Crónicas del viaje de un Fan NH al mundo Shinobi: Shippuden

Prologo: Regreso a la aldea: El nuevo equipo esta listo

Pensamientos:

Toda meta empieza por un sueño, todo sueño empieza por un deseo, todo deseo aparece con las metas que cumplimos. Hace dos años, algo que parecía un sueño sucedió, frente a mi aparecieron Hagoromo y Hamura Otsutsuki, quienes creí que solo eran personajes ficticios. Me mostraron sus habilidades y su preocupación por el desenlacé que tuvo su mundo. Deseaban que tuviera uno mejor y me escogieron a mí, de entre muchos otros. Acepte su deseo y me embarque a una aventura sin precedentes. Por casi 13 años estuve dentro del mundo Shinobi, hice amigos, aliados, enemigos. Aprendí mucho sobre mi mismo, sobre los demás, incluso encontré el amor de mi vida y adopte a una pequeña como mi hija. Pero la historia que yo creía conocer tuvo un gran cambio y me di cuenta que debía prepararme para el futuro. Así que regrese a mi mundo para entrenarme y prepararme. Pero también me percate, que este viaje que había empezado solo, debía terminarlo en compañía de gente de confianza. Finalmente mi entrenamiento termino y estoy listo para regresar al mundo shinobi. Esta vez, voy de la mano de gente de confianza. Nuestro objetivo, protegerlos a todos de un final trágico, pero lo mas importante, que nuestra pareja favorita, Naruto y Hinata, tengan la historia y el final mas increíble de todos. Y esta, es la historia de como lo logramos…

En un departamento, se apreciaban algunos cuadros de pinturas de paisajes, fotografías familiares en lo que cabe en una residencia normal. Pero sobre una pared, reposaba una espada con una empuñadura dorada con un grabado de dragón. Sobre la espada, estaba la insignia del Clan Dragón y dos varitas de incienso como una ofrenda. En el resto de la sala, se encontraba una pantalla mostrando las noticias locales mientras en la pequeña cocina se veía una tostadora encendida y una pequeña cafetera con la bebida lista. En eso, llega un sujeto de altura normal que parecía arreglar sus ropas. Usaba un pantalón de mezclilla azul oscuro, una camisa negra con dos franjas rojas verticales que cruzaban el lado derecho de su pecho. Llevaba una capa doblada en sus manos, la cual sacudía un poco y le quitaba toda la pelusa. Coloco la capa en la sala y luego fue por su desayuno de pan y café y se dirigió a su comedor. Tomo el control remoto del televisor y escucho las noticias.

… y en otras noticias, otro avistamiento del sujeto que hace unas semanas, detuvo un grupo criminal que se dedicaba al trato de personas y robo armado – hablo un conductor del noticiero – con esto, ya van más de 10 avistamientos de este individuo que se dedica a detener criminales

Las autoridades locales no aprueban el anonimato de este justiciero, aunque los crímenes en varias ciudades han disminuido en casi un 90% – hablo una mujer al lado del conductor – es por eso que la gente, sobre todo varias familias que fueron ayudadas por este individuo, lo llaman el "Héroe encapuchado"…

— ¡Caballero! – el sujeto en la sala grito con frustración – siempre que los salvo les digo que soy un caballero. Sí que son crueles

El sujeto lloraba en la mesa con lágrimas anime mientras bajaba el volumen de la pantalla.

— Bueno, al menos no hay más problemas en el mundo – el chico vio en la pantalla a una niña de cabello castaño que saludaba a la cámara con una sonrisa mientras decía: "gracias señor héroe" – Kanna… Yugito… ya quiero volver con ustedes

En eso, el timbre del departamento toco. El joven se dirigió a la puerta para abrir. Al abrir la puerta, una gran maleta cayo en su pecho y lo tiro al piso.

— ¡Por fin, ya llego el día! – una chica entro al departamento con una mochila en sus manos - ¡Estoy tan ansiosa!

— Qué bueno que llegaste Ela…

— Ya puedes llamarme por el nombre que usare en nuestro viaje. La hermosa y poderosa Riki Uzumaki

El chico se levantó para ver a la recién llegada. Era una chica de altura promedio. Usaba unos jeans de mezclilla semi claros, zapatillas negras y una blusa blanca a rayas debajo de una chaqueta negra de mezclilla. Su cabello era rojo y largo y sus ojos detonaban un destello marrón.

— Me da gusto que llegaras – dijo el chico con tranquilidad poniendo la maleta de la chica en la sala - ¿preparaste todo?

— Por supuesto, estuve toda la noche practicando mis jutsus de sellado para guardar mis cosas

— Pero, ¿Por qué no sellaste también esta maleta

— Es que… está llena de pergaminos

El chico abrió la maleta y vio un montón de pergaminos de sellado con nombres de todas sus cosas. El pobre vio a la chica reír nerviosa.

— Y dime, ¿El equipo no ha llegado?

— Aún no. Eres la primera en llegar

— Ya quiero conocerlos. Dijiste que eran unos chicos increíbles. Deben ser igual de maduros y atentos como tu Oziel

— Si claro

El pobre joven rio con nervios mientras veía a su amiga seguir hablando de la emoción que la invadía. Además, empezó a recordar cómo había conocido a su singular amiga, que le brindó apoyo en el pasado.

Flashback no Jutsu – Hace dos años y medio

Un día caótico más en el Hospital General, las urgencias abarrotadas de personas chillando que sus afecciones eran más urgentes que otras, cuando en realidad solo deseaban ser atendidos lo más rápido posible e irse a sus hogares, no teniendo paciencia para ir al Consultorio Externo atropellaban aquellos que si requerían estar en la espera de atención en Urgencias. Otras personan por su parte se lamentaban por el estado deplorable en el que sus familiares o conocidos debían enfrentar por sus patologías, mientras otros con maldad en su corazón solo tenían criticas venenosas y destructivas hacia el personal de blanco que muchas veces debían convertirse en máquinas para poder abastecer la demanda de usuarios del sistema de salud tan decadente. O al menos así pensaba Ela Genez, una recién llegada de una nación distante quien había llegado al prestigioso Hospital General para usufructuar su beca en Posgrado de Pediatría como parte de su programa de capacitación para Atención Primaria de Salud.

Ataviada con su uniforme quirúrgico (porque le daba pereza venir como Top Model, al contrario de otras colegas suyas) y su larga bata blanca, por el cual aborrecía usarla porque de lo torpe que era se atoraba en todas partes. Maldita bata blanca.

— Si fuera por mi usaría solo la chomba… – refunfuñaba la pelirroja de larga cabellera tomando su jugo de durazno mientras mordisqueaba un muffin de chocolate – extraño la chipa

La chica lloraba internamente mientras se disponía a regresar a la Urgencia Pediátrica cuando una interesante charla le llamó la atención.

— No me explico porque lo padece, sus estudios complementarios han arrojado resultados dentro de los valores normales… y por eso creí que era algo neurológico… – Ela reconoció al Dr. Amarilla, un prestigioso Traumatólogo quien platicaba con el afamado Dr. Ruiz Díaz, uno de los poco Neurocirujanos que prestaba servicio en el Hospital General

— Lo lamento amigo mío, pero los resultados de la Resonancia no arrojan datos de valores impresionables, están más normales que mi esposa… y eso es decir mucho…

Ela se puso a seguirlos, intentando sutilmente averiguar el nombre del paciente mencionado. Esa charla de ambos profesionales le había sonado muy familiar, como si lo hubiera vivido previamente. Y era imposible ya que no estaba ni 2 meses viviendo en la ciudad, era una recién llegada. Saludando a una de sus nuevas amigas, la Jefa del departamento de Enfermeras del Pabellón de Internados, quien solo levantó una ceja ante la actitud "ninja" de Ela al seguir a los dos doctores cuando la pelirroja se detuvo bruscamente al ver que ambos ingresaron en el Consultorio del Dr. Ruiz Díaz.

— ¡Me lleva! – susurró enfurecida, buscando con sus ojos marrones algún hueco por dónde meterse y continuar su acecho hasta notar la llegada de su colega de Posgrado, quien justamente estaba a punto de ingresar en el Consultorio del Neurocirujano – ¡Cheli! Psss ¡Cheli! ¡Aquí!

La mencionada Cheli Vallejos, una hermosa castaña de grande sonrisa y unas gafas modernas se paralizo de shock viendo a una alterada Ela quien intentaba con señas que la siguiera. Frunciendo el ceño sabiendo que si no seguía el juego de la pelirroja se tendría que atener a las consecuencias, se acercó con la desconfianza brillando en sus ojos oscuros.

— ¿Ela? ¿En qué problemas te has metido otra vez? Ni fueron 48 horas que te pillaron...

— ¡Nada que ver Cheli! ¡Te juro que fui incriminada…! ¡Y cuando me entere…! ¡Argh!

Ela calló bruscamente tapándose la boca con ambas manos para luego recordar el motivo principal por parar a su amiga. Pero ya fue tardío su reacción.

— Sabes que te adoro Ela. Pero hay veces que prefería no haberte conocido – suspiró Cheli ante el escándalo provocado por la pelirroja, haciendo que todos giraran a ver el incidente, incluso con el Dr. Ruiz Díaz saliendo a ver quién ocasionó tanto alboroto fuera de su consultorio

— ¿Qué está pasando aquí? – cuando el canoso galeno reconoció a una de sus internas sonrió afablemente – Doctorcita, estaba a tu espera

— Ya voy Dr. Ruiz Díaz. Me voy Ela, ya no causes destrozos ni escándalos ¿Puedes?

— Espera – chilló en voz baja Ela deteniendo de la manga a su amiga – necesito un súper-híper-archí-mega-ultra favor, chiquito y diminuto ¿sipa? – Cheli entrecerró sus ojos afilando su mirada oscura hacia su amiga y confidente – averigua el nombre del paciente que el Dr. Amarilla llevo para hacer la interconsulta con el viejo cascarrabias ¿sí?

— Deja de ser metiche, tenías que estar en Urgencias Pediátricas ahora. La Gill te va a destrozar si no apareces…

— Por favor Chelita de mi corazón, ternura de mi vida, hermana de mi alma… – Ela iba a continuar pero Cheli le calló con un dedo en sus labios – ¿Eso es un sí?

— me la debes… una grande Ela…

— ¡Eres la mejor! – chilló en voz ultra baja, haciendo que la castaña sonriera con soberbia

— Lo sé – Cheli con su mirada "Soy cool y lo sabes" incluso con un brillo en su amplia sonrisa

— Y tu modestia me encandila hasta los huesos – Ela refunfuñó por la falta de humildad de su mejor amiga

Horas después, Ela salía del hospital llevando su ropa casual, vestida con una remera con estampa de Cirque de Soleil gris con verde militar, un jeans básico y zapatillas bajas, llevaba una bufanda verde sobre su chaqueta color azul jean con su larga cabellera escarlata suelta por su espalda. Su mochila táctica militar en un hombro y los datos de Oziel D. Mario en un papel con la otra mano, con su I phone 7 pidió a Siri trazar la ruta para llegar a la dirección de dicho paciente.

Flashback Fin

Oziel se encontraba sellando todos los pergaminos de la chica mientras ella tomaba un poco de café y revisaba algunos de los libros del joven. En eso, la puerta vuelve a tocar.

— ¡Ya voy! – Oziel se acercó a la puerta, pero antes de poder abrirla, la puerta se abrió de golpe con una patada, aplastando al joven

— ¡Boom baby! ¡Ya llego por quien lloraban! – la voz de un joven se escuchó en la entrada

— No, no está bien – hablo otra voz masculina – te falto más energía mi amigo

— Ustedes deben ser los otros chicos que… ¡¿Tu?!

— ¡¿Pero qué haces aquí tu Fred?! – respondió un chico de lentes

— Valla, ¿Qué tenemos aquí? – hablo el sujeto que pateo la puerta

El primero en reaccionar fue un joven de piel morena que usaba lentes. Llevaba una camisa blanca de botones y un pantalón de mezclilla azul oscuro con zapatos negros. El otro sujeto, tenía el cabello negro con ojos cafés. Era un poco más alto que todos los presentes y usaba una camisa de botones azul oscura y un pantalón mezclilla claro. Llevaba tenis deportivos negros con blanco. Al momento de ver a la chica, se acercó a ella con un ramo de rosas que apareció de la nada.

— Hola hermosa doncella de cabellos de fuego, me llamo Oscar, primor – dijo el chico de camisa azul – un gusto conocerte

— Antes de que continúes, no es peli roja natural. Es obvio que se pintó el cabello

— ¡Eso no es cierto Javier!

— Y el ticket en tu bolsillo – el mencionado de lentes señalo un pequeño papelito en el bolsillo de la chica

— Es que… estaban a mitad de precio… ¡Digo, es natural! – la chica solo se cubría el rostro de la vergüenza

— Bueno, igual eres bonita – dijo el moreno identificado como Oscar - ¿Y dónde está nuestro anfitrión?

— Estoy… aquí… - Oziel salió detrás de la puerta con el golpe en su rostro – eso fue cruel

— Pero ¿Qué hacías ahí? Debiste recibirnos pero ya – dijo Oscar con desaprobación – debes ser más responsable

— … no tienes a tu suerte amigo – Oziel se recuperó del impacto mirando como Javier y Ela chocaban miradas – veo que es la primera vez que se ven en persona. Aunque debí mencionar quienes eran los demás del grupo

— ¡¿Por qué no lo dijiste?! – gritaron Javier y Ela hacia Oziel

— Oigan, dejen al tipo. Al menos ya estamos aquí – dijo Oscar con nervios – fue bueno, porque ya había pateado tres puertas antes de esta y me equivoque

— Y es por eso que yo era el del mapa – dijo Javier con seriedad

— Creo que la pateaste con mucha profesionalidad, ¿Acaso eres un bombero sexy como las series de televisión?

— Bueno, podría ser sexy por ti nena. Pero sino, por ti baby, seria Batman…

— ¡Oigan, concéntrense! – grito Oziel en medio de todos deteniendo el coqueteo de Oscar – ahora si me permiten, les explicare porque no los presente antes

— Pues rápido amigo, que el tiempo es oro – hablo Javier lanzándose al sillón para ponerse cómodo y sacar unas palomitas de quien sabe dónde – cuéntanos tu historia

— Bien – Oziel suspiro con pesar mientras se acomodaba en la sala junto a los demás – la razón de porque no los presente antes, es para que se concentraran en sus entrenamientos. Todos y cada uno llevo un pequeño entrenamiento durante dos años, todo para este día. Debían preparar sus cuerpos, no como yo que tuve un problema por no estar preparado

— Sobre eso, aquí está la nueva dosis – Javier saco algo de entre sus cosas

Oziel recibió con una sonrisa triste, un frasco con unas pastillas de color rojas. El joven de lentes recordó como había conocido a su amigo, el cual había recurrido a su ayuda por su deplorable estado.

Flashback

Javier salía de la universidad donde estudiaba con algo de cansancio por todo el trabajo que había hecho. Lo único que quería era ir a casa a descansar, pero como había terminado sus sesiones una hora antes, no sabía en que usar su tiempo. En eso, ve a un joven de ropas casuales caminando por los alrededores de la universidad con cierta preocupación y lo recordó. En la hora del almuerzo también había estado caminando por los alrededores, como si buscara a alguien. Cuando el joven de lentes se disponía a irse, vio en su brazo derecho una especie de tatuaje con la forma de un dragón y por alguna extraña razón sintió que había visto esa marca antes.

— Oye, disculpa amigo – Javier se acercó al sujeto que se mostraba un poco nervioso

— Ah hola, un gusto – saludo el desconocido con rapidez – perdona pero debo buscar a alguien

— Si es de esta universidad, puedo ayudarte

— Claro, es un tipo que quiero conocer

De seguro es gay – pensó Javier con burla para después seguir hablando – ¿sabes cómo se llama ese a quien buscas?

— Si, se llama Javier Pozos – al escuchar esas palabras, el mencionado se quedó petrificado

— ¿Y para que lo buscas con exactitud?

— Necesito su opinión. Es sobre unas cosas que escribió en sus fanfics…

— ¿Leíste sus fanfics? – Javier miro al chico con detalle y pudo notar que no era alguien malo – yo soy al que buscas

— ¡¿En serio?! – el chico se arrodillo en el suelo como si se sintiera más relajado – gracias al cielo. Llevo buscándote todo el día

— ¿Y para que o que me buscabas?

— Sígueme y te lo diré – dijo el chico con tranquilidad – por cierto, me llamo Oziel D. Mario, un gusto

Unos minutos después, ambos estaban en una cafetería del campus compartiendo un snack. Oziel le había entregado unas hojas donde había escrito sus anécdotas en el mundo shinobi, las cuales leía Javier. Al terminar, tenía una cara de asombro.

— Ahora lo recuerdo, ya había leído este proyecto tuyo. Eso significa que eres Emperor92

— Así es – dijo Oziel sin poder ocultar su emoción – entonces, ¿Qué te parece?

— Pues, es interesante lo que escribiste, aunque a mi gusto yo hubiera sido más liberal con mis deseos. No sé, hacer un harem o volver todo ese mundo patas arriba

En un universo paralelo, un sujeto del mismo aspecto de Javier estornudaba mientras se levantaba un poco sudoroso y desnudo de su cama, al lado de su novia de ojos perla y cabellera verde y corta. Oziel tomo las hojas y saco otras donde se veía el nombre de Javier.

— Bueno, yo leí tus escritos y tienes una gran creatividad para crear técnicas o para inventar buenas tramas. Por eso te busque

— Si querías un autógrafo, no era necesario que me acoses amigo. No soy Gay ni nada…

— Yo no soy gay. ¿No viste que tengo una novia?

— Pero viejo, eso es una simple historia ficticia

— No, no lo es… - en eso, Oziel revelo su Rinnegan para después activar su Modo Sabio con sus ojos de dragón – es totalmente real

Con esa prueba, Javier comprobó que lo escrito por el sujeto frente a él era totalmente real. Después de conversar un poco de la petición de Oziel, Javier medito todo lo dicho un momento.

— Entonces, buscas un poco de ayuda para tu regreso dentro de dos años

— Así es. Cuando vi tus escritos, me di cuenta que me faltaba algo de creatividad. Y necesito de la tuya…

— Bueno, dejando eso de lado, respóndeme una cosa – Javier miro con seriedad al sujeto frente a el - ¿Tu y Yugito tuvieron…?

— ¡No viejo! – Oziel se alarmo ante las palabras del tipo frente a él – solo besos, caricias… no queríamos…

— Virgen tenías que ser – dijo Javier con burla

— No dije que fuera virgen, ni digo que Yugito lo sea. Es solo que…

Javier se burlaba de las pobres reacciones del chico frente a él. Pero en eso, ve como Oziel empieza a toser con fuerza, escupiendo un poco de sangre en el último tosido, cosa que lo alarmo.

— Oye, ¿Qué tienes? – Javier vio como Oziel respiraba un poco agitado

— No es nada – el joven se recompuso mientras aplicaba chakra en su pecho – esta es la otra razón por la que te buscaba. Alguien me dijo que estudiabas medicina. Necesito un doctor que me ayude. Ya tengo una amiga que me ayuda, pero es mejor tener dos amigos de confianza

— Bueno, que me llames amigo ya es algo bueno – Javier tomo las copias de sus escritos y las guardo en su mochila – bien, te ayudare. Solo dime que necesitas

— Eso me gusta compañero

Después de eso, Oziel empezó a explicarle a Javier todo lo relacionado a sus planes y el cómo empezarían el entrenamiento del estudiante de medicina.

Flashback Fin

Oziel seguía explicando sobre el entrenamiento que habían tomado los demás mientras tomaba una de las pastillas que le dio Javier. En eso, unos clones de Oziel aparecen en un destello rojo con unas cajas en sus manos muy grandes.

— Bien, ya están aquí – hablo Oziel con tranquilidad revisando las cajas – sus armas para la misión

— ¡Que genial! – los tres invitados derribaron al sujeto para ver sus armas

— Es justo como las querías – dijo Ela mirando las de su caja

— No está nada mal – Javier miro su caja con admiración

— ¡Oh sí! ¡Simplemente genial! – dijo Oscar mirando su arma

— Por cierto Oziel, ¿Qué pasara con nuestros contratos? – hablo Ela con mucha emoción contenida

— Bueno… - Oziel se levantaba del piso incapacitado por ser aplastado por sus amigos – los contratos no serán posibles, ya que están en el plano shinobi. Los buscaremos una vez lleguemos allá

— Bueno, eso me parece bien – Oscar se recostó en uno de los sillones con tranquilidad – yo ya quiero irme

— A propósito Oscar, quería preguntarte algo – dijo Ela con curiosidad

— Adelante nena, tu pregunta

— Entiendo que Javier y yo estamos aquí por ayudar a Oziel con nuestros conocimientos de medicina y creatividad…

— No olvides mi perversión – dijo Javier de forma burlona

— Si claro. Mi pregunta es, ¿Qué aportas al grupo? ¿Cómo es que Oziel te encontró?

— Bueno… - Oziel se mostró nervioso mientras Oscar contenía la risa – el caso de Oscar fue diferente

Flashback

Oscar era un sujeto que tenía muchas metas y aspiraciones en la vida. Había estudiado mucho y trabajado en diferentes opciones. Entre ellas, había algo que mantuvo de joven. Ser un héroe o apoyo al indefenso. Y aunque no tenía súper poderes, había logrado convertirse en bombero, un pequeño sueño desde que era un niño. Una noche en su labor de bombero, se encontraba junto a su equipo tratando de controlar un gran incendio que había tomado el control de una zona de departamentos con varias familias. Hasta el momento no se veía ninguna familia afectada.

— ¿Falta alguien de sacar? – hablo un hombre, con los rasgos de ser el jefe

— Parece que no señor – Oscar brindaba apoyo a las familias que habían sido evacuadas – creo que solo queda apagar el fuego…

— ¡Ayúdenos! – en eso, el grito de una mujer se escucho

Todos vieron como dese un balcón, una mujer y su niño se asomaban pidiendo apoyo. Pero una explosión se escuchó en el edificio, alertando que nadie podría entrar.

— ¡Demonios! – Oscar tomo la manguera junto con otros de sus compañeros - ¡Debemos apagar rápido este fuego!

— No podemos pasar, si otra explosión ocurre…

La explicación del compañero de Oscar se interrumpió por el sonido de otra explosión que termino provocando un derrumbe en el edificio. Vieron hacia el balcón con preocupación, pero la familia no estaba, sino que se encontraba ya en el suelo, a salvo. Oscar se sorprendió al ver eso, pero sintió a alguien cerca del lugar. Vio hacia el techo del edificio y descubrió la silueta de alguien usando una capucha negra, pero parte de esta estaba quemada, revelando sus brazos, en especial el derecho, el cual mostraba un tatuaje con la forma de dragón. La silueta se percató que era observado y desapareció en un destello rojo, sorprendiendo a Oscar, pero intrigado porque creía haber visto esa marca en algún lado. Al día siguiente, por la mañana, el joven bombero realizaba una caminata matutina por el parque de su ciudad como era costumbre suya. Llego a un gran campo de futbol que estaba solo, pero se dio cuenta que había alguien en medio de la cancha. Se acercó a verlo y descubrió con sorpresa que en el suelo había una pequeña maleta con ropa, y una capucha negra, similar a la que vio en el incendio de anoche. Se pudo imaginar que el encapuchado había sido el culpable del acto, pero vio al sujeto que parecía ser el dueño de esa capa. Se encontraba con los ojos cerrados, entrenando con lo que parecía ser una espada real. El sujeto daba cortes y estocadas con mucha habilidad, cosa que lo dejo sorprendido. Este termino con su rutina y abrió sus ojos, pero Oscar estaba en frente de él.

— ¡¿Qué cara…?! – el sujeto se asustó por la presencia de Oscar y cayó de espaldas en el suelo

— Valla, sí que eres un miedoso – dijo Oscar con burla - ¿Eres el tipo de anoche no?

— No sé de qué hablas – Oziel se levantó con nervios mientras revisaba sus cosas – creo que me confundes mi amigo…

— En tu brazo derecho tienes un tatuaje con forma de dragón – Oscar señalo el brazo del sujeto, donde estaba la marca - ¿Eres algún piro maníaco?

— Claro que no – el sujeto se mostró nervioso ante las palabras de Oscar – solo estaba ayudando

— ¿Cómo estabas ayudando?

— Bueno…

— No es que me importe – Oscar ignoro el asunto, decepcionando al sujeto – por cierto, esa espada se ve genial…

— ¡No la toques! – Oziel aparto la espada de su camino – no puedes tocarla. O sino algo te puede pasar

— ¿De dónde me suena eso? En fin, debes venir conmigo, pues eres sospechoso de causar ese incendio

— ¡¿Qué?! Pero te dije que yo estaba ayudando…

En eso, una explosión se escuchó cerca del lugar. Ambos sujetos corrieron a investigar. Llegaron a una tienda de la comunidad y vieron que alguien lanzaba bombas molotov mientras su mirada mostraba locura.

— Ese sujeto está enfermo – Oscar miraba al tipo con enojo

— Creo que, debemos llamar a la policía – dijo el chico de la espada detrás de él

— Al diablo con la policía, yo lo atrapo – Oscar corrió a capturar al pirómano - ¡Oye, detente!

El sujeto de las bombas empezó a correr, mientras era perseguido por Oscar. El joven bombero lo persiguió por las calles de la comunidad, cruzando algunas calles y avenidas concurridas. Llegaron a un edificio en mal estado y el pirómano entro de golpe. Oscar entro siguiéndolo y al final le dio alcance en el techo, pero al llegar, vio que el sujeto encendía tres bombas más, mientras las deslizaba por sus dedos, para que cayeran a la calle. Oscar se asustó, pues había mucha gente abajo y podría ocurrir una tragedia.

— Oye, tranquilo – dijo Oscar caminando lentamente hacia el sujeto – baja de ese borde y deja esas bombas

— Oblígame – el sujeto se preparaba para soltar las bombas en sus manos – será un lindo fuego el que se haga allá abajo

— No te atrevas…

— ¡Pues si lo hago! – el sujeto soltó las bombas, asustando a Oscar

El chico corrió para detener al tipo, pero ya era muy tarde. Cuando vio por el borde, se preparaba para alertar a la gente, pero no había fuego, ni ningún rastro de las bombas. En eso, escucho un golpe rápido detrás de él y al mirar, descubrió al sujeto con la espada, que tenía al pirómano totalmente sometido, pues estaba en el suelo totalmente noqueado mientras en las manos del sujeto se encontraban las bombas molotov ya apagadas.

— Por cierto, no me presente – dijo el chico mostrando el tatuaje en su brazo – me llamo Oziel D. Mario, un gusto conocerte amigo

Unas horas después, ya anocheciendo, los dos jóvenes se encontraban en un bar. Oziel solo comía con un poco de nervios mientras frente suyo Oscar tomaba shots de tequila mientras reía con muchos ánimos.

— … y luego, él dijo: "hay, hay una serpiente, ¡en mi bota!" – con esas palabras, Oscar se echó a reír mientras Oziel solo lo seguía con una risita nerviosa

— Sí, es gracioso. Pero, ¿Cómo terminamos aquí?

— Bueno, es como te dije – Oscar tomo otro trago a su shot y luego miro al chico con burla – "si no lo controlas, no lo consumas"

— ¿eh? – Oziel no parecía entender las risas que Oscar soltaba con sus propis bromas

— Pero ya en serio – Oscar se apoyó en la mesa con sus codos – Oziel, ¿En serio crees lo que me contaste sobre tu viaje al mundo shinobi?

— Te digo que es real. De ahí obtuve mi espada, la marca dragón y las habilidades con las que detuve al pirómano

— Solo fue suerte – dijo Oscar tratando de llenar otro shot – si es real, demando una prueba más clara y realista

— Bien – Oziel suspira con resignación mientras pone su mano en la frente de Oscar

— ¡Oye, sin mariconadas!

Antes de que Oscar se aparte, ve como la mano de Oziel empieza a desprender un brillo verde, seguido de ver como sus ojos tienen un Rinnegan. Poco a poco, Oscar siente un fuerte dolor en su cabeza, el cual es aliviado poco a poco y en un parpadeo, está totalmente sobrio.

— Un momento – Oscar vio como Oziel apartaba su mano, ´pero miro de nuevo el tatuaje de su brazo derecho – eres el tipo que escribió ese fic en internet, sobre las crónicas de su viaje

— Sí, soy Emperor92 – hablo el chico con duda – pero debo irme. Solo vine de paso por la ciudad y…

— ¡Eso no mi amigo! – Oscar se levantó y apunto con su dedo al joven – no considero justo que tú puedas ir al mundo shinobi, algo que yo he deseado con mucho esfuerzo

— Pero…

— Y antes de que intentes escapar, solo quiero que sepas algo – Oscar saco su celular, donde estaba la grabación de Oziel deteniendo al pirómano

— ¡¿Pero cómo…?!

— Había puesto mi celular en un bolsillo en mi pecho para grabar al loco, pero termine grabando como entras a la acción. Y al menos que quieras que este video se vuelva la sensación del momento, debes llevarme a ese mundo

— Pero…

— Además, por lo que vi y leí, necesitas apoyo y yo soy muy fuerte y hábil aunque no lo parezca. Me necesitas y lo sabes

Oziel solo miro con incredulidad y un poco de satisfacción al sujeto que había encontrado en sus viajes. Era el pilar de fuerza que necesitaba, pero sentía que había sido descuidado con el uso de sus poderes.

Flashback Fin

Oziel era zarandeado por Ela, que parecía estar molesta con el chico.

— ¡¿Dejaste que te descubrieran y luego que te chantajearan?! – gritaba Ela con enojo

— Por eso te advertí sobre hacer de héroe – dijo Javier que se reía de su compañero – yo solo use mis habilidades para divertirme un poco

— Bueno, si deje que me chantajeara – Oziel se recompuso del zarandeo y respiro con tranquilidad – pero fue para bien. Oscar proporcionara mucho apoyo al equipo

— Por supuesto, después de todo me entrene para este día – hablo Oscar con superioridad

— De eso no hay duda, pero creí que habíamos sido elegidos por nuestras visiones – dijo Ela con seriedad – aun no puedo dejar de pensar en la mía

— Eso es algo normal, pero no deben preocuparse – dijo Oziel levantándose para tomar su espada – cuando Ela me lo conto, supe que debía buscar a quienes las compartían y solo tú y Javier las tuvieron

Ela recordó como había hablado por primera vez con Oziel y le conto sobre una visión que tuvo en sueños.

Flashback

Ela llego al departamento donde viva el paciente que habían comentado sus superiores, el cual afirmaban que era muy extraño. Toco a su puerta y alguien la abrió, siendo el paciente, que parecía tener una mirada cansada, pero estaba bien arreglado, pues llevaba una camisa de botones gris y pantalón de vestir.

— ¿Hola? – el joven vio extrañado a la peli roja en su puerta

— Disculpa, ¿Eres Oziel D. Mario? – dijo la chica revisando el papel con la información - ¿Paciente del Dr. Amarilla?

— Eh si, ese soy yo – hablo Oziel con duda - ¿Puedo ayudarte?

— De hecho, vine yo a ayudarte. ¿Puedo pasar?

— Claro – Oziel abrió la puerta y le permitió a la chica pasar – me disculpo por el desorden, no esperaba visitas

La chica entro, pero no vio ningún desorden extraordinario ni nada exagerado. Lo único que aprecio, fueron algunos libros de medicina, al igual que otros de escuela y algunos medicamentos. El joven se sentó en la sala y la chica lo imito. Algo que noto Ela, fue una espada que estaba colgando de una pared, con una marca de dragón sobre ella.

— ¿El Dr. Amarilla te envió?

— No, vine por mi cuenta – dijo la chica mirando los medicamentos en la mesa – veo que sientes mucho dolor. ¿Te ocurrió algo?

— Bueno, es difícil de explicar. Solo diré que mi cuerpo está muy adolorido. Creo que es por el viaje que realice

— ¿A dónde fuiste? ¿Ocurrió algún accidente durante ese viaje?

— Bueno, si te lo contara, no me lo creerías

— Pues tienes suerte. Si estoy aquí, es porque algo en ti me dijo que viniera y quiero escuchar tu historia

Oziel dudo un poco, pero vio que las palabras de la chica eran sinceras. Después de unas horas, el joven le conto todas sus vivencias en el mundo shinobi, además de explicar cómo empezó a sentir dolores en todo su cuerpo, como si este no lograra recuperarse.

— Creo que, esto es debido a mi fisiología natural – hablo Oziel con seriedad – yo no nací con las cualidades de un ninja, por eso…

— Cuando recibiste tus poderes, te fuiste acostumbrando – continuo explicando Ela – pero llego un momento en que el cuerpo no soporto la carga y empezó a agotarse constantemente. Eso explica tus dolores físicos y porque las pruebas no pueden explicar la razón

— Si, básicamente eso es – Oziel sonrió ante la afirmación de la chica – eres muy inteligente

— Bueno, por algo llegue hasta aquí. Pero dime, ¿Qué has intentado hacer para aliviar el dolor?

— Utilizo mis poderes, pero no son suficientes. Debes pensar que estoy loco por lo que te conté…

— Al contrario – la chica levanto su celular y revelo un dibujo NaruHina en la pantalla – yo te creo. Porque soy igual de fanática que tú. Además, siento que ya te había visto

— ¿En serio?

— Sí, pero en un sueño – la chica se puso seria mientras se cruzaba de brazos – cuando llegue a este país, empecé a tener sueños muy extraños

— ¿Y que viste en tus sueños? – Oziel también se puso serio al escuchar las palabras de la chica

— En mi sueño, veo un gran campo de batalla, similar al de la Cuarta Guerra Shinobi. Delante de todos, veo la silueta de una chica kitsune y a su lado otras siluetas que empuñan armas. Y en frente ellos, un sujeto con una espada similar a la tuya, pero en su brazo tenía un extraño tatuaje…

— Yo lo llamo marca – Oziel levanto su brazo mostrando la marca del Clan Dragón – así que, tu eres la chica kitsune

— ¿De qué hablas?

— Una semana después de que regrese del mundo Shinobi, empecé a tener sueños. Donde veía a un grupo de sujetos similares a mí, con habilidades muy grandes. Los cuales me ayudaban con la amenaza del mundo ninja. Hable con Hagoromo y me dijo que estas eran premoniciones del futuro

— Entonces… yo debo acompañarte – la chica no pudo contener la emoción al escuchar eso - ¡Voy a ir al mundo Shinobi!

— Bueno, me gustaría llevarte. Pero no me siento aun listo y tengo este dolor…

— ¡Yo te ayudare! – la chica poso sus manos en los hombros del chico mientras lo mantenía sentado en el sillón de su sala – déjame demostrarte que soy una hábil doctora. Así le probare a todos que no soy una simple novata

— Yo no creo que seas eso. Después de todo, viniste aquí movida por tu curiosidad y preocupación y aprecio eso. Bien, te ayudare con tu entrenamiento y tú me ayudaras a mí. Y dentro de dos años, iremos al mundo shinobi

— ¡Si, voy a ser una hermosa ninja, de veras, en serio! – la chica imitaba las frases de sus personajes favoritos con emoción – además, quiero ver en persona a Naruto y Hinata. Por lo que me dijiste, lograste que se hicieran novios

— Bueno, fue algo difícil en un principio…

— Pero yo hare que sean más que eso cuando vallamos a ese mundo – dijo la chica con una mirada llena de determinación - ¡Su amor será algo sin precedentes!

Oziel solo pudo reír nervioso ante las reacciones de la chica, pero se alegraba de tener una nueva amiga y compañera para su misión en el futuro.

Flashback Fin

Todos se pusieron serios al pensar en sus respectivas visiones.

— La tuya fue sobre la guerra en su máximo esplendor – dijo Javier – la mía fue sobre los cambios en el futuro. Vi algunas batallas con los Akatsukis muy diferentes a como ocurren en la historia original

— Entonces, la peor visión la tuve yo – dijo Oscar que se encontraba recostado con una mirada seria

— ¿Qué viste tú?

— Vi el Tsukoyomi Infinito, en su máximo esplendor

— Esto solo es prueba clara de que lo que hice fue para mal – Oziel apretaba los puños con enojo – no supe prever eso

— No podías saberlo. El futuro cambia, con cada minúscula acción – dijo Ela tratando de hacer sentir bien a su amigo – pero ahora que sabemos un poco de lo que ocurría, podremos enfrentarlo

— Esa es la idea. Pero una vez que estemos allá, planearemos todo – Oziel se dirigió a donde estaba su espada para hacer una pequeña reverencia y tomarla – llego el momento

— ¡Que emoción! – dijo Ela mientras movía sus manos delante de su pecho

— Ya quiero patearle el trasero a todos los que veamos en ese mundo – hablo Javier igual de emocionado

— Yo estoy ansioso por ver a esas nenas kunoichi – dijo Oscar con una mirada pervertida que después Javier imito

— Par de pervertidos – dijo Ela con enojo

Invocación: Jutsu de Portal Dimensional – Oziel clavo su espada delante de sus amigos

Delante de todos apareció un portal color verde y se apreciaba un bosque muy frondoso. En eso, al lado del portal aparecieron Hagoromo y Hamura Otsutsuki, los cuales vieron con satisfacción al chico que habían elegido y a los nuevos compañeros que había reclutado.

— Lo veo y no lo creo – dijo Oscar con incredulidad

— Hagoromo-sama, Hamura-sama es un honor volver a verlos – dijo Oziel que rápidamente hizo una reverencia, la cual imitaron sus amigos

— El honor es nuestro joven – hablo Hamura con tranquilidad indicando a los presentes que se levantaran – veo que ellos son los que elegiste…

— ¡Kya, que emoción! – Ela no pudo contenerse y se colocó al lado de los dos hermanos Otsutsuki – disculpen, ¿Puedo tomarme una foto con ustedes?

— Claro jovencita – dijo Hagoromo con una risita – veo que eres una chica con mucha energía

— Más bien es una fangirl… - Javier no pudo seguir con su burla porque Ela le lanzo su zapatilla en el rostro

— ¡Cállate, estoy en mi derecho! – la chica posaba con los dos sabios mientras Oziel tomaba la foto

— Bueno, supongo que Oziel ya les comento todo lo que ha hecho en el mundo Shinobi – hablo Hamura ya después de la foto

— Así es y estamos más que preparados – hablo Javier con determinación

— Los elegiste sabiamente Oziel. En ellos se ve honestidad y sus peculiares actitudes serán muy necesarias en esa odisea que se avecina – hablo Hagoromo

— Ahora, ¿Cuál será su misión en el mundo Shinobi? – pregunto Hamura con seriedad

— Proteger a todos los inocentes en el mundo Shinobi – dijo Oscar con determinación

— Asegurarnos que en todas las aldeas Shinobi exista la paz – dijo Javier

— Crear una mejor historia y un mejor futuro para los habitantes de Konoha y de todo el mundo – continuo Ela con emoción

— Pero sobre todas las cosas… - dijo Oziel mirando a sus amigos que asintieron al mismo tiempo

— ¡Asegurarnos que Naruto y Hinata tengan el mejor final de todos! – dijeron los cuatro jóvenes con determinación

— Están listos – Hagoromo levanto sus manos hacia los jóvenes y Hamura lo imito – al ingresar por el portal, recibirán las habilidades y poderes con los que deseaban y por los cuales se prepararon

— Una vez que su objetivo principal se cumpla, ustedes regresaran a su mundo – dijo Hamura – buena suerte. Confiamos en ustedes

— Llego la hora – dijo Oziel caminando hacia el portal junto a sus amigos mientras pensaba con emoción – Yugito, Kanna, pronto regresare

Con ese último pensamiento, los cuatro jóvenes entraron al portal, listos para su misión. Una nueva aventura les esperaba en el mundo Shinobi.

Es hora de que el viaje de entrenamiento llegue a su fin

Continuara…


Nota del Autor:

Hola queridos lectores y amigos

Un nuevo proyecto acaba de empezar, de la mano de nuevos amigos y compañeros.

Ahora solo queda ver que aceptación recibe este nuevo proyecto.

Quiero agradecer a quienes son parte de este proyecto y que tambien son escritores muy talentosos: JaviPozos (mi mentor y un compañero de confianza), Regina Alba Blossom ( Una amiga, a la que me gusta llamar hermana y a quien le confiaria mi cuenta) y OTAKUFire ( un gran amigo, compañero y quien me ayuda con las ideas e inspiración)

Antes de despedirme, me gustaria invitarlos a la campaña de apoyo a los escritores, con nuestro lema:

"Valora nuestro Trabajo, deja un comentario"

Gracias a Ares-sama por la idea, quien tambien es un gran escritor y espero que den apoyo con sus ideas

Sin mas, gracias por su apoyo

Que tengan un buen dia

Emperor92 fuera

¡Paz!