Resumen: Eren, Armin y Mikasa se darán cuenta de que hay errores que cometemos y que no tienen solución. Para ellos, haberse metido con las personas equivocadas y quedar embarazados. ¿Cómo afrontarán ésto sin ningún tipo de apoyo? Riren, ErwinxArmin y MikasaxOC. AU

Disclainer: Ni los personajes, ni la historia de Shingeki son míos, si fuese mía reviviría a Marco Q.Q

Notas: Está es una historia que se me ocurrió viendo un capítulo de ''Sin cita previa'' y ''Bones''. Si algo extraño xD pero los argumentos eran parecidos y los mezclé. Espero que os guste. Leer la nota del final del cap, es importante.

Advertencias: YAOI, LEMON y AU. Es una historia Riren, ErwinxArmin y MikasaxOc. Si no os gusta, por favor sal de la historia y lee algo que se adapte a tus gustos :)


Las consecuencias de ser adolescente.

1. Mi imperfección

¿Alguna vez has cometido un error? ¿Algo que, aunque sabes que está mal pero aún así continúas haciéndolo? Eso es lo que me ha pasado a mí. Creía que mis actos no traerían consecuencias pero estaba muy equivocado.

Me llamo Eren Jeager y sólo soy un chico normal de 14 años. Mi pequeña familia la forma, mi padre Grisha, un médico y científico famoso en el mundo en el campo de la neurociencia. Mi 'hermana' Mikasa Akerman, una chica de mi edad y a la que adoptamos cuando sus padres murieron cuando tenía dos años. Y mi mejor amigo, casi hermano, Armin Arlelt que vive con nosotros desde los 9 años cuando su única familia, su abuelo, murió.

Mi madre era Carla Jeager una respetada y aclamada modelo-actriz, aunque por desgracia la leucemia se la llevó cuando yo tenía 8 años.

Cualquiera que nos observe pensará que somos una familia perfecta; famosos, ricos, sin escándalos, buen comportamiento y buena educación. Pero…lo que en realidad somos se aleja de todo lo que tenga que ver con 'la perfección'.

Todo empezó con la muerte de mi madre. Mi padre se enfrascó aún más en su trabajo y poco a poco se volvía más distante. Al ser una familia de dominio público por la fama de nuestros padres, empezaron a salir en la prensa fotos de Mikasa, Armin y mías sobre nuestro 'mal comportamiento', y con eso me refiero a solamente hacer lo que cualquier niño de nuestra edad hacia, no nos diferenciábamos de ellos en nada.

Pero la prensa siempre nos sacaba defectos de dónde no los había, cómo si comportarnos como niños normales fuese un escándalo público. Éramos famosos y por ellos teníamos que sobresalir de la gente común y corriente.

Y para mi padre eso, fue el desencadenante.

Nos prohibió durante un tiempo salir a la calle a jugar, todos nuestros muñecos y juegos fueron tirados a la basura, nuestra ropa fue cambiada por una nueva más formar y uniforme, ¡nada de niñerías!

Nos obligó a estudiar la etiqueta y el comportamiento ante la alta sociedad y nos impartía clases privadas después del colegio que duraban hasta la noche.

Se empeñó con la idea de hacernos 'perfectos' ante todo el mundo, supongo que fue para que todos pensaran lo buen padre que era y que no le había fallado a su difunta esposa a la hora de criar a sus hijos.

Pasó de ser el mejor padre, al peor. ¡Pero, claro, sólo ante nuestros ojos! Para el resto del mundo era alguien ejemplar.

No nos divertíamos con los otros niños, ni siquiera teníamos un amigo, no veíamos la tele ni jugábamos a los videojuegos, nuestras personalidades fueron machacadas, no podíamos cometer ni un sólo error. Nos poníamos a estudiar hasta altas horas de la noche porque Grisha no quería buenas notas, quería las mejores. Y cuando no cumplíamos algo que él quería nos castigaba sin comer durante varios días.

Con el paso de los años se volvió aún más severo nos presionaba para que fuésemos el ideal de perfección para todo el mundo.

La cosa continuó hasta que simplemente la burbuja estalló.

Los tres empezamos a buscar a espaldas de mi padre, cosas para hacernos sentir normales, vivos, imperfectos. Queríamos escapar, correr y ser libres, buscábamos algo que nos dijera 'hey aquí puedes ser tu mismo y comportarte como te dé la gana'.

Y lo encontramos.

Mikasa, la niña buena, calmada, educada y amable, se unió a una famosa banda callejera. Eran mayores que ella y robaban, en ocasiones, a los transeúntes y en las tiendas pero también ocasionaban altercados con otras bandas, llevando incluso a algunos al hospital en estado grave.

Ella consiguió meterse en la banda gracias a su fuerza y a su agilidad, impresionando al jefe de ésta, Fate Morhing de tan sólo diecinueve años. Ellos dos empezaron a salir poco después.

Esa es la imperfección de mi dulce y bella hermana.

Por otra parte Armin, el que era el más sensato, inteligente y sereno de los tres, encontró lo que buscaba de casualidad.

Empezó a 'salir' con Erwin Smith al trabajar para él. El rubio mayor es un hombre muy respetado en el mundo empresarial. Su empresa 'Survey Corps' es famosa por ser la primera en el mercado de la tecnología renovable. Un buen hombre.

¿Sus pegas? Tiene 39 años, un poquito mayor para alguien de 14. A parte de eso, ni a su mujer ni a su hija le harían mucha gracia enterarse que su bueno y respetado padre se acuesta con un menor de edad.

Vaya cosa se ha buscado Armin para ensuciarse las manos ¿no creéis?

¿Y yo? ¿Qué encontrado para que me haga sentir vivo? Pués…algo realmente malo.

- ¡Ah!...ah- jadeaba intentando coger aire. Sentía como las embestidas iban cada vez más rápidas y fuertes, haciendo que me costase ahogar los gemidos.

Nos encontrábamos sentados en una silla del comedor, él debajo de mí mientras yo miraba al frente. Estábamos solos en la casa así que nos podíamos dar esa libertad.

- Uhmm…Levi-i que rico – gemí.

El mencionado como respuesta mordió mi cuello pero sin dejar ninguna marca. Metió sus manos debajo de la camisa de mi uniforme escolar hasta llegar a mis pezones para después apretarlos sin cuidado alguno. Eso hizo que soltase un gemido aún más fuerte.

Aún llevaba puesto mi uniforme del colegio, excepto los pantalones y la ropa interior, claro. No me había dado tiempo a quitármelo cuando Levi se había abalanzado sobre mí.

De pronto el sonido de la puerta nos alertó. Corriendo nos acomodamos para que no se notase lo que estábamos haciendo.

Seguía encima de Levi cuando la persona que acababa de llegar a casa, irrumpió en el comedor.

Pero afortunadamente, me había puesto el mantel de la mesa encima para que tapase mi desnudez. Ahora sólo era un inocente acto de cariño por parte del hombre que tenía debajo de mí, que por cierto aún seguí en mi interior.

- Buenas noches, lamento mucho la demora, Rivaille. –La persona que había entrado era una chica de cabello castaño rojizo, bajita y de cuerpo delgado. – En el trabajo ha habido más pacientes de los usuales.

- No te preocupes Petra, el trabajo siempre es prioritario al placer. –contestó él tranquilo. Al contrario de mí, que intentaba con todas mis fuerzas no ruborizarme ni gemir. El muy capullo se seguí moviendo dentro de mí, aunque a un ritmo suave para que la mujer no lo notase.

- De verdad, que lo siento mucho.- se inclinó haciendo una leve reverencia- subo un momento y me arreglo para nuestra cita.- sonrió.

Pero antes de marchar me miró, haciendo que me pusiese a sudar de los nervios por ser descubierto. A Levi parecía excitarle eso de poder ser descubierto porque sentía como se ponía duro en mi interior.

Lo cierto es que estar de esta forma con él era algo normal, cuando no estaba mi padre presente. Conozco a Levi desde que era pequeño, para mí él fue mi modelo a seguir, a quién yo más admiraba.

Y él siempre, por alguna extraña razón, siempre me dio un trato diferente a los demás, era su consentido.

No todo el mundo puede presumir de poseer el cariño de Levi Rivaille.

- Eren- me llamó Petra, haciendo que pegase un salto y adentrando el miembro aún más- bájate de Rivaille que le estarás molestando.

- Y…yo…yo- intentaba hablar sin soltar ningún sonido que nos pusiese delatar pero no lo conseguía. Levi, quién se divertía por la situación en la que me encontraba, contestó por mí.

- No te preocupes Petra. Ya sabes que Eren es un mocoso consentido que le gusta que le mimen. Y a mí no me molesta darle lo que quiere de vez en cuando.

Casi que me da algo al oírle decir eso. ¡Toda la frase iba con segundas! La castaña se acercó a mí, poniendo la mano sobre mi cabeza para después acariciármela.

- Por favor, vete ya para que pueda vestirme y salir corriendo. Creo que no he pasado tanta vergüenza en toda mi vida.- pensé.

- Bueno, me alegro –sonrió.- No hay nada mejor como ver a dos personas que amas llevarse bien entre ellos.

Se aproximó a Levi para darle un leve beso en los labios.- Voy a cambiarme, vuelvo en un momento –dijo subiendo las escaleras rápidamente.

- Menos mal que se ha ido.- pensé soltando un largo suspiro mientras que me dejaba caer sobre el pecho del moreno.

- Ya has oído mocoso, tenemos que darnos prisa.

Y dicho esto, me empujó, haciendo que mi pecho chocase contra la superficie de la mesa del comedor. El movimiento de improvisto que realizó el mayor hizo que saliese de mi interior.

- ¿Pero qué…uhm…-solté un quejido

- Será mejor que estés callado, no queremos que Petra nos escuche ¿no?

No me dio el tiempo para responderle. De inmediato me volvió a penetrar de golpe, haciendo que tuviese que ponerme ambas manos en mi boca para que de ella no saliesen los gritos de placer que amenazaba por dar.

Se empezó a mover rápido y fuerte para acabar lo más pronto posible. Yo estaba a punto de correrme, ya no podía aguantar mucho tiempo.

Lo cierto es que todo el asunto de que podían pillarnos en cualquier momento me excitaba más de lo que debería. Y eso no hablaba muy bien de mí que digamos.

Con una última embestida hizo que ambos nos corriésemos en un orgasmo que entraba entre los 10 mejores de mi vida. Sentí como llenaba todo mi interior mientras no dejaba toda mi esencia desparramada por el suelo del comedor.

Normalizamos un poco las respiraciones para después ponernos a vestirnos apresuradamente. Nos arreglamos lo mejor que pudimos y con las servilletas que había sobre la mesa, lavé el suelo que había manchado.

- Ya estoy aquí.- anunció Petra bajando las escaleras.

- Justo a tiempo.- pensé.

- ¿Nos vamos ya?- preguntó Levi. Él estaba impecable como si lo anterior nunca hubiese pasado.

- ¡Claro!- dijo la mujer emocionada.- Eren, te quedas a cargo de la casa. Hoy no vendrá tu padre a dormir, tiene mucho trabajo en el hospital.

- Que novedad- pensé con ironía.

- Cuando llegue Mikasa, cenad algo he id a la cama temprano ¿Me has oído?

Asentí con la cabeza. Mi mente sólo estaba en ese momento en la mira de lujuria que Levi me estaba dando. ¿Es qué acaso este hombre nunca tenía suficiente?

- Yo volveré más tarde- dijo sonroja mirando de reojo al moreno que la esperaba en la puerta. Se encaminó hacia él pero antes de que se fueran les detuve.

- Levi. –el mencionado se volvió- cuida de mi queridísima prima ¿eh?- y le di mi mejor cara de inocencia. A lo que él me respondió con una sonrisa torcida y una mirada juguetona, que sabía que nadie podía interpretar salvo yo.

Finalmente ambos se despidieron y se fueron.

- ¿Portándote mal, Eren? –inquirió una morena que acababa de llegar y que seguramente había presenciado todo lo anterior.

- Oh, por favor, como si lo tuyo fuese mejor, hermanita.- solté una risilla mientras cerraba la puerta de la casa - ¿Vas a salir esta noche?

- Como siempre –contestó ella, mirándome con una pequeña sonrisa.- Armin no vendrá esta noche, tiene 'trabajo' pendiente, él y el señor Smith tienen que quedarse tarde para acabarlo.

Nos miramos para luego reímos juntos.

Si. Mi imperfección tiene nombre y apellidos, se llama Levi Rivaille y tiene 34 años. Es un hombre de baja estatura, de mal carácter y con una obsesión con la limpieza. Es el vicepresidente de 'Survey Corps', socio y mejor amigo de Erwin Smith. Y, para finalizar, es el novio de mi única prima, Petra.

Sí, lo sé. Soy un completo hijo de puta por acostarme con el novio de mi prima pero en mi defensa diré que le amo. Y si solamente puedo obtener esa mínima parte de él, soy feliz.

Pienso que es mejor tener algo que a no tener nada de la persona a la que amas. Creo que Armin piensa lo mismo que yo.

Lo que para unos puede resultar horrible e inmoral para nosotros solamente es un medio para escapar de nuestra realidad.

Los tres sólo queremos ser libres de elegir qué hacer. No queremos que nos controlen, que nos opriman. No somos perfectos, llevamos las manos ensuciadas y nos encanta, porque eso no hace sentir bien aunque esté mal.

Pero nada de eso importa, solamente nosotros sabemos la verdad de cómo realmente somos y eso nos enfurece porque para mi padre y para el mundo…seguíamos siendo PERFECTOS.


Nota: Vale...escribo esta nota aquí porque quiero vuestra opinión. Tengo dos historias de Shingeki en curso pero sólo puedo hacer una de ellas. Me gustaría que votaseis por la que os gusta más para continuarla, la otra la haré una vez que finalice la ganadora. ^^ Mucha gracias :)

Para los que se lo pregunten, NO SE CUANDO VOY A ACTUALIZAR, tengo los exámenes y los trabajos de la universidad y para mi está antes el estudio que el placer. û.û Yo aviso.

Tengo otra historia en curso de en el foro de Naruto también Yaoi (por si hay alguien interesado ;D).

Si alguien quiere hacerme alguna pregunta que contacte conmigo, en mi perfil dejo mi cuenta de Facebook :)

Y por último que tal un sensual y hermoso Review \o.o/

..Ally..

:3

.

.

.

P.D: Si hay algún fallo de ortografía decírmelo :)