Una nueva vida
Harry despertó, en su cama de la casa "Gryffindor" y se dio cuenta de que todo había acabado. Se le agolparon todos los recuerdos a la cabeza, la Batalla de Hogwarts, su supuesta muerte en el bosque... Pero después también recordó la muerte de seres a los que quería mucho como Fred, Lupin, Tonks, y por último, un elfo que lo quería mucho, Dobby. Sintió un gran dolor en el corazón al recordarlo y pensó que lo mejor sería salir de allí e irse con los demás al Gran Comedor donde estaba seguro que le esperarían numerosos agradecimientos de familias aterradas por la furia de Lord Voldemort, pero ya no, ahora Voldemort estaba muerto, y todo volvería a la normalidad. Fue al Gran Comedor y una oleada de personas, de las cuales solo conocía a un puñado, fue a hablarle, a verlo... Pero a él solo le interesaba hablar con sus amigos. Agradecerle a Neville que matase a Nagini (la serpiente) y estar con Luna, Dean, Seamus, Ernie, George y sobre todo, quería estar con Ron, Hermione y Ginny. Tenía mucho que hablar con esta última. Ahora que todo había acabado, podrían volver a estar juntos. Se encaminó hacia el final de la mesa Gryffindor y encontró a Neville con la espada en su regazo y su abuela al lado, felicitándolo.
-Hola Neville.-Dijo Harry.
-¡Bien!¡Ya te levantaste Harry! Todo el mundo quiere darte las gracias.
-Yo solo quiero darte las gracias a tí Neville. Sin tí matar a Voldemort habría sido imposible.
-¿Para eso está el ED no?-Le dijo Neville con alegría.
-Sí.-Y una sonrisa le asomó por su cara manchada de sangre.
Dos sillas más atrás estaban los demás miembros del Ejército de Dumbledore, y a todos les dio Harry las gracias, ya que todos le habían ayudado a vencer a Tom Ryddle. Cansado de hablar con todos, fue en busca de Ginny, pero no la encontró. Le dio un vuelco el corazón. Recordaba vagamente cómo una maldición de Bellatrix (desconocía cual era) le daba de lleno a la chica, antes de que la señora Weasley acabara con "Bella" Instintivamente fue a la enfermería y le preguntó desesperado a la señora Pomfrey si Ginny Weasley se entontraba allí.
-Lo siento mucho Potter, pero se la llevaron de urgencias a San Mungo.-Esas palabras perforaron en el corazón de Harry, que seguidamente se desapareció y se apareció en San Mungo, aunque le extrañó mucho que hubiese podido aparecerse en Hogwarts.
En la recepción le esperaba casi una fiesta por todos los que había en esa sala. Les felicitaron por sus "excelentes habilidades" como mago, pero él pasó de todo y fue a la habitación que le dijo la recepcionista. Allí estaba la familia Weasley al completo (incluidas Hermione y Fleur).
-Harry, cariño, que bien que has venido.-Dijo afligida la señora Weasley.
Harry, al comprobar el mal estado en el que se encontraba Ginny, solo dijo:
-¿Sobrevivirá?-Se le saltaron las lágrimas al pronunciar esa palabra.
-No se sabe aún.-explicó el doctor que la atendía.