Bueno queridos lectores, aqui les traigo un fic de nuestros queridos Kagamine, en donde, debo admitir jeje odié a uno de ellos, pero aún así lo amo tambien. En fin espero que os guste.

Nos leemos abajo

Disclaimer: Vocaloid y sus personajes no me pertenecen, pero esta historia si.

Prólogo

Tres meses antes del presente

Era un día precioso, algo soleado pero sin llegar a hacer calor.

En la habitación en donde nos centraremos será en la pequeña sala de té de la duquesa de un precioso y lujoso castillo. Era una salita singular sin duda, era luminosa y finamente arreglada. En el centro de esta, dos sillones de terciopelo rosa, las paredes de mármol blanco aunque ligeramente rosado. De un lado, un gran ventanal cubierto de cortinas de seda rosa, amarilla y blanca. En esta habitación se encontraban dos bellas damas tomando juntas el té, una de ellas (la más joven) se encontraba leyendo un viejo libro; mientras que la mayor bordaba un hermoso buqué de flores en un suave pañuelo de viscosa beige.

-Mi señora ¡le ha llegado esta carta!- entró corriendo una pequeña muchacha de mirada verdosa. Una simple sirvienta sin duda; apresurada por entregarle el sobre a su ama, la dama joven.

La chica dejo su lectura, emocionada pues sabía quién era el remitente. La sirvienta le entrego la carta y la damisela la recibió, pero antes de poder empezar a leerla, la dama más grande le arrebató la carta a la joven y rompió el sobre en cuatro.

La muchacha le miró atónita ¿Cómo ella se atrevía a romper algo que era personal? Si, era su madre pero no tenía derecho.

La mujer más grande le dedico una mirada fría.

-te he dicho que ya debes de romper esa relación, hija mía. Bien sabes que en nuestra situación es necesario, no, es literalmente vital que contraigas un valeroso y conveniente matrimonio y eso querida mía, es algo que no conseguirás con este simple Vizconde te pretende.

-pero madre, él me ama.-respondió la muchacha con una pequeña suplica impresa en sus ojos.

La señora le volvió a mirar con toda la frialdad posible pero esta vez sonriendo de una manera que pretendía ser maternal.

-hija mía, no seas ridícula. El amor no es algo importante en una relación, eso se acaba con los años. Además querida, sabes bien que casi estamos en la ruina y un vizconde jamás podrá absorber todos nuestros gastos. Además tú te mereces algo mejor, mi vida.-la señora se levantó y salió de la habitación.

Capítulo 1

Comienzos

Nuestra historia comienza hace muchos años en algún lugar lejano.

Bien como les iba contando; erase una vez, en el reino anglosajón, en una provincia llamada Amaton llamado así por una peculiar fruta esférica de sabor dulce y fresco qué sólo crecía en el interior del país; el gobernante, un duque bastante rico y poderoso se consideraba a sí mismo como el hombre más feliz sobre la faz de la tierra. Sí bien acababa de contraer nupcias con una bella dama, hija de un Vizconde del reino vecino, al poco tiempo se dio la noticia qué su joven duquesa estaba esperando un heredero para el título.

El sumo gobernante de Amaton, el duque Lennard Kagamine, era un hombre sí bien bastante joven, pues tenía 20 años, era benevolente, justo y leal. Aunque no siempre fue tan bueno, pues durante su adolescencia fue conocido por ser toda una casa nova y no sólo en su país sino también en muchos reinos vecinos.

Pero todo en él cambio cuando en una visita al reino vecino más próximo conoció a la señorita Miku Hatsune, ella era al principio una más de sus conquistas pero la joven supo ganarse el corazón del joven duque. Poco después de eso ambos contrajeron nupcias en una bella y gran ceremonia en donde se juraron amor y lealtad mutua. Sin embargo su unión marital causó mucho revuelo y disputa dentro de la nobleza de Amaton pues la señorita Hatsune era considerada poco digna para el duque.

No mucho tiempo después de la boda, la joven duquesa Miku quedó embarazada, hecho que fue celebrado por la provincia entera, aunque a los muchos médicos les preocupaba la duquesa pues aún era bastante joven, apenas tenía 15 años.

Al cabo de unos meses después de la noticia de la llegada del futuro herederos al título, la joven duquesa sufrió de un aborto espontáneo, en donde no sólo perdió a su hijo sino la vida misma.

La doble pérdida devasto al joven duque; sin su esposa y sin su hijo, él padeció mucho. Después de eso él máximo consejo de Lores, una alianza entre los nobles con titulo del país, estipulaba ciertas normas de comportamiento entre reinos, monarcas y nobleza, le recriminó al duque de Amaton por estar faltando a una de las normas, una en donde decía qué un noble qué tuviera menos de 55 años no podía conservar el título sin una pareja, y de faltar a esta norma el título se pasaría a la pareja más directa en la línea de sangre.

En este caso, el título del ducado de Amaton pasaría a ser del primo del duque Leonard, Theodore Kasane y su esposa Teto.

Esto mismo fue lo que impulsó al duque de Amaton a mandar a uno de sus parientes más leales en la búsqueda de la próxima esposa.

Sin muchos preámbulos él consejero emprendió su búsqueda. Tardó unos meses en encontrar a la joven que según él agradaría más al duque de Amaton.

Este, presionado por el máximo consejo de lores, acepto a la joven aun sin conocerla, después de todo solo le serviría para conservar el título y evitar que su primo Ted se hiciera de él. Pero esté cuento será mejor contado sí lo relata esa joven en persona, pues yo no creo acercarme tanto a su entendimiento y sentir de los acontecimientos; así qué por el momento me despediré de usted querido lector.

Espero y les haya gustado, jeje créanme que esta bueno, si no me creen sigan leyendo. Para quienes no me conocéis os mando un saludo y beshitos, y yo espero conoceros vía sus reviews

beshitos con azuquitar y miel

Lenka Mockingjay (LeaM para los cuates)