Fairy Tail © Hiro Mashima
— Pecαdos Cαpitαles —
By: xHinamoriKunx
Pecado Capital I: Lujuria.
La Lujuria es el pecado ocasionado por la excesiva presencia de pensamientos de tipo sexual, además supone pensamientos posesivos hacia otra persona.
ஐ
Realmente no sabía qué hacer en esta situación. ¿Cómo había llegado a eso? Se estaba mirando en el espejo, viendo aquel traje de camarera que traía puesto, pero lo as vergonzoso con orejas de Neko y hasta cola.
¡Ese Fullbuster se había pasado! ¡Maldito Lujurioso!
¿Y porque se menciona aquí a Gray Fullbuster? Pues eso es muy fácil de relatar. Aprovechando la situación "obligo" a la chica a vestirse con aquel lindo, tierno vestido negro y para darle más emoción pues le agrego aquellas orejas negras al igual que la cola.
— ¡G-Gray-sama! — ella se sonrojo violentamente buscando al Fullbuster, que estaba en alguna parte de su habitación.
Aprovechando que el Gremio estaba de Fiesta a lo grande, Gray pudo entrar sin problemas a Fairy Hills para llevar a cabo su "plan".
— ¡Es usted un verdadero pervertido! — dijo en voz alta y completamente avergonzada por vestirse así. — ¡L-Lo tenía bien planeado! ¡Tener preparado un disfraz así!
— Pero aun así te lo pusiste ¿no? — la voz de Gray se escucho en el baño y este cuando salió, estaba vestido a excepción de su camisa mostrando su torso musculoso que le arranco una buena sonrojada a la pobre Loxar. — No es así ¿Juvia? — la miro con algo de sorna y levemente sonrojado mirándola de pies a cabeza sin perder ni un detalle de la hermosa chica que estaba frente a él.
Juvia traía puesto un vestido negro de camarera que le llegaba por arriba de la rodilla, medias negras que llegaban a sus muslos acompañados de unos zapatos del mismo color. Su cabello totalmente suelto y con hermosa ondulación en las puntas, teniendo encima las orejas de gato y la cola tras de ella.
— No creí que fueras una pervertida Juvia-chan. — dio una risita para recargarse en la pared con los brazos cruzados.
— ¿Quién es el pervertido aquí? — dijo la chica abrazándose a sí misma y sin mirarlo.
Gray por su parte se sentó en la cama de la joven para señalarle con dedo que la quería junto a él, cosa que Juvia no dudo en hacer. Se sentó junto a él y recibió una linda caricia en su cabeza como si realmente de un gato de tratara.
— Gray-sama. — olvido por un momento su "enfado" hacia el sonriéndole.
De un movimiento rápido, se coloco encima de ella haciéndola sonrojar. — Trata de decir "Nya". Quiero escucharte. — le sonrio acariciando su mejilla y depositando un dulce beso en ella.
G-Gray-sama se ve tan irresistible hoy ¡Juvia contrólate y trata de, de…!
— N-Nya. — lo dijo de la manera más adorable posible para ver qué pasaba. — ¿Nya? — dijo de nuevo al ver que no había respuesta.
— Te ves tan adorable. — dijo el alquimista con aquella sonrisa lujuriosa. — Tan adorable Juvia-chan.
Juvia no soporto tanta tensión y se separo del joven para levantarse. — B-Basta, esto no está bien, Juvia se irá a dar una vuelta. — se dirigió a la entrada del cuarto, pero aquella voz la detuvo.
— ¿Piensas irte vestida así? — la voz del Fullbuster sonó con algo de molestia.
Juvia sintió los brazos de Gray abrazándola por detrás y se congelo completamente. — ¿Gray-sama?
— No dejare que nadie que no sea yo te vea vestida así. — Gray se atrevió a lamer el lóbulo de su oreja sensualmente arrancándole un suspiro a la joven Loxar.
— G-Gray-sama espere…
— Tranquila… — la cargo y se sentó con ella en su regazo para comenzar a besarla de una manera apasionada y única para pasar a lamer su delicado y cremoso cuello. — J-Juvia esta… — gimió al sentir las manos del Fullbuster encima de sus pechos acariciándolos sutilmente arrancándole suspiros que al parecer poco a poco irán aumentando.
— ¿Pasa algo? — Gray se detuvo y miro la cara sonrojada de la maga de agua. — ¿Quieres parar?
— ¿Eh? No, es solo que… Juvia… — agacho la mirada apenada. — Es la... primera vez de Juvia. — se cubrió los ojos de una manera adorable cautivando al alquimista de cabellos negros.
— Descuida. Seré dulce y lujurioso contigo.
— ¡L-Lujurioso! — exclamo asustada y dio un grito al sentir una de esas poderosas manos bajo su falta tocando tal punto especial provocando un gemido que salió de sus labios que estaban cerca del odio del mago de hielo.
— Yo te amo Juvia y por eso quiero hacerte sentir como una mujer, la única mujer para mi.
— G-Gray-sama. — se quedo impresionada por tales palabras, pero se sintió feliz al saber que Gray la había elegido, al fin. La esperar valió totalmente la pena.
La abrazo mientras con sus dientes fue desabrochando un pequeño botón que había en el pecho de ella mostrando aquel atrevido escote para seguir con su boca quitar esos restos de tela que estorbaban en su camino.
— ¡N-No! —dijo débilmente la chica al como su pecho era siendo devorado por su amado. Se dio cuenta que algo duro comenzaba a sintiese debajo de ella, tanto Gray como ella notaron.
— G-Gray-sama, ya esta… — esas palabras le dieron a entender algo.
La tomo de la cadera y comenzó a frotarla suavemente sobre él con el fin de que sus intimidades se rozaran aun con la fricción de la tela, logrando que ambos suspiraran en los labios del otro por la exquisita sensación.
— ¿Quieres ayudarme? — le dijo con aquella Lujuria pintada en toda su cara, mientras la chica no tuvo más opción que obedecer.
Con lentitud y con toda la pena del mundo se deshizo de los pantalones negros del Fullbuster y sonrojarse al ver algo abultado entre los bóxer de Gray, con su mano lo acaricio suavemente mirando la cara de Gray quien retuvo un suspiro y cerró los ojos mientras llevaba una mano a los cabellos de la joven.
— No te detengas. — imploro mientras sentía que Juvia cumplía su deseo. — N-No detengas tu mano. — se acerco a ella y la besa diciéndole que no parara.
La ropa poco a poco iba desapareciendo con la consecuencia de que aquellas ambas pieles se tocaran y se rozaban con desesperación. La habitación estaba siendo inundada con los gemidos de ambos.
Dio un grito al sentir los dedos de Gray adentrándose en su ser seguido de un ligero movimiento circular que la enloqueció rápidamente abrazando a Gray que estaba ya encima de ella, gimiendo cerca de sus oídos que excitaban mas de lo normal al mago de hielo alquímico.
— Te gusta. — dijo lamiendo su cuello con suavidad. — ¿Estas así por mi Juvia-chan? — noto lo húmeda que estaba y aumento la intensidad de su movimiento.
— ¡S-Si! — se arqueo contra el reclamando los labios masculinos de él. — G-Gray-sama, J-Juvia te ama.
Sintió que ya estaba preparada para el siguiente paso y se coloco bien encima de ella entre sus piernas mientras sintió el pequeño temblor que se manifestaba en el cuerpo femenino. — Tu cuerpo esta tenso… necesitas relajarte Juvia.
Comenzó a adentrarse en ella mientras la joven Loxar enterraba sus uñas en la espalda desnuda del Fullbuster sintiendo que algo dentro de ella se desgarraba dolorosamente. Aquellos minutos pasaron para que las cosas cambiaran de ser dolorosas a placenteras.
Aquel delicioso vaivén de caderas de volvió un tormento y una adicción momentánea en ambos que no dejaban de dejar salir suspiros de sus bocas, llamándose el uno al otro con desesperación.
— J-Juvia trata de decir el "Nya" que te enseñe…
— N-Nyaaa. Nya… N-Nyaa. — comenzó a gemir Juvia como un Neko, con tal de complacer a su amado Fullbuster.
Sintió una fuerte opresión en su estomago, algo que muy pronto iba a estallar dentro de ella. — ¡Nyaaaa! — dio el grito para que ambos tocaran el cielo y hasta el mismo infierno juntos, para que el joven cayera encima de ella, ambos respirando con dificultad.
Gray le acaricio la mejilla y la miro. — ¿Estás bien? Lamento si fui algo brusco.
— Juvia está feliz. — le sonrio tiernamente dándole un corto beso. — Juvia te ama Gray-sama.
— Gray también te ama Juvia-sama. — le sonrio y se acomodo encima de ella de nuevo.
— ¿Gray-sama?
— Juvia-sama ¿lista para la segunda ronda? — la miro con lujuria y con diversión al ver la cara cómicamente espantada de la joven.
— ¡GRAY-SAMA, ERES UN COMPLETO PERVERTIDO!
Al parecer la lujuria no dejara en paz en un buen rato a esos dos pillos. La Lujuria si que te obliga a hacer este tipo de cosas con tal de complacer a las dos personas, siempre habrá alguna que lleva a una objeción, pero al final también cae en las redes de la maldita lujuria.
Continuara.
Próximo Pecado Capital: Gula.