"Un Puente a Terabithia" no me pertenece y si así fuera Leslie estaría muy vivita y junto a Jess :'( ohhh… el final es tan triste gente… ¡Ah! Y una última cosa… y la más importante en realidad (I):

Este fic va dedicado a "isabelmasen" quien fue la persona que me motivó a ver esa linda película y me pidió hacer este fic, espero cumplir con tus expectativas querida amiga

Un nuevo comienzo

Capítulo I: El informe de los guerreros caídos

La historia comienza una vez que han pasado un par de semanas desde la muerte de Leslie, las clases siguen su curso normal en la escuela y Jess comparte sus tardes con su hermanita pequeña en Terabithia.

-¿Se puede saber qué es lo que hacen ustedes dos, todas las tardes? –preguntó curioso y un tanto molesto el padre de Jess mientras la familia tomaba once en el comedor una tarde de un día Viernes.

-Nada –se apresuró en contestar la hermanita de Jess, pues le había prometido a su hermano que jamás le revelaría la existencia de Terabithia a nadie, inclusive si eso incluía ocultarle la verdad a su propio padre- es solo que a Jess le gusta caminar un rato antes de volver a casa y bueno… a mí me gusta acompañarlo, ¿No es así Jess?

-Eh… -el castaño la miró un tanto confundido, sin embargo después de unos segundos comprendió que su hermana intentaba encubrirlo- Sí. La verdad no es nada muy interesante… no sé por qué Meibel insiste tanto en acompañarme.

-Es divertido –se defendió la aludida- además así paso más tiempo con mi hermanito…

-Mmm… -el padre de los chicos los miró con desconfianza por unos segundos para después continuar con su merienda.

-Bueno, yo ya terminé con mi comida… -comentó de improviso el chico de cabellos castaños- …me voy a acostar.

-Un momento jovencito –le interrumpió su padre mientras que Jess intentaba escabullirse del comedor- ¿Qué hay de tus deberes?

-Ya los he terminado papa…

-Te equivocas –le corrigió secamente su padre mientras le miraba fríamente- hoy te toca lavar la loza de la once…

-¿Eso significa que tendré que quedarme aquí hasta que todos terminen?

-Exactamente, así que mejor te vas sentando de nuevo en la mesa antes de intentar escabullirte por ahí…

El chico de ojos verdes lo miró un tanto molesto por unos segundos antes de sentarse nuevamente en la mesa para esperar a que todos terminasen. Una vez que todos hubieron terminado su comida le dejaron todos los platos repartidos en la mesa, ni siquiera se tomaron la molestia de llevarlos hasta la cocina. El rey de Terabithia suspiró pesadamente… esa seguramente sería una larga noche, tendría que levantar la mesa y además lavar todos los platos y servicios que hubiesen ocupado esa noche, tenía mucho trabajo por delante… después de todo, eran una familia numerosa. El niño de cabellos castaños miró rápidamente toda la mesa antes de comenzar… ni siquiera se habían dignado en levantar la azucarera o la tetera, simplemente había algunas veces en la cual sentía que abusaban un poco de él.

-No te preocupes hermanito… -el chico aludido giró su vista para ver a quien le estaba hablando y se encontró con su hermana pequeña recogiendo algunos platos que se encontraban sobre la mesa- yo te ayudaré… así podrás acostarte temprano y mañana iremos juntos a Terabithia por la mañana … ¿Mañana volveremos a Terabithia, verdad?

-Claro que sí, Meibel –Jess miró a su hermanita menor por unos segundos y le dedicó una sincera sonrisa- Por cierto… gracias por ayudarme.

-No es nada… -la niña rubia le miró casi emocionada por sentirse parte de la vida de su hermano, por primera vez él estaba compartiendo algo que era suyo con su hermana, compartía ese mundo que había creado hace meses con su mejor amiga Leslie, definitivamente se sentía feliz por ser parte de él y sentía que debía agradecérselo de alguna manera- Yo levanto la mesa Jess… tú lava la loza, ¿Vale?

-Vale

Una vez que ambos hermanos terminaron de levantar y lavar toda la loza de la once se dieron cuenta de que ya era bastante tarde, el cielo estaba completamente oscurecido y no se escuchaban ruidos en el interior de su casa. Ambas subieron a tientas a su cuarto para no despertar a sus padres ni a sus hermanas, después de todo, estas tenían un humor de los mil demonios cuando interrumpían su sueño. Se cambiaron rápidamente de ropa y se acostaron después de un bajito "buenas noches" cerraron sus ojos intentando conciliar el sueño.

-Señor… Jess –el aludido giró sobre sí mismo mientras tapaba su rostro con su cubrecama para quedarse dormido de una buena vez, sin embargo esa extraña voz seguía molestándolo- Despierte por favor… hay noticias de Terabithia y la reina Leslie que usted debería saber inmediatamente…

¿Acaso había escuchado bien?... ¿O tal vez solo se trataba de un sueño? El chico de ojos verdes se destapó rápidamente y pellizcó una de sus mejillas fuertemente para comprobar que la voz que acababa de escuchar no era parte de un sueño.

-¡Auch! –Se quejó un tanto molesto y a la vez aún más intrigado al descubrir que estaba despierto y que de verdad alguien lo estaba llamando- ¿Quién está ahí?

-Soy un guerrero Terabiano a sus servicios mi Lord… -el chico de cabellos castaños lo miró incrédulo por unos segundos. Frente a él se encontraba, efectivamente, una de esas libélulas con las cuales jugaban Leslie y él, pretendiendo creer que eran fuertes y valientes guardianes de Terabithia.

-¿Pero cómo…? –el muchacho aún se explicaba cómo podría haber llegado una de esas libélulas hasta su casa y lo más importante… hasta su habitación, siendo que había cerrado todas las ventanas y puertas de esta… de seguro que su basta imaginación le estaba jugando una mala pasada.

-No soy un producto de tu imaginación Lord Jess… -el aludido miró a la pequeña libélula con sus ojos desorbitados mientras intentaba borrar de su mente la imagen que tenía frente a sus ojos, un guerrero del tamaño de una libélula que portaba una armadura, un escudo y una afilada espada que lo escrutaba con su miraba. Sin embargo, por más que lo intentaba, ese pequeño guerrero seguía inmóvil y fijo ante su mirada.

-¿Por qué está aquí… no se supone que solo puedo verlos una vez que llego hasta Terabithia?

-Eso es porque hasta el momento ninguno de nosotros había tenido la necesidad de salir de allí… hasta hoy –respondió un tanto melancólico el fiel guerrero Terabiano.

-Dijiste que tenías noticias de Leslie… -recordó Jess, aún un poco dudoso de mantener una conversación con lo que según él, era un producto de su imaginación- Pero eso no es posible, porque ella está…

-Encerrada en un calabozo y ahora mismo está siendo custodiada por los secuaces del señor de la oscuridad –sentenció secamente, esperando un momento para que el chico pudiese digerir la noticia que acababa de entregarle.

-¡Pero si Leslie murió hace dos semanas! –Exclamó un tanto melancólico y lleno de rabia el muchacho- ¡Yo mismo asistí a su funeral!

-Lo sé señor… pero yo mismo fui testigo de cómo los secuaces del señor de la oscuridad la encerraban en un calabozo subterráneo, tan solo por la razón de ser la reina de Terabithia…

-No puedo creerlo… ¿Leslie está… viva? –preguntó Jess incrédulo.

-Si tan solo me dejase explicarle cómo sucedió todo mi señor…

-Está bien… te escucho.

-El día en el cual usted fue a la capital, Leslie decidió que quería proteger a Terabithia, aún si usted no estaba con ella –un aura negra descendió sobre los hombros de Jess tan solo al recordar el hecho de que justo en el día en el cual, él había decidido salir de excursión a un museo junto a su maestra de música, había sido el día de la muerte de su única y mejor amiga Leslie- Pero no se angustie mi señor, no fue su culpa… si usted hubiese estado junto a ella ese día, lo más probable es que el señor de la oscuridad hubiese encontrado otra oportunidad para capturarla…

-¿Pero… por qué el señor de la oscuridad querría capturar a Leslie? –preguntó intrigado el joven rey.

-Por ser la persona que liberó a todos sus esclavos, más bien al reino de Terabithia por completo, por ser la reina de nuestro mundo y por…

-Pero… ¿Cuándo fue que Leslie… los liberó? -le interrumpió Jess, aún más intrigado que antes.

-El día en el que llegaron a Terabithia y se autoproclamaron como nuestros reyes, las cadenas que nos aprisionaban se desvanecieron poco a poco, hasta liberarnos completamente… entonces supimos que teníamos ante nosotros a nuestros verdaderos reyes.

-¡Espera! –Volvió a interrumpirle el muchacho, mientras intentaba encajar las piezas y asimilar lo que estaba escuchando- Eso no es posible… porque "Terabithia" es un mundo que Leslie y yo inventamos por nuestra propia cuenta, no es real.

-Lord Jess… -habló calmadamente y con parsimonia para intentar calmar al rey de Terabithia y que este entendiese muy bien lo que estaba por decirle- Si bien usted siempre imaginó que nos veía, Leslie no… ella tenía la habilidad de vernos desde un principio… ella siempre supo que éramos reales y no un producto de su imaginación… como usted insinúa.

-¿Y qué hay de Meibel? –Jess dejó por unos segundos sus dudas y comenzó a preguntar con cierta preocupación, por lo que le pudiese suceder a su hermana si todo eso era verdad- ¿Acaso ella también puede verlos? … Si es así, ¿Ella también corre peligro?

-Ella no corre peligro mi Lord –intentó calmarlo la libélula- Y ella… al igual que usted lo hacía antiguamente, nos imagina… más bien, ella imagina las cosas que tú le mencionas que puedes ver, al igual como lo hacían la reina Leslie y usted antiguamente.

-Pero… ¿Desde cuándo puedo verlos… de verdad? –Jess estaba empezando a creer tan solo un poco de lo que estaba escuchando, después de todo había algo de cierto en lo que le relataba la pequeña libélula, Meibel sólo lograba "ver" las cosas que él le decía que viera, al igual como sucedía con Leslie. Además, desde hace un tiempo hasta ese día ya no le costaba tanto trabajo imaginar a los Terabianos, era como si estuviesen allí por su cuenta sin que él tuviese la necesidad de imaginarlos…

-Desde que usted decidió compartir el secreto de nuestro mundo con alguien más, fue cuando adquirió la habilidad de vernos cómo realmente somos… sin embargo Leslie no tuvo que cumplir con esta condición para poder vernos… ella siempre supo que estábamos allí, es por eso que siempre le hablada a usted de nosotros con tal convicción…

-Ahora entiendo porque ella estaba tan entusiasmada cuando le dije que "sí podía verlos"… -Jess abrió su mente, tal como su amiga Leslie le había pedido hace unas semanas y se convenció de que todo lo que estaba pasando era real, Leslie se encontraba en peligro, aún estaba viva… eso era lo más importante, y terminó por aceptar la idea de que Terabithia era real, después de todo… no perdía nada con creer- Entonces… ¿Qué pasó con Leslie? ¿Está bien? Y otra cosa… ¿Por qué el señor de la oscuridad se molestó en disimular su muerte en vez de…? –al chico se le formó un nudo en la garganta tan solo al pensar en la palabra… "asesinarla". Sin embargo después de unos segundos en los cuales tomó un breve respiro para relajarse, pudo continuar con su interrogatorio- no es como si lo hubiese preferido de esa forma, ¡Claro que no!... Es solo que me parece extraño que si Leslie le era un problema para esclavizar a los Terabianos, me pregunto por qué no "se deshizo del problema" en vez de agregarse otro problema más a la lista…

-A Leslie la ha secuestrado el señor de la oscuridad… como le mencioné anteriormente –respondió con paciencia, pues sabía muy bien que las noticias que le traía de Terabithia lo dejarían un tanto impactado y quizás no retendría mucha información en un comienzo- Ella no está muy bien en estos momentos… es por eso que he llegado hasta aquí. Y la razón por la cual el señor de la oscuridad mantiene cautiva a la reina Leslie es porque no le interesa asesinarla, pues puede ser reemplazada rápidamente por una princesa… tal cómo tú lo hiciste, mi lord Jess…

-Mi intención nunca fue reemplazar a Leslie –al razonar las palabras del guerrero, volvió a sentirse culpable por querer reemplazar inconscientemente la compañía de su mejor amiga… pero no, él sabía que no era así, el jamás intentaría reemplazarla… jamás- Yo… no me di cuenta de eso, yo… lo siento.

-No se disculpe Señor, después de todo, gracias a que existe una princesa es que nuestra reina sigue con vida… sin embargo no existe una persona que pueda reemplazar al rey.

-Entiendo… pero, si el señor de la oscuridad tiene el suficiente poder como para acabar con la reina de Terabithia…–Jess comenzaba a entender cada vez más la situación en la cual se encontraba, sin embargo aún habían ciertas cosas que no encajaban- ¿Para qué se tomaría la molestia de capturar a Leslie?

-La reina es el señuelo perfecto para atraerlo usted a su guarida, mi señor –intentó explicarle- él quiere matarlo a usted …

-¿Y… por qué no lo ha intentado aún?

-Si tan solo me dejase explicarle…

-Está bien, no interrumpiré desde ahora, lo siento… -en ese momento Jess se dio cuenta de que desconocía el nombre del guerrero con el cual había estado conversando todo ese tiempo- por cierto… ¿Cómo te llamas?

-Yo… esto… nadie se había molestado en preguntarme mi nombre antes –respondió un tanto confundido el- … me llamo Kriss, su alteza.

-Otra cosa Kriss… deja de llamarme "su alteza, mi señor, mi lord" o de cualquier otra forma que sea así de formal –Kriss lo miró con sus pequeños ojos sin comprender la situación. Se supone que dentro de la historia de los reyes de Terabithia, ningún rey le ha dado tan libertad a sus subordinados- tan solo llámame Jess, a partir de este momento seremos amigos… ¿Vale?

-¿Lo… lo dice en serio mi Lord? –le preguntó escéptico y un tanto esperanzado el guerrero Terabiano.

-Claro que sí, por cierto… ¿Qué te dije sobre eso? –Le cuestionó un tanto molesto y a la vez divertido por el nerviosismo que denotaba la pequeña libélula- Sólo llámame Jess… me siento un tanto extraño cuando me llamas de esa forma.

-Como usted quiera… Jess

-Eso está mejor… y no me hables de usted, ¿Vale?

-Está bien… -suspiró resignado Kriss. Después de todo, órdenes son órdenes… - Voy a continuar con mi explicación, si me lo permites, claro…

-Por supuesto, sigue…

-Bueno… como le decía, la razón por la cual el señor de la oscuridad no ha intentado acabar con su vida es debido a una habilidad especial que usted… digo, que tú posees –Jess lo miraba atento a cada palabra que pronunciaba Kriss- Si bien Leslie tiene la capacidad de ver, tú tienes la habilidad de crear… me explico, ¿Recuerdas ocasión en la cual los secuaces del señor de la oscuridad los acorralaron y tú creaste una armadura de acero alrededor de tu mano para defender a la reina Leslie?

-Claro que sí, pero…

-Dentro de nuestro mundo "eso" que tú creaste fue real… y tú lo creaste, al igual que creaste ese puente con tus propias manos en tú mundo, tú puedes crear un castillo, una espada o lo que sea que desees en nuestro mundo, con tan solo usar tú mente –aclaró firmemente el nuevo amigo de Jess- es por esa razón que el señor de la oscuridad no ha intentado asesinarte aún… porque tú eres el único que puede derrotarlo. El verdadero plan del señor oscuro… el espera que tú intercambies tú vida por la de la reina Leslie.

-Espera un momento Kriss… ¿Cómo es que sabes todo esto? –el chico de cabellos castaños había comenzado a desconfiar del pequeño guerrero, después de todo… ¿Cómo era posible que un guerrero que supuestamente estaba de su parte, estuviese al tanto de tal información y no le hubiese informado antes de que el señor de la oscuridad capturase a Leslie?

-No desconfíes de mí, Jess –le suplicó el fiel guerrero- Cuando los secuaces del señor de la oscuridad se llevaron a la reina Leslie, mis camaradas y yo nos encontrábamos patrullando el sector, por lo que fuimos testigos del momento en el que los secuaces del señor de la oscuridad cortaron la cuerda y se la llevaron. Sin pensarlo dos veces nos fuimos tras secuestradores, sin embargo una vez que llegamos hasta su guarida estos nos estaban esperando y nos tendieron una trampa, nos encerraron en el mismo calabozo en el cual la mantenían cautiva. Ella me informó acerca de los planes y las intenciones del señor de la oscuridad, también me contó acerca de sus habilidades… lo cual lo había descubierto una vez que te vio crear esa poderosa mano de acero para defenderla. Durante su estadía en el escondite del señor de la oscuridad había logrado descubrir muchas cosas y me pidió que no le contase nada a usted… claro que ella no sabía que habían disimulado su muerte para que sus parientes no la siguiesen buscando y estropeasen su plan. Ella creía que sería capaz de encontrar una salida lo suficientemente grande como para que pudiese escapar de allí sin tu ayuda… sin embargo los días pasaron y solo encontraba salidas diminutas, en la cuales solo un guerrero de mi tamaño podría entrar… se volvió cada vez más débil y finalmente a pesar de que ella estaba en contra de mis intenciones no pude seguir obedeciéndole y escapé por una de las salidas secretas que tenía nuestro calabozo para encontrarte y suplicarte que la rescates a pesar de que ese no es su deseo, ella sabe que todo es una trampa pero aun así… yo sé que no podrá resistir mucho más tiempo.

-Entiendo… -el chico ojos verdes estaba completamente decidido en buscar y rescatar a su mejor amiga lo antes posible- ¿Puedes recordar el camino hasta el escondite del señor de la oscuridad?

-Si… ¿Cuándo crees que podamos salir en su búsqueda…? –para el fiel guerrero Terabiano le era difícil acostumbrarse a la informalidad con sus reyes, después de todo, siempre había hablado con parsimonia y formalidad frente a la realeza- ¿… Jess?

-Esta misma noche Kriss, solo dame unos minutos para arreglarme para el viaje –Jess se levantó ágilmente de su cama y comenzó a buscar su ropa para cambiarse y una mochila para llevar ciertas cosas de utilidad para el camino- Por cierto Kriss… ¿Cuánto tiempo crees que nos demoremos en llegar hasta allá?

-Un día o quizás dos si vamos caminando…

-Vaya… se encuentra un poco lejos de aquí –por un segundo la duda acerca de si lo que estaba pasando era real o no, comenzó a carcomer los pensamientos del rey Terabiano. Sin embargo la sola posibilidad de volver a ver a mi mejor amiga Leslie era más fuerte que cualquier duda que pudiese surgir- Pero eso no importa, iremos bien preparados ¿No es así Kriss?

-Por supuesto Jess –respondió un tanto alegre Kriss al ver la fuerte voluntad que reflejaban los ojos del rey Terabiano.

oOoOoOoOoOoOo Fin Capítulo oOoOoOoOoOoOoOo

Aquí terminó el primer capítulo del fic que me pediste… ¿sabes? Me alegro que me hayas pedido a mí este pequeño favor, a decir verdad realmente me ha gustado la peli y aunque no me lo hubieses pedido, creo si yo hubiese visto la peli por mi cuenta también me hubiesen dado ganas de hacer un fic con ella. Espero que te haya gustado el comienzo del fic, no creo que sea uno muy largo… pero intentaré hacerlo lo más interesante y emocionante posible ^^

Nos vemos hasta el próximo cap y ojalá que me dejes un comentario con tu opinión de él, para saber si te ha gustado o no, pliss (:

Eso… bye ^.^