Escritores y Star Wars fanfic
"LA GUERRA DE LOS FANFICS"
por Ivan Emiliano Altamirano Advertencia: Todos los personajes en
este fanfic son propiedad de...un momento! Creo que no hace falta
decir esto...solo lean el fanfic y espero que les guste.
Agradecimiento: Le doy todas las gracias a los escritores de fanfics que me dieron su permiso de incluírlos en esta historia. Perdonen si no les gustó como les pusé, pero no había remedio.
PROLOGO
Esta historia ocurre a miles de años
luz, hace mucho, mucho tiempo, en un lugar muy, muy lejano...(eh,
creo que ya han oído eso antes). En fin, la galaxia animee
(oigan! acaso no me dirán que un tras un escritor, no hay un
fan emperdernido del animee)...ok, terminemos con las aclaraciones y
pongamonos serios.
Donde iba? Ah sí, en la galaxia animee,
existían miles de planetas y sistemas que estaban bajo la
jurisdicción de la República únida de planetas,
un sistema de gobierno democrático y justo que gobernaba con
justicia toda la región (suena a sueño guajiro).
La
sede de la República era un planeta en el centro de la misma,
llamado Pergamino (¡!), el cual albergaba un gran senado donde
los representantes de los planetas daban su opinión y dictaban
leyes en beneficio de todos, para no hacer largo el cuento, era el
modelo perfecto de gobierno.
Sin embargo, gente ambiciosa (como
siempre) trató de derrocar a la República y como los
conflictos no faltaban, los Caballeros Jedis, seres legendarios, con
poderes basados en una antigua religión donde la Fuerza era el
centro de su poder, controlaban cualquier acto de rebeldía y
de maldad sin mayores problemas.
Sin embargo, la Fuerza como el
poder, no distingue entre el bien y el mal, un Caballero Jedi hace
100 años trató de utilizar sus poderes para su
beneficio, para ser poderoso. Así inició la batalla
eterna entre el bien y el mal, entre los Jedis y los Sith, y como su
conflicto, llegó a afectar la galaxia entera...
Los Jedis
lograron triunfar, pero al final, un puñado de caballeros
oscuros sobrevivió...
Prologo 2
La lluvia caía a raudales enmedio de la
plataforma plateada. Dos figuras se miraban sin perder detalle
mientras los sables evaporaban las gotas sin chistar.
-Nieves, es
tu última oportunidad. Unete a mí y juntos...
-Se el
resto, dominaremos la galaxia como amantes, pero lo siento David, no
eres mi tipo.
-Temía dijeras eso
El sujeto de negro se
lanzo con todo hacia la joven. Esta repelio los primeros embates con
maestría. Luego giro para cortar en dos a su enemigo, pero vio
con sorpresa como había desaparecido.
-Tecnica Kunoichi -
murmuro Nieves girando su sable a gran velocidad - sin embargo, eso
no va a...ah!!
La Jedi no preevio que el ataque viniera por
debajo, recibiendo una patada en las piernas. Nieves giro sobre sí
misma para evitar caer, pero quedo desprotegida. El atacante aparente
frente a ella y giro su sable. Nieves solo parpadeo, cuando su mano
se alzaba grotescamente fuera de su cuerpo. Antes de que pudiera
decir o gritar, el sujeto la pateo fuertemente. Salio volando fuera
de la plataforma enmedio de un fuerte relampago. Este se asomo y vio
como el agua caía a raudales enmedio de una gran ráfaga.
Una carcajada maligna emergio de sus labios mientras sus ojos se
iluminaban.
-No podrás impedir el renacimiento del
"Anticristo"...El Sith esta destinado a dominar al Universo
entero!
Dagobah...
Un sujeto diminutivo, un alienigena de color verde y
grandes orejas, caminaba lentamente por la vereda oscurecida del
planeta. Sin embargo, se detuvo y miro hacia arriba. Abrio los ojos
desmesudaramente al ver 1 estrella rojiza enmedio del
cielo.
-Imposible - murmuro - esto es. El día del juicio
final se acerca... - solto un largo suspiro - Ave Satani. La marca
del demonio ha surgido...solo el Elegido vencerlo podrá...
Hace
mucho tiempo, en una galaxia
muy, muy lejana...
FANFICS
WARS
Capítulo I
La Fugitiva
LA PAZ Y LA ARMONIA REINA EN LA GALAXIA GRACIAS AL GOBIERNO DE LA REPUBLICA Y LOS CABALLEROS JEDIS DISPERSOS EN DIFERENTES SISTEMAS CON LA MISIÓN MANTENER EL ORDEN.
SIN EMBARGO, ESTA PAZ ES RELATIVA YA QUE HAY AMENAZAS DE QUE SURJA UNA NUEVA GUERRA ENTRE EL JEDI Y EL SITH
Y MUCHOS SISTEMAS SE VERAN AFECTADOS...
Año 30XX, Planeta Pergamino, Inmediaciones del Templo Jedi
-Vamos joven padawan, te falta enfocar más tu
poder
-Sensei, me gustaría hacerlo, pero usted se la pasa
críticandome todo el santo día
-Y que querías?
Lo único que haces es salir de juerga a las computadoras
-El
entrenamiento no tiene que ser tan aburrido - sonrió el chico
mientras sostenía un sable de luz.
Dicha arma, el sable de
energía, era el toque de distinción y poder de un Jedi,
no utilizaban otra cosa que el sable, lo cual les daba un rango
superior.
Como ven, el joven que esta siendo entrenado, de
cabellos negros y ojos castaños, mirada arrogante pero
decidida, practica para convertirse en un caballero Jedi, y dejar el
rango de aprendiz o padawan.
La chica o mujer que lo entrena, es
su sensei. Los Jedis son entrenados desde muy jovenes para poder
unificar mejor su poder con la Fuerza. Tan pronto son Caballeros,
ellos reciben a su vez un chico que se convertira en su aprendiz. En
el caso de la joven (se supone que es joven) lleva unos 10 años
entrenando a su primer padawan. De cabello negro corto y mirada
penetrante, aunque algo soñolienta, observa los movimientos de
su aprendiz mientras practica con un rotor, un dispositivo que hace
de disparador, con el cual puede entrenar sus movimientos.
-Ten
cuidado Ryoga!
-Ya lo sé Sensei, ya lo...ah!! - el rotor
dispara sin que se de cuenta y el joven sale corriendo mientras su
cabello comienza a quemarse. La jedi solo mueve la cabeza con
pesar.
-Creo que necesitas seguir practicando
Entre tanto, en el espacio exterior de Pergamino, a millones de
kilometros, una nave de aspecto desconocido va a gran velocidad,
mientras varios cazas de color oscuro lo persiguen con saña
-Tengo
que llegar - exclamaba la piloto mientras esquivaba los disparos de
sus captores, pero finalmente, en un descuido, logran darle en un
alerón, perdiendo toda la estabilidad.
-Mayday! Mayday! -
grita por el comunicador. El crucero da varias vueltas y en un
desliz, la piloto se golpea con el panel de control, perdiendo el
conocimiento. La nave se precipita hacia Pergamino.
-¡Malaya!
- grita uno de los perseguidores - no podemos seguir
-Esto no le
gustara al Señor
-Ni que lo digas, será mejor
regresar...tal vez no logre salir con vida
Las naves dan media
vuelta mientras el crucero herido cae a la atmósfera...
Templo Jedi.
Tanto la Jedi como su aprendiz caminan lentamente
por los campos de entrenamiento, una sección artificial, que
esta colocada a lado del Templo Jedi, el centro y lugar de reunión
de todos los Jedis, los cuales se establecieron luego de la Gran
Guerra del Sith y es su cuartel general, así como la lanzadera
a los miles de Caballeros que rondan la Galaxia.
Un ligero humo
negro aun brotaba de los cabellos mojados del padawan que había
corrido al lago más próximo para terminar con su
percance.
-Eres demasiado impetuoso joven padawan
-Sensei, no
deja de regañarme...solo estaba probando ese
movimiento
-Exponer tu cabeza burlandote del rotor no es algo que
debe considerarse
-Je, lo siento - el joven sacó la lengua
mientras su maestra lo miraba con regaño.
-Conchita...
-Sensei,
dime sensei...igualado
-Lo siento...
-Siempre disculpandote, no
entiendo porque eres tan insolente
-Soy un chico,
recuerdas?
Conchita levantó la vista implorando piedad.
Conchita Nemain, una prominente Caballero Jedi, llevaba ya 10 años
entrenando al impetuoso Ryoga Antilles, un padawan bastante arrogante
e imprudente (me recuerda a alguien). Ella hubiera preferido una
chica, pero la mala suerte, según ella, le había caído
cuando vió a este chico hace 12 años. Era talentoso,
pero demasiado ocupado con otras cosas, como los videojuegos, los
libros y el deporte, por lo cual, siempre iba a la zaga con respecto
a los demás padawans.
-Ser un chico tampoco te da excusas
para ser como eres...deberías
-Lo sé, "Ser como
los demás", ya lo sé
-Lo sabes, pero no lo
aplicás
Ryoga volteó la mirada mientras Conchita le
dirigía una mirada de regaño.
-En la vida, debes ser
el mejor, el primero o el diferente - murmuro
-Como sea, debes
seguir entrenando mi aprendiz
Ryoga iba a hablar cuando se escuchó
una explosión.
-¿Que fue eso?
-Ni idea, pero
parece que fue una nave que se estrelló
-¿Uso la
Fuerza oh gran sensei para verlo?
-No, ví el humo de un
crucero a lo lejos
Ryoga frunció el cejo con desilución
y siguió a su maestra. Finalmente llegaron al claro y una nave
yacía totalmente de espaldas en uno de los jardines
accesorios, el humo era bastante denso y algunas llamas emergían
de las alas.
-Ryoga, ve a los cuartiles y trae un doctor, yo
tratare de ver si hay sobrevivientes
El chico asintió y
salió hacia el Templo. Conchita sacó su sable de luz y
partió con rapidez la compuerta. Entró enmedio de una
humadera. Cerró los ojos y con la Fuerza, comenzó a
detectar presencias en el lugar. Solo un ente se encontraba
-Allí
- hizó un movimiento con el aire y dispersó el humo por
unos momentos. Una piloto yacía en la cabina,
inconsciente.
-Vaya - Conchita checó el pulso. Estaba con
vida. Tomó a la joven y la llevó hacia afuera - me
sorprende que halla sobrevivido.
Conchita se alejó lo más
posible de la nave y colocó a la joven en el suelo. Ryoga
apareció, pero sin médico, salvó con un
maletín
-¿Y el doctor?
-No habie nadie - Ryoga se
arrodilló - pero al menos traje lo que necesitó
-Te
he dicho que...
-Tranquila sensei, no le hare daño, ahora
he estado practicando
Conchita miró con expectación
a su aprendiz. Todos los Jedis, además de tener habilidades
propias de su rango, nacen con un talento especial. En el caso de
Conchita, era poder comunicarse con cualquier persona, inclusive
animales y plantas, entender su sentir o sufrimiento. El de Ryoga era
un extraña habilidad de curar a las personas, como si fuera un
médico.
-Primero tenemos que comprobar signos vitales -
Ryoga sacó un estetoscopio y comenzó a verificar.
Frunció el cejo y entonces se colocó a lado de la
chica.
-¿Que ocurre?
-No respira... - Ryoga comenzó
a darle respiración de boca a boca, pero al tercer movimiento,
la chica comenzó a toser y entreabrió los ojos.
-Parece
que ya esta - de nuevo revisó su condición con un
estetoscopio y un baumanómetro - hay signos - entoncés
sacó un aparato y lo colocó en la boca de la joven.
Luego de un minuto, lo sacó y leyó el monitor
-Su
PO2 es baja, CO2 alto. PH 7.2, alta concentración de
carboxihemoglobina...creo que sufrió intoxicación por
humo - acto seguido sacó un pequeño aparato y tomó
a la chica - aspira esto, te ayudará. Es oxígeno
La
joven no respondió y solo tomo el ventilador,
succionándolo.
-De todas formas, tiene que verla un doctor,
pero parece que se pondrá bien - sonrió. Conchita miró
con satisfacción a su alumno. A pesar de ser un torpe en sus
habilidades jedi, era bueno en otras cosas
-Y bien - Ryoga se
inclinó - ahora mis honorarios
Conchita le salió una
gota de sudor.
Mientras, varios Jedis miraban la escena con
expectación, entre ellos una joven de ajustado traje rojo, que
no parecía estar muy contenta con lo sucedido.
-Así que ya esta bien doctor?
-Sí - sonrió
el galeno mientras miraban a la chica por la TV dimensional - Ryoga,
te felicito. La carboxihemoglobina se corrige con altas
concentraciones de oxígeno
-Gracias - asintió el
joven - pero sino, no se salvaba
-Tienes un buen alumno
Conchita
-Eso se supone, pero doctor, es el único que me lo
ha dicho...en fin, quería cobrarle a la chica
-Ryoga...
El
chico se encogió de hombros apenado.
-Creo que ire a
buscarle su expediente...de seguro su familia debe estar
preocupada
-Esta bien - Conchita asintió. La chica miraba
el proyector holografico, pero con una expresión triste.
-Hola
- la Jedi se acercó. Ella se volvió
-Gracias por
haberme salvado
-No fue nada, cual es tu nombre?
-Barbara,
Barbara Chekka...perdonen el destrozo en su jardín
-No hay
problema - se sentó en la cama junto a ella - que andabas
haciendo? Acaso escapaste de casa?
La joven negó con la
cabeza
-Lo siento, pero no puedo decirlo...es algo
secreto
Conchita frunció el cejo. Ahora notaba miedo y algo
de terror en aquella joven.
-Bueno, si no quieres decirlo, sabes,
nosotros podemos ayudarte
-Nadie puede ayudarme... - dijó
con un halo de tristeza - nadie...
Conchita se levantó y
volteó. Ryoga le hacía una seña desde la
puerta.
-¿Que ocurre? - La Jedi salio de la habitación
-No
esta en los registros...creo que es extranjera
-Lo es - Conchita
la miró - parece que nos esconde algo
-Que raro - Ryoga la
miró - yo solo percibó dolor
-Siempre
malinterpretas, debes unirte con la Fuerza más joven
padawan
-Esta bien, pero... - Ryoga notó como su maestra
mantenía la mirada fija. Luego pareció despertar
-Acaso
vió el futuro de la chica?
-Sí - la Jedi pareció
desconcertada - pero eran demasiadas cosas...una batalla...una
familia...un planeta...un Sith
-¿Un Sith? - Ryoga tembló
- acaso...
-Eso es imposible. Los Siths tienen centurias extintos.
Tenemos que averiguar que tiene de especial y porque apareció
en el Pergamino
-Bien, dejemelo a mí
-Ryoga, no es
momento de jugar al Don Juan
-Maestra, usted siempre
malinterpreta, solo hablare con ella
-Como quieras, pero no
juegues
-¿Jugar? Acaso... - el chico miró a su
sensei - bien, bien, olvídelo
-Iré a ver al
Consejo...
Ryoga asintió y fue con la chica...
A miles de años luz, en el planeta Malagaste, uno de los 6
que integran el sistema Hispania.
El planeta, una vez hermoso,
ahora se encontraba en ruinas. Miles de ejercitos marchaban por el
lugar mientras las naves cazas Stukgas, de fabricación
militar, rondaban por los cielos.
En lo alto del castillo
imperial, una figura parecía mirar con cierta satisfacción
los eventos sucedidos.
-Tenemos total control del planeta señor
- un soldado ataviado con ropas medievales apareció - el
último resquició, el fuerte Asturia cayó por
fin
-Bien, bien - el joven se volvió - informen al Señor
y luego comiencen con el plan. Este lugar nos servirá de
fuente de energía para los reactores de la Estrella
-Como
ordene Lord Eagle - se despidió el soldado. El sujeto, vestido
totalmente de negro, pero con un capucha que simulaba el emplumado de
un halcón, se volvió lentamente hacia la ciudad Core,
la mayor de todo el planeta. Solo había tomado unos días
acabar con la resistencia. Las escasas transmisiones filtradas, con
llamadas de auxilio, no habían sido respondidas. Era lógico.
Nadie creería una guerra a gran escala.
Entonces una
pantalla apareció atrás de él. Eagle era de
pelos castaños, y mirada fría y temible.
-Señor
Eagle, una comunicación de los Interceptors
-Bien,
proyectenla
Una imagen borrosa apareció. Era otro joven,
vestido de negro, con aspecto preocupado
-Y bien Battousai, que
pasó con la chica?
-La perdimos - murmuro agriamente. Eagle
frunció peligrosamente el cejo
-¿Como que la
perdieron?
-Bueno, se acercó demasiado a Pergamino...si la
hubieramos seguido, nos hubieran detectado
-Lord Demon se
enfadara, ustedes lo saben
-Lo suponía - apareció
alguien a lado de Eagle - sabía que fallarías al
atrapar a la chica
-Deluxe...deja de meterme en mis asuntos
-Como
quieras, pero ya fallaste. El Señor no estará muy
complacido
-Je, al menos seremos dos
Deluxe pusó una
mueca de enojo mientras Eagle soltaba una risita
-Bien, por el
momento la dejaremos así...de seguro volverá, su
familia no durará mucho tiempo - Eagle se volvio hacia lo que
era el trono del Rey. Lo miro un momento, para luego volverse y
partirlo en dos con su sable.
-Así caera la República
- murmuro - tal como cayo Amy...
Pergamino...
Conchita colocó su mano frente a un panel
de identificación. La puerta cambió de rojo a verde y
se abrió. Una sala de forma circular apareció frente a
ella, así como 12 personas, el Gran Consejo Jedi, los 12
sabios más importantes de la Orden.
-Saludos Nemain...hemos
recibido tu solicitud, y es algo que hay que ver
-Lo sé
Maestro Wolf - asintió la chica viendo que el Consejo sabía
los detalles del accidente - esa joven tiene una carga de energía
muy extraña
-¿Un Sith? - preguntó otro
maestro
-No lo sé Maestro Shion, solo sé que su
mente es una mezcolanza de imagenes terribles
-El lado oscuro es
díficil de ver - exclamó otro de los maestros, que era
mucho más alto que una torre y con una cara incrustada de
rocas - tendrás que averiguar lo que ocurre con la joven. El
Sith no ha muerto, eso puedo asegurarlo...mil años han pasado,
pero no son suficientes para erradicar el mal
-Mi aprendiz esta
tratando ahora maestro Soullard, pero temo que no tendrá éxito
tampoco
Los 3 maestro jedis, Black-Wolf-Equis, Saulo Shion Gi y
Jullian Soullard, los más antiguos y venerados de toda la
orden, parecían encabezar el consejo, miraron con cierta
sonrisa maliciosa
-Sabemos lo que piensas Nemain, así que
no des rodeos
La Jedi frunció el cejo molesta
-No
podemos cambiar a tu aprendiz, llevamos 10 años
diciendotelo
-¡Pero maestros! Ese chico va a colmarme la
paciencia...porque no me dieron una niña para entrenar
-Era
parte de un experimento - dijo uno con aspecto de lobo, el maestro T.
Wolf
-¿Experimento? Eso es injusto! Las mujeres somos
descriminadas, no cabe duda
Los 4 Maestros solo se encogieron de
hombros
-No refunfuñes...es un chico que tiene talento -
dijo otro maestro de aspecto juvenil, demasiado para ser parte del
Consejo
-Pero es demasiado atolondrado Maestro Kudo!
-Lo
sabemos, por eso lo dejamos en tus manos. Tú eras igual que él
cuando te entrene
-No me haga recordar cosas tristes - exclamó
Conchita - pero esta bien, ya casi se gradua...bueno, si no vuelve a
errar en las pruebas
-Dile que tenga paciencia, eso es todo
-Bien,
lo hare - Conchita se inclinó - entonces, si averiguamos la
procedencia de esa extraña joven, nos dejaran partir a
averiguar el asunto
-Podrás ir - sonrió el Maestro
Shion - pero ten cuidado, esto puede significar el inicio de una
nueva guerra y no queremos ya más derramamientos de sangre
innecesarios
-Bien, como ordene Maestro - se levantó -
tengo luz verde
-Que la Fuerza te acompañe - le
despidieron. Mientras Conchita salía, los 12 maestros se
miraron
-Sinichi, que opinas?
-Eso será peligroso, sería
mejor que no fueran solos
-Nemain es muy capaz, igual que su
aprendiz, pero esto... - Black se tocó la barbilla - siento
algo muy oscuro aquí...creo que no perderemos el tiempo - tocó
un interruptor de su asiento y habló - díganle a Cloud
Strife que lo necesitamos, que venga al Consejo...es confidencial.
Conchita bajó con preocupación al cuarto donde
tenían a la joven. Vió a Ryoga con un expediente médico
en la mano
-¿Al fin hablo?
Ryoga tomó aire
-Nada
- soltó todo lo que tenía en un suspiro. A la Jedi le
salió una gota de sudor
-No quiere decir ni una palabra, no
me dirigió ni siquiera la mirada desde que me dijó su
nombre
-Je, tienes buenas cualidades para comunicarte con las
mujeres
-No es mi problema que ustedes sean tan volubles... -
Ryoga se calló por un coscorrón de su maestra
-Más
respeto! Acaso no te enseñe modales
-Lo siento sensei -
Ryoga se tocaba el brazo adolorido - pero es cierto
Otro coscorrón
y el chico saltaba de dolor de un lado a otro.
-A veces me das
pena, eso no lo hace un Jedi
-Bien, bien - el chico guardó
silencio - y ahora que haremos?
-No lo sé, su mente es
díficil de ver...
-Igual que ella misma, a proposito,
cheque los examenes que le hicimos
Conchita tomó el
expediente y vió los resultados con normalidad...salvo
uno.
-5000 midiclorianos... - dijó con algo de
sorpresa
-Tiene sensibilidad a la Fuerza. No es una Jedi ni
aprendiz, pero con un buen entrenamiento...
-Es demasiado grande,
pero tal vez funcione...por eso no podíamos ver su mente con
claridad. Debió aprender parte de eso
-Como le dirían
ustedes Maestra, el sexto sentido o intuición
femenina
Conchita asintió y siguió viendo a la joven
que solo veía la ciudad por la ventana
-El Consejo nos dió
luz verde para investigar
-Eso esta bien, pero sin los datos
necesarios, no podremos ayudar a la...
-Maestra Nemain - un joven
apareció - ya tenemos los informes de la "caja negra"
de la nave
-Eso es perfecto - Conchita asintió - Ryoga,
quedate con ella, voy a averiguar lo que pasó
El aprendiz
asintió
-Ojalá podamos ayudarla - se volteó...
Ryoga miró el reloj puestó en la pared de la
habitación.
-Han pasado dos horas - pensó - desde
que estoy aquí y ni siquiera me dirige la palabra
Siguió
viendo a la joven, la cual no daba señales de
respuesta.
-Chts! Que hare...la Sensei se esta tardando
Ryoga
sentía algo de desesperación. Podía percibirla
de la joven, su impaciencia, aunque no la exteriorizaba, hacía
mover la habitación y la Fuerza misma.
-Aun no domina sus
sentimientos - sonrió - puedo sentir algo...bueno, yo tampoco
soy bueno en esto, pero...
-Tu mundo ya debe estar destruído
- se oyó. La chica se volvió hacia Ryoga que fingía
desinteres - si no nos dices que ha pasado, no podremos ayudarte
La
chica quisó hablar, pero se calló y se volvió
rapidamente.
-Tu familia, tus amigos...tu casa, todo puede estar
destruído... - Ryoga notó que no podía
contenerse - y tal vez tu perro
-Deja de decir eso! - contestó
con enojo - no ves que me estas haciendo sufrir
-Vaya, hasta que
hablaste - se acercó - ahora sí podemos conversar
-No
quiero hacerlo, nadie puede ayudarme...ni siquiera ustedes que son
Jedis
-Sabes quienes somos, pero no lo suficiente
-Ustedes
nunca podrían ganarles
-Ganarles? - Ryoga pensó con
cierta sorpresa - deben ser los Sith
-Nadie puede ganarles, son
invencibles, ellos destruyen nuestro planeta en.. - la chica comenzó
a echarse a llorar. Ryoga le acercó un pañuelo - ellos
son horribles
-Lo sabemos, por eso tenemos que...
-Nadie puede
ayudarme...son temibles
-¿Sabes quienes son?
-No, solo
se que vestían totalmente de negro y que portaban blasters y
tanques de batalla
-¿Blasters? ¿Tanques? - meditó
el chico - entonces no son los sith...tal vez alguien que quiere
rebelarse
-Y porque dices que podemos ser de utilidad?
-Ellos
nos amenazaron y dijeron que no podrían ni siquiera los Jedis,
nadie en absoluto
-Solo te lavaron el cerebro, nosotros
liberaremos tu planeta, no te preocupes
-Pero...
-No te
preocupes, los venceremos - dijó Ryoga con confianza. La joven
lo miró con cierta reserva, pero denotó una
sonrisa
-Eso, no te desanimes...ahora tienes que ayudarnos, tienes
que decirnos de donde eres y que paso con tu planeta Barbara
-Esta
bien - se limpió las últimas lágrimas - lo
hare...
Conchita regresaba del taller con frustración. La caja
negra no había sido dañada, pero no contenía más
que frases de auxilio y sonidos de ataque. Ahora era seguro, ella no
se había estrellado por accidente, sino que había sido
derribada. No dentro de Pergamino, sino fuera del espacio.
-No
cabe duda de que la Fuerza esta con ella - musitó - si hubiera
sido alguien normal, no habría sobrevivido al choque
Además,
la nave casi no se había cuarteado en el trayecto, salvo un
disparo en el alerón. Naves como esa no existían en
gran cantidad en la galaxia, salvo en ciertos sectores.
Mientras
los técnicos investigaban, Conchita regresaba a la habitación
y vió con agrado que Ryoga y la chica platicaban con
soltura.
-Parece que lo logró - pensó y se
acercó
-Chicos, como han estado?
-Hola - se volvió
la joven - gracias de nuevo, Ryoga me ha dicho que podrán
ayudarnos
-Claro que los ayudaremos, pero necesitamos saber todo
sobre tí...no estas en los registros
Barbara asintió
-Como
saben, me llamó Barbara, vengo del planeta Malagaste, del
sistema Hispania
-Eso esta casi al otro extremo de la Galaxia -
comentó Conchita
-Sí, no estabamos en unión
con la República, pero mi padre, ya estaba en términos
de aliarse con ella
-¿Tu padre?
-Sí - intervinó
Ryoga - ella es una de las dos hijas del soberano del planeta
-Vaya,
entonces eres una princesa?
-No precisamente - sonrió con
tímidez - mi hermana, Belen es la heredera al trono...en
cambio yo, iba a prepararme para ser una estudiosa de mi pueblo
-Eso
esta bien - sonrió - pero se nota que sabes pilotear
-Me
enseñaron como parte de mi educación formal...siempre
me ha gustado ser una combatiente, y no tanto el papel de hija
refinada de mi padre
Ryoga observó con sorpresa como
Barbara había cambiado. Detrás de ese exterior, tenía
un carácter fuerte y decidido
-En fin, entonces dices que
fueron invadidos
-Sí, pero no supimos cuando. Un día
atacaron el palacio, tomados por sorpresa. Muchos murieron y mi
familia fue encerrada para obligarla a firmar un armisticio. Yo logré
escapar
-Pero los tanques, los soldados...todos hubieran sido
detenidos
-Eso no fue la razón de que cayó el
palacio, sino que algo invisible nos atacó...no pudimos verlo,
pero yo sí...eran Gaimelechs
-¿Gaimelechs? Eso no
puede ser, fueron prohibidos por su ferocidad al ataque
-Y aun
así, son enormes, cualquiera los hubiera visto
-Nadie los
vió, salvo yo...parece que llevaban algo que los hacía
invisibles
Conchita miró a su alumno con una mirada que el
le devolvió. No cabía duda de que Barbara poseía
talento.
-Bueno, y no pudiste ver a los invasores
-Solo a los
soldados, pero no a los líderes...aunque debó decir que
siempre tenía un extraño presentimiento, de algo
maligno y tenebroso. Yo quería quedarme con mi familia, pero
mi padre me obligó a escapar...Dios! Quisiera saber si estan
bien
-De seguro lo estan, te ayudaremos
-Entonces fuí de
ayuda?
-Claro - asintió la Jedi - sabemos a donde ir y a
que enfrentarnos, pero para mandar una fuerza de la República,
tenemos que verlo por nosotros mismos
-Que! Entonces no me
creen!!
-Te creemos, pero - sonrió Ryoga - si no son tan
fuertes, solo nosotros podemos encargarnos de esto
-Gracias,
muchas gracias - les tomó las manos a ambos - entonces
rescataremos a mi familia y a mi pueblo, gracias!!
Tiempo después,
luego de hablar un poco más y despedirse de Barbara para que
pudiera descansar, los dos jedis conversaban afuera en voz
baja
-Tiene poder, usa por instinto la Fuerza
-Eso pude ver, si
los Gaimelechs existen, ella tiene razón
-Esas cosas fueron
vetadas desde su gran poder de destrucción, aun me niego a
creer que existan
-Pueden existir mi joven padawan...nosotros aun
usamos algunos
-En este caso, debemos llevarlo
-Creo que sí,
esto no me gusta...
-A mi tampoco sensei...sabe, he estado algo
resfríado
Conchita le dió un buen zape a su
discípulo
-Deja de bromear, esto es serio
-Lo
siento..auh - dijó mientras se tocaba la cabeza.
Fin del capítulo
Notas del Autor versión 2.0
Sí, FW se
reestructura en todos los capítulos, incluyendo las notas.
Luego de 6 años, comenzare nuevamente a escribir esta historia
de abajo para arriba. Se que muchos no les gustara, pero quiero
encontrar nuevamente ese sentido que tenía para escribirla.
Durante el trayecto me desvíe en algún momento y esto
paso de ser una historia para divertirse, a un mero proyecto
psicológico de su servidor, y esa no era la opción.
Ahora vuelvo a escribir y espero a muchos les agrade la nueva versión
de Fanfic Wars. Nos vemos en el siguiente episodio...
