Capitulo 1: artes perdidos
Un chico rubio corría en las afueras de la villa de la hoja como si su vida dependiera de ello ya que como el sabia ese día era la celebración de la muerte de kyubi el peor día de su vida. Estando un par de kilómetros lejos de la aldea se detuvo a dar un vistazo a su aldea desde ese lugar se podía ver como los aldeanos lo buscaban con desesperación con sus miradas llenas de odio, el chico suspiro agradeciendo de haber salido antes de su casa si se le podía llamar casa a un cuarto con muchas cuarteadas en las paredes con plantas creciendo dentro de ella con los vidrios rotos y una cama hecha de periódicos sucios y mojados.
Se acostó en el verde pasto observando la villa con tantas luces de colores que daban una gran vista esperando a que pasara la celebración que tanto odiaba y pensando lo que pasaría mañana si cambiaria lo que le estaba pasando o si algún día lo respetarían solo espero a que todo terminara quedando dormido en medio del bosque.
A la mañana siguiente naruto iba corriendo por el espeso bosque hasta toparse con un ninja que lo sujeto con fuerza y lo empezó a jalar de su pequeño pie golpeándolo contra las piedras y árboles que se cruzaban en el camino y le gritaba "eso te gusta no es así demonio" mientras lo jalaba mas fuerte y se reía de el
Naruto ya estaba acostumbrado al maltrato de los aldeanos el sabia que llorar y suplicar que lo dejaran no serviría pero sabia que la mascara que siempre le mostraba al mundo siendo introvertido y el payazo de la aldea no lo tendría para siempre solo estaba esperando ha que alguien lo sacara de su soledad que le demostrara la razón de porque vivir
Al sentir que no avanzaban alzó la vista y vio que el ninja estaba sudando como nunca por que delante de ellos estaba el hokage que veía al ninja con una cara de pocos amigos junto con dos Ambu uno con el cabello gris y con una mascara que paresia una comadreja y otro con el cabello café con una mascara de un halcón
Hokage – ¿que crees que estas haciendo con el joven uzumaki? Pregunto el hokage con una vos autoritaria
ninja – lo que debimos de hacer desde que nació este monstruo hokage –sama. Respondió el ninja con un poco de temor. Mientras un Ambu recogía a naruto y se alejaba saltando de rama en rama
Hokage – que demonios estas diciendo ese chico es solo el que contiene el poder de nueve colas no puedo creer que hayan tanta gente tan entupida en nuestra villa, sebes lo que pudiste haber ocasionado si se debilita el sello que le contiene al zorro de nueve colas y lo que pudisteis haber ocasionado si se desatara su poder, los esfuerzos y las vidas que dieron nuestros camaradas combatiendo con el kyubi hubieran sido envano
El ninja no daba crédito alo que escuchaba el solo pudo haber ocasionado la destrucción de toda la villa por su estupidez no podía decir ninguna palabra se sentía tan culpable que solo agacho la mirada y pidió disculpas al hokage
Hokage – las disculpas no bastaran y tu lo sabes todas las esperanzas de joven uzumaki están pendiendo de un hilo y tu acabas de empeorar su situación. Kakashi lleva a este hombre a mi oficina séle dará una sentencia
Kakashi – hai hokage sama. Mientras sujetaba al ninja y se dirigían ala oficina del hokage
En otra parte de la villa de la hoja
Naruto salía del hospital sin ninguna herida solo con sus ropas hechas trizas causadas por las piedras y las ramas filosas, caminaba sin rumbo fijo pensando que tedria que hacer para que la gente lo respetara por lo que el era no por lo que creian que era, el siguió caminando hasta que se dio cuenta de que había llegado a un lugar que jamás había visto en su vida, era una mansión bastante vieja como si la hubieran abandonado desde hace mucho tiempo, con enredaderas subiendo por las gruesas paredes de piedra y una gran entrada hecha de barrotes de acero oxidado
Naruto que se sorprendió tanto por jamás haber visto algo así, se adentro en aquella casa sin saber que lo que haria cambiaria su vida
Al estar dentro de la casa observo que todo estaba tan limpio que hasta podía ver su reflejo en el piso de madera todo lo contrario de la parte de afuera, así que se quito sus zapatos y siguió cominanado por el gran pasillo que paresia nunca terminar. Al poco rato de estar caminando sin querer tropezó con una alfombra, chocando con la pared la cual se abrio y cayendo adentro de lo que paresia ser un sótano donde habían solo velas encendidas alrededor de un gabinete de una madera muy fina con cristales muy extraños y chapas de oro, dentro de ese gabinete habían dos pergaminos plateados los cuales tenían letras gravadas en el listón que los rodeaba que decía " solo aquel corazón tan puro podrá abrir los pergaminos sagrados de la fuente vital"
Naruto – impresionante jamas sabia visto unos pergaminos tan extraños como esos, me pregunto si yo……. Naruto se acerco abrió el gabinete y tomo los pergaminos con una mano, en ese momento todo se volvio oscuro y despertó cerca de un lago que estaba en las afueras de la villa
Naruto - ¿en donde estoy? ¿Como llegue a este lugar? Al no encontrar a nadie alrededor se disponía a irse, cuando escucho la vos de una chica y se paro en seco para observar quien era
Naruto ¿Quién esta allí? Muéstrate
¿? – aquí estoy
Naruto volteo rápidamente pero no vio a nadie eso ya lo estaba asustando pero cuando volvió a escuchar la vos, vio que eran los pergaminos los que emitían la vos, por reflejo solto los pergamino y cayo al suelo un poco asustado.
Los pergaminos al caer provocaron una explosión de humo lo cual hizo que se asustara mas naruto y al despejarse el humo se podía apreciar una mujer entre 18 y 20 años de edad, con cabellos morados una piel muy blanca unos ojos color azul y vestida con un kimono blanco con una águila estampada en la parte trasera de este, la chica tenia las medidas perfectas lo que la hacia una mujer realmente hermosa
La chica voltio hacia naruto el cual tenia los ojos tan abiertos que parecía que séle saldrían de la cara si no se calmaba un poco, a todo esto ella le sonrió y decidió presentarse con el nuevo lider de una familia olvidada
Hola mi nombre es tsubaki yo seré tu sensei para aprender los artes perdidos ninja encantada de conocernos Uzumaki Naruto