Disclaimer: Todos los personajes que aparecen en ésta historia son de Stephenie Meyer, y con ello su fantástica saga : "Crepúsculo".
Summary: Son todos los sentimientos que se me ocurrieron en el momento de "no ir a clases". Mike cuenta por fin su lado oculto.
Pd: No todo es exactamente igual... traté de agregarle parte de mi.
(Todo lo escrito es POV Mike)
Bueno, aquí dejo todos mis posibles sentimientos resumidos. Para desahogarme, tal vez.
Cuando supe que la hija del jefe de policía Swan vendría a vivir a Froks, el pueblo más pequeño que alguien conozca, el pueblo más frío; uno que no para de llover, la gente que no conoce la nieve acá la ve con frecuencia, uno que se oculta el color café, anaranjado y amarillo -pero nunca deja de ver por todos los lados el color verde, o el grisáseo-, uno que por poco los habitantes logran olvidar el sol y con ello su calor. Me pregunté por qué a ella, o a alguien que vive en algo totalmente lo opuesto desearía vivir acá, en este sitio. ¿Cómo supe todo ésto?, muy fácil, por aquellos rumores de típico pueblo pequeño uno se logra enterar de cosas buenas y malas, de cosas que a veces ni siquiera le pueda interesar a alguien. Por ahora, la hija del jefe de policía Swan es uno de esos casos. Hasta ahora, quizá ésto cambie. Quien lo sabe.
No me pude sacar la sensación de que alguien nuevo llegaría, aun mejor, ¡llegaría una chica!... y no solo sería nueva en el pueblo Forks, sino que en la escuela -por lo que supe tiene la misma edad que yo y mis amigos- y por tanto nos toparíamos en muchas asignaturas, en el casino quizá. Sería mi vecina, sí viviría al frente mío (para los que no saben siempre he sido vecino del señor Swan). Por todo estos pensamientos que he tenido desde que me he enterado de ésta noticia no he podido dormir bien, técnicamente no dormí del solo hecho de pensar en una tontería, de pensar en alguien que nunca en mi vida había visto, en alguien que no conocía físicamente, ni con ello mucho menos de carácter -siendo que es la hija de mi vecino-. Esto es extremadamente raro para mi. Bueno, no le hecho la culpa a Isabella Swan -así nos contó Charlie Swan como se llamaba su hija- por no haber dormido, siempre me sucede esto antes de entrar al colegio, pero esta vez ha sido peor, mucho peor.
A penas llegaste a casa tu papá te había dado un vehículo, te habían venido a visitar los Quileutes: el padre y su hijo, por lo que veo son muy parecidos, de distinta edad. Y aun peor! son amigos de la familia. Admito que me coloqué algo celoso hoy, solamente quería ir a conocer a Isabella, pero no se presentó la ocasión, solo eso diré. Malditos Quileutes.
La primera vez que te vi llegar al colegio sentí una felicidad correr por todo mi cuerpo, una sonrisa sin darme cuenta se colocó en mi rostro. Quise conocerte de verdad, incluso creo que fui uno de los primeros en acercarme -bueno, fui el primero porque corrí, pero ese tipo de detalles da lo mismo-. "Esta es mi oporunidad" dije para mis adentros.
-Hola mi nombre es Mike Newtoon, vivo al frente de tu casa y si quieres te ayudo a conocer parte de esta escuela- dije apresuradamente para que nadie viniera a interrumpir ya que ¡estaba con la chica nueva! traté de sonar lo más agradable posible. - Tu debes ser Isabella Swan, cierto?- la apunté con mi dedo sin dejar que me respondiera.
-Ehm... hola, sí. Pero, preferiría Bella - dijo mirando a todos lados, como si estuviera perdida. Bueno, obvio que estaba perdida era nueva -Gracias, pero ya tengo una hoja que me dieron en la secretaría hoy en la mañana para poder ubicarme- dijo respondiendo a mi oferta de ayudarla a encontrar su primera clase.
-Pero, a qué clase vas ahora?- pregunté sin dejar pasar mi oportunidad de hablar con ella.
-Uhmm - dudó y se fijó en un papel que tenía en la mano - voy a historia y geografía -
-De verdad? yo también me dirijo para allá- sonreí como bobo al frente de ella - ven, vamos juntos - le ofrecí por segunda vez
-Está bien, claro
Íbamos caminado hacia el edificio número cuatro; muy callados. Hasta que llega una chica tapando su cara con una cámara de esas profesionales, supuse que era Angela, y no me equivoqué. Sacó una fotografía a Bella y se quitó la cámara presentándose y saludándome.
-Hola Mike. Tanto tiempo- me abrazó
-Ehh, hola Ange. Sí, mucho tiempo.- le respondí y correspondí su abrazo.
-Bienvenida Isabella. Me llamo Angela, pero dime Ange- le sonrió muy amigablemente.
-Bella. Prefiere que le digamos Bella- la interrumpí
-Sí, prefiero Bella. Muchas gracias Ange- trató de sonreirle ¡qué hermosa es! -eh... me harías el favor de borrar la foto que me tomaste por favor- miró atentamente a Ange esperando una respuesta.
-Eh, okey, pero supuestamente es para el diario... así que digamos que nunca te tomé una foto- apretó unos botones en su cámara y borró la foto de Bella.
-Muchas gracias- observó su reloj - bueno, yo me tengo que ir, me quedan solo tres minutos para llegar a tiempo a clases y no quiero llegar tarde en mi primer día- se despidió de la mano y se fue.
-Vaya chica. Me calló bien- me miró- Bueno, yo tambien me voy
- Eh, sí, sí, claro.- salí corriendo, persiguiéndo a Bella y me despedí de la mano de Angela- ¡nos vemos después Ange!
