¡Hola! Mi primer fic en publicar, de Harry Potter... Salió a base de mis amigos Role Players! Espero que la historia esté muy clara...

Aclaración: Moví las edades de los Potter, Albus tiene 16, y James 17, por lo tanto... Lily quince.

En fin, para ahuyentar algunos grumos aquí les dejo algunos datos:
Lily Luna Potter es una Gryffindor, quince años, cuñadas: Emmily Digory de 16 años & novia de James, (Si hija de Cedric & Cho Chang) & Amy Lockhart más tarde novia de Albus (Si, su padre es Lockhart, por el momento no recuerdo a su madre...) Está enamorada de Alec Davies, hijo de Gabrielle & Roger Davies, su hermana se llama Cassandra y tiene la misma edad que Lily, ambos son de Ravenclaw. Dominique, Molly, Rose, Hugo, y Roxanne son sus primos. Anneliese es una Slytherin de quince años muy amiga de Lily, al igual que Maddie Goyle, las 3 son amigas & Maddie también está en Slytherin. Sarah Finch, es la mejor amiga de Lily, junto con Anneliese, Maddie, y Sophia, una gryffindor de 16 años, hija de Ariana D. y Gellert Grindelwald.

Empezaba por ser una mañana cálida, la luz del Sol, parecía estar aumentando su intensidad lumínica para despertar a la pecosa pelirroja, tumbada en las sábanas blancas.

Las cortinas bailaban, ayudándole al Sol, para despertar a la pelirroja. Pero cuando éste subió entre los montículos y casas al rededor, quedó su luz impregnada en la cara blanca y pecosa de la muchacha. Ésta hizo un puchero, apretó los labios, y por fin; abrió los ojos.

Y así, con una camisa gris y grande para la moldura de la chica; bajó las escaleras de madera haciendo rechinar a cada uno de sus pasos. Al cabo de un momento, llegó a la cocina y cuando se disponía a abrir el refrigerador…

-¿Insomnio, otra vez?-Preguntó un muchacho con el cabello en el rostro, le podía cubrir toda la cara como dos cortinas, a una ventana.

-No… Albus, no me gusta que andes por ahí escondido…-Dijo la pelirroja.

-Lily, esta vez no pude dormir nada… Nada, de nada.-Dijo Albus irritado.

Lily se sentó junto a su hermano y lo abrazó. Éste le correspondió y la besó en la frente. Él, se le quedó viendo fijamente, como queriendo decirle algo.

-¿Ibas a tomar algo?-Masculló, soltándose de los brazos de su hermana.

-Mmm si… Jugo, ¿Quieres?-Preguntó la chica.

-No, en realidad quiero intentar dormir de nuevo… Todavía es muy temprano.-Albus.

Lily asintió y se giró al refrigerador. Cuando se sirvió el jugo y estaba por irse, alcanzó a ver que Albus ya no estaba. Subió las escaleras y se dirigió al cuarto de del mismo; abrió la puerta, pidiendo que ésta no hiciera ningún ruido, y echó un vistazo al cuarto desordenado. Al parecer de Lily, Albus se había quedado dormido… O tal vez estaba fingiendo. Se fue dejando la puerta entre abierta, y al fin se metió a su cuarto. Vio el reloj, y definitivamente era muy temprano… Y ahora, el día estaba totalmente nublado.

En pocos días, la chica y sus hermanos volverían a Hogwarts, vería más seguido a sus compañeros y extrañar a sus padres se volvería una rutina.

En cuanto, a su hermano James, seguía viviendo con ellos, por petición de Ginny.

El día por fin se aclaró, y dejó ver al amigo Sol, Lily bajó para desayunar y ahí se encontró con su familia reunida. Ginny dando la espalda a la barra desayunadora, Harry susurrándole cosas al oído, y James y Albus peleándose y paseando su tocino al plato del otro. Lily sonrió abiertamente y se abrió paso entre la guerra de comida.

-Buenas Lily.-Dijo James sonriéndole con comida en los dientes.

-Jajaaa, ¡Así, te ves más guapo tontito!-Lily.

Albus maldijo por lo bajo y se echó a reír con sus dos hermanos.

Sus padres los miraban divertidos, pero seguían en propio mundo.

Cuando todos estaban sentados, nadie comentó nada… El silencio se hizo costumbre en la casa de los Potter, lo había logrado por fin.

Y por más que Lily quería contarles de que le encantaba Alec Davies, de lo triste que fue despedirse de Anne, las locuras de Sophie, las llamadas sospechosas con Sarah y Molly, su prima y mejor amiga… No podía articular palabra. Pensaba, que sus hermanos estaban en la misma situación, pero lo dejó así.

Y así, entre intentos e intentos por contarles de su vida a sus padres… Las horas se fueron y se convirtieron en días. El día tan esperado, por fin llegó.

-Lily, por favor escríbenos cariño.-Dijo su madre preocupada.

-Mamá… Lo haré, aunque creo que ya nadie lo hace...-Dijo Lily girando los ojos.

-James, cuiden a su hermana por favor…-Harry. –Que no se meta en líos, y ustedes tampoco.-Dijo en un susurro.

¡Papá! Te escuché…-Dijo divertida.

-La cuidaremos, pa… Aunque no se ve muy bien que estemos ahí como moscas ahuyentándole a toda la gente que se le acerca.-Al.

Lily apretó los labios y se giró enojada. Abrazó a sus papás y se despidió de sus tíos.

Al entrar al vagón, los hermanos se toparon con Dominique Weasley,Alec y Emmily.

-¡No!-Dijo Lily al ver a su castaño preferido.

-¿No qué, Lily?-Dominique.

-Acabo de recordar que…-Lily.

-Acabas de recordar que tienes que sentarte con nosotros.-Dijo James interrumpiendo a su hermana.

-No… Enserio, tengo que irme. Hay un montón de cosas que debo contarles a mis amigas, je.-Lily.

-Puedes decirles que se sienten con nosotros Lily.-Dijo Alec.

Lily se quedó perpleja, emitió una risita y automáticamente se puso color rojo tomate.

-De verdad, gracias. Pero lo que es privado, es privado.-Lily.

-Lily… Anda, después ya no nos veremos tanto.-Emmily.

-¿Emmi que dices? Si tu y yo nos vemos todos los días…-Dijo sonriente la pelirroja.

-Jeje, bueno. Sólo decía.-Emmily.

-Chicos, yo también me tengo que ir… Acabo de ver a Sophia.-Dijo Albus entusiasmado.

-¡Te quiero Al!-Lily.

-Adiós, pecosa.-Dijo abrazando a su hermana.

-¡Lily!-Gritó Anneliese.

-¡Anne!-Lily.

La rubia abrazó a Lily con tanta efusividad, que la pelirroja sintió que su cuerpo entero daba una vuelta completa en un abrir y cerrar de ojos.

-Te amo, me acabas de salvar las pecas.-Susurró Lily.

-Jajaja, ¿Por qué?-Anneliese.

-Ya te cuento. Bueno chicos, nos vemos en la cena, adiós.-Dijo haciendo un ademán.

-Adiós Lily.-Emmily.

-Cuidate pelirroja…-James.

*Peligros inexistentes…

Al llegar al castillo, Lily moría de hambre. Y a juzgar por el sonido de varias personas a su alrededor, no era la única.

Al fin, se sentó y quedó rodeada de gente, hablando de sus experiencias del año anterior y las cosas que intentarían hacer ésta vez. Lily, miraba a sus amigas, asintiendo y sonriendo como respuesta para lo que estaban platicando. Desvió la mirada hacia la izquierda, rumbo a los ravenclaws y se topó con unos ojos azules, hermosos. En su rostro se dibujó una sonrisa. Alec también le sonrió y bajó la mirada hacia su plato. Lily, que estaba confundida, movió la cabeza a un lado cual perrito, tratando de descifrar lo imposible; y el rugido que emitió la sacó de sus pensamientos, empezó a comer y se perdió en la inmensidad de sus pensamientos.

Ahora, Lily se encontraba bajando las escaleras del dormitorio de las chicas; para disponerse a ir a la cabaña del guardabosques.

Al sentir el viento en su rostro, se abrochó la chamarra y se puso el gorro. Iba con el cabello suelto y su pijama. El viento, hacía que se le salieran los mechones rojos y provocaba que se le pusieran en el rostro para no dejarla ver su entorno.

-¡Lily! ¿Qué haces aquí?-Dijo Alec agarrándola de los brazos.

-¿Por qué? ¿Anda James por aquí…?-Dijo viendo a todos lados.

-Jeje, no. Son las tres y media… Es peligroso.-Alec.

-¡Por favor! El régimen "Voldy-heart of coldy" terminó Alec…-Lily.

-Lo sé… Pero aún así es peligroso.-Alec.

-Bueno… ¿Tú que haces aquí?-Lily.

-Eh, yo... Pues yo… La verdad, estaba viendo el clima, me gusta venir a estas horas.-Alec.

-Aunque no lo creas, a mi también.-Lily

-Ven, te enseñaré algo.-Alec.

El castaño, se llevó a la chica a una zona verde un poco retirada, se sentaron a platicar y al cabo de un momento, el Sol se asomó para los dos. Dando por terminado, aquel dichoso encuentro.

Es bellísimo…-Lily.

-Si. Éste es mi lugar favorito, cuando quieras lo podemos compartir.-Alec.

Lily se giró hacia él, y le esbozó una sonrisa.

-Gracias Alec.-Dijo apenada.

-Bien, tenemos que irnos.-Dijo levantándose y tendiéndole la mano a su pelirroja.

-Ésta, le tomó la mano y juntos se encaminaron para el castillo.

-¿Quieres que te acompañe a tu sala común?-Alec.

-No, muchas gracias.-Lily.

-Bueno… Porqué tu hermano me mata si te pasa algo.-Alec.

-Pues deberías de dejar que sólo mi hermano se preocupe por peligros inexistentes.-Dijo divertida.

-Río-Está bien, nos vemos en unas horas, Lily.-Alec.

-Descansa.-Le dio un beso en la mejilla y dio vuelta al pasillo.

-Lily, traía la cabeza en otro lado... Si quería seguir siendo la más serena de sus amigas, tenía que dejar de ver, pensar y sobre todo, soñar a Alec.

-Potter… ¿Qué haces a éstas horas?-Dijo un muchacho rubio y mucho más alto que Lily.

-Yo, estaba buscándote.-Mintió Lily.

-¿A mí, y porqué venías con ese Ravenclaw, se les perdió algo?-Volvió a decir.

-Mira Scorpius, estaba… Pues estábamos buscando al prefecto más cercano.-Lily.

-¿Y porqué yo?-Scorpius.

-Pues, porqué tu siempre andas en esta zona para mantener a los Gryffindors quietecitos…-Lily.

-¡Ja! ¡Pues se me ha escapado una, entonces! ¿Para qué me buscabas, eh Potter?-Scorpius.

-¿Te he dicho cuánto te quiero?-Dijo Lily con sarcasmo.

-¿Te he dicho cuánto te odio?-A lo que el rubio le contestó.

-…No quiero un castigo iniciando el año… Jamás he tenido uno y...-Lily.

-En eso deberías pensar, antes de andarle coqueteando a Davies.-Scorpius.

Lily dibujó una sonrisa en su rostro pecoso.

-¿Estás celoso, Malfoy?-Dijo divertida.

-¡Celoso! ¡Bah! ¿Y por él?-Scorpius.

-Admítelo, es más mono que tu…-Lily.

-No, no lo es Potter. Es como si dijera que tu eres más linda que Rev Nott.-Scorpius.

-Mm… No contestaré eso, o si te haré rabiar.-Lily.

-Bien, basta ya. Acompáñame a …-Scorpius.

-¡Claro que no! No voy contigo a ningún lado.-Lily.

-No lo hagas difícil, Potter.-Scorpius.

-Malfoy, vamos a hacer un trato ¿si?-Lily.

-No.-Scorpius.

-Vamos, sé que te mueres por besarme.-Lily.

-Pues que desinformada estás, me gustan sin pecas…-Dijo rozándole la mejilla a Lily.

Ésta se apartó lo más rápido que pudo.

-Está bien, vamos a hacer un trato.-Scorpius.

-A ver…-Lily.

Vas a ser mi novia por un mes entero, y te apuesto que te enamoras de mi, en muy poco tiempo.-Scorpius.

-¡NO! No puedo hacer eso…-Lily.

-¿Por qué no, eras muy valiente hace unos segundos?-Dijo burlón.

-Entiende, hay cosas que… Simplemente no se pueden.-Lily.

-¡Ah, claro! Entiendo, le romperás el corazoncito azul a Davies…-Scorpius.

-¡Cállate!-Dijo Lily echándosele encima para golpearlo.

-¡Contrólate Potter, o no respondo!-Scorpius.

La chica lo fulminaba con la mirada, mientras él, le sonreía abiertamente, viéndola de una manera diferente a la mirada que siempre le dedicaba cuando lo hacia quedar en ridículo, o cuando levantaba la mano ella primero para robarle sus respuestas en el club de la biblioteca…

-¿Aceptas o no, pelirroja?-Scorpius

-Obviamente no, Malfoy.-Lily.

-Mira… Piénsalo, y mañana me dices. Por el momento, no te daré un castigo.-Scorpius.

-Ya te dije que no, no hay nada que pensar.-Lily.

-Buenas noches, "Lily".-Scorpius.

El rubio se fue perdiéndose en la inmensidad del castillo, dejando a Lily petrificada.

Sin duda, ella quería golpearlo en su orgullo... Lo que más le dolía a un Malfoy. Su orgullo. Se sentía incómoda, observada y algo estúpida... Pero mañana sería otro día y estaba segura que haría hasta lo imposible por safarse de las garras del prefecto más peligroso, pomposo y orgulloso de todo Hogwarts...

¡Espero que el fic haya sido de su agrado! Me gusta más el término Drinny, pero he iniciado con los de la siguiente generación :D