unas gotas de lágrimas.
-¿po-porque lloras?- pregunte en shock.
-po-porque yo… y-yo… también… fui violada.- dejo escapar mas lagrimas, la mire con sorpresa… no me esperaba eso.
-¿e-en serio?... ¿sabes… quien fue?-
-s-si… fue, un ex novio… el… el quería… te-tener rela…ciones pe-pero yo me negué.- termino con su relato, por instinto la abrace, ella me correspondió.
Lloro en silencio mientras nos abrazábamos, la verdad tiene mucho que no abrazaba a alguien y sentí calidez.
-deberíamos ir al baño… para lavarte la cara.- dije con voz dulce.
-es-está bien.- contesto sollozando.
Nos dirigimos al baño, estaba vacío por suerte, se lavo el rostro y después me miro.
-gracias… aunque no seamos amigas, me entendiste.-
-descuida, ya sabes después de todo te comprendo muy bien.- dije mirando mi barriga.
-¿tú… tú lo quieres?- pregunto dudosa.
-sí, con toda mi vida.- conteste aun viendo mi barriga con una sonrisa.
-me alegro… ¿podemos ser… amigas?- pregunto tímidamente.
Me sorprendí al principio, pero después hice un movimiento leve de afirmación.- por supuesto.- conteste con una sonrisa.
-¡oh! Me alegro…- se acerco a mí y se medio hinco viendo directamente a mi barriga.- podre ser tu tía.- hablo dirigiéndose a mi bebe.
Sonreí.
-deberíamos regresar ¿no crees?- le pregunte viendo la hora en mi celular.
-¡oh, cierto!, sabes odio las clases.- comento con un puchero.
-Wow, ¿en serio?, eres la única.- conteste sarcásticamente.
-cierto.- contesto siguiéndome el juego.
Nos dirigimos al aula, en el camino nos encontramos con su hermano, me vio y después se acerco a mí, por instinto di un paso atrás.
-hola, mi nombre es Len… tu eres Rin ¿verdad?- se presento con una sonrisa.
-s-si.- conteste nerviosamente.
-bueno, espero podamos ser amigos.-
-etto… y-yo… n-no lo creo.- conteste aun nerviosa.
-pero, ¿Por qué?- pregunto un poco triste.
-mmm… Len, no la molestes, si no quiere solo déjala.- le regaño Lenka, al parecer me entiende muy bien.
-está bien.- bajo la cabeza un poco triste.
Reanudamos el camino hacia el salón, Len en frente de nosotras, Lenka iba a lado mio.
Miraba el suelo como si fuera lo más interesante del mundo, -oh, mira una hormiga.-.
Cuando llegamos pasaron las clases, Miku a veces me miraba con odio, Lenka tenía una gran sonrisa, Len estaba serio… espera, ¿¡Por qué rayos lo veo!? Como sea, yo ponía atención a la clase.
-nos vemos mañana Rin-chan.- Lenka se despidió de mi muy alegre mientras guardaba mis cosas.
-claro, Lenka.- conteste viéndola con una sonrisa.
Lenka se fue con su hermano y yo me dirigí a mi casa… espero que mi padre no este.
Por un momento pude ser feliz con la nueva amistad de Lenka, pero debo volver a la cruda realidad.
…
y eso es todo... si les gusta dejen reviews... y no puedo decir mas ya que me estoy muriendo de frio... mis hermosas manitas se congelan, estoy en un ciber... no tengo internet y mi vida es una tortura gracias a eso... y yo de lista me fui a poner en una computador que esta en frente de una ventana abierta... ¡ME CONGELO!... oh perdonen las tantas malas palabras.
DEJEN REVIEWS, NO LO OLVIDEN... ¡SON OTALMENTE GRATIS!