Desde dentro del departamento se podía escuchar pasos subiendo por el pórtico; cuando el sonido se detuvo era más que obvio que había alguien que estaba justo al frente de la puerta. De pronto, otros pasos podían ser escuchados de la misma manera; subiendo por los escalones del porche pero de manera más tranquila.

-¡Ya! ¡Ya! La consola no se va a ir a ningún lado, Liena, solo tranquila.

El picaporte entonces giro, y al hacerlo la luz de la media mañana baño el interior del cuarto haciendo que en las paredes blancas resaltaran las fotos que el joven tenía colgados.

Para cuando la puerta estaba abierta por completo, la chica de cabello rubio entro corriendo hacia el departamento; paso en un instante por la sala y entro en la cocina, dejando las bolsas de víveres que cargaba con ella.

La comida quedo en la repisa que dividía la pequeña cocina de una estufa, lavamanos y refrigerador; fue entonces que Liena levanto la mirada hacia la puerta del departamento y vio a su…padre cerrar la entrada del hogar.

Ahora bien; Liena tenía 18 años y aún faltaba algo de tiempo para que cumpliera otro; de la misma manera hasta dentro de un año más iniciaría la universidad. Pero, bueno…le entusiasmaba mucho pasar tiempo con su papa.

Es decir, su departamento no era la gran cosa. Una cocina pequeña, una sala de estar con un sillón y televisión (con su consola), y una habitación con cama, unos cuantos muebles y eso era todo.

En comparación era pequeño a diferencia de su casa- en realidad a la casa de sus abuelos. Pero eso no era lo que a ella le daba emoción como tal; ese era su papa.

Es que, ¿Cómo no tenerlo? Por ser freelancer, apenas y podía despegarse de su computadora. Un día tenía que mandar guiones, otros había que mandar bocetos y hasta revisar diseños preliminares; y se le notaba contento. No había que mentir, era obvio que a él le gustaba mucho su trabajo. Pero, por esa misma razón le era difícil tener tiempo libre para que ella pudiera visitar.

Había también otras razones; pero a ella le gustaba pensar que era la principal, y más problemática.

-Entonces, ¿Qué quieres comer?

Su padre se fue acercando poco a poco hacia ella, dando un vistazo al contenido que había en su bolsa de mandado; listando las posibilidades de comidas para realizar.

-Puedo haceeeer…pasta, pescado, tal vez ¿macarrones?

Liena alzo sus manos, haciendo movimientos con ellas para su padre: "Macarrones y ¿galletas?"

-Liena…-su padre hizo una mueca de sospecha picara; sabía que su hija era perfecta para hacer galletas, pero eso usaba de excusa para comerlas cuando fuera- El que va hacer la comida soy yo. En tus vacaciones debes descansar.

La chica entonces, con un puchero lleno de inocencia que hacía recordar a su madre, desvió la mirada hacia abajo.

-"Pero, quiero cocinar contigo…"

Su padre sonrió; revolvió el cabello de su hija y entonces coloco su bolsa de víveres en el mismo lugar que la de Liena.

-Está bien. Galletas y macarrones; pero cenaremos algo más saludable en la noche. ¿Tenemos un trato?

La chica asintió con velocidad y abrazo su padre.

-Te pareces mucho a tu madre; -el hombre de 35 años dejo salir un suspiro entre sonrisas- Pero, ¡Vamos! ¡Hay mucho que hacer!

Liena se separó y rápido tomo la harina que se encontraba entre los víveres; mientras ella comenzaba a buscar los utensilios para la cocina, su padre actuaba de forma más lenta.

Para cuando ella ya se encontraba con una cacerola preparando la mezcla, el apenas había sacado los macarrones y estaba buscando alguna olla para colocarlos; en su mente muchas cosas divagaban. Hacía mucho que pasaba tiempo con Liena, y él sabía que después de esto también pasaría más tiempo antes de que ella viniera.

Navidad estaba algo cerca; y él sabía que ella no lo pasaría con él. Nadie pasaría navidad con el después de todo.

Bueno, Clyde tal vez lo haría; e incluso le invitaría con sus padres. Existía la posibilidad que eso reafirmara la teoría de los padres del moreno sobre el "crush" de Lincoln con su mejor amigo, y eso no era bueno para nada. Pero al final de cuentas no aceptaría la invitación de su amigo, porque…

Bueno, tal vez estar solo en esas fechas le hacía sentir menos culpable sobre muchas cosas.

En fin; estos días eran de exclusividad para Liena.

Había terminado muchos guiones y bocetos con antelación para que nada molestara o interrumpiera el tiempo con su hija. Era lo justo, después de todo. Ella era su hija mayor, la que aún le tenía cariño consciente, y seguía preocupándose por él. No sería justo no dedicarle un 100% de su tiempo aunque fuese algunos días.

Eso hace un buen padre, ¿no?

"Claro, y muchas cosas más que tu no haces con ella o alguien más…" sus pensamientos se fueron apagando para cuando se acercó a la estufa.

En ese momento, giro su visión un poco para observar a su hija; Estaba orgulloso de ella.

Excelentes calificaciones de su preparatoria, gran nivel de comunicación aun con su impedimento oral, siempre amigable con todos e incluso vice-presidenta de su escuela. Con cómo su madre era, y como él estaba por arriba de la media, se sentía bastante orgulloso de su hija siempre superándose.

¡Imagínate! Su madre, una mujer tierna, linda y guapa. Con un cuerpo escultural, había logrado tener una hija que media casi como ella, con su mismo cabello e incluso piel perfecta. Ahora, Liena tenía más cadera que su madre, pero él sabía que eso a ella no le molestaba y le ayudaba a verse muy dulce.

Su rostro dibujo una sonrisa; había recordado cuando se vistió de Winnie Pooh para Halloween cuando tenía 6 años.

De verdad deseaba poder pasar más tiempo con su hija.

Entonces volteo hacia la olla, y vio los macarrones ahí.

Se sentía algo raro. Como ausente; aturdido. Cuerpo cortado, y estaba seguro que no podía escuchar bien.

Sintió una mano tocando su hombro; giro la cabeza y ahí estaba Liena, haciendo señas con sus manos.

"¿Papa?"

Su visión entonces le perdió; se fue disparada hacia el techo y sintió como su cuerpo colapsaba hacia un lado. Su cuerpo, golpeando de forma dura contra el refrigerador, no le respondía.

Sus parpados estaban abriendo y cerrando, temblando. Pudo ver como la mano de su hija trataba de hacerlo reaccionar.

Pero, sus ojos entonces se cerraron, y su conciencia se perdió.

Lo primero que sintió al abrir sus ojos lentamente, fue frio en su cuerpo; era como si la temperatura hubiese bajado algunos grados. Después, sintió dificultad para respirar; algo obstruía sus fosas nasales. Oh, también estaba desnudo.

Es decir, sentía el desnudo roce de una sábana en su cuerpo; eso quería decir que no traía puesto sus jeans.

Bajo su mirada del techo, en el camino hacia su mano pudo ver maquinas a su alrededor antes de centrarse en unos dedos que tocaban suavemente su muñeca izquierda.

-…oud?

Su parpadeo solo fue una fracción de segundo; pero estaba seguro que se habían sentido como minutos antes de poder reaccionar. Dio un para más de estos, y pudo centrar su visión en el hombre frente a él; una bata blanca y una playera azul médica.

-Señor Loud, ¿me escucha?

-Yo…-Su voz se escuchó ronca; tocio un poco y trago de manera seca antes de tratar de asentir- Si lo…lo siento. ¿Dónde estoy?

-Esta en el Beth Israel, señor. Sufrió un…desmayo, y la ambulancia lo trajo. No se preocupe; no sabía que los trabajadores de ImaGe tenían tan buenos seguros.

-Soy…Freelancer.

-Bueno, con la nueva ley tiene derecho a seguro médico después de 8 meses de contrato continuo.

-¿Dónde está-?

-Señor Loud, es necesario establecer ciertas cosas antes de que…se preocupe por otras.

-Disculpe, es solo que…

-Su amigo, el señor McBride está en la otra habitación con la chica. No tiene por qué preocuparse.

Sus hombros se relajaron y dejo salir un respiro más calmo, se acomodó en la cama sin perder de vista al doctor, esperando a que prosiguiera.

-Necesito que los detalles que le diga los confirme para mí, ¿está bien?

-Claro.

-¿Su nombre es Lincoln Loud?

-Si lo es.

-¿Vive en Newark, New Jersey?

-Desde hace ocho años.

-Y, ¿es originario de Michigan?

-Lo soy.

-¿De Lansing?

-No, no. Soy de…Royal Woods.

-Perfecto. Parece que no tiene algún problema en su memoria por ahora. Al menos en aspectos básicos. -El doctor puso su tablilla para escribir debajo de su brazo, acomodando sus lentes al hacerlo- Entonces debemos de hablar de otra cosa, Señor Loud.

-Eh…me puede decir Lincoln, si gusta.

-Está bien, señor Loud sobre su salud-.

-¿Co-como dijo que se llamaba?

El doctor entonces arqueo un poco los cejas; existía la posibilidad de que su paciente aún se sintiera algo atontado y fuera por eso que no entendía la gravedad con la que él quería comunicarle la noticia. Aunque, también, existía la posibilidad de que solo fuera una persona muy educada; y eso le daba un poco de pena, por la situación en la que el hombre de cabello blanco se encontraba.

-…Me llamo Oliver Williams, señor Loud. -El medico vio atento a su paciente; parecía que esperaba una continuación a esto, como para indicarle como podía llamarle para hacerle sentir cómodo al momento de dirigirse a el-. Doctor Williams está bien.

-Gracias Doctor Williams. Discúlpeme aun me siento aturdido.

Lincoln comenzó a ponerse erguido en la cama; con la espalda muy pegada a su almohada y usando sus brazos para empujarse levemente hacia arriba.

-Es…normal. Se desvaneció en medio de su cocina, al caer se dio un ligero golpe en el hombro; nada de gravedad. La ambulancia lo trajo hace aproximadamente…-reviso rápido su reloj y volteo a verlo de nuevo- una hora y media.

-Entiendo. ¿Me desmaye por cansancio?

El doctor, alguien que aparentaba menos edad que el propio Lincoln, tomo rápido una silla que estaba al lado de la cama y se sentó al costado derecho del paciente, sus ojos cafés hicieron contacto con los avellana del único varón de los Loud, y fue este primero quien relamió sus labios tratando de buscar las palabras que decir.

-Era una teoría, si…pero hicimos pruebas porque no parecía que su cuerpo se encontrara tan fatigado como en otros casos. Pensamos en sus niveles de azúcar, entonces tomamos su sangre y también un pequeño examen de la presión. Y no nos dieron nada, entonces, revise más de cerca su abdomen y piel. Por ende, hicimos un examen de alfafetoproteína.

La cabeza de Lincoln comenzó a dar ligeras vueltas de nuevo; sentía su boca seca y sus manos que temblaban con leve fuerza. Mientras el doctor buscaba la forma de continuar, Lincoln abrió sus labios temblorosos y lanzo una pregunta con una voz más apagada y con aparente miedo que antes.

-¿Para qué…es el examen?

-El AFP se encuentra siempre en niveles bajos en los adultos, señor Loud, y suben cuando hay posibilidad de una enfermedad en el hígado.

-No bebo mucho, o seguido, ¿Esta seguro?

-La cirrosis no da solo por beber, pero tampoco tenemos registro de un consumo continuo de algún tipo de medicamento entonces…

-¿Si?

-Existe una probabilidad de que usted tenga cáncer de hígado. Aún hay que hacer pruebas pero…es importante que lo tome como una posibilidad.

La visión de Lincoln se quedó clava en el doctor por unos segundos, después fue bajando poco a poco hasta mirar sus rodillas que se encontraban cubiertas debajo de las sabanas del hospital. Su respiración era liviana; demasiado. Casi como si estuviera en trance.

-¿Podría hacer pasar a Liena?

-Su sobrina, ¿cierto?

-Si -Mordió levemente su labio inferior y alzo la mirada para verle- Si, y también a Clyde, por favor.

-¿No necesita un poco de tiempo?

-No, doctor. Lo que debo hacer…es pasar tiempo con mi familia.

Quiero pedir una disculpa, sincera a todos pero eh tenido bastante trabajo últimamente: entre a un equipo de americano de la universidad, el semestre ha estado bastante complicado y agregarle una pequeña depresión por ahí.

PERO; siempre quise poder publicar esta historia. De sobre aviso, tome un poco de inspiración en la MAGNIFICA historia de Jonas Nagera que es "Tres días de caos". Aunque obviamente no pienso copiar nada de su creación, si me sentí algo inspirado por su trabajo.

Tratero de explorar los sentimientos de todos hacia Lincoln, y una redención de el mismo con su familia antes de…¿Qué pase algo?

Gracias a todos y que hayan disfrutado!

PS: Si continuare un sentimiento compartido en dic, igual que el sig cap de esto estará para finales de nov.

PS2: Soy una perra por la crítica positiva (mentira, cualquiera es bienvenida (por eso soy una perra)) entonces si les gusto por favor no duden en dejar un review o un MP para mejorar.