Hola =)
Bueno este es el primer fic que subo, espero que les agrade, la verdad es que me gusta mucho esta pareja, me encantaría que en la serie le dieran un poco de oportunidad, pero bueno… se vale soñar… xD
Como les acabo de decir este es el primer fic que subo, pienso actualizar cada domingo pero eso también depende de como me vaya en este capítulo.
Comenten, se aceptan críticas constructivas así que no se abstengan de decirme algo, jajaja, a menos que sea ofensivo xD jajaja
Disfrutenlo =D
1.- No pertenezco a ti
La oscuridad de la noche empezaba a cubrir el cielo, a pesar de que la gente de aquella villa ya se encontraba en el interior de sus casas, todavía se alcanzaba a apreciar dos sombras que adornaban las calles vacías.
Una de aquellas sombras, se posicionó sobre uno de los faros de luz con los que contaba la aldea, después de dejar ver su cabello rubio y sus distinguidas rayas en las mejillas, formó una sonrisa ligera, no era una sonrisa de siempre, mas bien, era una sin esfuerzo, casi como diciendo "ya lo sabía…"
— Ahora que Sasuke ha regresado tengo la seguridad de que estarás bien… — Esta vez le dedicó una sonrisa de oreja a oreja
La segunda figura se posicionó debajo de la luz, esta vez, era una chica, a pesar de que era blanca de piel había algo que la diferenciaba de las demás, su hermoso cabello rosa que caía hasta sus hombros.
La chica miró al rubio con un poco de preocupación. Hubo un tiempo muerto en que los dos se quedaron completamente en silencio, cosa que para alguien tan escandaloso como Naruto o como para Sakura no debía de pasar.
La chica pasó sus ojos verdes hacia la cálida mirada del chico, entonces le sonrió tiernamente.
— Lo siento… —entonces tomó una bocanada de aire— estoy confundida… — bajo la vista al suelo— no puedo decidir… —después de un momento apretó sus puños mostrando impotencia— sé que es algo egoísta pero no estoy lista para hacerlo
El chico rubio nuevamente le dedicó una sonrisa de oreja a oreja, la chica se sintió débil ante aquel ademán, siempre que él sonreía ella se veía envuelta entre aquel acto, había algo que comenzaba a sentir por él desde que Sasuke ya no estaba, pero por el otro lado, también había algo encerrado en su pecho que seguía palpitando por el otro hombre, tomar una decisión así era algo crucial y si lo hacía ahora podía arrepentirse de eso toda su vida.
Naruto se llevó sus dos manos a su nuca, suspiró profundamente, entonces sonrió como si nada hubiera pasado segundos antes, el chico rubio intentaba no perder los estribos a pesar de que por dentro se sentía deshecho.
— Estaré aquí hasta que decidas
Entre aquella noche, otra chica se encontraba vagando por las calles, ella deseaba tomar aire fresco, quería sentir la brisa fría bajo aquella luna plateada. Esta vez, su cabello largo bailaba conforme el viento soplaba. Se sentía un poco abrumada, no quería estar detrás de aquellas cuatro paredes o más bien dicho dentro de aquél clan al que ella odiaba la mayoría de las veces.
La chica dobló en una esquina y siguió caminando derecho, fue en ese instante en donde ella sintió en su pecho un dolor muy profundo.
Sakura había besado al rubio.
Bajo aquella luz tenue que el faro les proporcionaba, se podía apreciar tan claramente que Haruno no tenía intenciones de renunciar ante aquel amor. Hinata sintió que por dentro su pecho se comprimía más y más dejándola sin aliento, tal vez fue por el asombro del chico o por la decisión de Sakura lo que más la hacía desvanecer.
No, ella no podía cargar con tanto dolor, Hinata intentó irise de aquel lugar en cuanto antes, pero exactamente por el esfuerzo que gastaba al hacerlo lo único que logró hacer fue arrastrar los pies, ella se fue tan silenciosamente que ninguno de los dos presentes se percataron de su presencia.
Hinata apoyó su mano sobre las paredes de la calle, apretó fuertemente su pecho con su mano derecha, le dolía tanto, se sentía tan inútil y tan desesperada.
Ella intentó seguir caminando así que avanzó muy lentamente todavía arrastrando los pies, cuando la chica se sintió libre de poder sacar sus lágrimas, lloro.
Aquel llanto que todavía contenía en su garganta, solamente podía librarse de sus lágrimas porque no quería darse el lujo de gritar, aunque se sintiera impotente no podía desvanecerse nada más por eso. Era un sentimiento tan pesado, aquel que ni siquiera le permitía tragar saliva libremente porque el nudo era tan fuerte y estaba tan aferrado a su garganta. Ella se sintió tan vacía, era como un hueco en el cuerpo, le faltaban tantas emociones y aun así solo podía sentirse inútil.
De un momento a otro, para la chica le fue difícil respirar, después de intentar regresar a su ritmo normal cayó en cuenta que estaba hiperventilando. Fue entonces cuando se recargó completamente en la pared, muy lentamente comenzó a deslizarse para caer al suelo inconsciente.
Hinata sintió sus ojos pesados, intentó abrirlos pero la luz la cegó tanto que se arrepintió, ella estaba consciente y lo único que podía percibir era el dulce olor a una mañana fresca. Intento mover sus manos pero las sentía tan pesadas que desistió. Después de un rato, intentó nuevamente abrir sus ojos, esta vez tuvo éxito.
Lo primero que observó fue el techo de un templo viejo, al querer ganar mas campo de visibilidad la chica volteó hacia el lado derecho, esta vez vio una puerta corrediza que se encontraba abierta, dándole paso al aroma fresco de la mañana. Hinata volteó hacia el lado opuesto, esta vez se sorprendió.
Un chico se encontraba sentado, recargado en la pared, aquel cabello negro que se ondeaba por la brisa de la mañana captó la atención de la Hyuga. Estaba sentado y todavía mantenía el sueño. La tez blanca que brillaba con la primera luz del día fue algo que impactó a la chica.
Finalmente, la Hyuga se levantó y se acercó al chico para mirarlo con más detenimiento. A decir verdad, Hinata había olvidado que Sasuke había regresado a la aldea después de la guerra que tuvieron en la isla paradisiaca. La chica todavía no terminaba de entender por qué se encontraba en aquél lugar, ella se sentó a un costado del chico y abrazó sus piernas, eso lo hizo solamente cuando recordó el incidente del día anterior.
Es cierto, se había desmayado, tal vez el Uchiha se encontraba cercas y por eso fue que la trajo consigo, pero a pesar del recuerdo que todavía mantenía en su mente de su enamorado besándose con Sakura tenía también otros problemas que resolver como por ejemplo su padre debería estar asustado, Neji de seguro tendría ganas de matar a todo el mundo y su clan completo ahora se encontrarían buscándola.
Pero ahora que se encontraba en un lugar tranquilo, quería aprovechar de esa situación para poder relajarse. Como si fuera cosa del destino, la chica comenzó a caer en sueño, ella no se había percatado de que su cabeza ahora se escondía entre sus rodillas, sus manos se deslizaron y fueron perdiendo fuerza, entonces la Hyuga cayó dormida.
Después de unos minutos, el Uchiha se levantó, a pesar de que todavía era muy temprano decidió que era tiempo suficiente como para levantarse, él había olvidado todo recuerdo del día anterior o al menos así hubiera sido si no se hubiera topado con la imagen de una chica sentada en forma fetal.
Sasuke respiró profundamente, era algo que lo incomodaba, tener que cuidar de alguien a quien muy apenas y le había dirigido la palabra si de por sí era muy desgastante tener que cuidar de alguien que conocía.
El chico la tomó del hombro, solamente para recostarla pero fue entonces cuando sintió la diferencia entre sus anchos hombros y los delicados de ella, inmediatamente borró todo pensamiento fuera de lo normal de su mente. Terminó por recostarla sobre el piso y decidió que era mejor pasar a otra habitación.
La hyuga finalmente se levantó, al percatarse de que Sasuke se había levantado decidió que lo mejor era hacerlo ella también. En cuanto intentó abandonar la habitación se sintió un poco abrumada al asomar la cabeza por el pasillo y encontrarse con mas puertas corredizas que la conducían a quien sabe donde. Hinata intentó no hacer ruido al caminar pues en parte se sentía como infiltrada a un lugar al que obviamente no es bienvenida.
— Si sigues así llegarás a la cocina
Entonces la chica se estremeció, aquella voz tan singular, serena y con un tono arrogante hizo que desvaneciera cualquier pensamiento de su mente. Entonces se dio la vuelta para poder mirar a su acompañante.
— Siento mucho lo que a pasado
Hinata le dedicó una leve mirada, entonces apartó la vista de él, a decir verdad ella siempre se había sentido un poco extraña al estar al lado de Sasuke además de que le temía a su actitud arrogante también temía que la criticara como lo había estado haciendo siempre con Sakura e Ino.
— De verdad lo siento
Entonces Hinata hizo una leve reverencia, después de un segundo se levantó nuevamente y se quedó en silencio, todavía buscaba en su mente alguna escusa que darle.
— Si es todo lo que deseas, la salida esta en esa dirección
El chico apuntó hacia el lado opuesto del pasillo en el que se encontraba su acompañante, Hinata lo miró todavía un poco desubicada, entonces entendió a lo que se refería.
La chica comenzó a caminar a la dirección señalada y justamente cuando paso por el costado del moreno un fuerte sonido proveniente de su estómago se propagó en la habitación. Hinata se volvió completamente roja, entonces se llevó sus manos a su estómago y lo tapo como si eso fuera a hacer que los ruidos se detuvieran. Sasuke suspiró un poco cansado, colocó su mano en la pared, esto provocó que le impidiera el paso a la salida a Hinata.
— Necesitas comer
Entonces Hinata volteó a ver a los ojos al chico, Sasuke ni siquiera la miró a la cara, la chica se sintió un poco incómoda y avergonzada.
— Ya sabes donde esta la cocina
La chica tardó unos segundos en devolverse por la misma dirección, Sasuke se quedó parado sin siquiera inmutarse. Entonces Hinata pudo llegar a la cocina.
A decir verdad, el templo se miraba en malas condiciones, las paredes se veían viejas y de las éstas todavía reposaba el polvo y las telarañas colgaban. Al llegar a la cocina, Hinata se sintió un poco abrumada, no por el hecho de que la cocina estuviera en esas condiciones si no por el hecho de que una persona se encontrara viviendo en ese lugar.
La chica pasó a lo largo de la habitación, entonces se dirigió al refrigerador y lo abrió muy lentamente, esto provocó su sorpresa. El interior de éste solo contaba con algunos pocos vegetales, un cartón de leche vencido y las sobras de lo que al parecer fue la cena de ayer. Hinata suspiró profundamente, en realidad ya había dicho que comería algo y si no lo hacía tal vez heriría el orgullo del Uchiha, fue entonces cuando la chica decidió tomar un tomate, lo lavó muy cuidadosamente y comenzó a comérselo como si fuera una manzana.
— ¿qué haces?
La misma voz de antes se presentó de nuevo, esto hizo que Hinata se exaltara, entonces se dio la media vuelta para apreciar al Uchiha.
El chico se encontraba recargado en la pared, todavía mantenía una expresión divertida, no era una risa cualquiera mas bien era como una ligera mueca burlona. Sasuke traía cargando en su mano izquierda una bolsa con comida que había comprado unos minutos antes de que ella se levantara.
— Es que… —Hinata intentó pensar en una buena escusa— me agradan los tomates…
Exactamente Hinata maldijo ese momento ya que su estómago la traicionó de nuevo, al sentir aquel olor que expedía la bolsa de comida de Sasuke, su panza continuó rugiendo lo que hizo que se sintiera aun mas avergonzada.
Esta vez Sasuke dejó escapar una risa un poco más notoria, Hinata bajó la vista al suelo y se encogió de hombros. Fue entonces cuando el chico pasó a sentarse sobre la mesa, cuando el moreno notó que Hinata seguía de pie todavía avergonzada le tiró una mirada un poco arrogante en donde le mostraba el otro asiento de la mesa.
El chico sacó de la bolsa dos tazones de ramen de Ichiraku, en realidad Sasuke era un chico que comía mucho pero en estas condiciones tenía que compartir su segundo tazón con aquella chica, eso fue algo que le disgustó.
Hinata tomó el tazón con un poco de nerviosismo, entonces decidió que era mejor esperar a que el chico comenzara a comer para que ella también pudiera hacerlo, en cuanto Sasuke partió sus palillos se percató de la mirada de la Hyuga.
— ¿qué es lo que esperas? —preguntó un poco desesperado
Hinata posicionó su vista en el tazón de ramen, entonces separó los palillos y decidió que lo mejor era empezar a comer.
Ese instante se volvió algo extraño para Sasuke, estar sentado con otra persona en aquel amplio templo era algo extraño, se había acostumbrado a estar solo que de un momento a otro se volvió un poco difícil aceptar que esta vez no estaba solo.
— Este lugar es muy agradable
La huyga hizo ese comentario solamente para simpatizar, ella había escuchado por rumores lo que había pasado con el clan Uchiha, exactamente por eso ella sabía la debilidad del moreno. Hinata no intentaba hacer que Sasuke se enamorara de ella, más bien, ella quería simpatizar con él como lo había estado haciendo con Kiba y Shino. Inmediatamente supo que no obtendría respuesta ante aquel comentario, así que decidió dar también el segundo paso.
— Muchas gracias por lo de ayer…
La hyuga hizo una pequeña pausa en comer, entonces miró al Uchiha que todavía se encontraba comiendo, ni siquiera se inmuto ante aquel comentario.
— Sé que soy una molestia, así que creo que es mejor que me marche ahora
La huyga se levantó de su lugar, esto había sido un poco abrumador para ella, de por si no era una chica muy habladora pero a veces tan siquiera le respondían solamente por cortesía, el Uchiha ni por eso le había respondido. A pesar de que solo había comido un poco de aquel delicioso ramen era mejor dejarlo hasta ahí. No quería darle más molestias.
Mientras la chica salía de la habitación, el moreno la tomó de la mano impidiéndole la salida. Hinata se sintió un poco extraña, era la primera vez que sentía la mano de un chico, a decir verdad había mucha diferencia, sus manos eran por mucho mas grandes y también contenían mas fuerza de la que ella podía aportar.
— Todavía no has terminado de comer, cuando acabes puedes irte
La razón por que el Uchiha hizo eso fue porque se sintió un poco mal debido a su comportamiento, exactamente eso era lo que lo enojaba mas por dentro ¿por qué preocuparse por una chica? Él nunca lo había hecho en lo que fue de su vida hasta ahora, ni siquiera le importaba lo que pasaba alrededor cuando se trataba de una mujer. El chico frunció el ceño debido a su batalla mental, cuando Hinata volteó a ver de nuevo su rostro se sintió un poco atemorizada así que decidió que debería terminarse el tazón aunque ni siquiera pudiera acabarse la mitad.
— ¿has pensado en… ?
Hinata dijo con un poco de temor a que tal vez lo ofendiera, pero esta vez no había nada más que hacer, el moreno ya estaba molesto así que en realidad no perdía nada.
— reparar este dojo
— No hay nada que reparar
El moreno comentó tan fríamente que la chica se sintió un poco tonta por el hecho de que había preguntado eso.
— Sería algo agradable que pintaras las paredes de algún color…
La Hyuga sabía que de esa manera no obtendría simpatizar con él, pero aun así ella no sabía de qué otra manera lo podía llegar a hacer.
— ¿color? Es un dojo
El Uchiha la miró un poco fastidiado, Hinata pensó que lo mejor era seguir comiendo. Después de un momento pensó que lo mejor era volver a intentarlo, después de algún tiempo Hinata se había convertido en una chica que intentaba hacer las cosas como ella pensaba, aunque no le salieran a la primera.
— El lugar es muy agradable… —entonces tomó una bocanada de aire— pero se siente un ambiente muy pesado…
El moreno la miró un poco extrañado, era la primera vez que alguien le decía algo como eso, en ese instante frunció el ceño casi como aborreciéndola por dentro.
En ese momento, se escuchó varias personas hablar a lo lejos, gracias a su habilidad ocular Hinata se percató de que se trataba entonces se encogió de hombros un poco asustada. El Uchiha inmediatamente supo de quién eran aquellas voces tan familiares y lo que buscaban.
El moreno se levantó de su asiento, fue en ese tiempo cuando se dirigió a la salida para comprobar su suposición.
— Uchiha Sasuke, tenemos una orden para revisar su casa
En ese instante Sasuke frunció el ceño, nadie pasaba así como así al interior de su casa y menos le hablaban de esa manera.
Fue entonces cuando Hinata decidió salir por sí misma, detrás de Sasuke ella se dejó ver por todas las personas que se encontraban en ese lugar.
— ¿Hinata Hyuga pasó la noche con Uchiha Sasuke?
Cuestionó uno de los guardianes de Hinata, la chica se pudo percatar que la mayoría de la familia Huyga se encontraba en ese lugar, incluyendo su padre y su hermana, además del mejor equipo de rastreo, Shino y Kiba. Al parecer esta noticia iba a estar de boca en boca por un tiempo en toda Konoha.
Muchas gracias por leerlo, espero que no les haya aburrido, en el próximo capítulo tal vez haya más Sasuhina.
Intenté hacer no cambiar la actitud de los personajes, pueden decirme si les resulto de su agrado o si hay algo que les gustaría agregar o cambiar. =)
¡ ¡ ¡ Hasta el próximo domingo! ! ! =D
