Título: Rachel y Santana: Investigadoras de Secretos
Autora: Symbelmynne
Capítulo: 1 – I don't know anybody...
Palabras: 4,588
Parejas: Rachel Berry/Santana López, Quinn Fabray/Brittany Pierce, Sue Sylvester/Shelby Corcoran,
Summary: Es el último año de secundaria, dos años viviendo juntas y de novias. Pero alguien empieza a chantajear a todos con sus secretos. Incluida Santana. ¿Rachel y ella se separaran o juntas encontraran una solución? Tercera parte de Rachel Berry: ¿detective privado? Y Santana López: Consejera no Autorizada.
Rating: M
IMPORTANTE: Empieza con un poco de drama, pero es para ambientar la historia. Sé que no es mi fuerte, y que no me gusta escribirlo, pero de vez en cuando...jajaja.
También cuando dice S&R es un salto de tiempo en el mismo día. Y cuando se encuentra la línea de salto es porque cambia el día (esta parte depende del momento en que Rachel y Santana se acuesten a dormir a pesar de que no estén justo en ese momento)
Glee no me pertenece. Sino existiría Pezberry.
Fecha de Publicación: 09/07/2014
I don't know anybody...
Un nuevo año de secundaria estaba llegando a su término medio, mientras Rachel y Santana intentaban seguir con su relación (sin ningún tipo de problemas) y terminar finalmente su vida en Lima.
Extrañamente, Shelby y Lucía no lograban ni querían meterse en el medio de la relación de esas dos, aunque lo intentaran. Eran terriblemente habladoras y pasaban más tiempo tratando de resolver sus problemas solas que solicitando ayuda de sus madres.
Así que mientras Santana seguía siendo la capitana de las porristas, Rachel seguía siendo una alumna que en el pasado resolvía casos criminales.
Pero las dos juntas, después de la extraña fase en la que todos le pedían consejo a la latina, eran mucho más fuertes. Palabras de Lucía.
Rachel sabía que algún día iban a darle la razón o a demostrarle que estaba equivocada. Esperaba nunca tener que demostrarle que estaba equivocada.
"Hola" dijo Santana apareciendo al lado de la diva que caminaba hacia su casillero un lunes a la mañana de comienzos de noviembre. Ya estaba comenzando a hacer frío y se acercaban las fiestas.
"Hola" dijo Rachel
"¿Qué estás haciendo?" preguntó Santana
"Caminando hacia mi casillero, como todas las mañanas." dijo Rachel deteniéndose al frente de ese armario de metal que le correspondía por ese año. Ese grandioso último año. "¿Qué ha sucedido?" preguntó un poco intrigada por la pregunta de su novia.
"Nada, ¿por qué preguntas?" preguntó la latina incómoda, mirando hacia todos lados.
"Porque estás nerviosa" dijo Rachel
"No lo estoy." dijo la latina.
"¿Sabes que si pongo un poco de atención puedo descubrir que es lo que ha sucedido, pero que no lo quiero hacer porque voy a esperar que me lo digas?" preguntó la diva levantando una ceja.
"Sé que puedes descubrirlo si vas corriendo a preguntarle a Sue, pero no es eso..." dijo Santana acercándose a su novia. "Resulta que vi algo..."
"¿Otra cosa más?" preguntó Rachel. Sabía de que estaba hablando. Últimamente habían descubierto muchas cosas respecto a sus compañeros de escuela, incluso profesores. Tenían mala suerte.
"Si. Emma..." dijo Santana acercándose al oído de Rachel.
"¿En serio? Nunca lo hubiera imaginado" dijo la diva.
"Eso es lo que vi. Y me vio. Así que seguramente vamos a ser llamadas" dijo Santana.
"Serás llamada"
"No, porque todos saben que siempre nos contamos los secretos." dijo la latina.
"Ve, tienes que ir a clases mujer." dijo Rachel girando sus ojos. Santana sonrió y trotó hacia su casillero.
Rachel decidió que lo mejor era agarrar sus libros y se sorprendió al ver un pase para llegar tarde a la primer clase del día, con una nota pidiéndole que se presente en el aula de fotografía inmediatamente.
Miró hacia el lugar en donde encontraría a Santana, pero no la vio. Solo se encontró con Noah caminando hacia ella.
"¿Todo bien, princesa?" preguntó el joven.
"Si, Noah. ¿Me guardas el lugar en clases?"
"Si." dijo el joven confundido.
"Gracias" dijo Rachel caminando hacia el aula de fotografía rápidamente. Sabía que los lunes a primera hora no había clases de fotografía.
S&R
El nuevo profesor de fotografía era un joven inglés de clase media que había aparecido en Lima a mediados del año anterior. Hizo un par de suplencias en McKinley antes de que le ofrecieran un puesto completamente nuevo.
Rachel y Santana sabían bien porque le habían ofrecido ese puesto. Pero no iban a estar repitiéndolo por todos lados, no solo ponían en juego la carrera del profesor, sino también la vida romántica del mismo.
El profesor se movía nervioso por toda la habitación, hasta que vio entrar a Rachel. Caminó pasando a su lado y cerrando la puerta.
Robert Stevenson, era su nombre y a pesar de que Rachel siempre soñaba que había una L en el medio, sabía que no era así.
"Necesito tu ayuda" dijo señalándole a Rachel el escritorio. No iba a acercarse demasiado a ella, no cuando sabía con quien se acostaba ese hombre, día tras día, noche tras noche.
"Si es para abrirle los ojos en cuanto a gustos." dijo Rachel caminando despacio.
"Estoy siendo chantajeado" dijo el profesor caminando nervioso hacia el escritorio y señalando un papel que estaba justo en el medio.
"¿Chantajeado?" preguntó Rachel
"Si Figgins se llega a enterar..." dijo Robert dejándose caer en su silla, y llevando ambas manos a su rostro.
"¿Y es seguro que yo lo sepa?" preguntó Rachel
"Tú sabes con quien estoy casado" dijo el profesor.
Rachel asintió, primero para mover algo de su cuerpo que no sean sus piernas y para sacar su cabeza de su voz, adoraba ese acento inglés. Por el otro porque era cierto, sabía que se había casado en secreto con la hija menor de Figgins. Y por menor, significaba que la joven todavía iba a la secundaria (a pesar de que era mayor de edad). Por lo tanto, la diva decidió caminar hacia el escritorio y mirar el papel. Figgins le había ofrecido el puesto pensando que así podía sacarse de encima a una gran parte de padres que se habían fascinado con su acento inglés. Después de todo, muchos creían que sus hijos podrían aprender cultura con él. Por lo tanto esos padres insistieron tanto que le dieron el puesto, soportando los rumores que decía que el hombre satisfacía a las madres de sus alumnas. Aunque Rachel y Santana sabían la verdad.
Era una carta escrita con letras recortadas de diarios y revistas, con la foto de una noche entre su profesor y la joven hija del director.
"Quizás no sería tan grave si yo no fuera un inglés protestante" dijo el hombre.
"Y no se hubieran casado el día que ella cumplía 18 años" dijo Rachel.
"Más allá de eso, ese hombre me odia." dijo Robert volviéndose a parar al ver que Rachel estaba concentrada en la carta. "Cuando vine a trabajar a la escuela, tuvo que tolerarme. Pero ya nos habíamos visto antes."
"¿Cuántos años tiene?" preguntó Rachel
"55" dijo el profesor.
"No él. Ud." dijo la diva sacando su celular y comenzando a sacar fotos de la carta.
"32" dijo el profesor.
"¿Y ya lo había conocido antes?"
"Hay una asociación para profesores extranjeros, o algo así. No hay muchos en el estado de Ohio, así que yo iba moviéndome por el mismo tratando de encontrar un trabajo fijo. Tiene un grave problema con los ingleses."
"Figgins racista. Eso no lo hubiera imaginado. Pero estoy segura de que no es eso."
"Bastante. Además de que una vez, yo estaba a punto de casarme con su hermana menor"
"¿Y eso es cierto?"
"Si. Rachel, Andrea me ha dicho que eres capaz de resolver este misterio." dijo el profesor. "Necesitamos que lo resuelvas. No podemos juntar esa cantidad de dinero. No la tenemos."
"No le ha dado un plazo para presentarlo"
"Si, pero eso no es lo importante. Ella tiene acceso a su fideicomiso para la universidad, pero no quiero que lo use. Yo tengo algo guardado de mi herencia, pero al final de todo no quiero gastarlo. Es dinero para nuestro futuro."
"Profesor, dígame realmente porque Figgins lo odia tanto" dijo Rachel. "No puedo hacer demasiado sino sé bien toda la historia."
Robert Stevenson giró sus ojos.
"Está bien, supongo que no puedes ayudarme" dijo el hombre.
"Estoy dispuesta a hacerlo, pero tengo que saber toda la historia. En todo caso, cuando pueda hablar con su esposa, me avisa a que llegaron los dos. Aquí le dejo mi número de teléfono." dijo Rachel dejando el aula y camino a su clase.
No sabía quien podía llegar a estar detrás de eso, pero sabía que Santana a veces tenía la loca idea de chantejear a las personas cuyos secretos conocía.
S&R
"¡Tienes que hacer algo!" gritó la latina al ver a Rachel entrar en la cocina de su casa esa misma tarde, mientras salía corriendo escaleras arriba rumbo a su habitación y Quinn se quedaba sentada en la mesa mirándola enojada.
"¿Algo sobre qué?" preguntó Rachel despacio, mientras sus perros se acercaban a olerla.
"Supongo que algo sobre mi" dijo Quinn y la diva suspiró. Hacía un tiempo que la convivencia, sobre todo entre la latina y la rubia, estaba siendo difícil. "Según ella le arruiné el trabajo práctico que tiene que entregar en unos días. Además, no sé desde cuando está tan interesada en estudiar. Nunca movió un maldito dedo para hacerlo. Simplemente ahora está en toda la pose de ser la alumna perfecta."
Rachel sintió en su cuerpo el escalofrío. Antes de que Santana y Lucía se mudaran con ella, cuando Quinn se acercaba enojada hacia la diva, ya sea por mirar a Finn o por respirar, hablaba en ese tono neutro tirando a enojado. Quizás Quinn solo fuera la única que pudiera mantener ese tono. Pero Rachel estaba recordándolo casi a diario.
"Seguro tendrá sus razones" dijo despacio.
"Seguro que la defiendes porque te acuestas con ella." dijo Quinn poniéndose de pie.
"Quinn..." dijo Rachel mirándola.
"Lo sé. Lo sé. Me estoy comportando como una joven malcriada. ¿Crees que mi madre te hubiera dicho que evitaras que esto suceda?" preguntó Quinn.
Rachel solo la miró, tratando de mantener la distancia y una mano en cada perro. A veces parecía que Quinn comenzaba a hervir de furia dentro de si misma y esos animales eran los únicos que lo sentían.
"Yo se lo hubiera dicho" dijo Shelby entrando en la cocina y mirando a Quinn.
La rubia últimamente tenía estos altibajos. Muchas veces Rachel suponía que era porque en realidad estaba teniendo problemas con Brittany y ser madre a los 18 años seguía siendo tan difícil como a los 16 o a los 17.
"Lo siento, Rachel" dijo Quinn sonando mucho más sincera que otras veces.
"Está bien" dijo la diva.
"Voy a ir a mi cuarto. ¿Me avisan cuando llegue Lucía con Beth?" preguntó Quinn
"Si." dijo Shelby.
"Gracias" dijo Quinn dejando la cocina.
"¿Qué pasó?" preguntó Shelby acercándose a su hija y dejando un beso en su frente.
"Pelearon. Otra vez" dijo Rachel
"Esto sigue sin funcionar, Rachel" dijo Shelby.
"¿Qué quieres que le diga?" preguntó la diva. "No puedo pedirle a ninguna de las dos que se vaya. Y no quiero pedirle que se vaya"
"Podrías hablar con Brittany." dijo Shelby
"Quinn necesita ayuda de un tipo que no puedo darle, mamá"
"Lo sé."
"Voy a ir a ver a Santana" dijo Rachel caminando hacia las escaleras.
"Intenta no tener relaciones sexuales" dijo Shelby.
S&R
"Como me gusta esto de una computadora que funciona" dijo la latina mirando como las hojas salían por la impresora. "Quedó una copia del trabajo práctico. Ahora tengo menos ganas de matar a Quinn."
Rachel solo se sentó en la cama a esperar.
"Esta vez ni siquiera dijo algo. Solo entró en la cocina y vio que estaba con el trabajo práctico y le tiró café. Café, Rachel" dijo la latina
"¿En algún momento van a terminar con esta guerra que tienen entre uds.?" preguntó Rachel
"No, sigue con esa idea de que estoy acostándome con Brittany a sus espaldas"
Rachel asintió, sabía que hacía un tiempo la rubia venía gritando eso, tratando de hacerle entender a la diva que también era problema de ella.
"¿Estás chantajeando a la gente cuyos secretos conocemos?" preguntó la diva cambiando de tema.
"No." dijo Santana acomodando las hojas de su trabajo que terminó de imprimirse y girando para mirar a su novia. "Por un lado, porque la única vez que lo plantee tu mirada me hizo saber que si alguna vez ponía en practica esa idea ibas a dejarme. Por el otro porque mi madre también se enojaría mucho conmigo"
"Lo sabía." dijo Rachel. "Entonces, ¿será un caso aislado?" preguntó acostándose en la cama de Santana.
"Tenemos que hablar de Quinn." dijo Santana sentándose sobre su novia.
"No vas a convencerme con insinuaciones sexuales" dijo la diva.
"No iba a querer hacer eso." dijo Santana
"Rachel, Quinn te está buscando." dijo Shelby entrando en la habitación de Santana sin golpear.
"Cierto, madres" dijo Santana saliendo de encima de la diva.
S&R
"Para ser lunes, sobre que es un feo día en la semana, uds. dos me han complicado las cosas" dijo Rachel entrando en la habitación de Quinn.
"No te voy a hacer menos complicadas las cosas diciéndote que me voy a ir." dijo Quinn
"No venía a pedir eso" dijo Rachel. "Después de todo, ya todo termina. ¿Te diste cuenta?"
"No vengas con estupideces melancólicas"
"No sé por donde hablarte, Quinn. Realmente" dijo Rachel dejándose caer en la cama de la rubia. "Últimamente estás bastante complicada. Y no le quita que seamos tres adolescentes."
"¿Y yo que culpa tengo?" preguntó la rubia
"¿Tirarle café al trabajo práctico de Santana solo por qué si?" preguntó Rachel levantando una ceja.
"Estaba ahí. Estaba tentada."
"¿Por qué no creas una pequeña mafia dentro de la escuela y haces lo que hacías cuando eras la capitana de las porristas?"
"Porque a la única que quiero hacerle algo es a ti y no puedo"
"Touche." dijo la diva poniéndose de pie. "¿Puedo saber cuál es el problema conmigo ahora?"
"Tu presencia"
"Viendo que no llegamos a nada...me voy a retirar" dijo Rachel.
"¿Acaso no lo sabes?" preguntó Quinn sin quitarle la vista de encima.
"¿Saber qué, Quinn?" preguntó Rachel. "Sé muchas cosas pero parece que las que me involucran no las sé."
Quinn inclinó su cabeza y observó los ojos de la diva.
"¿No eres tú?" preguntó Quinn
"Si estás hablando del imitador de Liza que está cantando en ese bar en el pueblo, no. Para comenzar él es un hombre" dijo Rachel.
"En serio no lo sabes y no tienes nada que ver" dijo Quinn sorprendida y agarrándose la barbilla, pensando.
"¿De qué? Está bien si no me lo quieres decir, pero es muy cruel que intentes ganar mi curiosidad porque lo que en realidad quiero, en este momento, es averiguar de que rayos estás hablando" dijo Rachel dando media vuelta para salir de la habitación.
"¡Me están chantajeando!" gritó Quinn para que la diva no se fuera.
"¿Qué?"preguntó Rachel dando media vuelta y cerrando la puerta del cuarto de Quinn detrás de ella. "¿Quién?"
"No lo sé, pensé que era una de uds. dos" dijo Quinn incómoda.
"Quinn. No es la primera vez en el día que escucho algo sobre un chantaje. No, no soy yo. No es Santana tampoco"
La rubia la miró analizando sus palabras, estudiando cada opción.
"No puedo darte nada ahora." dijo Quinn
"¿Por qué?"
"Porque vas a meterte a investigar"
"Por esa razón me lo dijiste, Quinn."
"La última vez que investigaste terminaste con una bala"
"Si, que no pude recuperar para hacer un trofeo. Pero no le digas a Santana."
"¿Hay algún tipo de secreto que tengas que Santana no conozca?" preguntó Quinn
"Que yo sepa...no. Solo que me gusta comer limón."
"Con razón de vez en cuando eres amarga" dijo Quinn hurgando en uno de sus cajones. "Esto me llegó hace dos semanas. El segundo me llegó hoy"
Rachel agarró los papeles. El primero era exactamente igual al del profesor Stevenson.
"¿Cuál es tú secreto, Quinn?" preguntó despacio.
"¿En serio no lo sabes?" preguntó la rubia.
"No lo sé. Y parece que es grave, pero al final de cuentas, hoy nadie quiere decirme la verdad. Cuando quieras decirme la verdad de lo que está pasando, del porque hay alguien chantajeandote con un secreto que parece que vale mucho, me buscas. Vives en la misma casa que yo" dijo Rachel dando media vuelta. Hoy estaba cansada de la gente que no quería contarle sus secretos.
S&R
"Que raro que ninguna de las dos esté en el cuarto de la otra haciendo que estudian" dijo Lucía cuando vio a su hija en el living de la casa y a Rachel por ningún lado. "¿Dónde se fue tu novia?" agregó.
"Salió con Shelby y Sue" dijo Santana. "Y los perros"
"¿Y por eso estás de mal humor?" preguntó Lucía.
"¿Dónde está Rachel?" preguntó Quinn. "¿Y dónde está mi hija?" agregó al ver a Lucía sin la niña.
"Puckerman me la sacó cuando yo llegué a la puerta de la casa. No es mi culpa." dijo Lucía. "Estaba con Brittany"
"¿Tú o Puckerman?" preguntó Quinn
"Puckerman" dijo Lucía.
"¿Rachel?" preguntó Quinn
"Con Shelby y Sue" dijo Lucía mirando a su hija. "¿Otra vez pelearon?"
"¿Quiénes?" preguntó Quinn
"Tú y mi hija" dijo Lucía.
"Voy a esperar a Rachel en la cocina." dijo Quinn caminando hacia esa habitación y sentándose.
"No sé que le pasa" dijo Santana levantando sus hombros.
S&R
"Berry" dijo Sue deteniendo a Rachel en el camino de vuelta. Shelby decidió adelantarse, su novia le había dicho que necesitaba hablar con su hija ese día.
"No. Si no estás dispuesta a decirme la verdad sobre el porque alguien conoce un secreto tuyo y te está chantajeando, no voy a investigar. Y punto" dijo Rachel
"Sabía que algo te estaba molestando en todo el camino, pero no sabía que tenías la capacidad de la clarividencia." dijo Sue. "Aunque estoy dispuesta a contarte mi secreto."
"¿En serio? Eres la primera" dijo Rachel sorprendida.
"¿La primera que te viene con esto o soy la primera dispuesta a decirte mi secreto?" preguntó Sue
"Lo segundo"
"¿Dónde y cuándo podemos hablar?"
"¿Cuándo es la fecha límite?"
"No tiene."
"Bien, mañana en la escuela. ¿Puede ser? ¿Su oficina es lo bastante segura como para tener esta conversación?" preguntó Rachel
"Si, lo es" dijo Sue. "Te voy a hacer llegar el mensaje y tienes un pase libre para toda una hora"
"Gracias" dijo la diva. "Aunque se lo vas a tener que explicar a mi madre"
"Tu madre va a estar presente" dijo Sue.
S&R
Rachel se fue a la cama temprano. Había tenido lunes malos, pero no podía recordar un lunes en el que todos quisieran su ayuda y nadie quisiera decirle que es lo que realmente estaba sucediendo.
"¿También te está afectando la convivencia con todas estas mujeres?" preguntó Santana entrando en la habitación de la diva y tirándose a su lado en la cama.
"Creo que hay algo con esto de los secretos" dijo Rachel. "Pero no puedo averiguar..."
"No sabemos todos los secretos de Lima, Rachel. Hemos tenido la mala suerte de encontrarnos en un mal lugar, en un mal momento, pero no sabemos todos."
"Creo que antes de terminar la secundaria voy a saber muchos secretos de McKinley." dijo la diva.
"Bueno, por lo menos pasamos un año sin mucha actividad" dijo Santana
"¡Puerta abierta, idiotas!" gritó Lucía que se estaba metiendo en su habitación.
"Puerta abierta." dijo Santana dejando un beso en los labios de Rachel y caminando hacia su cuarto.
Cuando Rachel se despertó a la mañana siguiente, se encontró con que Quinn le solicitaba por mensaje de texto una reunión a solas durante el día y que un número desconocido la había llamado varias veces.
Santana no miró de buen agrado el dispositivo que estaba en las manos de su novia, ni la cara de preocupación de la misma.
"¿Qué pasa?" preguntó la latina.
"Nada" dijo Rachel
"No te creo. Pero me voy a ir al entrenamiento mejor" dijo Santana dejando la casa.
"Y ¿ahora que le pasa a tu novia?" preguntó Lucía sentándose al frente de ella.
"Si yo supiera. Pero ya no entiendo demasiado" dijo Rachel
"¿Entiendes esto?" preguntó Lucía dejando un papel sobre la mesa, era una carta, dirigida a la madre de su novia, escrita con letras recortadas de diarios y revistas.
"¿Cuándo te llegó?" preguntó Rachel
"Esta mañana. Estaba en el buzón." dijo Lucía. "Sabes que salgo todas las mañanas a buscar el correo."
"Nunca lo entregan tan temprano, Lucía"
"No, no lo hacen."
"¿Entonces que estabas haciendo tan temprano revisando el buzón?" preguntó la diva cerrando los ojos cansada en el momento en que Quinn aparecía con Beth. Sabía que hasta ahí llegaba la conversación porque la madre de su novia guardó rápidamente la carta entre su ropa y se dispuso a servirle el desayuno a la rubia.
"Cuando volvamos de la escuela" dijo la diva y Quinn asintió.
S&R
Rachel esperaba a su madre sentada al frente de Sue, quien parecía nerviosa. Era la tercer hora y era recién la primer persona con la que podía hablar. No iba a pedir demasiado, solo quería entender como la habían vuelto a traer al mundo de la investigación.
Shelby entró apurada, cerrando la puerta detrás de si misma y sentándose al lado de su hija.
"Soy una persona orgullosa" dijo Sue logrando que la diva levantara una de sus cejas. "Y soy una persona triunfadora." agregó mirando los ojos marrones de Rachel Berry. "A través de los años, he hecho algunas cosas de las cuales no me siento orgullosa para poder lograr los triunfos de los que puedo alardear con tanto placer. Pero algunas cosas que he hecho, han sido peores que otras"
"¿Cómo qué?" preguntó Rachel. "¿Cuál de todas esas cosas es la causante de esta carta?"
"¿Te molesta escuchar hablar a otra persona que no seas tú?" preguntó Sue tratando de contener una sonrisa. Esta chica le caía muy bien desde el tema de los Fabray unos años atrás.
"Lo siento" dijo Rachel sonando realmente arrepentida.
"Está bien." dijo Sue "Me gusta esto de que vayas directamente al grano"
"Sue, no te desvíes en elogios a mi hija. Después podrás hacerlo" dijo Shelby
"Bueno, la cuestión es que no sé por qué me pueden llegar a estar chantajeando, Rachel. Solo sé que puede llegar a tener que ver con el cuarto y el quinto campeonato nacional" dijo Sue.
"¿Qué fue lo que hizo en esos dos?" preguntó Rachel
"Mis porristas estaban en una dieta líquida, con bastante contraindicaciones. Un par de ellas..." dijo Sue mirando a Shelby rápidamente "Un par de ellas sufrieron abortos a causa de esa dieta cuando ya estaban terminando el secundario. Otra sufrió una pérdida de visión, que después de que contraté a los mejores doctores en el tema, resultó ser temporal."
"Y si eso se sabe a nivel estatal, ud. no podrá dar más clases en todo el país." dijo Rachel
"Exacto. El problema es que ninguna de esas chicas hizo problema alguno porque no asociaron sus problemas con las bebidas que yo les estaba proporcionando" dijo Sue.
"¿De dónde sacaste esas cosas?" preguntó Shelby
"Su madre es agente del FBI" dijo Rachel. "Pensé que lo sabías" agregó al ver la cara de sorpresa de su propia madre.
El silencio cubrió a las tres.
"¿Hay posibilidades de que puedan unir esos accidente contigo?" preguntó Rachel
"Seguramente si. Es por lo que supongo que he recibido esa carta" dijo Sue
"¿Estás segura?¿No puede ser alguien que solo quiera dinero y busque hacerte pagar con eso?" preguntó Shelby
"No lo es" dijo Rachel mirando a Sue con los ojos entrecerrados. "Sue no es la única que ha recibido una carta parecida. Pero hasta ahora solo conozco una persona que recibió una segunda carta. Es raro, eso si, que en la primer carta solo pongan el monto y que saben los secretos que ocultan"
"Pero al final de todo, siguen sin saber si es o no es el secreto que Sue está contando" dijo Shelby
"Es el único secreto que tengo que puede llegar a destruir toda mi carrera" dijo Sue
"¿Cuándo te llegó la carta?" preguntó Rachel
"La semana pasada" dijo Sue.
"¿Qué día?" preguntó Rachel sacando una libreta de su bolso y comenzando a anotar.
"El miércoles" dijo Sue
"Necesito que estés atenta si te llega alguna otra de estas cartas y que me comuniques enseguida" dijo Rachel
"¿Va a llegar otra?" preguntó Shelby
"Si, además de que solo dice: Conozco tus secretos. 5000 dólares para mantener el silencio. Las cartas no dicen nada más. No dicen donde hay que depositar el dinero, ni cuando lo van a reclamar, ni de que secreto se trata." dijo Rachel.
"¿Entonces?" preguntó Sue
"Entonces tenemos que seguir esperando. Nos hace falta más datos" dijo Rachel. "No puedo hacer nada con eso. ¿La dejaron en un sobre?"
"No" dijo Sue. "Solo en esa hoja doblada. Aquí en mi escritorio"
"¿En tu escritorio?"
"En mi escritorio." dijo Sue asintiendo.
"¿Qué estás pensando hija?¿No se te va a dar por volver a meterte a investigar?" preguntó Shelby
"No es un asesinato, así que creo que es seguro investigarlo" dijo Rachel.
"¿Por eso querías que ella escuchara esto?¿Para que se meta de nuevo en esto de investigar cosas que no le corresponden?" preguntó Shelby enojada mirando a Sue.
"Mejor me voy" dijo Rachel evitando estar presente en el momento de la discusión de pareja.
S&R
Para la hora del almuerzo, solo sabía lo de Sue y no había tenido ningún tipo de comunicación del otro profesor y mucho menos de su novia.
Decidiendo que lo mejor era evitar a la latina que podía llegar a estar pasando por alguna crisis interna y tratando de evitar el dolor de cabeza que podía llegar a volver a su mente por estar pensando demasiado. No solo en lo de las cartas, sino también en que podía haberle pasado a la latina desde la noche anterior hasta ese medio día.
Por lo tanto, para no ser molestada se metió en el auditorio y se sentó en las filas del medio de butacas, donde ya no había luz para ser vista y la suficiente para sacar lo que necesitara de su bolso.
Por eso se sorprendió cuando vio a entrar a su novia y a su mejor amiga al auditorio.
Las dos parecían nerviosas y miraban hacia un lado y hacia el otro.
"Sanny, ¿puedes calmarte?" preguntó Brittany poniendo una mano en el hombro de la latina.
"Britt, me llegó una carta. Alguien sabe" dijo Santana
"¿Sabe qué?"
"Lo que pasó, Britt" dijo Santana
"No pasó nada, San"
"Tu y yo sabemos..."
"Lo único que sabemos es que estábamos muy borrachas para recordar que es lo que pasó. Hasta yo entiendo eso." dijo Brittany.
"Pero despertamos desnudas...juntas, Britt"
"Si, lo sé. Quinn también, por cierto" dijo la rubia.
"¿Quinn lo sabe?" preguntó Santana haciendo un paso hacia atrás.
"Sip" dijo Brittany
"¿Por qué estás tan tranquila?" preguntó Santana. "Si Quinn lo sabe, solo es cuestión de tiempo que Rachel se entere. No quiero que ella se entere"
"¿Por qué? Si al final ni siquiera sabemos si pasó o no pasó algo entre nosotras, San. Solo creímos que pasó algo por la situación." dijo Brittany
"Odio lo inteligente que te has vuelto estando con Quinn." dijo Santana sentándose en el piso del escenario.
"Tengo que ver a Quinn." dijo Brittany saliendo del auditorio.
Rachel esperó, con los ojos llenos de lágrima en esa fila, hasta que Santana decidiera irse. Pero sabía que no lo iba a hacer y no podía llegar tarde a la siguiente clase.
Cuando escuchó el timbre, Santana siguió sin moverse de su lugar y Rachel decidió que era mejor ir a clases.
Se levantó despacio y subió las escaleras del escenario casi sin hacer ruido, era el único lugar por el que podía salir mientras el lugar no estuviera en uso.
Santana la escuchó, y al levantar la mirada vio de donde venía y volvió a largarse a llorar.
Rachel tenía la opción de irse o escuchar la explicación de su novia, decidió que lo segundo era mucho más importante, y caminó hasta sentarse al lado de la latina y abrazarla. Después de todo, amaba a la sexy porrista.
Hello Kitties!
¿Cómo están?
Espero que bien. Yo ando medio bloqueada así que recurrí a esta historia para publicarla porque me di cuenta de que Marcadas está llegando a su fin.
Y como iba a publicar esta cuando finalmente comenzara a escribir el tramo final de Marcadas, bueno...creo que se entiende.
Cuando escribí este capítulo, ya había terminado de leer los dos fics anteriores, así que temporalmente creo que está bien. Estoy segura que está bien, pero bueno, no sé porque pongo el creo.
En cuanto a la publicación de los capítulos, espero poder publicar uno por semana, así como Marcadas. Pero estoy pasando un momento de bloqueo. El segundo de este ya esta escrito.
El drama entre Rachel y Santana se resuelve en el capítulo que viene y saben bien que no soy muy adicta al drama en si, así que seguramente ya se estarán dando cuenta hacia donde se resuelve. Además que comienzan las escenas M en esta historia, pero no involucran a nuestras protagonistas.
Terminando con esto, espero que les guste.
Su review es muy importante para mi, así que bueno, eso.
Muchas gracias por atreverse a leerla!
Besos Kitties!
Lore!
