Disclaimer: Los personajes son de Stephenie Meyer.
Claim:Paul/Rachel
Summary: Porque cuando están juntosse produce algo, algo tan fuerte, tan grande, que se vuelve irreversible. Va mucho más allá de la imprimación. Se enamoraron y ya no hay marcha atrás.
Notas: Para el reto Palabras Para El Recuerdo, del Foro LOL. (Palabra clave: Irreversible)
No turning back
Paul era alto, mucho más alto que un chico común, pero no tan alto como lo eran Jake o Sam. También era un tanto quejoso o una jodida nenaza, como le gustaba decir a Embry.
Solía ser bastante popular entre las chicas, aunque no tanto como Quil, que solía ser el tierno por el que todas las chicas morían.
A Paul nunca le había disgustado ser un licántropo. No, que va, era genial poder correr a tanta velocidad, transformarse en semejante bestia y, además, poseer tanta fuerza. Nunca le había disgustado hasta el momento en el que la imprimación se iba haciendo cada vez más y más evidente en cada uno de sus camaradas. Primero fue Sam, luego Jared, después Quil. Poco a poco, uno a uno, iban cayendo lentamente.
Y eso le daba miedo, lo asustaba. ¿Y si se enamoraba locamente de una fanática de los chupasangre? ¿Y si no era bonita? ¿Y si no le gustaba el queso? Porque el amaba el queso y nada ni nadie lo haría comer sin queso. Además, no le parecía nada justo tener que amar a quién se le cantara a sus genes de licántropo.
Pero, por obra y gracia del destino, sucedió. No fue algo premeditado ni nada. Iba caminando por la playa, no estaba prestando atención al camino y chocaron. Era Rachel, la siempre amigable y un tanto infantil Rachel. Rachel, la hermana de Jacob, su amigo lobo y él estaba allí, simplemente allí, dejando de girar alrededor del Sol para girar en torno a ella, mientras la miraba a los ojos. Estaba jodido, realmente jodido.
Y nada de todo eso que antes lo preocupaba importaba. No importó cuando Rachel tomó la iniciativa y lo besó por primera vez, tampoco cuando ella se encargó de limpiar la sangre de sus heridas ya cicatrizadas. Menos que menos cuando ella hizo el gran sacrificio de abandonar la universidad para quedarse a su lado, en La Push, cuando él no tenía mucho para ofrecerle.
Porque cuando están juntosse produce algo, algo tan fuerte, tan grande, que se vuelve irreversible. Va mucho más allá de la imprimación. Se enamoraron y ya no hay marcha atrás.
