Comenzaba un nuevo día, la misma rutina de huir de los adolecentes sobre alimentados con historias de internet, asesinar gente que puede poner en peligro la existencia paranormal es casi tan común como lo es para nosotros ir a la escuela o al trabajo.

No estamos hablando de otro más que de Slenderman, Slendy o como quieran llamarlo. En fin, llevar milenios con la misma rutina cansa bastante. Todo sin la compañia de alguien que te acompañe por la eternidad o que así lo parezca, alguna vez estuvo con alguien lllamado Jeff pero eso es historia antigua.

No nescesariamente estaba dormido, estaba en un estado de sueño ligero, salió buscando alguien o algo con que entretenerse durante la noche.

Miku y su hermano mayor Mikuo se preparaban para salir hacia la aventura en los espesos bosques que quedabancerca de la mansión Vocaloid, estaba en busca de cierto personaje alto y delgado muy popular en internet (no, no es peter lan anguila), Miku se oponía rotundamente a esta búsqueda pero tenía que ir debido a que su queridísimo hermano robó su diario y amenazó con publicarlo en su blog.

-Listo Miku-chan, ya nos vamos- Dijo Mikuo muy emocionado.

-no creo que esto sea buena idea- dijo Miku aferrandose a su osito de felpa que conservaba desde los 5 años.

-Vamos, tal vez nos de su autografo- Mikuo chantajeando a su hermana

-De veras?-Pregunto Miku con ilusión en sus ojos

-Si lo encontramos- Dijo Mikuo ayudando a su hermana a sali por la ventana.

Se adentraron en el bosque buscando alguna señal de vida. Miku siempre había soñado con conocer a su ídolo mucho antes de que se pusiera de moda en internet, tenía 5 años cuando lo vió por primera vez en un sueño, a diferencia de la mayoría de los niños Miku no sintió ningun temor, al contrario, sintió curiosidad por aquel personaje. Mikuo iba dos pasos delante de Miku alumbrando con su linterna.

-Miku, a partir de aquí nos dividiremos

-hai!- respondió Miku alejandose de su hermano. Miku se adentró en el bosque hasta que su cuerpo suplicó un descanso, caminó otro poco y decidió revisar su bolso en busca de agua pero solo encontró su diario y una nota de disculpa por parte de su hermano.

Enojada y cansada caminó otro poco encontrándose una casa que parecía olvidada, entró en la casa buscando algún mueble que estuviera limpio, para su sorpresa todo estaba bastante ordenado. Se deslizó hasta la cocina y tropezó con alguien que llavaba una olla de leche quedando ambos totalmente empapados.

-Lo lamento, no sabía que alguien vivía en este lugar -Miku alzó la mirada y se encontró un rostro totalmente blanco. Todo empezó a dar vueltas y cayó desmayada.


Lol, este capi esta muy corto pero los demas estaran mas largos ya verán.

Esta idea llegó en uno de mis pensamientos ociosos, espero que les guste

BYE BYE