9 de Octubre, Toronto, Canadá, 2004.
Era una noche algo lluviosa, la capital de Canadá, Toronto, anunciaba así, que era más que evidente y seguro, que el otoño se había instalado entre sus fieles transeúntes. Bo Dennis, una muchacha de ojos marrones oscuros, casi negros, se encontraba en un bar de la ciudad. Iba por su 7º chupito de absenta, sin pensarlo dos veces se lo tomó de un trago. Puso el vaso de golpe sin romperlo en la barra y su torso giró 90º grados a la derecha, sus ojos se cerraron fuertemente y su rostro se tornó en un gesto amargo. Supo que ya era momento de abandonar el bar, así que pagó al camarero y salió por la puerta de emergencia. Quizá destino, quizá coincidencia, se encontró de frente con algo que le hirvió la sangre. la muchacha, llevaba casi 4 días sin alimentarse y sus ojos, al ver con antelación lo que podría pasar, se tornaron azules eléctricos. Su mueca de enfado se tornó en una sonrisa malévola, inclinó la cabeza hacia un lado y le sonó el cuello y su sonrisa se tornó aún más malévola. "muy bien Bo, se acabaron las sutilezas" se dijo a sí misma. Sin pensar mucho más, se dirigió hasta el chico, lo agarró de la chaqueta, lo estampó contra la pared y sin darle tiempo a nada, le absorbió su alma de golpe. Una onda azul salía de la boca del chico, el cual, había intentado forzar a una muchachita gótica de no más de 20 años. Bo pudo sentir, cómo el alma de aquel chico, la alimentaba lo suficiente como para mantenerse un par de días sin volver a matar a alguien. Bo Dennis, no era una chica humana, se trataba de un ser que se alimentaba del alma de las personas, desde que había matado sin querer, a su novio Marck a sus 16 años, fue rechazada por su familia, como consiguiente se marchó de casa buscando un lugar en el mundo mientras se alimentaba. Cualquier persona pensaría que es una asesina, y Bo, se consideraba a ella misma como un monstruo, aunque no sabía lo que le pasaba, intentaba lidiar con ello, pues de sobra, ella sabía que sería algo con lo que tendría que aprender a vivir. Sus ojos se tornaron azules eléctricos por un momento al ver a la chica gótica, pero al instante volvieron a verse marrones oscuros, su mueca malévola se tornó como si la muchacha le hubiese echo un favor, mientras, la lluvia caía sin pena alguna. Aún tenía la mirada clavada en la chica gótica que la miraba asustada a los ojos, Bo respiraba agitadamente. Pasó la manga derecha de su chaqueta de cuero por su boca y sin pensarlo dos veces echó a correr para huir de la ciudad. Sus deportivas hacía tiempo que se habían desgastado, lo que Bo no sabía, era que sin dibujos en la suela del zapato resbalaría. Bo, llegó hasta el final del callejón dejando atrás a Mckenzi, que ese era el nombre de la muchacha gótica. La lluvia no dejaba de caer sin cesar. Antes de llegar a la carretera, como si hubiese pisado una cascara de plátano tirada en el suelo de mármol su pié izquierdo se elevó y su cuerpo cayó en el suelo. Como consecuencia, su cuerpo cayó en el suelo. Tras caer de culo, se golpeó el coxis y su cabeza rebotó en el suelo. Kenzi corrió hasta ella, por suerte para Kenzi, pasaba un muchacho llamado Dyson que decidió ayudarla.
-"¿Qué ha sucedido?" preguntaba Dyson mientras corría a socorrer a Bo.
-"Se ha resbalado y se ha golpeado la cabeza" dijo Kenzi al lado de Bo con algo de miedo.
-"Algo me dice que no es lo único que ha pasado ¿me equivoco?" decía Dyson mirando a Kenzi.
-"No sé si debería decirlo" dijo Kenzi algo asustada mientras temblaba de miedo a la par que frío.
-"Si no lo dices, no puedo ayudar a esta chica" decía Dyson con los ojos entrecerrados por la lluvia.
- "Dios... se que luego me arrepentiré pero... esta chica, me salvó de un malnacido que quedó muerto atrás, no se si porque voy borracha o porque me han drogado, pero pude ver cómo ese chico parecía quedarse sin alma, de él salía algo azul y entraba dentro de esta chica" dijo Kenzi mirando intermitentemente a Bo y Dyson.
-"Está bien, no te preocupes, llevaremos a esta chica a un hospital especializado en golpes para descartar cualquier problema, a ti también te revisarán por si te metieron algo en la bebida o simplemente es que llevas unas copas de más" mentía Dyson mientras llamaba por teléfono a Hale.
-"¿Se pondrá bien?" decía Kenzi preocupada por Bo, mientras, agarraba fuertemente su mano.
-"No te preocupes, se pondrá bien" dijo Dyson convencido de que Bo, no era humana.
-"¿Qué me he perdido?" dijo Hale llegando con su carismática sonrisa hasta Dyson, Bo y Kenzi.
-"Se ha golpeado la cabeza, parece solamente estar inconsciente, creo..que tenemos un problema..." Dijo mirando atrás dando a entender que había un cadáver tirado que debía ser procesado policialmente.
-"Señorita, haga el favor de acompañarme" dijo agarrando con firmeza pero con cariño y compresión los brazos de Kenzi para levantar a la muchacha del suelo, ya que se encontraba de rodillas.
