Summary: «Se permitieron por primera vez sentir la maravillosa sensación de sus manos entrelazadas...»


Christmas cold

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Momo veía con sus brillantes ojos negros toda la extensión del lugar, totalmente emocionada.

Puestos y más puestos de deliciosa y desconocida comida se extendían por metros y un gran árbol navideño se encontraba en el centro de ese parque, siendo este la atracción principal.

―Todoroki-san ―murmuró la pelinegra, sintiendo que el frío le calaba los huesos aun a través de ese grueso abrigo.

―¿Qué pasa, Yaoyorozu? ―preguntó, centrando su mirada en su acompañante.

―¿Es tu primera vez en un festival navideño? ―interrogó, deseosa de que su respuesta fuese «sí». Ya que, deseaba más que nada compartir esta experiencia con el chico de cabello bicolor.

―Sí ―respondió, sonriéndole como solo lo hacía con ella―. Y me fascina haber venido contigo, Yaoyorozu.

A pesar del frio, la pelinegra sintió sus pómulos enrojecer.

―Todoroki-san... ―murmuró bajito, temerosa de preguntar―. ¿Puedo tomar tu mano?

El chico de ojos heterocromáticos asintió, también con sus mejillas sonrojadas. Y entrelazo la fría mano derecha de Momo con su cálida mano izquierda.

Esa fría tarde navideña, se permitieron por primera vez sentir la maravillosa sensación de sus manos entrelazadas, con el bello escenario de la ciudad de Japón totalmente decorada con luces navideñas.