Capítulo 1: Negación. Retratos. Verdad.
Se percibían en el aire, los cambios estaban próximos.
Definitivamente se acabaría pronto esta generación del Host Club dedicada a atender a las niñas ricas y con tiempo que asistían a la escuela Ouran, con el objetivo de ofrecerles pasatiempo con lindos muchachos de su misma edad y condición.
Los muchachos del Host Club estaban terminando ya su tiempo en la escuela secundaria. Era hora de retos mayores: la facultad, el trabajo…La vida fuera de ese enmarcado mundo liviano de la escuela.
Aquella tarde era gris, la lluvia cubría con pesadez el patio de la escuela.
Dentro de la Tercera Sala de Música, sede oficial del Host Club:
- Tamaki, tengo algo que hablar contigo…
- Dime, Kyouya…
- Voy a abandonar antes de tiempo el Club…- dijo serio Kyouya sin dejar de mirar por la ventana.
- ¿Qué?...Pero…Pero…¿Por qué?- respondió sorprendido y a los gritos el presidente Tamaki.
- No hagas este teatro…Tengo la posibilidad de entrar en la universidad en Estados Unidos este mismo semestre. Y ya sabes, tengo que esforzarme…Además, tengo pensado aprovechar las vacaciones para socializar…
- Con gente rica a la que puedas manipular para tu plan.- Kyouya volteó a ver al presidente. Era la primera vez que lo escuchaba hablar con tal seriedad. Aunque no respondió a su comentario. Después de todo, era verdad y no lo apenaba.
Ootori Kyouya, tercer hijo de la Familia Ootori, dueña de la administración de los hospitales más importantes en Japón y en el mundo, había luchado siempre contra ese karma fatal que resultaba la excelencia de sus dos hermanos mayores. Ellos contaban con la facilidad que gozan los primeros en llegar. A diferencia de ellos, él debía luchar por ganarse una posición, había aceptado sobrellevar la vida así, seguro de la idea que un día su esfuerzos darían resultados.
- No te preocupes por la administración del Host en lo que queda del año, ya lo arreglé casi todo y además, Mori-sempai aprendió a manejarse…Y sino, tú podrás asesorarlo también…- prosiguió Kyouya con habitual calma casi tenebrosa.
-De acuerdo…- respondió su rubio amigo, ya casi resignado.
Un pequeño silencio entre ellos dejó escuchar el sonido de la lluvia de afuera.
Kyouya había dejado de mirar por la ventana súbitamente, como si la escena de afuera le arrancara algo de nostalgia, y había posado su vista, de nuevo en sus notas.
- ¿Qué harás con Haruhi?- manifestó de pronto Tamaki, con un tono de preocupación.
- Se le dará aviso, lo mismo que al resto de los chicos.- respondió un inmóvil Kyouya, sin siquiera apartar la vista de sus apuntes.
- ¡Sabes que no refiero a eso!- exclamó su amigo, un poco exasperado.
- No entiendo entonces. ¿De qué hablas?
- ¡Jooooo, Kyouya!- gritó Tamaki- ¿acaso vas a irte sin decirle lo que sientes por ella?
Kyouya esbozó una mueca de sonrisa. Siguió sin desviar la mirada de sus actividades.
- Pero, ¿de qué hablas Tamaki?
- De la verdad, Kyouya…Acaso, ¿piensas que no me dí cuenta?
- ¿Cuenta de qué?- contestó con la misma parsimonia de siempre.
- ¡De que estás enamorado de ella!- esta vez, Kyouya dirigió la mirada a su amigo.
- Tamaki- se acomodó los anteojos hasta el puente de la nariz, se cruzó de brazos- creo que tus celos por Haruhi están haciéndote ver cosas donde no las hay.
- ¡Vamos!- replicó Tamiki Suou, casi molesto.- ¡Al menos, ten la valentía de aceptarlo!
- Aceptar, ¿qué?...Haruhi es tan buena amiga mía como del resto del grupo. Ha sido útil al Host Club…
- ¿Por qué insistes en seguir negándolo?...¿Realmente crees que puedes engañarme?
- Tamaki, en serio, no te pongas idiota.- Kyouya regresó su vista a su cuaderno, donde fingió seguir trabajo.- ¿Qué es lo que pretendes que te diga?...
- Pretendo que me digas la verdad.
- Nunca he tenido ni tendré esas intenciones sobre Haruhi…Además, ¿qué mérito tendría tener esa clase de afecto por Haruhi?...No tiene dinero, no es hija de un magnate, ¡por Dios, mírala!, ni siquiera puede pagar una cuota de este instituto…Ella no es útil para mí. ¿Qué ganancia obtengo de ella entonces?
- Sus sentimientos…Sus inocentes y lindos sentimientos…Eso es lo que obtienes de ella, sin si quiera hacer esfuerzo alguno.
- Tamaki, esta charla se esta volviendo demasiado inútil…El único enamorado de Haruhi aquí eres tú, ya dejemos esta poco productiva charla.
- Acaso, ¿crees que no sé de tus retratos?
- ¿Eh?- esta vez, la voz de Kyouya denotó la sorpresa y su cuerpo instintivamente se puso de pie, observando a su amigo.
- Los retratos que dibujas de ella en tus cuadernos…En ese que tienes ahí.- Kyouya se sintió descubierto.- Siempre supe que, a pesar no mostraras ningún tipo de interés en Haruhi, ni la miraras, siempre has estado admirándola, desde cierta distancia…- Kyouya no pudo responder, sintió como aquellos sentimientos, que creía tan bien disimulados, estaban siendo expuestos.
- Tamaki, yo…- intentó seguir armando excusas que lo liberaran de las acusaciones de su amigo.
- Sólo acéptalo…Eso no generará una pelea entre nosotros.- Kyouya entendió que estaba siendo vencido.
- Entonces, esa es la verdad.
- ¿Y qué harás con ella?...¿Vas a irte así como así?
- Sí.
Bueno, acá una nueva historia, esta vez con OHSHC...Espero que les guste!
No olviden dejar sus críticas, halagos, todos sus comentarios.
Hasta la próxima!
Brisalunar
19/8/2010
