"Odio amarte porque al amarte me vuelvo débil, odio amarte porque me paso todo el día pensando en ti, odio amarte porque te amo, y ese amor no significa lo mismo para ti…"

-odio amarte mientras tu amas a otra... - deje caer mi cabeza encima de mi diario donde escribia mis mas profundos secretos y sentimientos. Aunque creo que ya no era un secreto por que todo el mundo sabe que estoy perdidamente enamorada de Trunks Brief, desde que lo vi por primera vez, cuando solo tenía 10 años. Mi padre se tuvo que mudar a las montañas paoz junto a la casa de mis queridos abuelitos, porque tenía que trabajar en corporación cápsula. Yo había dejado mi vida atrás y estaba muy molesta por eso, deje a mis amigos, mi escuela... La gimnasia. Odiaba todo y a todos, hasta que lo vi. Él es el hermano mayor de mi unica amiga: Bra. ¿Que tan patética puedo ser como para que después de 4 largos años en esa escuela yo no tenga otra amiga a parte de ella?. Solo los tengo a ellos y con eso me conformo. Sobre todo con el. Trunks es un chico tan... Tan apuesto, Cabello color lavanda que le caía sobre los ojos azul eléctrico, alto y ancho de espaldas. Tenía la nariz más perfecta que jamás había visto en toda mi vida, unos labios carnosos y besables que derretían a más de una chica cuando se curveaban para mostrar una sonrisa... Además es un alumno modelo: sus notas nunca bajaban de sobresaliente y también era la estrella del equipo de fútbol americano, claro junto con mi tío Goten y un chico llamado Dai, que, de el prefiero no hablar... Por ahora.

-¡Pan! - grito mi madre desde la cocina - ¡Se te va hacer tarde!

-¡Voy! - grito desesperada despues de ver el reloj de mi mesita de noche, eran las 7:45 am y las clases comenzaban a las 8. Iba tarde. Antes de bajar corriendo por las escaleras mire mi calendario y vi un pequeño post-it que decia que el 25 de abril seria el gran día. Desde hace tiempo que he intentado entrar en la escuadra de posrristas, pero siempre he sido muy pequeña de estatura y no querían aceptarme; claro que no he crecido mucho desde entonces, Sigo siendo pequeña para mi edad, pero, se sin duda alguna que soy mucho mejor que cualquier chica en esa escuela en cuanto de acrobacias se trate. Tengo 14 años y mi cuerpo aún no se ha desarrollado como quisiera, mis pechos son pequeños y casi ni se notan, mi trasero va por el mismo camino y mi cintura es igual a la de una niña de 10 años. ¡Dios! Tengo el cuerpo de una niña de 10 años. ¡Como odio mi cuerpo!. Si tan solo hubiera seguido ejercitándome.

Regresando al punto: dentro de unos días seran las pruebas para las suplentes de porristas y por fin me dejaron hacer la prueba (con una ayuda de la cocapitana que resultaba ser mi amiga Bra). Tome mi mochila y me la eche al hombro, estaba feliz apesar de ser un lunes por la mañana y por un gran motivo: volveria ver a trunks.

-¿llevas todo? - pregunto mi madre entusiasmada al verme entrar a la cocina. Yo asentí y la salude con un beso en la mejilla y después hice lo mismo con mi padre. El estaba molesto porque pensaba que ser porrista era una perdida de tiempo, entre otras cosas.

-son solo chicas que se exhiben ante el público mientras se contorcionan de manera bulgar, no quiero que tu...

-¡papá! Ya habíamos hablado de esto y habías aceptado

-si, pero ahora creó que lo haces para que Trunks volte a verte - abrí la boca tanto que sentí que se me partiría los labios, ¿como era posible que mi padre pensara que yo quería exhibirme para trunks? Debería de estar bromeando, por que de una cosa estaba muy segura, esto no lo hacia por el, lo hacia por mi y solo por mi. Ser porrista me daba la oportunidad de volver a retomar mis acrobacias. Yo era gimnasta Olimpica, solo que antes de poder entrar de lleno a ellas, mi padre decidió aceptar un nuevo trabajo (como ya había dicho) y yo la deje. Mi cuerpo se estaba volviendo flácido y sin forma, necesitaba de esto o hacer que condujeran casi 3 horas para llevarme a las clases y eso era algo que no podían hacer. Ser porrista era mi premio de consolación... Me lo debía.

-Gohan - reprendió mi madre con una severa mirada. Creó que al igual que a mi abuelito goku, a mi padre también le daba miedo su esposa. Respire hondo y rodé los ojos al ver como discutían y despues de 5 minutos ya se estaban besando. No tenían remedio. Y aunque, para ser sincera me encantaba verlos así, del modo mas romantico posible, los amaba, ellos me habian enseñado como debia ser el amor, como debia sentirse y yo queria una historia de amor como la de ellos. Me emocionaba la idea de encontrar al hombre perfecto que me amara por lo que soy realmente y no por mi cuerpo, que se negaba a cooperar conmigo para hacerme lucir bonita.

Una bocina de auto sono afuera de mi casa y ya sin tiempo tome un pan tostado para despues salir corriendo y encontrarme con mi tio goten. El era un chico increible, mi mejor amigo... El unico. El me defendia si alguien me molestaba y siempre me invitaba a las fiestas que sus amigos hacian. Si no fuera por el yo, seria un cero a la izquierda, un ser invisible. Me trataba como una adolecente normal. La verdad no se por que los chicos o chicas no se me acercaban, no querian ser mis amigos, creó que tengo un tipo de repele que los aleja de mi, yo no soy como Bra, ella es amigable, siempre rodeada de personas. Ojala lo fuera, apesar de tener la misma edad, ella tenia mejor cuerpo, un rostro angelical y un cabello hermoso, fue por ella que me deje crecer el mio y ahora me llegaba hasta el trasero. Si me preguntaran ¿que es lo que me gusta de mí? Diria sin pensarlo que es mi cabello, es la unica parte salvable que tengo.

Cuando llegamos al colegio, el estaciono su auto y yo salí apurada lista para hacer mi misión de todas las mañana. Saque un pos-tit en forma de corazón de color rosa que decía "tu eres mi razón por la cual me levanto feliz todas las mañanas". Todos los días le escribía un pequeño mensaje de amor a Trunks que dejaba pegado en la puerta de su casillero y aveces cuando tenía la oportunidad dejaba una paleta con forma de corazón en el también. Ciertamente no sabia si el las leía o si se comía las paletas que le dejaba pero me hacia la ilusión de que lo hacia y las guardaba en una cajita para después atesorarlas. Mi corazón palpita enérgicamente tan solo de pensarlo.

-buenos días pan - me saludo bra con su voz tan dulce. Venia vestida de pantalones ajustados y un poco desgastados de las piernas que iban perfectamente combinadas con una blusa de color salmón. Su cabello como de costumbre lo llevaba suelto solo detenido por una diadema de diferente color cada día. Le tengo tanta envidia. Ella si que lucia su cuerpo, a veces me le quedaba observándo, como se contoneaba al caminar por los pasillos, meneando su trasero de un lado al otro, y su blusa abotonada que enmarcaba su pecho; ya se lo que piensan pero no, la respuesta es: No. No soy lesbiana. Las mujeres también vemos a otras mujeres pero no por asuntos lesbicos, simplemente vemos lo que nosotras queremos en nuestros cuerpos. Y yo... Yo quería ser como ella. Mi mama me decía que no me adelantará que ese cambio llegaría a mi tarde o temprano, pero empezaba a creer que yo me quedaría así toda la vida.

Al otro lado del pasillo se encontraban 5 chicos haciendo bullicio, agrediendo y burlandose de los más débiles, como me molestaba que eso pasara. Ya había tenido un problema con Dai por meterme en lo que no me llaman y por supuesto que llegue a embarrar a Goten por defenderme, así que le había prometido no volverme a involucrar en esos asuntos pero no podía evitarlo. Bra quiso detenerme pero fue en vano, así que solo miro a lo lejos esperando que no me hicieran nada esos bravucones

- ya le quitaron mas de lo necesario, ¿no creen? - dije parada firmemente con los brazos cruzados y una Expresión de pocos amigos en el rostro. Dai sonrió al verme y no se porque me hizo sentirme nerviosa. - 5 contra uno, wow que valientes

-Son no te metas en nuestros asientos si no quieres que te demos una leccion

-dejala Tamayo - intervino Dai sin quitarme la vista de encima y caminando hacia mi, mi cuerpo tenia la necesidad de salir corriendo al sentirlo tan cerca de mi pero no lo hice, pegue firmemente mis pies al suelo y le dediqué una mirada más severa - yo me encargo de ella - su sonrisa de alguna forma se hizo más grande, tanto así que pensé que se le saldría del rostro

-si tu le haces algo a mi sobrina, te juro que mañana no vas a saber Ni tu nombre completo - rumio Goten detrás de él y ¿quien creen que venia a su lado? Así es. Trunks estaba junto a él mirando la situación, esperando a que los golpes comenzaran para apoyar a su amigo, desvío la mirada y me vio de pies a cabeza como revisando que no tuviera algún daño o me faltara algo, despues de unos segundos me lanzo una hermosa sonrisa que me dejo desarmada. No pude evitar el sonreír tontamente ante su presencia, cuando el estaba cerca era como si el Tiempo se detuviera a mi alrededor, Como si todos dejaran de existir...

-andando chicos - añadió Dai antes de dar la vuelta y ver a Goten directo a los ojos, retandolo a que lo golpeara solo una vez para que comenzara la guerra entre ambos, sin embargo, no lo hizo, solo regreso la vista hacia a mi y me guiño su ojo derecho - no quiero problemas tan temprano - murmuro a lo lejos, ¿que demonios fue eso? ¿Porque me hizo ese gesto? No lo entendía, ¿era una amenaza? Debo admitir que tenía miedo

-¿estas bien? - asentí con un respiro - te dije que no te metieras más con ellos - me reprocho molesto - no siempre voy a estar cerca y dentro de poco nos iremos ala universidad, a ver quien te va a defender

-lo siento, pero estaban molestado a...

-dejala Goten - por fin dijo Trunks interrumpiendo lo que decía y ni me importó por que por un segundo pensé que me daría la razón y me defendería. Error. - cuando ya no estemos en esta escuela estoy seguro que nadie se fijara en ella - dijo cretinamente sin dejar de verme mientras sus labios se curveaban hacia arriba mostrando una sonrisa de bravucón que nunca le había visto. Se estaba comportando de una manera muy extraña últimamente, al menos solo conmigo. Me quede parada viendo como se marchaban aun sorprendida por sus palabras. El se detuvo y se giró para mirarme a los ojos, sabia que lo que había dicho me había lastimado, y en verdad así fue, ¿acaso creía que yo era tan poca cosa que nadie se fijaría en mi despues de su partida? tal vez así seria, pero nada le daba el derecho de restregarmelo en la cara - sabes que estoy jugando, ¿cierto linda? - solo hacia falta que me llamará así para que dejara de estar molesta con el, me encantaba cuando me llamaba linda, con ese tono de voz tan dulce. Solo el podía hacerlo. Sonreí como una tonta y deje que me arrastrará suavemente con su brazo derecho, mi tío Goten lo miro con recelo. Como ya había dicho "todos" los que nos conocian sabían que yo estaba enamorado de el y mi tío sabia que trunks solo me estaba dando falsas esperanzas al tratarme de esa manera. Aunque a veces pensaba que no lo decía jugando, a veces, cuando me sujetaba así como lo estaba haciendo ahora, sentía que en verdad tenía algún sentimiento hacia a mi. Amistad, cariño... ¿Amor? Suspiré. Que lindo seria que el se fijara en mi y no en... Mis Pensamientos fueron interrumpidos bruscamente por un empujón que me llevo a dar un par de zancadas que casi me hacen rebotar con el cuerpo de mi tío. Marrón había aparecido en escena y como era de esperarse, se le colgó del brazo de mi Trunks, no sin antes dedicarme una maldita mirada de odio. Quisiera aceptarlo o no, ella era la Chica de la cual trunks estaba enamorado. Cuando ella estaba cerca yo solo... Me sentía peor, con el autoestima más baja de lo común y es que a su lado yo era poca cosa, ¿como podría trunks fijarse en mi cuando la tenía a ella?. ¿Como podría pelear contra una chica como ella? Marrón era alta, rubia, de ojo azul y con una cuerpo que cualquier chica desearía. Ella al igual que mi tío Goten tenía 16 años y ya era toda una mujer. Claro que trunks estaba interesado en ella, y digo ¿quien no? Siempre estaban juntos, tomados de la mano, secreteandose, abrazados... Solo sabia por bra que ellos no eran más que amigos pero que tarde o temprano llegarían a ser algo más y no podía permitirlo. Trunks tenía 17 años, era el mayor de todos y eso significaba que tenía tiempo limite para poder ser su novia, una vez que cumpliera los 18 seria el fin. Jamás seria mio. Ok, estoy hablando como una loca que quiere matar a asu amor solo porque será mayor de edad e intocable.

El timbre que anunciaba el inicio de las clases sonó y tuvimos que separarnos, mientras se marchaban pude ver como trunks rodeaba la cintura de marrón y la acercaba a su cuerpo para murmurarle algo al oido, debía hacer algo antes de que lo impensable pasara, era obvio que mis notitas no estaban dando resultados, debía poner a trabajar el plan "B"... Si tan solo tuviera uno...