Well ~ este fic fue un RETO para mi ._. Sísi… me retaron a intentar con esto. AlexBraginski me retó a probar con esta pareja & HOLLY BASTARD ! Fue MUY difícil, soy nueva en esto del Selfcest.
Tuve que improvisar algo que traiga al Fem!Iggy asi que xD perdónenme si no queda claro que es MAGIA *O* Hay que tener más imaginación & pensar que en Hetalia es posible xDD
Lo más complicado fue el femenino, puesto que todo lo que sé de ella es que se llama Alice, así que improvise el resto, la hice lo más igual a Arthur pues me pareció lo más lógico & en cuanto a la apariencia la base en algunas imágenes que encontré en internet, espero no sea una blasfemia como yo creo que es n_nU
Bueno xD es MUY OBVIO que Hetalia no me pertenece si fuera así Feliciano sería mujer & habría mas DenxNor & SuxFin, también más SuizaxLiech & otras cosas x)~
Anime: APH
Pareja: UkxFem!Uk
Rated: M
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Selfcest
~o~
Arthur se miraba en el espejo del baño. Se admitió a sí mismo que era hermoso, siempre lo había sido. Sin importar que Seychelles prefiriera a Francis antes que él, ¿Qué sabía ella?
- Nobody can love you, more than yourself… - se dijo.
Era lo cierto. Nadie le amaba, más que sí mismo, y nadie sería capaz de hacerlo. Pero a veces… él mismo no bastaba para satisfacer sus más íntimos deseos, los más ocultos, los que sólo podía compartir consigo mismo, y ése era el problema, no confiaba en nadie que no fuera él.
- Ser yo, es un problema. – se repetía como quien le reza a un santo.
Se hizo a un lado y encendió la ducha. Salió del baño y cerró la puerta detrás de sí.
Alguien llamó a la puerta.
Bajó las escaleras tranquilo y abrió la puerta.
- Igirisu-san. – Kiku hizo una leve reverencia.
- Eh… Japon… ¿Qué te trae por aquí?
El pelinegro le extendió un paquete.
- Llegó este paquete a mi casa, con su nombre. – explicó el japonés.
Inglaterra lo tomó.
- Gracias.
- No hay de que Iggy-chan. Hasta luego. – se despidió.
Eso fue extraño… ¿Por qué llegaría un paquete mío a casa de Japon? – pensó.
No le dio mucha importancia y subió a su cuarto. Se quitó la ropa y se preparó para tomar un baño.
Cuando iba a meterse al baño miró el paquete, la curiosidad le invadió…
Tomó lo que le había traído su amigo y lo abrió. Era una cajita, la abrió. Contenía un frasco de líquido azul y una etiqueta que decía: "Baño de burbujas. Vierta en agua caliente".
- Oportuno… escalofriante. – se dijo.
Entró al baño que ya estaba cubierto por una nube de vapor. Abrió el frasquito y lo vertió en el agua; un suave aroma a arándanos se desprendió del agua, Arthur lo aspiró y luego se metió a la bañera.
El agua estaba excepcionalmente deliciosa; cálida y perfumada. Se estremecía cada vez que entraba más y más, el contacto con el agua caliente le hacía sentir un profundo placer. No muchas veces se sentía de ese modo, tan bien, tan conforme, pero claro, no era suficiente…
Estuvo un rato sumergido en la tina y luego salió.
Ya estaba cansado, no quiso cenar. Se puso su pijama azul con rayas y se fue a dormir…
-º-º- Al día siguiente… -º-º-
La luz del sol entraba por la ventana del cuarto del inglés, atravesando sus párpados y obligándole a abrir los ojos…
Se sentó en la cama y se frotó la cara. Se levantó, dio algunas vueltas por el cuarto y luego entro al baño…
Tenía los ojos medio cerrados por lo que entró sin fijarse en nada…
Se puso frente al lavabo, encendió el agua y se lavó la cara. Al levantar el rostro se vio al espejo, el mismo rostro hermoso de siempre… en el espejo vio algo que se movía. Se dio vuelta y…
- Who the hell are you? – gritó una chica de lentes, cabellos rubios, tan rubios como los suyos, y ojos verdes, tan verdes como los suyos… que llevaba… la misma pijama que él…
- La pregunta es… ¿Quién eres tú? ¿Y qué haces en mi casa?
- Esta es MI casa…
- ¡Claro que no! ¡Esta es mi casa!
- ¡Holly bastard! ¡THIS IS MY HOUSE!
- ¡No estoy jugando! ¡Sal de mi casa ahora!
La chica le observó por un momento… Arthur estaba agitado, rojo del enfado, ella también, pero luego se calmó…
- A-arthur… - dijo ella.
- ¿C-cómo sabes mi nombre?
- N-ni idea…
Alice. – una voz en la cabeza de Arthur se hizo presente.
- ¿A-alice? – repitió, tal y como lo había oído en su mente.
Ella dio un respingo.
- ¿Sabes m-mi nombre?
- Sólo… fue lo primero que se me vino a la mente…
Ambos movieron la cabeza, al mismo tiempo, las manos también, y así se acercaron el uno al otro…
- Esto es extraño… – dijeron al unísono.
- Mucho… – se dijo Alice a sí misma.
Ambos suspiraron.
Los dos quedaron en un incómodo silencio, mirándose sin decir nada. Eran tan similares… sus ojos, su piel, su cabello… incluso se movían del mismo modo y usaban las mismas expresiones… incluso tenían el mismo acento inglés perfecto.
Al mirar a Alice con detenimiento, él, notó que la pijama que llevaba sí era la suya, puesto que le quedaba bastante holgada, su cuerpo era más pequeño y era un poco mas bajita, pero seguía siendo extrañamente similar, como si fueran mellizos… no, ni mellizos… como si fuesen la misma persona.
Como Arthur era un caballero, sin importar que ella estuviera en su casa por una razón que ni ella comprendía, decidió hacer lo correcto.
- Me parece que debería buscarte algo más apropiado para vestir.
- ¿Por qué? Esto es muy cómodo, en realidad. – se acomodó los lentes.
- Pero no es apropiado.
- ¡Tú no vas a decirme qué es apropiado!
- ¡Es mi casa, yo digo lo que se me viene la gana! – todo intento de calmarse era inútil. Ella lo ponía nervioso.
- ¡¿Quién diablos te crees?
- Oh sweetie… Yo soy Arthur Kirkland, el Reino Unido de la Gran Bretaña e Irlanda del norte…
- No, no… eso no es posible… Yo soy Alice Kirkland, el Reino Unido de la Gran Bretaña e Irlanda del norte.
- ¡Debes estar bromeando!
- ¡Claro que no!
- Ya, basta. ¿Dónde está la cámara? La broma acabó.
- ¿Cámara? ¿Broma? ¿De qué hablas?
- Esto no puede ser, simplemente no. – dijo el inglés un poco más calmado.
Alice rodó los ojos y acomodó sus gafas.
- Solo le pido, cordialmente, que salga de mi casa. No es correcto entrar a la casa de una dama sin permiso ni invitación.
- ¡No necesito invitación para entrar a mi casa!
- ¡Esta es MI casa!
Arthur optó por ignorarla y salió del cuarto de baño.
Ella, indignada lo siguió.
- ¡Sigue así hasta la puerta, imbécil!
Él la siguió ignorando y abrió el cajón de su cómoda para tomar su ropa, pero se dio con algo que no era suyo… junto a sus pantalones, perfectamente doblados, había varias faldas, eso no era suyo…
- You see? My house. – afirmó la chica.
- Peor aún… nuestra casa. – dijo un atónito Igirisu.
- ¿Qué?
Él le hizo una seña para que se acercara, ella lo hizo.
Los dos se quedaron viendo la ropa de ambos en el cajón. Abrieron, al mismo tiempo, otro y tambien había ropa, de un lado las camisas blancas de Arthur y del otro también camisas, pero más pequeñas.
- Esto no es posible… ¡Esto no está pasando! – gritó una sorprendida e irritada Alice.
Arthur cerró ambos cajones con un movimiento seco y silencioso.
- A-arthur… ¿pasa algo?
- ¿Y a ti qué? No tiene importancia… solo… estoy confundido.
- Ya somos dos.
Él se quedó sumergido en sus propios pensamientos. Mirando la nada, allí parado frente a ella.
La chica, por su parte, se puso un tanto nerviosa, por lo que no encontro más que hacer que ponerse a limpiar el cuarto. Recogió la ropa, dobló lo que estaba limpio y puso en el cesto lo que estaba sucio. Encontro junto a la puerta del baño el paquete roto, y al levantarlo un pequeño papel se deslizó y cayó al suelo.
- ¿Hm? – ella levantó el papel. - ¿Qué es esto Arthur?
El chico volteó y fue hasta ella para tomar el papel. Lo leyó.
- Está en francés. Dice: "Porque incluso alguien como tú, merece amor. Con cariño, Seychelles". – de repente el rostro del ojiverde se tiñó de un rojo intenso.
- Pastel de chocolate1… - dijo ella para sí misma, pero lo suficientemente fuerte para que él la oyera.
- ¿Cómo es que sabes eso?
- No tengo ni idea. Solo… las cosas vienen a mi cabeza como si fueran mis propios recuerdos.
- Solo queda algo que hacer…
- ¿Hm?
- Pues solo se me ocurre ir a hablar con ella.
- Ah no. Yo no iré. – Alice planto sus pies firmes en el suelo y puso los brazos en jarra.
Arthur agarró a la chica del brazo y la levantó un poco.
- Claro que vendrás, o me creerán loco.
- ¡Suéltame!
- No, hasta que accedas a venir.
- ¡NO IRE!
- ¡No te soltaré!
- ¡Déjame en paz!
- ¡QUE NO!
Ella intentó soltarse, pero él era mucho más fuerte.
- Solo di: "Si Arthur, iré contigo".
- Fine! Si Arthur iré contigo.
El inglés la soltó.
Ella puso la mano sobre su muñeca, en la que ya había una marca levemente rojiza.
- I'm sorry. – se disculpó él.
Alice lo ignoró.
- Solo vamos ¿quieres? Mientras más rápido acabe, mejor.
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1: "Pastel de chocolate" n_n simplemente lo saqué de un rollplaygame, donde Iggy llama a Seychelles de ese modo.
Well este fue el primer capítulo…
¿Qué piensan? ~
Gracias por leer…
-Shay Fuera ~ -
