Say something

Alec estaba cansado del ambiente, tantas personas alrededor suyo le estaban dejando una sensación de hostigamiento que no se quitaba con los minutos que pasaban, el club estaba tan atiborrado de personas que podía claramente sentir las miradas y las presencias de los demás seres que se encontraban en conjunto en ese reducido espacio llamado bar. Alec no tenía nada mejor que hacer que observar a los demás, ya que pensaba que de esa manera, quizá, encontraría la solución a sus problemas.

Habían personas bailando, riendo, hablando, bebiendo, besándose y como él aquellos que solo observaban cual cazador a su presa antes de atacar. Aun que la analogía no sea correcta, ya que el no había ido a ese lugar buscando liarse con alguien, más bien, lo contrario, en vez de atacar a la presa es solo quería huir y correr. Él no estaba para las situaciones de una noche o cualquier situación con alguien en estos momentos. Se quedó unos minutos de más observando los diferentes grupos reunidos que habían, precisamente, lo que observaba eran sus miradas. Habían problemas, conflictos, diversión, amor, miedo, lujuria… tantos detalles que unos cuantos intentaban ocultar con mucha determinación; mientras que, otros propagaban a los cuatro vientos con sus miradas, lo que claramente andaban buscando esa noche. Tantas cosas que podríamos notar más seguido si uno presta la debida atención al ambiente que le rodea.

Alec estaba tan ensimismado en su pequeña inspección de los seres del bar que no se dio cuenta que igual que él habían grupos e individuos que lo miraban solo a él. Quizá eran los tatuajes que siempre llevaba cual piel a sus huesos que lo diferenciaban de los humanos corrientes o el aspecto de desesperanza de su rostro que lo hacía llamativo para los demás. Como aquel grupo de hombres que lo miraban y cuchicheaban con sus orbes hacia él y lo miraban cual líquido refrescante y necesitado por un sediento que ha estado perdido en el desierto. Otros, eran un poco más discretos, pero habían algunos que lo hacían sentirse tan incómodo. El no había echo nada malo, así que ¿Por qué esos algunos lo observaban con cara de odio? Seguro quizá sabían que Magnus y él habían terminado y que todo era por su culpa. Él no merece ser amado y menos por alguien tan esplendoroso y radiante como Magnus. Él solo es un mortal, mitad ángel, mitad humano, cazador de sombras y con una familia media rota por arreglar. Él no fue lo suficiente para el gran brujo de Brooklyn, es seguro. Por eso, lo terminó, ya que nunca lo sería.

Los pensamientos de Alec se cortaron cuando Alaine regreso con las bebidas.

De alguna forma la hiperactiva amiga, casi prima, había conseguido arrastrar a Alec a ese bar, donde su mayor clientela era homosexual, para que se distraiga un poco y no siga con esa cara de sufrimiento eterno.

- ¿Ya no van a volver juntas? -Alaine estaba teniendo problemas con su nueva novia y solo por ese motivo es que Alec decidió salir de su encierro de ya cinco meses para hacer algo que no tenga que ver con entrenar, hacer misiones, preocuparse por Jace, vigilar que Simon no se sobrepase demasiado con su hermana y sufrir por su corazón roto. Uno que parecía tener tatuado el nombre de Magnus y que le dolía como si estuviera en carne viva, cada día desde que terminaron.

- Supongo que sí pero, por ahora nos estamos dando nuestro tiempo para tomar las cosas con calma -Alaine ya no quería hablar de su ex novia, éstos eran los décimos tragos que traía para Alec y para ella, aun que, la verdad eran más para ella - Sabes deberías valorarte más, fuiste demasiado bueno para alguien tan egoísta como él. En fin, vamos a bailar Alec, que no hemos venido a deprimirnos.

Después de unas cuantas canciones y unas cuantas rondas más de tragos, de los cuales fueron bebidos casi en su totalidad por Alaine, un cansado Alec lleva de regreso a una ebria casi inconsciente cazadora de sombras al instituto. Cuando llegan la recuesta en una de las camas de las habitaciones de huéspedes. Y se va a su habitación.

Se recostó pensando que el cansancio lo adormecería, pero por mucho que lo intentaba esa noche parecía ser como muchas de las anteriores. Una de las cuales solo pensaba en lo tonto que había sido por perder a Magnus.

Todos estos meses él pensando lo tonto que fue pero ni una sola vez pensó, acerca de lo tonto que Magnus fue. Las relaciones son de dos personas, no de él solo. Él también tuvo la culpa.

- Él... También... Tuvo... La... Culpa... -Los ojos de Alec eran bombardeados por una luminosidad no antes vista. Se levantó, cogió su chaqueta, se calzó y salió del instituto con una destino fijo en mente.

Say something, please say something

Unos cuantos golpes en una puerta muy antigua, unos cuantos pasos al otro lado, un suave maullido de un gato y una lluvia que parecía ahogar la ciudad.

El gran brujo de Brooklyn no esperaba que fuera de su puerta a las cuatro de la madrugada apareciera un cazador de sombras, aun que no uno cualquiera, era Alec oliendo a lluvia que se desprendía de su ropa y a bar. Alec, Alec, el solo nombramiento de él era como una pequeña daga que se clavaba cada vez más profundo en su corazón.

- Cuánto tiempo sin verte, te diría que pases, pero no es un buen momento.

Alec no lo miraba como su Alec, esa mirada que Magnus recibía que estaba cargada de tantas cosas. Él siempre se había vanagloriado de lo fácil que se le hacia leerlo, pero ahora no daba por sentado nada. Es que Alec lo estaba miraba con tanta fuerza que parecía desaparecer por segundos que pasaban.

- No deseo entrar, he venido a pedirte que regreses conmigo.

Lucía tan serio. Tan directo. Tan hermoso. Tan tranquilo y, a la vez, tan mojado y delgado.

- Alexander creo que había quedado claro que habíamos acabado y que no había vuelta atrás.

Alec frunció el ceño con la tensión escrita en su rostro.

-Todo es tu culpa

Antes que pudiera seguir Magnus lo calló colocando su dedo en sus labios.

-Vamos Alexander no digas algo de lo que te puedes arrepentir. Sé que estás un poco ebrio pero

Alec con un poco de rechazo sacó el dedo de Magnus de su boca y le cortó, lo que iba a decir.

- No estoy ebrio, apesto como uno por que estuve con personas que sí lo estuvieron. Al menos, déjame hablar -La lluvia igual de tormentosa como inició se apagó- Tú me terminaste no por que hayas pensado que yo quería quitarte tu inmortalidad. Me terminaste por que eres un cobarde -Esas palabras no tuvieron una mero repercusión en Magnus, estaba tranquilo cual estatua- Por que eres un egoísta. Cuando tu me acusaste de serlo, realmente lo creí, lo sentí de verdad. Pero la verdad es que estaba muy segado por mi dolor, hasta ahora.

-¿Quieres decir que ya no te duele? ¿Eso haz venido a decirme Alexander? ¿Ha refregarme que eres feliz?

- He venido a decirte que yo pude ser todo, lo que hubieras querido. Por el Ángel, inclusive, admití que me gustabas delante de todo Idris. Recorrimos parte del mundo por que era lo que tú querías hacer...

Say something, I'm giving up on you

I'll be the one, if you want me to

Anywhere, I would've followed you

Say something, I'm giving up on you

... Yo estaba feliz de que estés solo a mi lado por que, de esa manera, yo me sentía más fuerte, más grande, más importante...

And I am feeling so small

It was over my head

I know nothing at all

... Te pedí perdón por lo que hice o por lo que piensas que hice. Es cierto que fui una persona impulsiva y no pensé, lo que hablar con ella iba a significar luego en nuestra relación. Pero vamos. Nunca antes había estado con nadie así que; por eso, no te pediré perdón. Por amarte, por quererte, por desearte solo a ti no pediré perdón...

And I will stumble and fall

I'm still learning to love

Just starting to crawl

Ahora Magnus lo miraba como si estuviera mintiendo.

... Entiendo tu mirada, piensas que no digo la verdad o la digo a medias pero sabes Jace me propuso que lo bese, literalmente me lo pidió pero yo no pude -suspiro de Alec- sabes lo sentí tan antinatural solo pensar hacerlo, no como cuando algo pasa contigo...

Say something, I'm giving up on you

I'm sorry that I couldn't get to you

Anywhere, I would've followed you

Say something, I'm giving up on you

... Cuando fui donde Camille, yo había ido por que quería un cierre. Es lo que los humanos hacemos, incluso, los cazadores de sombras. Necesitamos cierres de las cosas para continuar o para afrontar miedos y temores. Por eso fui, por que había eliminado todas mis dudas, ya que supuse que eventualmente me lo contarías. Aun que la verdad ahora me pregunto si algún día lo ibas a hacer. Yo he venido a decirte que fue también tu culpa, yo fui así por que tú dejaste que yo fuera así porque no hiciste nada para remediarlo por que eres un egoísta que estaba esperando que me equivocara para acabar con lo nuestro, así te aguantabas el dolor ahora y no cuando muriera. Pero también he venido a decirte que te amo, y que vuelvas conmigo.

And I am feeling so small

It was over my head

I know nothing at all

Magnus seguía con el mismo rostro sin emociones y con la tranquilidad pintada en su rostro.

- Lo nuestro no puede continuar Alexander, ya te lo había dicho.

Alec sintió que la sangre abandonaba su cuerpo por un momento. La adrenalina de soltar todo lo estaba consumiendo, así que hizo lo que mejor le pareció que debía hacer. Besó a Magnus Bane.

Magnus no lo detuvo extrañaba con todo lo que el representaba a Alec, cada poro de su piel lo llamaba a Alec, solo a Alec.

Se escuchaban unos pasos venir del interior de lugar de Bane.

- Honey Boo Boo por que te demoras tan... -No terminó de hablar al ver en que escena se había colado.

Alec dejo de besarlo con toda la pasión que había estado guardando por esos meses, para voltear y ver a un hombre en ropa interior, el cual provenía de departamento de Magnus.

Magnus vio como Alec no solo retrocedía un par de pasos, vio como la ira y la cólera lo inundó tan rápido como lo abandonó para dar luego paso a la calma total.

- ¿Magnus tienes algo que decirme?

And I will swallow my pride

You're the one that I love

And I'm saying goodbye

- No hay nada más que decir Alexander. Creo que ya tú mismo haz dicho suficiente.

Eso era todo. Era el fin.

Magnus vió como el semblante de Alec cambió de la ira a la triste, de la tristeza a la melancolía y de la melancolía a la lástima en solo cinco segundos.

- Oh querido, haz vivido tanto tiempo y ni así te das cuenta de, lo que yo un humano que no ha vivido nada comparado tuyo, se da cuenta.

Por última vez, Alec se acercó y besó tiernamente los labios de Magnus, no le importó que el desconocido que obviamente había estado con Magnus los viera. Después de todo era el final.

Se separó despacio y acarició la mejilla de Magnus, tratando de transmitirle todo, lo que su corazón y su razón habían mantenido a raya por tanto tiempo.

Alec retrocedió dos pasos y le sonrió.

Say something, I'm giving up on you

And I'm sorry that I couldn't get to you

And anywhere, I would have followed you

- Adiós Magnus. Espero que en el futuro no te arrepientas. Ya sabes ese dicho humano ¿No? Bueno quizá no lo recuerdas pero dice: "Uno no se da cuenta de lo que tiene hasta que lo pierde".

-Interesante Alexander pero pensé que no te agradaban los mundanos

-En este caso sí, por que este es mi adiós y quiero terminar una conversación por una vez en mi vida con una buena frase como lo hace Jace... -los dos se miraron en silencio sin saber que más decir, entonces Alec se volteó para retirarse pero no sin antes verlo directamente a los ojos y decirle- Adiós.

Oh-oh-oh-oh say something, I'm giving up on you

Ese fue su cierre. Magnus podía sentirlo. Sin más palabras, lo vio marcharse, vio como su espalda se perdía entre la multitud de personas que había, por muy raro que era, esa madrugada.

El hombre en pequeños bóxer lo quedo mirando muy detenidamente.

-¿No vas a ir a por el? Te vas a arrepentir y lo sabes.

Pocas veces Magnus había escuchado a su huésped hablar de una manera tan seria.

Lo único que hizo fue mirar a los ojos de su huésped, tan iguales en color y en forma que los suyos y decirle

-No esta vez, no esta vez...

Say something, I'm giving up on you