Disclaimer: Ningún personaje de Naruto me pertenece, propiedad de Kishimoto
Nota: Este Fic participa del Reto especial: Ino Yamanaka del Foro La Aldea Oculta Entre las Hojas.
Cambios.
.
.
.
Golpea la mesa con cierto ataque de ira, provoca que las finas tazas de porcelana se resquebrajen hasta hacerse pedazos. Es, indudablemente, horrido recibir ese tipo de tratos como si se tratara de un objeto sin valor o un ser malvado como Madara u Orochimaru.
En efecto. El comportamiento desinteresado de su esposo es completamente inaceptable. Ni siquiera Shikamaru es tan insensible con Temari, todo lo contrario, su trabajo de padre lo conlleva a dejar –por algunas ocasiones– el comportamiento aburrido y desganado que poco le importa lo que ocurre en su entorno.
¡Ni siquiera Naruto manifiesta irresponsabilidad! Si el Hokage mantiene un poco de su ajetreado tiempo para velar por su esposa, ¿qué excusa puede poner el cretino de Sai?, porque es muy sabido que el rol de ser líder de una aldea es tan cansado y un consumo de tiempo gradual que es difícil mantener dos vidas a la vez.
—No tienes excusas—la hermosa rubia gruñe, se deja caer sobre la silla por el cansancio de caminar—; en qué momento me digné fijarme en un hombre tan irresponsable. Eres peor que Shikamaru y Naruto juntos.
Ino Yamanaka se lleva las manos hacia su rostro. La impotencia y el recuerdo de los días en que pasa sola en casa la obliga en tener una revolución de estados emocionales. Tal vez puede entender a esas alturas la razón de su madre con respecto a poseer paciencia cuando se es casada.
Ah, pero es irrevocablemente estúpido comparar a Inoichi con Sai. El padre de Ino nunca descuidó sus obligaciones como padre ni como miembro del Equipo de Inteligencia de Konoha.
—Si él estuviera aquí—musita con elocuencia, sus ojos esmeraldas se fijan en el cuadro de fotografía colgado sobre la pared—; ¿qué hubiera sido de mí si te tuviera conmigo?
Más tarde que nunca, sus emociones volvieron a causar un cambio brusco en su persona. Oh no, eso no es concebible e Ino lo sabe bien. Frunce el ceño, se muerde el labio inferior y echa la cabeza hacia atrás.
Su melena larga y sedosa cae como cascada, sus ojos se humedecen e intenta con todas sus fuerzas no volver a derramar lágrimas.
Ino es fuerte, una kunoichi de cuidado más el problema que lleva en su corazón no tiene culpa de algún ser. Sabe que Sai es inocente, pero desde las últimas semanas no puede controlar el carácter. Llora. Ríe. Come con gula. Se marea y…
—Oh, por todo lo sagrado—engulle el calamitoso llanto. Se pone de pie perpleja—; Sakura tiene razón. Este cambio se debe a que muy probablemente…
Sus ojos quedan en blanco, tira la silla hacia atrás y corre hacia el recibidor. Esos cambios solo tenían un culpable y ese no era Sai. Lleva sus manos hacia su vientre y un sonrojo terrible se asoma en sus mejillas.
—Espero sea tu culpa—sonríe mientras corre hacia el hospital—, porque es lo único que aceptaré pasar por estos nueve meses.
