DISCULPEN LAS FALTAS DE ORTOGRAFIA.

© Miraculous: Les aventures de Ladybug et Chat Noir pertenece a Thomas Astruc, productores y empresas productoras. Obra sin fines de lucro.

DIGAN NO AL ALCOHOL

Heaven Hall

I

Etude

Perdona la Interrupción, pero, ¿Te gusta el Licor? Ese único vaso de cerveza después de bañarse… Levantas el frio vaso y en un solo trago… lo bebes todo. Sin embargo, el método para disfrutar del licor es diferente en cada persona. Hablando con sus amigos, susurrándole a un amante y sosteniendo el vaso mientras se piensa muy profundamente.

Tal lugar donde todas las personas se reúnen es un bar… El Licor da origen a una historia y la historia crea tus tragos.

Este es el comienzo de las historias que permanecen en secreto en una tranquila esquina de parís, el Bar Heaven Halls.

Marinette

El Champan con suze es de mis cocteles preferidos, me hacía olvidar el estrés del trabajo, de la vida y sobre todo de mi vida amorosa.

Estuve dudando un momento en entrar al bar, pero ahora sé que fue una buena elección, porque ahora puedo relajarme por completo y los problemas del mañana ya no me aparecen tan agobiantes.

Un buen coctel sostenía mi mano para pasarlo tranquilamente por mi garganta, la bebida era tan deliciosa y burbujeante que hacia distraerte del ajetreado día. A veces trabajar en lo que te gusta, puede incluso llegar a convertirse en un fastidio, los compañeros y los jefes a veces hacían que el trabajo fuera pesado, aunque fuera lo que mas te gustara en esta vida.

Como en este día.

—¿Ya tienes listo el corte de la nueva prenda? ¡Muévete niña! No tenemos todo el día, si no puedes con la carga de trabajo, deberías considerar renunciar—Pronuncio por 5ta. vez la jefa del departamento, a veces era tan castrante tan solo escuchar su voz, si no me hubiera pedido más de 5 cambios a la prenda, ya hubiera terminado, era su trabajo no el mío pero el mundo laborar era mas complejo de lo que uno imagino.

Al terminar aquel trabajo decidí continuar con el mío, a veces uno no entendía por qué ascendían a gente que ni si quiera podía con sus trabajos a coordinar y a dirigir todo un departamento.

Pero la respuesta era obvia.

El sexo movía al mundo junto con el dinero, eran rumores que corrían por la empresa, era un secreto a voces y por mas que intentaba decir o pensar que no era cierto, cada día que pasaba se veía que los rumores tenían algo de razón.

Por mas que echará a perder las cosas o se equivocara nunca la regañaban, ciertamente no le caía precisamente bien y a mi poco me importaba, por eso se ensañaba aun mas conmigo.

Cada día era igual, pero era el único trabajo y que había conseguido y buscar uno con la misma paga era casi imposible, pero mi paz mental a veces estaba hecha un asco.

Al terminar con mi jornada laboral, me puse en marcha a mi casa, si no fuera por el mensaje que había llegado a mi celular.

"Lo lamento, pero no me gusta la dirección que esta llevando nuestra relación, terminamos"

—Maldito poco hombre— Susurre mas para mi que para alguien más, aunque no hubiera nada en el vestíbulo de la empresa, esas cosas no se dicen por mensaje, lástima que no todas las personas tengamos los mismos valores morales.

Camine cerca de una hora en una arboleda que quedaba cerca, bajo el atardecer parisino, no quería regresar a casa, no tenia ganas de llorar aquel día ¿Para qué? ¿Qué arreglo con eso?

Nada.

Camine hasta llegar aquel lugar escondido en una esquina poco transitada.

Heaven Hall asi tenia por nombre aquel lugar.

Definitivamente era uno de los mejores Etudes que había probado, me relajo completamente, definitivamente en esta etapa de mi vida no era momento para deprimirme y no mirar al mañana.

—Señorita ¿le sirvo un poco más? — Me saco de mi ensoñación aquel bartender —Si-i…—Realmente hoy necesitaba el trago y no me lo iba a negar, que importaba que mañana trabaja, que importaba que pasara mañana, lo que importaba era el hoy…

El joven volvió a hacer un poco de su mezcla, para vaciarla en mi copa.

—Listo señorita, disfrute de la bebida

—Muchas gracias…

Una vez que se hubo alejado suficientemente de mi lado, regrese a estar encismada en mis propios pensamientos con un jazz relajante de fondo.

Definitivamente era una de las pocas veces que no me arrepentía de mis decisiones.

Adrien

Una y otra vez hacían las cosas mal, nunca tenían los atuendos en forma o tiempo, no paraban de ser incompetentes. Si no era cosas del trabajo, eran algunas mujeres que querían pescar a un hombre rico.

Era absolutamente irritante y desgastante.

Llevaba días atorado con el proyecto y si se retrasaba más, eso me haría perder mucho dinero.

Bueno, ahora que lo pienso ya estaba un poco irritado en ese momento, después de todo detestaba que las cosas no salieran como quería y a aquellos que hacían que no procediera como debía.

—¿Qué están haciendo? ¡Ya es mas que tarde para la presentación de los vestuarios! No hubo ningún error en la planeación y la estrategia a seguir, entonces ¿Por qué mierda están tardando? — Les grité realmente me encontraba irritado ese día — ¡Háganlo de nuevo y mas les vale que me entreguen lo que estipule!

—Pero jefe es imposible el tiempo ya no da para eso

—Eso debieron pensarlo antes de salirse del tiempo y forma, además de entregarme un trabajo tan mediocre

Me fui enseguida de gritarles todo eso, por algo les estaba pagando bien y no precisamente para que me entregaran unas mierdas cualquieras, fui directamente al lugar de trabajo para poder sacar el proyecto a flote con cada hora que pasaba el tiempo se agotaba.

Malditos incompetentes…

Me concentré tanto en mi trabajo que no me di cuenta la hora que era, las 9 de la noche marcaba ya mi reloj de mano, podre ser quisquilloso con mi trabajo pero aun así se que necesito descanso.

No soy un robot.

Al salir del vestíbulo de la empresa me dirigí directamente a mi carro, mientras conducía por las calles, me apeteció un poco de licor, la verdad aun no quería regresar a casa, así que busque en Google maps el bar mas cerca, casi no frecuentaba los bares, incluso un bistro estaría mejor que un bar al menos tenían comida, pero esta vez quería ir a uno.

Al llegar a la dirección que me había indicado, me di cuenta de que la puerta era bastante grande y pesada, después de todo figuraba a un escondite, cuando entre pude olvidarme de todo el mundo exterior.

Al llegar a la barra me senté al lado de una bonita mujer, pero no estaba ahí para ligar, una vez que el barman me vio, se dispuso a atenderme.

—¿Qué le sirvo señor? — Me pregunto

—Un whisky con hielo y mezclado con agua— Estaba cansado, no había descansado lo suficiente ese día, una elección como esa sería la mejor.

Al beber el whisky me di cuenta de que estaba en su punto, no perdía potencia y el balance era perfecto, casi siempre nadie sabia prepararlo a pesar de que su preparación era fácil.

Pasé un rato ahí entre el mormullo de los comensales, el jazz relajante y las botanas que me habían ofrecido, un rato después me dispuse a irme después de pagar la cuenta, al llegar a la puerta, choque con la mujer que había vislumbrado al entrar.

—Disculpa…—Susurre en torno apenado

—N-no, fue mi culpa adelante pase—Me dijo haciendo una seña con la mano

—Como caballero que soy, las mujeres primero—ofreció a lo que ella ya no discutió, le abrí la puerta y salimos de aquel lugar.

—La noche es hermosa el día de hoy —Dijo en voz alta, a lo que yo giré a la cabeza en dirección al cielo y era cierto a pesar por las luces y la contaminación visual se podía ver las estrellas perfectamente al voltear para verla me di cuenta de que ya había emprendido rumbo, no la detuve porque ya era tarde y tampoco me apetecía, pero realmente esperaba verla otra vez.

Notas de la autora: perdón por atrasarme con mi otro fic, ya casi lo termino y posiblemente en un rato suba la continuación ya me excusare bien en mi fic xD por el momento disfruten estos pequeños cortos