Solía ser, hace más de 15 años una niña consentida, solamente mirada por encima no entendía la realidad cruda en la que estaba inmersa, para mí era todo rosa, (aunque ese color no me quedaba bien), era la nena de papá, la más dulce e inocente criatura, con tan solo 13 años seguía soñando con el cuento de hadas, y anhelaba mi príncipe azul, (morado negro verde...cualquier color), siempre fui curiosa, todo me llamaba la atención, con la mejor discreción, siempre obtenía la información que quería, Mi papá siempre fue el que me dio todo eso, hasta hoy por hoy es el hombre más importante para mí, mi mentor en la vida, y solo por el cantaba y bailaba para hacerlo feliz, siempre fui buena estudiante, me esforzaba al máximo solo para él, nunca por mí, de ahí es que nunca pude ser egoísta.
Siempre daba lo mejor de mi sin esperar nada, nunca me impresionaron las grandes cosas, yo era feliz mirando la luna en sus distintas etapas y facetas, escuchando canciones y melodías de guitarras, aún sigo amando la música es una caricia a mi alma, e involuntariamente la uso para expresar mis emociones más profundas, solo las que dejo ver a aquellos que realmente me conocen, la dulce niña, para ese entonces yo no quería que mi mamá se preocupara de mí, ella tenía una enorme tarea con mi hermana mayor, la que hasta ese momento era mi heroína, porque cuando a mis oídos llego la noticia de que ella tenía que ser toda una mujer y mamá a la vez me asuste, yo no entendía nada de eso...Claro que lo entendías solo que no lo queras ver. Me presento gente soy la conciencia racional de esta mente imperfecta Si lo eres, soy la tipa intelectual con lentes que te jode la cabeza para que veas bien y analices bien todo, si yo soy la que te golpea mentalmente la frente para que tomes la decisión correcta, aunque a lo largo de los años casi nunca me hiciste caso, no importa ahí seguiré, me van a oír seguido no se asusten (pongo cara de póker) ja. Yo quería saber todo no era tan ingenua mi hermana iba a ser madre, pero no entendía por qué estaba sola?, en fin cambiaron muchas cosas, mi mamá siempre estaba enojada y mi papá muy triste, por eso siempre trataba de hacer lo que sea por volver a ver sus ojitos verdes brillantes y la sonrisa que me encantaba, él fue el que trato de hacerme entender lo que me deparaba en cuanto sea más grande y sin ningún pudor, se lo agradecí aunque no lo entendía del todo, cuando empecé a tener amistades, en vez de mis pasatiempos favoritos, tuve que tratar de acoplarme, casi nadie tenía mis gustos, ni les gustaba las películas como a mí, la peor experiencia fue cuando salí a bailar por primera vez, a para algunos era una tremenda experiencia, para mí fue horrible! la música te dejaba sorda y era inaguantable, trataba de entender las letras de las canciones pero no había caso, y cuando por fin volvía me tocaron el culo sin permiso! asco, ja se lo pregunte a las que supongo consideraba amigas en ese entonces, su respuesta fue reírse y decir es normal, JA yo recuerdo tu cara de pocos amigos pero no ella no quería decirle a su papá por miedo, no quise saber nada, me daba vergüenza lo admito, estaban tan enfrascados en los acontecimientos que sucedían con respecto a mi hermana que no quise que intervengan en cosas que no me parecían importantes, pero luego todo cambio, me habían comentado lo que era un beso, una caricia, sip, aunque las que querían darte no eran caricias, eran puras manoseadas de adolescentes hormonales que tu creías cualquier cosa, en fin era algo ingenua, no sentía lo que yo creía que era lindo, bien aquí va, me mandaron de acompañante de mi hermana porque ella quería salir y si no iba conmigo pues no salía, dije bien voy, y sin saber que ese sería un día que jamás olvidare, aun me quedan algunas imágenes borrosas y asquerosas de ese día, supuestamente iríamos a comer, mi hermana, su novio y yo, en vez de eso caí en un lujar, si se le puede decir lugar a ese cuarto de cuatro paredes una cama y una tele, a ver películas , Empiezan las comillas subjetivas, ver ese tipo de películas fue algo denigrante asqueroso repulsivo aun siento las náuseas por eso, prácticamente deje de oír ver y sentir, porque, además de tener la manera gráfica de algo a lo que no estaba realmente acostumbrada, detrás mío se llevaba a cabo una reproducción muy similar, ahí para mí todo se volvió negro, me encerré en ese lugar a gritar sin palabras, a golpear sin hacer ningún movimiento, y esa fue la primera vez que llore sin lágrimas...bien no quieres decirle, pues yo soy muy directa, eras una niña no tenías por qué presenciar eso, ni ver ese tipo de películas, de ese lugar nunca te pude sacar sin que pasaran muchos años más de 7 en realidad, ver como escondías eso no te hizo bien pero te rehusaste a hablar a gritar o cualquier reacción de una niña, esa ves que deberías ser egoísta con toda razón no lo fuiste, fue tan grave el conflicto que te perdí y tuve que aguantarme cada golpe mental cada miedo a recibir lo mismo que viste en esa pantalla, terror a que alguien te toque, pero te acoplaste a la situación ya no te importaba todo eso, te daba igual, no optaste una actitud rebelde como se debería de haber manifestado o hasta un poco depresiva, sea la excusa que sea, no quisiste escucharme, y esa fue la primera que yo grite y no escuchaste, llore y no hubo lágrimas y capture lo que podrías llegar a necesitar del exterior y también me oculte y no asome mi vista por mucho tiempo...
Ya no veía los colores, no me parecía agradable cualquier música, pero a la vista yo seguía tal cual, con la misma mirada, que para mí era la más linda, me gustan mucho mis ojos, solo a mi papá le sonreía realmente, solo a él, deje pasar el tiempo se me acercaron más personas, chicos en realidad, y yo seguía igual, solo por dentro era el conflicto, todo me gritaba que no era eso lo correcto, que estaba mal, bien no quise obtener información, tampoco me volví estúpida, escuchaba lo que me convenía, averiguaba algunas cosas ciertas otras no tanto, el sexo para mí se volvió algo repugnante, y tuve que aguantarme que todos quisieran ser mis "amigos" por tener la hermana que tenía, no se equivoquen amo a mi hermana pero eso no quiere decir que yo acepte algunas cosas, "Ay yo hago el amor con él porque lo amo" pura mierda para mí no era así, no lo voy a negar, dejaba que alguno que otro en una fiesta o reunión me metiera mano "era normal" si claro para ellos a mí no me importaba pues no sentía nada, pero nunca dejaba que se llegue a más, trate de guardar esa parte importante, porque era así para mí, pero yo nunca encontraba el motivo de mi repulsión , solo pasaba y yo no sentía nada, pero en ese entonces yo no quería culpar a ese gran elefante rosa que oculte en mi mente, no lo iba a admitir, no culpaba a nadie, solo yo estaba mal, pero trataba de seguir con algo que se acercaba a todo lo que hacían las demás, dentro mío ponía los ojos en blanco cada vez que escuchaba a mis "amigas" hablar como si fueran las expertas en el tema, en fin a los 14 años me sentía algo mejor con ser así, me valía lo que piensen yo "estaba bien" hasta tuve un buen novio...era genial rebelde le gustaban algunas de las cosas que a mí me agradaban, se ganó a mi familia, el primero que llevaba a casa guau yo haciendo las típicas cosas de chicas de la edad, era interesante tenía un buen grupo de amigos solíamos ver películas de las buenas, me llevo al cine, a cenar, típico chico pero yo no sentía las mariposas ni nada al verlo, por fuera era todo sonrisa, vale me envidiaban el novio, ojos verdes delgado rubio y alto, comente lo bajita que soy, parecía un llavero a su lado, en fin todo iba "bien" pasamos esos momentos de mano por aquí mano por allá bien, hasta ahí, ahora si quise hacer algo, muy estúpido por cierto, lo conocía alrededor de 10 meses, en fin incentivada por mi mamá, quise sorprenderlo, me prepare normal y fui a bailar a su discoteca favorita, aclaro me encanta bailar de todo, menos la cumbia! no puedo evitarlo, no me gusta, bien el sorprendido estaba muy agradecido, me mostraba a todo el mundo "mi novia" solo tomaba lo que él me daba, "primer error" lo último que se es que al otro día tenía un molestia en mi entrepierna, y mi tanga favorita manchada de rojo...
Eso fue todo, no sé nada, no sentí nada, no vi nada, no oí nada, las típicas historias de las primeras veces se fueron por el caño, no me quede con eso, averigüe lo que pude sin que tuviera tanta vergüenza de admitir lo que me paso, no quise decirle a nadie, otra vez pero ella no escuchaba, me estire de mi letargo a gritarle pero la vergüenza pudo más, la verdad que hasta a mí era el peor error de admitir lo estúpida que fue y menos hacerlo saber, no podía hacerle eso a papá, no podía.
Me valió mierda, otra vez, me escondí, me daba igual, ya no me quedaba nada, mi autoestima de fue de vacaciones, mis metas no valían de nada, era automática para dar a los demás lo que esperaban de mí, termine mis estudios ingrese a la facultad sin ver sin nada no me llenaba nada, era como un vació pues no se notaba seguí escondiendo todo...cambie de carrera cambie gustos, trataba de que con la música expresar algunas cosas pero nadie sabía ver bien.
Creo que alrededor de mis 21 años fue que alguien si lo vio, me asuste no quería que nadie me tenga lastima o algo así, no quería, pero una vez que vi su mirada me cegué, las sensaciones eran nuevas, no era el tipo de hombre que cualquier padre desea a una hija, pero me valía mi rebeldía, para mí era todo, aunque tenía una lucha interna enorme, seguía ocultando mis verdaderos sentimientos, peleaba constantemente conmigo misma, no quería que me conociera al cien por ciento, pero él tenía un poder sobre mí que nunca nadie obtuvo, con una mirada me derretía, y esa sonrisa arrogante me hacía vibrar, y aun así siendo tan obvio todo, no lo quería reconocer, pero fue al primer hombre que me entregue en cuerpo y alma...al fin! era hora, lo admitiste, sinceramente me estaba cansado de repetirlo, dilo de la manera que quieras usa cualquier comparación te movía el piso, te partía en dos, era tu otra mitad, príncipe azul, Sapo Rojo, te atrapo, te cautivo, no había nadie más, solo él...
Y así mal trecho y raro entregue mi corazón por primera vez, con él podía hablar horas de cualquier cosa, para mí era tan inteligente, gracioso, atractivo, y puedo seguir, no me molestaba que se burlara de mí, si fui la típica estúpida enamorada, aceptaba lo que me daba sin importar si estaba bien o no, si me valoraba o no, con todos los defectos que los demás lo describían, me advertían, yo lo veía perfecto, a pesar de que no expresaba si me sentía bien o no, fui la mujer más feliz del mundo, me enfrente a tantas cosas, desilusiones más grandes de las que ya nombre, humillaciones en cantidad, engaños, mentiras, todo pero seguía amando incondicionalmente al único hombre que fue capaz de ver más allá de lo que era por fuera, o por lo menos así lo creí, hasta que tuve que enfrentar algo a lo que no estaba nada preparada...
Cuando comprendí a lo que me enfrentaba ya contaba con 24 años, supuestamente no debería ser tan idiota, si fui muy idiota, pero no me arrepiento de nada, por propia decisión de ambos nos separamos, el llevándose mi corazón de mujer, yo llevándome una ilusión distinta y nueva, jamás volveré a amar a ningún hombre lo comprobé por más de que todo el mundo crea lo contrario, ¡bien! Parece que hoy estamos aceptando todo, ¡y estoy haciendo un baile ridículo de victoria! no me juzgues por lo menos me siento totalmente ligera de sacar varios elefantes, ya de colores diversos, de encima escondidos y más, sigo bailando!
Generalmente las historias y relatos tienen un final feliz, es lo que se espera, o a lo que se está acostumbrado. pues te cuento un cuento que no tiene un final totalmente feliz, hoy tengo esa ilusión llamándome mamá y un nuevo corazón con el cual la amo más que a nada en el mundo, pero aquel corazón que perdí para siempre no lo puedo olvidar, jamás lo haré, por mucho que trate, por más que me griten, o demuestren que se puede, yo no lo consigo, no me arrepiento, sé que él me hizo una promesa de no volver a hacerme daño, la cual está cumpliendo, pero eso no quiere decir que en algún momento yo deje de amarlo menos o más, no sé si será grande o no pero el amor que le tengo es tan verdadero como el amor que le tengo a mi hija por encima de todo lo demás, muchas veces me pidieron que siga adelante que no vuelva la hoja de esa historia, ya ni los escucho, para mi hija soy puro amor, para los demás volví a mostrar aquella faceta en la que soy toda sonrisa mientras que por dentro soy lo que soy, un final parcialmente feliz.