Disclaimer: Los personajes, escenarios y todo lo que podáis reconocer, son propiedad de J.K. Rowlling y Tite Kubo. La trama es de Eradona, esta es sólo una traducción de una fan de la autora autorizada por la misma.

Capítulo 1

La Guerra de Invierno había acabado, pero la lucha entre la Sociedad de Almas y Aizen no había hecho más que empezar. Los 13 Escuadrones de Guardia de la Corte con la ayuda de humanos excepcionales y algunos exiliados olvidados, habían logrado matar a uno de los traidores, ex-capitanes, Tossen; Gin estaba en condición crítica luego de traicionar Aizen y los shinigamis estaban recuperando y restableciendo su fuerza, sabiendo que él iba a volver a atacarlos. Era tiempo de reconstruir y reunir; y para algunos de ellos, para entrenar y hacerse más fuertes.

Ichigo Kurosaki estaba sentado en una mesa con Urahara, tomando té, luego de entrenar con él para controlar su presión espiritual. Él había finalmente logrado sellar Zangetsu justo aquél día, y él no necesitaba un comandamiento de liberación, sólo un pequeño pulso de reiatsu en la zanpakuto, y ésta, inmediatamente se convertía en su Shikai.

¿Por qué alguien que había pasado el equivalente a tres meses en el Dangai necesita entrenar para controlar su presión espiritual? Porque él estaba trabajando en NO dejar que ésa volviese a ser como antes (cuando se fugaba por todas partes como un grifo roto), pero en un 'sano intermedio'. Él había convertido todo su reiatsu en fuerza física para poder derrotar a Aizen y usar el Getsuga Tensho Final... lo que no hizo. Por alguna razón, tan pronto como Ichigo le dijo lo que estaba a punto de hacer - Aizen aparentemente tuvo un ataque de pánico o tuvo una premonición que el ataque de Ichigo sería mortal para él o suficiente como para herirlo tan gravemente que ni siquiera él podría recuperarse de él; lo siguiente que el shinigami sustituto supo, una Garganta era abierta y El Hombre Que Pudo Ser Dios se zambullía en ella para luego cerrarla, dejando Ichigo y un recién llegado Urahara con casi idénticas expresiones de "WTF?".

"¿Qué demonios ha pasado?" Ichigo gritó a Kisuke.

El dueño de la tienda, mirando a donde la Garganta había acabado de cerrarse dio de hombros y meneó la cabeza.

"Me supera completamente." Él contestó, rascándose la cabeza bajo su siempre presente sombrero a rayas verdes y blancas. Maldiciendo, Ichigo clavó Tensa Zangetsu en la suciedad, se dejó caer en una roca y puso mala cara, mucho para el desconcierto de Urahara. Ichigo estuvo tres meses en el Dangai entrenando con Tensa Zangetsu, gastó casi toda la energía espiritual de su padre - ¿y ni siquiera pudo usar Mugetsu? No que él no estaba aliviado de poder quedarse con sus poderes, pero aún así...ellos no tuvieron la oportunidad de de hablar más sobre ello, ya que en ése momento todos sus amigos llegaron, más o menos sanos y salvos, de Hueco Mundo. Más tarde, Urahara teorizó que el Hogyoku notó que el Gestuga Tensho Final era una amenaza mortal y forzó Aizen a retirarse, ya que retirarse no estaba en la personalidad del hombre. Al fin y al cabo, Aizen sabía todo sobre Mugetsu y cuán poderoso ése ataque era; Isshin lo había usado una vez en sí mismo, al fin y al cabo.

Él también estaba entrenando otra vez con los vizards para poder controlar su hollow interno mejo muchos días la semana. Hiyori aún estaba recuperándose en el Cuarto Escuadrón, por lo que él estaba trabajando con Shinji o Lisa la mayor parte del tiempo. Muchos de los oficiales aún se estaban recuperando, por lo que los que estaban recuperados o sanos trataban de tomar el relevo y habían sido cedidos a otros escuadrones para ayudar hasta que sus oficiales mejorasen. Incluso los vizards - a regañadientes- habían ayudado durante un tiempo, siendo ex-oficiales, hasta el padre de Ichigo, Yoruichi y Urahara. Además, Ichigo había empezado a aprender kidou de su padre (quién no había sido su primera opción como instructor), y trabajando en el mano a mano con Yoruichi. Además de trabajar de nuevo con Urahara en su manejo de la espada, su horario actual tenía su tiempo libre extremadamente lleno. De hecho, iría tan lejos como para decir que no tenía tiempo libre. Tan poco, que él estaba, de hecho, dejando la búsqueda de Hollows para el Shinigami local - y los vizards, quiénes, si poniendo los ojos en blanco, tomaron otra vez esa misión.

Inconscientemente, él flexionó su mano izquierda, testándola. Se notaba raro, y un poco dura. Urahara le miraba por debajo del ala de su sombrero, y cuando Ichigo se dio cuenta de que lo estaba haciendo, frunció el seño y apartó la mirada.

"¿Va todo bien, Ichigo-kun?" Urahara le preguntó. Ichigo asintió. Su reiatsu estaba tan interiorizado, tan encerrado, que Ichigo se había vuelto invisible hasta para aquellos que ya lo conocían; hasta había podido sorprender a Uryu, cosa que se asustó al Quincy a tal punto que una o dos veces había chillado como una niña cuando Ichigo le había dicho "Boo". Fue por eso que Aizen pensó que él había vuelto atrás, cuando en realidad Ichigo había evolucionado más allá de los sueños más salvajes del traidor. Lo que él estaba haciendo ahora era desaprender lo que había aprendido con Zangetsu durante aquél tiempo y tratando de encontrar un 'intermedio sano'. Sí, él finalmente había aprendido a controlar su presión espiritual - pero había tenido un precio. Uno muy alto. De ahí la palabra 'sano'.

Kisuke y Yoruichi se habían alarmado bastante cuando volver a su cuerpo se había vuelto extremadamente doloroso; tanto, que él se había vuelto bastante reacio a dejar su cuerpo, ya que eso significaba tener que volver. Por lo que, un día cuando había llegado a la tienda luego de la escuela - la Capitana Unohana estaba esperando por él. Ichigo había tragado en seco cuando la había visto, y luego muy mansamente (él estaba completamente convencido que ella era el segundo capitán más fuerte, y probablemente aún más poderosa que Kyoraku y Kenpachi... bueno, al menos no había estado el Raro esperándole) hizo todo lo que ella y Kisuke le habían pedido mientras le hacían una serie completa de extraños y bizarros experimentos. Hasta su padre, quién Yoruichi había traído cuando iban por la mitad, estaba desconcertado por lo que le estaban haciendo.

Cuando habían acabado, ella había hablado con Isshin por un buen tiempo, antes de que volviese a la Sociedad de Almas, e Isshin había estado serio y sombrío cuando ellos volvieron a casa. Una semana después, Ichigo había recibido un Gigai para que sustituyese a su cuerpo, el cual, le había dicho Kisuke, se estaba rompiendo. Ya no podía soportar el esfuerzo de su enorme reiatsu. Para decirlo sin rodeos - su cuerpo humano se estaba muriendo.

Mientras estaba ahí sentado, refrescándose luego de un ejercicio de esfuerzo mental, tratando de acostumbrarse a su gigai y todo lo que eso significaba, su mente estaba en las crípticas palabras de despedida de Renji - el cabeza de piña roja se las había arreglado para venir durante dos horas aquél día para ayudarlo a entrenar. Su amigo le había dicho que no podía esperar para ver las expresiones de algunas caras cuando Ichigo caminase detrás de otra gente desapercibido; cuando él había salido del Dangai, Ichigo no era nada más que un espacio vacío. Rukia, que estaba feliz sólo con verle vivo y de una sola pieza, no lo notó, ya que Byakuya se había abalanzado y se la había llevado, apenas dando a Ichigo la oportunidad de darse cuenta que ella estaba bien. Hasta Renji se había quedado conmocionado por la rapidez de las acciones de su capitán, su boca entreabierta mientras miraba detrás de ellos. Ichigo tenía la impresión que era Byakuya de quién Renji estaba hablando. Tan leal como Renji era, había veces que el pelirrojo se sentía ofendido en nombre de su amigo. Ichigo había hecho tanto... ¿No se merecía un poco más de reconocimiento y aceptación de parte de la Sociedad de Almas? A veces parecía que sólo Kyoraku y Ukitake estaban dispuestos a luchar por él.

Ichigo saltó súbitamente cuando escuchó una voz alegre saludar mientras su propietario entraba en la tienda. ¿Qué demonios? Esa no puede ser... Al darse cuenta que era su hermana Yuzu, Ichigo escupió el sorbo de té que había estado a punto de tragar... ganándose una mirada de reproche por parte de Tessai Tsukabishi, el ex-capitán del escuadrón de kidou. Tessai había sido el primero a quién Ichigo había preguntado sobre aprender kidou. Después de todo, ¿quién mejor que el ex-capitán del escuadrón?

"Ah, ¿No lo sabías, Ichigo-kun?" Urahara lo miraba desde detrás de su abanico "los niños se han convertido en muy buenos amigos..."

"No, es cierto, no lo sabía..." Ichigo tosió. Se volvió para ver a sus dos hermanas entrando en la habitación, Yuzu con regalos en la forma de un enorme plato lleno hasta el borde con pasteles deliciosos.

"¡Onii-chan! ¡Aquí estás!" ella sonrió a su hermano mayor en cuanto lo vio, y rápidamente puso el plato en la mesa dándose prisa para abrazar a su hermano, casi derribándole. Ellos no llegaban a verse con frecuencia, ella a menudo se quejaba a su gemela. Karin mientras tanto fue saludando a Ururu y mirando a Jinta.

Bueno, Ichigo pensó, Karin es amiga de uno de ellos, de todos modos. Entonces, vio la razón por la que Karin estaba mirando a Jinta...y se encontró frunciendo más el ceño. El chico pelirrojo, de quién a menudo Ichigo pensaba como un mini-Renji en prácticas, quién estaba mirando a Yuzu con ojos de adoración. Karin encontró su mirada con la de su hermano, y puso sus ojos en blanco. Lo tengo todo controlado, Ichi-nii, no te preocupes, decía su expresión. Jinta, mientras tanto, había notado la mirada de Ichigo y había tragado en seco.

Vale; lo dejaré en tus manos entonces. Pero si me necesitas...

Te lo haré saber.

Bien.

De hecho, cuando pensaba en ello, nadie jamás sería lo suficientemente bueno para Yuzu. Nunca. Y cuando lo discutieron un tiempo después, Karin estuvo de acuerdo con él. Sin embargo ambos razonaron, mejor que sea alguien que sabía lo que estaba ahí fuera, sabía lo que podía pasar y estaba preparado para luchar con ello, que alguien que fuese completamente ignorante. Pero era demasiado pronto como para pensar en cosas como esa. Ellas tenían sólo doce, después de todo. Y al menos Jinta no venía con todos los primeros que el primer 'enamoramiento' de Karin hizo - estando ese entre los vivos. Para su primer llamado interés romántico no era otro que el niño genio, el capitán del décimo escuadrón, Toshiro Hitsugaya. Un interés adquirido a través de una pelota de fútbol, no menos... mierda, ¿quién era él para hablar? Su propia luz del amor era aún más vieja que Toshiro e igual de 'muerta'. Y tenía la complicación añadida de ser la hermana adoptiva del mayor palo en el culo noble del Seiretei... suspiró, sintiéndose más deprimido que nunca. Los hermanos Kurosaki era un gran lío.

"Ichigo..." Yuzu le miró.

"¿Qué pasa, Yuzu?"

"¿Algún día volverá Rukia-nee-chan? La echo de menos." Hasta Karin parecía querer saber la respuesta a esa pregunta, y ella había a menudo sospechado de Rukia, sospecha que se probó correcta cuando ella descubrió que Rukia era una Shinigami.

"No lo sé, Yuzu. Espero que sí. En estos momentos necesitan cada oficial sin discapacidad que tengan allí," Suspiró, recordando la presencia de todos los Capitanes y Tenientes, así como sus amigos vizard, cuerpos y partes plagados por la falsa Ciudad de Karakura...parecía tan irreal en aquél momento, como algún tipo de película de miedo. En el final, los únicos oficiales sin discapacidad que quedaron fueron los que se habían ido a Hueco Mundo: Byakuya, Mayuri, Nemu, Kenpachi, Renji, Unohana, y Isane, y los oficiales que no habían estado con ellos, como los tercer asientos de Ukitake-san y la teniente de Kyoraku-san, Nanao Ise. Capitana Unohana, Orihime y Hachigen habían tenido sus manos llenas durante un tiempo.

"Bueno... ¿por qué no la mandan en uno de los grupos que vienen para ayudarte con los hollows? Digo, sé que no la dejarían quedarse por demasiado tiempo, pero un desvío rápido para decir 'hola' y darnos un abrazo..." Karin gruño. "¿Pueden hacerlo, no? Me refiero a que dejan que ese raro con cabeza de piña pararse lo suficiente como para disfrutar de la cena y él es de un rango superior."

Hubo sonrisas y toses educadas debido al apodo que Karin le dio a Renji. Ellos podían y con su conocimiento del Mundo de los Vivos, no había ninguna razón para que no pudiese. Ichigo sentía como si él supiese por qué ella estaba siendo contenida - Byakuya Kuchiki. Él miró a Yoruichi, que estaba sentada al lado de Urahara, y por la astuta, mirada de reojo que ella le dio...supo que estaba en lo cierto. Al fin y al cabo, Renji había sido enviado un montón de veces, y sí, algunas veces, hasta se las había ingeniado para quedarse a cenar para poder rellenar a Ichigo, Isshin y Urahara de lo que pasaba por el Seiretei. Y cuando Ichigo había preguntado, de una manera muy indirecta, por qué no había vuelto, él se había vuelto muy incómodo. Entonces Ichigo lo supo, y no había presionado a su amigo por una respuesta. Ellos habían finalmente llegado a un punto en el que no estaban siempre compitiendo entre si y él no quería arriesgarlo. Le había hecho saber a Renji, de una manera igual de indirecta, y Renji se sintió bastante aliviado. Ichigo se había sorprendido que su amistad había de hecho, progresado hasta aquél punto.

"Su capitán aún no se ha recuperado completamente," dijo Ichigo en un tono quieto, un poco preocupado. Ukitake no era el individuo más saludable de la Sociedad de Almas, pero él era uno de los favoritos de Ichigo. De hecho, Ichigo iría tan lejos como para decir que él era la persona en la que él más confiaba y respetaba luego de Rukia y Renji. Él había desafiado la Cámara de los 46, el Comandante General y la ley sólo para salvar Rukia de la ejecución. Eso en sí mismo, había hecho de él un hombre honorable, aparte de ser un buen hombre. "Así que en lo que las asignaciones de Rukia se refiere..."

"Su hermano tiene la última palabra. Ukitake no tiene la fuerza para discutir con él en este momento,"

"Oh sí, "murmuró Urahara, "y todos sabemos lo mucho que Byakuya adora a Ichigo-kun."

"Derecho de vuelta para él," Ichigo replicó irritado.

"Ichigo," Yoruichi suspiró. Ellos ya habían bailado ese baile... demasiadas veces.

"Mira, sé exactamente como es él. Lo tengo todo de eso. También tengo un par de cosas más. Estabas- estás igual de bien colocada que él. Y no eres nada como él. También sé que la familia de Kyoraku-san es casi tan altamente colocada - y, si se tiene en cuenta la energía pura y la clasificación dentro de los escuadrones, él es aún más alto - y él tampoco es nada como él," Irritación brilló en los ojos de Ichigo, "Así que ergo, puedes ser un noble- el príncipe o la princesa de una familia noble- sin actuar como si tuvieses tu zanpakuto metido por el culo el cien por cien del tiempo. Y puedes interactuar con los demás sin tratarlos como si fuesen deshechos o basura y que no valen ni para limpiar la suciedad de tus sandalias. Y no sería malo para él sonreír al menos de vez en cuando. Él es tan frío cuanto Hyorinmaru." Ichigo corrió sus manos por el pelo y resopló con irritación. "Tú y Kyoraku-san...ambos tratáis a la gente, no importa cuál sea su rango, como si ellos importasen algo. Como si opinión valiese algo. No como si ellos estuviesen tan por debajo de vosotros que os diera vergüenza reconocer que existen. Tratáis a la gente como si fuesen - bueno, gente." Los ojos de Yoruichi se fueron ampliando durante el apasionado discurso de Ichigo, y su boca se abrió ligeramente con sorpresa mientras él seguía.

Él de pronto se vio en un abrazo rompe-huesos, Demonios, pensó, ni siquiera la vi moverse... y está en un gigai...

"¡Ichigo, esa fue la cosa más dulce y más bonita que me has dicho!" La Diosa del Flash olfateó, mientras trataba de estrujarlo hasta la muerte. "¿No crees, Kisuke?"

"Tiene sus momentos. Ahora sé un buen minino y deja al pobre chico respirar, ¿sí? Se está volviendo azul." Urahara se escondía detrás de su abanico otra vez. Probablemente sonriendo debido a la situación de Ichigo, el HDP.

Yoruichi dejó libre a Ichigo, pero no pudo evitar desordenarle el pelo. Sí, como si Kuchiki jamás haría eso - ni en broma. Sólo servía para darle aún más énfasis a lo que había dicho. Era como él lo había dicho, Yoruichi trataba a la gente como gente... oh, ella era suficientemente rápida como para cortarlos a trozos si hacían algo estúpido y idiota - él había tenido su pata en el ojo una vez por ser un idiota - pero eso era sólo cuando ellos estaban siendo estúpidos, idiotas y tontos. Ella sonreía, ella bromeaba, ella mostraba sus emociones - pero Byakuya no. No, todo eso estaba por debajo de él.

Y él había crecido mucho des de que había invadido la Sociedad de Almas para salvar a Rukia de ser ejecutada. Ichigo ya no era el mocoso impulsivo que había sido: Hueco Mundo le había curado eso. Hasta Uryu lo había comentado sobre ello, muchas veces, y algunos de sus profesores le habían preguntado abiertamente si él era Kurosaki Ichigo o si otro ser terrenal le había secuestrado y dejando un intercambio en su lugar. Él solía pensar más las cosas antes de reaccionar. Pero eso no significaba que él no podía reaccionar rápida e impulsivamente cuando era necesario; él sólo tendía a pensar más de lo que solía: mucho más. Y darse más cuenta de lo que sucedía a su alrededor. Tener un agujero abierto en tu pecho por un Cero te curaba de un montón de cosas, pensó, estremeciéndose interiormente. Aún habían noches en las que se despertaba empapado de sudor y temblando. Su padre había tenido que despertarle de una pesadilla en más de una ocasión. Y también en más de una ocasión, Ichigo se despertó y encontró a su padre allí sentado, en el medio de la noche, observándolo con preocupación. No era Aizen el que le daba pesadillas; era Ulquiorra. Le había costado un poco de torcedura de brazo para hacer que su hijo le dijese qué era lo que le daba los sudores fríos por la noche. En consecuencia, su padre había parado sus tácticas de emboscada - bueno, la mayor parte de ellas. Aparentemente, él se dio cuenta que su hijo ya tenía suficiente en su plato, especialmente des de que todo aquello con su cuerpo había comenzado...

"¿Qué pasa con chantajearle?" Karin preguntó, apoyando su cabeza en sus manos. "¿Tenéis alguna suciedad de él?"

Yoruichi se rió entre dientes "Nada que funcionase," admitió ella. "No estoy segura que pudiésemos conseguir. La Sociedad de Mujeres Shinigami han intentado conseguir una foto por años y no lo han logrado aún."

"Si es un pez-gordo noble, supongo que tampoco podríamos sobornarle," Yuzu suspiró, apoyando su cabeza en el brazo de su hermano.

"No creo que haya nada con lo que podamos sobornarle - a menos que sea la cabeza de Ichigo. Y eso, como que derrota el propósito," se rió Urahara, especialmente cuando Ichigo le gruñó.

"¿Por qué no le gusta Ichi-nii?" Yuzu se sentó, sintiéndose ofendida.

"Probablemente era el usual bocazas, auto arrogante cuando se conocieron," Karin murmuró. Ichigo se estremeció ante cuán cierta estaba su hermana. Claro que, el hecho que Ichigo había 1) Desafiado Byakuya una y otra vez; 2) se rechazaba a llamarlo por un título y a darle cualquier forma de respeto (todavía no lo había perdonado del todo, lo que para Ichigo significaba que no se había ganado que Ichigo usase un honorífico junto a su nombre, no como Ukitake-san, Kyoraku-san y Unohana-san); y 3) Ichigo le había ganado con un Bankai completamente nuevo que había acabado de aprender.

"Oh, es por una serie de razones," Urahara se rió. "Y ellos siguen empezando con peor pie cada vez que se encuentran..." Yoruichi se rió en ese. "Además Kuchiki-sama sigue poniéndose en una situación en la que debe agradecerle a vuestro hermano, y que lo irrita, por supuesto..."

"¿Huh?" Yuzu parecía desconcertada y miraba de uno a otro tratando de descubrir de qué estaban hablando.

"Um, algún día os contaré sobre cómo invadí la Sociedad de Almas," Ichigo se encogió de hombros.

"¿Invadiste...la Sociedad de Almas? ¿Para qué?" Karin miró boquiabierta a su hermano, "¿Tú sólo?"

"¡No, sólo no! Yoruichi estaba conmigo. Y Orihime, Chad y Uryu. Y pillamos más gente por el camino." Hasta Yuzu le miraba boquiabierta. "Y fuimos a rescatar a Rukia. Iban a ejecutarla."

Para su sorpresa fue Karin la que se puso de pie por la ira. "¿Iban a hacer qué?"

"Estoy suponiendo que nunca les constaste la historia completa," Dijo Yoruichi suavemente. Ichigo meneó la cabeza.

"Mira, todo fue un gran complot de Aizen, ¿de acuerdo?" dijo con dulzura. "Pero Renji, un curandero de nombre Hanataro, otro amigo Ganju Shiba, el escuadrón de Kenpachi Zaraki, y Toshiro -. Todos ellos estaban trabajando para salvarla, sólo que lo hacían de diferentes maneras, en momentos diferentes y por razones diferentes... pero cuando llegó el momento de su ejecución los que realmente estaban allí fueron Renji, su capitán Ukitake-san y el capitán del octavo escuadrón Kyoraku-san. Y Toshiro casi murió cuando supo lo que estaba pasando."

"Toshiro... ¿casi se mure?"

"Él había ido a la Cámara de los 46, que es su gobierno, para hacer un último intento... y hablar algún sentido en ellos. Él también había comenzado a sospechar de algunas cosas que estaban ocurriendo. Él y Rangiku-san los encontraron todos muertos. Aizen los había matado y era el que tiraba los hilos y daba órdenes en su nombre."

"¿Por qué él quería a Rukia-chan muerta?"

Ichigo miró rápidamente a Urahara, que parecía estar esperando por él. "Es... complicado. Tanto que aún estoy tratando de envolver mi cerebro alrededor de los planes de Aizen*. En cuanto lo haga, os lo haré saber," dijo finalmente con una sonrisa débil, optando por librar a Urahara. No estaba demasiado lejos de la verdad. Ichigo aún trataba de entender cómo él participaba en el total de los planes de Aizen de gobernar el universo. Él... y Rukia. Él probablemente lo sabría, si su padre no le hubiese parado Aizen de explicarle. Y Urahara admitió que no lo sabía. Por lo que, los que de hecho lo sabían eran Isshin y Aizen. Isshin no estaba hablando, y Aizen se había retirado de nuevo a Hueco Mundo.

Cuando Karin parecía a punto de protestar, Urahara la golpeó en la cabeza con su abanico. "No está mintiendo; los planes de Aizen son muy complicados y se remontan a más de 100 años. No estoy seguro que siquiera yo los comprenda completamente. Parcialmente, quizás; en total -no."

"Entonces, ¿su hermano está enojado contigo porque invadiste Sociedad de Almas para rescatar a su hermana?" Aparentemente, Yuzu se había perdido algunas páginas atrás, pero eso era normal. Su habilidad para ver a los espíritus era nueva, ella estaba aún aprendiendo sobre Sociedad de Almas. Ella aún no podía ver a los shinigami, no claramente.

"Bueno..." Ichigo se removió incómodo, "más o menos."

"¿Más o menos?" Yuzu le miró de soslayo, "¿Cómo 'más o menos'?"

"Bueno, yo medio que le derroté... luego de salvarla. Estaba tan dedicado a seguir la ley que iba a ejecutar a su propia hermana."

Las gemelas se quedaron boquiabiertas, sabiendo muy bien lo que había pasado con su hermano. Los hermanos mayores nacían primero para poder proteger a sus hermanos menores; las dos lo habían escuchado decirlo muchas, muchas veces. Era casi un credo con Ichigo.

"Oh," dijo finalmente Yuzu, y había una gran cantidad de entendimiento en aquella palabra. Un hermano tratando de ejecutar a su propia hermana... no, eso habría mandado a Ichigo con una sobrecarga de ira. De hecho, estaría echando espuma por la boca como un perro rabioso. No era de sorprender que los dos no se llevasen bien.

"Por lo que supongo que sobornarle también está fuera de cuestión ¿no?" murmuró Karin, apoyando la barbilla en las manos con tristeza.

"¿qué tal... sobornar a todos los demás?" preguntó Yuzu pensativamente.

"¿Huh?"

Yuzu sonrió beatíficamente. "¿qué tal sobornar a todos los otros capitanes?"

"¿qué tenemos con lo que podamos sobornar a todos los capitanes?" preguntó Karin, son darse cuenta que ambos, Yoruichi y Urahara estaban de pronto sonriendo.

"¿a qué sonreís, vosotros dos?" preguntó Ichigo, de pronto nervioso. Yoruichi levantó una de las sabrosas tortas del plato.

"¿Tenéis alguna idea," ella literalmente ronroneó, "cuántos de los capitanes - y tenientes- de la Sociedad de Almas, tienen un gusto por lo dulce?" Karin y Jinta, ambos rieron, dándose cuenta de lo que estaba pasando.

"Hey, el gorrón (N/A 1) comerá de todo - pero sí, lo más dulce, lo mejor..." Dijo el niño, asintiendo con la cabeza. Ahora, hasta Ururu y Tessai empezaron a sonreír.

"¿Sabíais" dijo Urahara, su sonrisa cada vez mayor, "que tenemos una cocina enorme aquí?"

"¿De verdad?" Yuzu se animó. "Podría..."

"Por supuesto. Y creo que debería mencionaros... el cumpleaños de Kuchiki-san está cerca, ¿no es cierto, Yoruichi?"

La cabeza de Ichigo se volvió hacia Yoruichi, sus ojos abriéndose ligeramente. Él había tratado en vano descubrir la fecha de cumpleaños de Rukia, pero no había podido sonsacarle. ¿Cómo había podido Urahara...?

"Voy a volver y confirmarlo...mientras Yuzu planea su ataque." Asintió Yoruichi.

#

Yuzu planeó lo que quería hacer con mucho cuidado, cuestionando su hermano y Urahara sobre todos los capitanes y sus asistentes para poder tener un número exacto de personas, a la espera de Yoruichi para confirmar el cumpleaños de Rukia para ellos y el equipo de Urahara limpió la cocina hasta que brillaba. Sólo le tomó dos días a Yoruichi reunir toda la información que necesitaba: Renji era más que servicial, les dijo cuando regresó, y estaba dispuesto a ser un co-conspirador. Él pensaba que era una gran idea, al igual que Ukitake, que también era muy servicial y les ofreció su sala de conferencias para su uso.

"¿Él era?" Ichigo sonaba un poco dudoso, ya que siempre había pensado que su amigo pelirrojo sentía algún tipo de atracción por Rukia. Ukitake-san no le había sorprendido; él sospechaba que el capitán peliblanco estaba de parte de Ichigo. ¿Pero Renji?

"Sí. Él se dio cuenta que sólo serán amigos, y ella piensa en él como un hermano... por lo que él prefiere verte acabar con ella que cualquier otro." Ichigo estaba completamente anonadado por aquella revelación y balbuceó algo incoherente. "¿Por qué tan sorprendido? Él sabe que tú no das tu afecto a la ligera, pero cuando lo haces..." Yoruichi se encogió de hombros. "Bueno... invadiendo no sólo Sociedad de Almas por Rukia, pero Hueco Mundo por Orihime, ¿cuál es sólo una amiga?" ella sonrió, "él sabe que puede confiártela."

"¿Entonces, cuando es su cumpleaños?" Yuzu preguntó, sus ojos brillantes mientras miraba a su hermano mayor.

"Es el catorce de enero."

"Eso me da menos de dos semanas..." Yuzu ladeó su cabeza. "Por lo que, una caja de galletas para los capitanes, y estaba pensando en un gran pastel de capas por el cumpleaños de Rukia. Lo puedo hacer en trozos y lo ponemos junto para crear el completo..." Les contó a todos los que quería hacer.

"¿Tendrás tiempo de hacer todo eso?" Karin preguntó a su gemela. Preocupada por la cantidad de trabajo de la que estaba hablando.

"Si tu e Ichi-nii me ayudáis, lo tendré. Karin puede glasear las galletas, y Ichi puede decorarlas. Encontré una caja entera de diferentes colorantes alimentarios por lo que no tendré que mezclarlos," Yuzu explicó, sus ojos brillando.

Al final hasta Shinji quedó reclutado como ayudante de pastelero. Resultó que el vizard sabía romper huevos sin dejar caer trozos de cáscaras en la masa. Era una habilidad importante, dijo, cuando necesitabas romper tres docenas de huevos y sólo podías usar las yemas en una mescla y las claras en otra. ¿Por qué desperdiciar cualquier parte del huevo, si podías usar el mismo huevo en dos mesclas diferentes? Él también ayudaría a la hora de la entrega, ya que iban a ser seis pasteles de capas, y Renji también iba a pasarse para ayudar con el resto, al igual que Nanao.

"No te preocupes, que ella sabe mantener la boca cerrada," él le había asegurado a Yoruichi. "Ni siquiera el capitán Kyoraku sabrá lo que está pasando hasta que estemos listos." Capitán Ukitake le mandaría a Rukia y Kiyone en una misión falsa, y podría ser capaz de controlar sus acciones, con la ayuda de Kiyone. Esto le inquietó un poco a Ichigo, hasta que Yoruichi le aseguró que sin Sentarō, todo estaría bien. Ellos pondrían el pastel junto en la sala de reuniones del decimotercero escuadrón, y usarían la puerta privada de los Shihoin hasta el Seiretei, por lo que Orihime, Chad y Uryu desafortunadamente no podrían ir. De todas maneras, ellos ayudaron a Ichigo a comprar el regalo de cumpleaños, y fue Orihime quien vino con la idea, loca como era... pero todos estuvieron de acuerdo que para Rukia era perfecto, por lo que todos trabajaron en ello, e Ichigo insistió en poner los nombres de todos en él, ya que todos trabajaron en él e Isshin pagó la diferencia. Karin encontró el envoltorio perfecto para él. El pastel sería el regalo de Yuzu para Rukia.

Así que, allí estaban, la mañana antes, Ichigo trabajando duro en el glaseado de vainilla, el número del escuadrón - y a veces la representación de la zanpakutō del capitán si había espacio. Alrededor del uno de Yamamoto, puso llamas; y así... Cuando Renji y Nanao llegaron, todo estaba listo, y ellos cuidadosamente recogieron las cosas para el viaje a Sociedad de Almas, luego de dejar que la pareja echase un vistazo.

"Wow..." los ojos de Nanao se abrieron cuando ella había visto las galletas. Yuzu había hecho extra para el equipo de Urahara, lo que les había dado la oportunidad de probarlas. Sus ojos se abrieron detrás de sus gafas. "Increíble..."

"Te dije que era una excelente cocinera," Renji le pinchó. Ella sólo asintió. Des de que Yuzu no podía ver por completo a los shinigami - ella podía decir, vagamente, donde ellos estaban, pero no podía verlos de la manera que lo hacía su hermana - Nanao se giró hacia Ichigo.

"Por favor, dile a tu hermana que ésta es la cosa más deliciosa que jamás probé..."

Ichigo miró a su hermanita con orgullo. "Karin, ¿se lo dices? ¿ya que ella tampoco puede verme ahora?"

"Lo haré, Ichi-nii. Mejor si os marcháis chicos, o llegaréis tarde. Y no te olvides..."

"¡No lo haré! ¡No lo haré!" Karin le había hecho prometer decirle hola a Toshiro por ella. Él no podía esperar para pinchar un poco al bajo, peliblanco, capitán; era condenadamente serio, eso hacía divertido pincharle. Cuanto más insistía en ser llamado Capitán Hitsugaya, lo más se decidía Ichigo en no hacerlo: simplemente por que volvía al niño genio loco.

Yuzu miró a los otros cuando ellos se había ido, "¡Espero que funcione!" dijo, cruzando los dedos.

¡Yey gente! Éste es el primer capítulo, no hay nada sobre el universo Harry Potter aún, pero lo habrá... Intentaré subir un capítulo a la semana, pero ya véis que son largos - y hay 49 *me desmayo*- y mis clases vuelven a comenzar en pocos días, por lo que... ¡haré lo que pueda!

La historia original es en inglés de Eradona, y es una trilogía, dos partes están hechas y publicadas, y la tercera en proceso de edición, por lo que ya véis, hay mucha historia, y se vuelve muy interesante, ¡Os lo aseguro!

Matta ne,

~Schieffer