Disclaimer. Kuroko no Basuke pertenece a Tadatoshi Fujimaki. No saco ningún tipo de provecho económico con la publicación de este fanfic, el cual es de mi completa y total autoría.

N/A. Este fanfic es la respuesta al reto llamado "10 Little Things…", lanzado por FantasyAcquired de la página Lunaescense. Dicho fanfic podrá encontrarse en mi cuenta allí, bajo el nick Wonderful Mess, una vez haya sido traducido al inglés y propiamente beteado.

Defecto #1
A veces eres imbécil

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"Deja de joder."

Aquellas fueron las primeras palabras que Aomine Daiki te dedicó, cuando tratabas de llamar la atención de Kise porque al rubio se le había olvidado coger su móvil y corriste tras de él para devolvérselo.

Siendo sincera contigo misma, en aquel momento te quedaste a cuadros; sin habla. No conocías a aquella persona de nada y, a pesar de estar haciendo un poco de escándalo, sin lugar a dudas no tenía el derecho de mandarte ¿a callar, a tomar por saco? Parpadeaste un par de veces, devolviste lo que tenías que dar y decidiste despedirte con una breve reverencia, algo aturdida.

"¿Otra vez tú, pesada?"

Fue lo que te dijo la segunda vez que os cruzasteis, de nuevo gracias a que Kise se había olvidado el móvil en el trabajo. Frunciste el ceño, pensando cómo semejante bárbaro podía ser amigo del rubio (no por nada, simplemente porque no entendías cómo el rubio podía soportar tal carácter). En aquella ocasión estabas preparada para una réplica que nunca llegó dado que Kise logró calmarte antes de meter la pata.

Enojada te diste la vuelta y te marchaste, no sin antes advertir a Kise que no volverías a correr tras de él a devolverle el móvil si andaba con compañías tan barriobajeras.

"Kise. Esta mujer está plana."

La gota que colmó el vaso, se podría decir. Sí, nunca habías tenido mucha delantera. Sí, te acomplejaba un poco. Y sí, odiabas que te llamasen "plana", ¿pero a qué mujer no le molestaría?

Ese día montaste un verdadero escándalo, llamándolo "pervertido" y dándole una buena patada —para tu gran decepción no en sus partes, pero aún así— que le dejó sorprendido. No se lo esperaba de ti, aunque tú tampoco lo esperabas. Sin embargo te sentías satisfecha de ver su cara de alucinado y con la cabeza bien alta seguiste tu camino a casa.

"Aquí tienes, por lo de hoy."

La familiar voz hizo que quisieses hacer desaparecer a tal espécimen de la faz de la Tierra. Sin embargo lo que tenías delante era un helado (¡encima tu preferido!) de la mano del imbécil más imbécil que hubieses conocido jamás. Y, encima, era una ofrenda de paz. Alzaste tu cabeza para ver si se estaba burlando de ti, pero la realidad era que lo decía bien seriamente. Reticente tomaste el helado y musitaste un simple "gracias".

Él se fue por su lado y tú por el tuyo.

—Al final no es tan mal chico… —te dijiste a ti misma mientras quitabas el plástico del helado y empezabas a mordisquearlo.

Y ahí estamos con el primer defecto. :) Me encantaría saber vuestras opiniones al respecto así que agradeceré cada review que dejéis.

Con cariño,
Wonderful Mess.