Título: Mal gusto erróneo.
Fandom: Katekyo Hitman Reborn!
Pairing: Tsuna+Longchamp, Longchamp/Gokudera
Advertencias: soso, fumado, feoo. Lo de siempre owo, spoilers del Arco del diario vivir.
Mal gusto erróneo
Longchamp tenía un gusto pésimo, las novias que se conseguía y las chicas que les quería presentar eran pruebas vivientes de ello, por eso, cuando se le había acercado sonriendo ampliamente con casi brillos de felicidad rodeándolo, Tsuna había decidido hacer lo más sabio que pudo realizar en esa situación: huir como un cobarde, ignorando los gritos del otro chico de "pero te quiero preguntar algo, vuelve" a lo que solo había contestando, sin dejar de correr y aumentando ligeramente la velocidad un "¡no me interesa, estoy ocupado!".
No quería ser arrastrado a otra cita con mujeres de belleza tan… peculiar. No, no, ya muchos traumas tenía encima como para sumarle uno más.
Longchamp había cesado su persecución después de recibir esa respuesta, deteniéndose un momento para analizarla "seriamente".
―Entonces eso significa que no le molesta, ¿verdad Mangusta?―inquirió Longchamp a su tutor, sonriendo bastante alegre.
―Podemos suponer.
La sonrisa en el rostro del chico se amplió por esa respuesta.
― ¡Pues en ese caso manos a la obra!―soltó enérgico, volteando para buscar a alguien hasta que lo ubicó a unos metros de donde estaban ellos―¡Hey Goku-chan salgamos juntos!―gritó emocionado, corriendo hasta donde se encontraba el italiano que se había detenido por semejante grito.
― ¿De qué mierda estás hablando?—soltó, con el ceño mas fruncido de lo normal intentando con eso espantarlo de cualquier idea que estuviera pasando por su cabeza.
A Longchamp y su mente espesa les resbaló ese gesto por completo.
―Eso, que salgamos juntos, como en una cita ¡será divertido!
La cara de Gokudera después de escuchar aquello se había convertido en la viva estampa del shock y, si se había detenido de explotarlo allí y ahora fue por la simple mención de "Sawada-chan dice que no hay problema" cosa que provocó un tic en su ceja y un "b-bueno, si el Décimo lo dice, no me puedo negar" dicho con voz entrecortada, sacando con eso un grito de emoción de Longchamp y un "así se hace" en tono de completo orgullo de su tutor.
Y, diciéndose repetidamente en su mente varias veces "esto lo hago por el Décimo, para ser una buena mano Derecha" Gokudera se dejó llevar mientras el otro –que estaba ridículamente feliz― lo tomaba del brazo y lo jalaba con toda la confianza del mundo para empezar con la estúpida "cita".
Reborn, viendo todo eso desde uno de sus escondites de la escuela, solo pudo sonreír maliciosamente.
El del mal gusto definitivamente no era Longchamp.
Ya después golpearía a su alumno por tarado. Ahora a disfrutar del espectáculo.
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En serio, no puedo creer que no hayan escrito nada de Longchamp, con lo amor que es ;OOOO;
Denle amor con sus reviews *OO*