Kuroko no Basket y sus personajes no me pertenecen, yo solo los uso por diversión y para animar el día a los lectores.

Dani: Hola! Soy yo! De nuevo por aquí...sin terminar ninguna de mis historias... en fin. Esta vez se me ocurrió una idea loca, casi fuera de este mundo! Justo después de un año de no publicar absolutamente nada, he decidido volver al oficio~ En fin, les dejo este sensual fic -que en mi opinión esta muy pobre- para que se diviertan. Se podría decir que este es solo el prólogo, pero me he aburrido de poner prólogos así que empezare con el cap 1~

Aclaciones:

1)Aquí la mamá de Akashi esta viva.

2) (T/N) es tu nombre

3)(T/A) es tu apellido

4) (T/M) es tu mote o apodo

5)Puede que carezca mucho de descripciones

6) Divirtanse!

CAPITULO 1: El Vaso de Ramen

(T/N) se había levantado temprano como todos los días, solo para llegar tarde a la escuela. Era su primer año de instituto aunque pronto pasaría a segundo. Las cosas cada día le iban más y más difícil y con ello el calor y sus últimamente muy cortas conversaciones con su madre.

El padre de (T/N) era maestro de posgrado por lo cual siempre andaba viajando, especialmente a Europa. Su madre era ama de casa, pero de vez en cuando bordaba manteles o tapices para conseguir dinero y comprarse chucherías. Pero ¡POR FAVOR! La mujer era una vaga total y ahora andaba peor que gato durmiendo más de ¡16 HORAS AL DÍA! Joder, ahora era cuando más la necesitaba, cuando había reprobado el examen final de química… ¡MIERDA!

— ¡SE ME HACE TARDE! — Gritó desesperada entrando al instituto a velocidad supersónica. Cuando entro al salón se tropezó con el marco de la puerta corrediza cayendo al piso haciendo acrobacias para no golpearse la cara o la cabeza pero chocándose finalmente contra su mesa.

— Bien, Mika dime cuanto tiempo demoro esta vez. — Dijo una chica de cabello negro largo y ojos pardos acercándose a (T/N) con un paso elegante.

— ¡(T/M)-chan supero tu record de 2 minutos! —Celebró una chica de cabello castaño claro ojos rosados.

— ¿Algunas palabras para sus fans señorita (T/A)? — Preguntó la morena acercando su mano a la cara de (T/N) como si tuviera un micrófono.

—Bueno antes que nada, quiero agradecer a mi ma… ¡Y un carajo! ¡Eso no se supone que deba ser así! — Se quejó la (T/A) levantándose del piso de un brinco. — Una diva como yo debe estar bien presentada, preparada y mostrando a todo el mundo su "Perfect body". ¡ESPEREN! ¡Eso no es lo que debería decir en esta situación!

—Día x del mes x del año x, (T/A) (T/N) alias (T/M) entró al salón a velocidad desconocida superando su record de 2 minutos, aun se ´pueden apreciar inicios de un desorden mental en el sujeto…— Susurró la morena cerca de una grabadora.

— ¡Mala amiga! ¡Hasta cuando piensas seguir haciéndome bullying! ¡Es que acaso ya no he sufrido lo suficiente! —Exclamó (T/N) sacudiendo a su amiga en modo Drama Queen.

—Está bien, pero deja de zarandearme. —Se quejó la chica.

—Chitoge-chan solo quería animarte, (T/M)-chan. — Dijo Mika sentándose en su mesa al lado de la de (T/N).

—Te veías desanimada desde hace varios días, ¿algo ha pasado con el señor (T/A)? —Preguntó Chitoge.

—No. —Respondió (T/N)

— ¿Y entonces Nao-chan? —Preguntó Mika.

—Sí, está más vaga de lo normal. Me preguntó si es que la habrá dado la menopausia…

—Pero de que hablas, tu madre tiene menos de 40. Aun esta joven. Yo diría que tal vez está embarazada.

— ¿¡QUÉ!? ¡¿Ni hablar?! Si así es el asunto, sería mejor que yo sea la que esté embarazada. — (T/N) hizo un puchero. — Ha estas alturas no pienso tener un gusano paracitoso tamaño humano.

Mika y Chitoge se quedaron con la boca abierta al escuchar lo que (T/N) había dicho. Luego comenzaron a reír nerviosamente hasta que escucharon disparos en la puerta del Instituto.

— ¿Qué es eso? —Preguntó (T/N).

—Yakuzas. —Susurró Mika.

—No creo que vengan por lo que creo, de seguro solo se tirara un tiroteo en la puerta hasta que una de las bandas ganen. —Opinó Chitoge. —Solo hay que ignorarlos y hacer como si no estuvieran aquí…

— ¡Chicos! No salan del aula, ¡es una orden directa del director! — Gritó el profesor a cargo entrando. —Malditos rojos… — Susurró el sensei sacando un arma de debajo de su saco.

Las tres chicas se quedaron petrificadas en sus asientos mientras a sus compañeros les valía verga lo que acaban de ver.

— ¿Ustedes vieron eso? —Preguntó (T/N)

—Sí, sensei se cortó el cabello. —Dijo Mika temblando en su asiento. — ¡Es el fin del mundo! —Gritó desesperada.

— ¿En serio? ¡SOLO TE FIJASTE EN ESO! —Se quejó Chitoge. — ¡¿Solo viste eso?!

— ¿Tú también lo viste, Chitoge?

—Por supuesto, como no ver ese moco que le colgaba de la punta de la nariz. —Chitoge comenzó a reír como posesa.

— ¿Es en serio? —Suspiró (T/N).

El tiroteo siguió hasta poco antes de la hora del almuerzo, no tuvieron el receso de la mañana pero se la pasaron todo el día sin hacer nada. Al fin cuando los dejaron salir para el almuerzo (T/A) (T/N) la chica más responsable del universo se dio cuenta de que algo andaba mal.

—Olvidaste tu almuerzo otra vez, ¿verdad? —Preguntó Chitoge riendo de su amiga.

—Mo, (T/M)-chan es toda una descuidada. —Río Mika.

— ¡NOOOOOOOOOOOOO! —Definitivamente ese no era el día de (T/A) (T/N) la chica más responsable del universo.

—Vamos, hoy hay natto en el comedor. Es mejor ir a comprar unos vasos de ramen para que comas. —Sugirió Chitoge guiando a las chicas a la bodega tras el comedor donde los conserjes vendían comida de contrabando.

Las chicas siguieron hablando de cosas triviales como la razón de ser del natto, el cual era muy odiado por (T/N). Haciéndola recordar la vez que ella le pidió un hermano a su mana y ella le dio un perro que a la semana desapareció igual que el pandicuatricornio que siempre la acompañaba al baño por las noches.

—Buenas, ¿tiene ramen? De sabor original estará bien, solo no me lo de muy caliente. —Pidió (T/N)

—Bonita decoración, señor conserje. —Opinó Mika mirando el techo de la bodega.

—No es una decoración, los yakuzas entraron a la bodega a resguardarse y los profesores les dispararon desde la azotea perforando el techo y casi todos los vasos de ramen… —Dijo el anciano tendiéndole el vaso de poliestireno a (T/N). —Ten cuidado, si apretar un poco el vaso puede que se rompa. — Aconsejo el hombre.

—Ok, gracias por el consejo.

Luego de acomodarse en una banca del jardín, las tres adolescentes comenzaron a disfrutar de su almuerzo. Mika traía un bento tradicional y Chitoge solo mordía una hamburguesa.

—Esto es malo… —Susurró (T/N).

— ¿Qué pasa? —Preguntó la morena mirando a su amiga.

—Me estoy quemando las manos…—Susurró la chica soplando el ramen.

—Entonces déjalo en el banco un rato. —Aconsejo Mika.

—No puedo…

— ¿Por qué?

— ¿Y si se rompe?

—No se va a romper. — Se quejó Chitoge

—Ok…

Cuando (T/N) estaba por poner su vaso de ramen sobre la madera, se escucharon disparos en la entra de la escuela… otra vez.

—Se les pide amablemente a todos los alumnos que se dirijan a sus salones… ¡AHORA MALDITOS MOCOSOS! —Escucharon las chicas por el altavoz.

—Mierda. — Susurraron las chicas guardando su comida para volver a ir al aula.

Cuando estas entraron l pasillo principal una horda de desesperados alumnos corrían a diestra y siniestra empujándose entre sí avergonzando a las chicas. Chitoge de alguna manera se la arreglo para meterse entre la multitud y guiar a (T/N), pues Mika estaba más entretenida en filmar con su celular como un par de arañas se reproducían en una esquina del techo. (T/N) tenía el vaso de ramen contra el pecho para evitar que este se derramara o se rompiera, y al parecer sus esfuerzos daban frutos pues solo estaba a unos pasos de entrar al salón.

—Que bien, ya llega…

Una bala perdida rompió una ventana al otro lado del pasillo muy lejos de donde (T/N) y Chitoge estaban.

—Y una puta mierda... —Susurró (T/N).

— (T/N) apúrate y entra... opd… ¡RANMARU! —Gritó Chitoge tomando a (T/N) del brazo.

De la nada a su costado apareció un chico muy parecido a Chitoge al costado de las chicas.

— ¿Qué paso, nee-chan? —Preguntó el chico que era una cabeza más alta que ellas.

—Ayúdame, no podre con ella cuando se descontrole. — Exclamó la chica jalando más del brazo a (T/N) sin poder moverla ni un centímetro.

—No entiendo, ¿por qué (T/N)-nee está molesta?

—Se le rompió su vaso de ramen y no pudo comer nada.

—Mierda, esto está feo…

— ¡Malditos YAKUZAS! —Gritó (T/N) muy molesta comenzado a retorcerse en su lugar.

— ¡Apúrate, Ranmaru! — Exigió Chitoge sosteniendo a su amiga de la cintura.

—Pero luego me compras mis gominolas.

— ¡Al carajo tus gominolas!

—Las gominolas son justicia, al igual que las planas. —Exclamó levantando el puño.

— ¡Te compro tus malditas gominolas pero no me dejes sola con este monstruo!

El cabello de (T/N) había comenzado a flotar mientras su sonrisa se retorcía y sus ojos brillaban.

—Bien, usare la cuerda de numero 16. ¿Está bien?

—Usa la que tú creas que sea conveniente.

(T/N) comenzaba a zarandear a Chitoge mientras de su boca salían llamas de fuego. Chitoge estaba por ponerse a llorar mientras era zarandeada hasta que su hermano ato con una cuerda súper gruesa a (T/N) dejándola inmovilizada y a la vez sin aire haciéndola desmallarse como si fuera perro con rabia.

—Buen trabajo, Ran. Ya puedes irte, de regreso a casa te compro tus gominolas. —Dijo la morena arrastrando a su amiga dentro del salón.

—Pero antes quiero que nee-chan me felicite. —Se quejó el chico.

—Pero que chico más molestoso…—Chitoge miró a su hermano y poniéndose en puntitas le dio unas palmaditas en la cabeza.

—Nee-san es muy bajita. —Se burló el chico a lo que Chitoge lo pateó tirandolo por las escaleras.

(T/N) suspiró hoy definitivamente no había sido su día, estaba a punto de tirarse a morder como perro con rabia a la primera persona que le se cruzara por enfrente, y faltas no le ganaba para nada.

Al fin cuando llego a su casa decidió calmarse y tomarse su tiempo para quitarse los zapatos y dejarlo en el recibidor. No se pondría pantuflas ya que no tenía ganas y quería caminar descalza.

— ¡(T/N)-chan! —A penas al poner un pie dentro del pasillo la adolescente fue tacleada por su madre quien la estaba achuchando con la fuerza de un oso ruso.

—Mamá, ya para. — Pidió la chica casi al borde de la asfixia.

—Ah, mi princesa ya llego. —Dijo su padre saliendo de la sala para recibir a la chica.

— ¿¡Papá!? ¿No se supone que volvías para mi cumpleaños? —Preguntó la chica.

—Como tú dijiste, se supone. En fin, ese no es el asunto. Nanao, es mejor hablar esto en la sala. —Dijo el hombre de la casa ayudando a su esposa a pararse.

—Mo, pero yo quiero seguir abrazando a mi pequeña. —Se quejó la mujer al ser separada de su hija ahorcando más a esta.

—Mami, me ahogo…—Susurró (T/N).

—Está bien, ninguno me deja hacer lo que quiero, son unos pesados. —Se quejó la mujer parándose molesta y dirigiéndose a la sala.

— ¿Qué demonios le pasa a mi mamá? —Preguntó la chica al ser ayudad por su papá.

—Es una sorpresa.

—Si claro, como si la mujer no tuviera retraso severo cuando le da la gana. ¡Au! ¿Por qué fue eso? —Le preguntó la adolescente al recibir un golpecito en la frente por parte de su figura paterna.

—Más respeto a tu madre, ella te llevo por 9 meses en el vientre.

—Aja…

Al llegar a la sala (T/N) se sentó en el sillón unipersonal para evitar se ahorcada por su madre más esto no le funciono ya que al sentarse la mujer salto a ella como si fuera un gato.

—Nanao, compórtate. Esto es serio. —Dijo el hombre.

—Sí, tienes razón. —Respondió la mujer enderezándose. — (T/N), querida, ¿recuerdas cuando me dijiste que querías un hermanito y yo te regale un perrito?

—Digamos, que sí… —Respondió la chica no gustándole por donde iba la conversación.

— ¿Pues recuerdas que hace poco me pediste un perrito?

—Mamá, eso fue cuando tenía 10.

—Por eso mismo.

—Mamá. — (T/N) miro seriamente a la mujer. — Tengo 16.

—No, tienes 10.

—Tengo 16…

— ¿¡Quien dice!? —Preguntó molesta la mujer.

—Yo, mi partida de nacimiento, el colegio y mi papá.

—No es cierto, tú tienes 6. —Se quejó su papá.

—Tengo 16.

—Tiene 10.

—Tiene 6.

— ¡Y un carajo! ¡Que tengo 16! — (T/N) se paró de su asiento y corrió a su habitación, al regresar les puso un papel en la cara a sus padres. — Aquí lo dice, tengo 16.

— (T/N), cariño, falsificar registros civiles es ilegal. —Dijo su mamá.

— ¡SOLO DIGANME O QUE QUERIAN DECIRME!

— ¡Estoy embarazada! —Exclamó Nanao. — ¡Mira cariño, (T/N) esta tan feliz que no tiene palabras!

—… no creo que este feliz, amor…—Susurró el hombre.

—…— (T/N) sacó su celular. — Hola. Mika, las sospechas de Chitoge eran ciertas. Escribe todo lo que te voy a decir. En mi laptop, la contra es mi mágico pandicuatricornio es violeta, sí. Todo junto. En la carpeta x de documentos está el archivo las bolas mágicas de Jonas. Ahí están las indicaciones de lo que tienen que hacer por el siguiente año. Ahora me despido, dile a Chitoge que a pesar de todo el bullying que me hizo yo me comí su goma de borrar en primer grado de primaria y que la odio con todo el heart, y a Ramaru dile que en mi taquilla de zapatos están mis gominolas mágicas de edición limitada traídas del Amazonas...

—Creo que se lo ha tomado mejor de lo que esperaba. — Dijo la madre.

—Bueno, querida. ESO no es lo que tu madre te quizó decir.

— ¿Mamá? ¿Qué está pasando?- Pregunto (T/N) asustada casi al borde del colapso.

—Ah, querida… Es una historia muy graciosa, pero eso no tiene nada que ver ahora… Pero el problema aquí no es que seas la heredera de una familia yakuza, el problema es que la sopa se enfrío.

Genial eras la nieta de un yakuza y a tu madre solo le importaba la puta sopa.

—Jajaja que gracioso, por un momento pensé que hablaban en serio. Pfff, por favor como no me di cuenta antes. Mi mamá embarazada, heredera de los yakuzas. Muy buena broma, casi me la creo si no fuero por lo de los yakuzas eso ya es demasiado extremo…

(T/N) se quedó cayada al ver que sus padres estaban serios, lo cual no era normal, definitivamente no era NORMAL. Se sentó en el sillón, sus piernas temblaban mucho, no podía seguir parada… ni siquiera consiente. Aquella noticia era mucho.

— ¡VOY A SER HERMANA! —Gritó eufórica. — Siempre lo quise, ¡¿QUÉ!? ¿¡ACASO PENSARON QUE EN VERDAD DIRIA ESO!? PRIMERO ME CASO ANTES DE SER HERMANA PRIMERISA A LOS 16….no… ¡17 AÑOS! —Gritó histérica.

—Qué bueno que digas eso de casarte porque, eme aquí la sorpresa…

—Con permiso. —Dijo un hombre con kimono entrando a la sala. — Señorita Nanao, la señorita Shiori está lista para explicar sobre la situación a la señorita (T/N).

—Muy bien, que Shi-chan pase, ella siempre ha sido mejor con los niños. —Le respondió Nanao al hombre quien captó toda la atención de (T/N), este al ver que la chica le miraba sorprendida, se sonrojo y salió del lugar.

— ¿Ok…?

De la nada, una mujer vestida con un hermoso kimono de tonalidades rosas y rojas se hizo presente en la habitación, era hermosa. Su cabello era rojo bermellón largo y lacio, sus ojos eran dorados como el bronce y su piel clara como la porcelana china.

—Es un gusto conocerte, (T/N)-chan. —Dijo la mujer.

—Yo soy Shirosaki Shiori, la 31va cabeza de la familia Shirosaki. También conocida como la hermana menor de Shirosaki Nanao la 30va cabeza de la familia Shirosaki.

— ¿Desde cuándo tengo una tía?

— ¡(T/N)! —Regaño Nanao a su hija. — Shiori ha venido aquí a habarte de algo muy importante.

—Sí, tienes razón Nana-chan, será mejor decirlo de una vez.

— (T/A) (T/N), tu eres la heredera de la familia Shirosaki, elegida para ser la 32va de la familia.

— ¿Qué? No lo entiendo.

—Bueno, todo empezó conmigo, jejeje.

—Nana, esto no es gracioso, tu hija está corriendo un gran riesgo ahora. —Regaño Shiori.

—Bueno, yo le cuento. Cuando tenía tu edad, mi padre me obligo a comprometerme con la cabeza de la familia Akashi. —Explicó Nanao. —Peró mi aquí presente hermanita, estaba enamorada de Masaomi así que a ella le cedí mi puesto como heredera a pesar de ser adoptada. Además la familia Shirosaki tiene la extricta norma de cazar a sus hijas con alguien del Clan Kuroko así que yo decidí irme a vivir con la familia Kuroko, esta perdió interés en mi al no ser la heredera así que me aburrí y me vine a vivir aquí donde conocí a tu padre y me case y te tuve a ti.

—Eso explica mucho. —Susurró (T/N).

—Debido a que yo no era de la sangre del padre de Nanao, la familia Akashi perdió el interés en mí al cuando mi hijo cumplió 8 años. Por eso la familia Shirosaki y Akashi nunca se unieron y se generó una pelea entre todas las familias. —Explicó Shiori para luego tomar a la chica de las manos y mirarla a los ojos poniéndola nerviosa. — (T/N) te pido, que por favor aceptes ser mi sucesora y me ayudes a solucionar mi error y el de Nanao…

—Disculpa, te recuerdo quien es la adoptada aquí. —Se quejó la madre de (T/N).

—Te recuerdo quien fue la que rompió el trato con los Kuroko. —Contraatacó la peli roja.

—Es la culpa de mamá, ahora termine de explicarme todo, tía de la nunca supe que existía y podría haber sido mi madrina antes de la loca de Rina. —Pidió (T/N).

—Rin-chan no está loca, solo un poco deprimida sexualmente. —Defendió Nanao a su amiga.

—No, no está loca. Solo que cada vez que viene me regala lencería de prostituta y me pregunta a cuantos chicos me he tirado en la semana. —Se quejó la adolescente.

—Ok, no quiero saber más de ese asunto. Así que, ¿(T/N) me ayudarías? —Preguntó la peli roja.

—…— (T/N) miró a su madre y luego a su tía.

—Si te quedas aquí me ayudarás con mi embarazo.

—Ok, te ayudo tía Shiori. —Dijo la chica saltando.

—Bien, tus amigas de todas maneras ya han aceptado así que mañana mismo nos vamos a Tokyo. — Shiori juntos sus palmas y sonrió.

—Espera, ¿Mika y Chitoge van a ir?

—Va a ir hasta Ranmaru-kun, los tres son tus guardaespaldas después de todo. —Dijo Shiori.

— ¿Qué?

—Sí, Nanao les paga a sus padres para que ellos te protejan. ¿No lo sabías?

—Mis únicos amigos… son pagados para estar conmigo…

—Yo te lo puedo explicar, cariño…—Dijo Nanao acercándose a su hija

—De ninguna manera, eso explica mucho. Nadie, ni siquiera ustedes que son mis propios padres son capaces de soportarme. — (T/N) se paró de su asiento. — ¿Y saben qué? Reprobé el examen de química, espero que estén contentos con que me vaya a Tokyo para que sigan haiendo sus cochinadas, tengan cuantos hijos quieran, pero no me involucren a mí.

(T/N) se fue a encerrar a su habitación dejando a todos con la palabra en la boca. La chica llego a su habitación y dejo su celular con música a todo volumen, luego tomó sus botas del armario y salto por la ventana.

Corrió hasta un parque no muy lejano y se sentó en uno de los columpios y se comenzó a balancear suavemente.

—Sigues siendo toda una mocosa. —Susurró una voz a su espalda. —Era obvio que al llegar a tu casa nadie te encontraría, a ti no te gusta llorar en tu cama después de todo hace calor.

— ¿Qué demonios quieres, Chitoge?

—Bueno, al igual que tu… Nao-chan me acaba de decir porque mi hermano y yo seguimos viviendo aquí a pesar de que nuestros padres viven en Osaka.

—Pero…

—Nao-chan me llamo desesperada, dijo que Shiori-san te había dicho que ella nos pagaba. Yo no tenía idea, pero no hay que ser adivinos para unir los cabos sueltos y darte cuenta de que mis padres me dejaron aquí con Ran por eso. Ran tampoco lo sabía si es que lo preguntas.

— ¿Y qué hay de Mika?

—No hay que ser adivinos para saber de dónde sus padres sacan dinero para invitarnos a salir.

— ¿Tengo que disculparme con mi mamá?

—Mañana nos vamos a Tokyo. Si es que quieres que la pobre de Nao-chan se quede con un nudo en el corazón mientras esta en labor de parto, no es mi problema. —Chitoge comenzó a empujar a (T/N) para ir más alto. — Y eso me recuerda que…

— ¿Qué cosa…?

Chitoge le tiró una patada espartana en la espalda haciendo que (T/N) cayera de cara al suelo.

—Eso es por mi goma, y aun no he terminado. Esto es solo el comienzo. —Dijo la morena con voz tenebrosa.

—Pe-pe-pero… era solo una goma…

— ¡Era mi goma! Con olor a vainilla con forma de conejito y tú te lo comiste, llore semanas por esa maldita goma.

—Pero tenía 6 años.

—No me importa, me tuve que comer mis zanahorias y las de Ran por un mes para conseguirlo.

—Está bien, por cierto. ¿Dónde está Mika?

—Esta con Shiori-san arreglando nuestros vestido para mañana y Ran fu a comprar dulces para el camino, ¿de dónde sacaste esas gominolas mágicas del Amazonas? Se movían solas así que no deje que Ran se las comiera.

—Las compre por internet. Creo que por haya las llaman suri… En fin, vamos a casa quédense a dormir. Llama a Ran también.

—Ok, él vendrá después de que la mudanza termine de levarse nuestras cosas a Tokyo y retire el deposito del alquiler. A partir de mañana hasta iremos a otra escuela. Esto se pondrá feo…

—Lo sé, nunca pensé que sería la heredera de una familia de yakuzas.

—Peor aún, cuando termines el instituto te casaras…

— ¿Qué? ¡Eso no estaba en el contrato!

— ¿Para qué demonios creías que te necesitaban en Tokyo? A partir de ahora serás la Cleopatra de Japón, la Elena de Tokyo, la Queen de las Queens.

—Mierda, esto está más complicado…yo quería casarme con Ran.

—Oye, mocosa. Con mi preciado hermanito no te metes. —Chitoge se tronó los dedos haciendo un feo sonido.

—Solo era una broma. —Rió nerviosa (T/N).

Las dos chicas fueron a la casa de la heredera Shirosaki a comer pues el estómago de (T/N) comenzaba a sonar como Chewbacca.

Dani: Ok, lo sé... Esta medio malo... Pero fue porque he perdido el toque y lo hice todo hoy y muy apurada...hasta estoy segura de que (T/N) e salió rara...muy parecida a mi...bueno, espero que les haya gustado. Entonces le pongo unas preguntas para que tenga que comentar:

PREGUNTAS:

1)¿Esta buena la idea?

2)¿Cual es su chico favorito de KnB?

3)¿Esta bien la personalidad de (T/N)?

4)¿Algún consejo u opinión?

Dani: espero sus review's con muchas ansias~ Cuidanse! Bye Bye~