Jalea de Piña
Por: MorelosBkpets
Capitulo 01: Dilema, de días y bromas pesadas.
O ▬ O ▬ O ▬ O ▬ O ▬ O ▬ O ▬ O ▬ O ▬ O ▬ O ▬ O ▬ O ▬ O ▬ O ▬ O ▬ O
—Uhmmm, uhmmm, ¡esto es delicioso!
—Me alegro que te hay gustado, la prepare especialmente para ti y tu papá.
—Gracias mamá, a parte de la mermelada de frambuesa, la jalea de piña es una de mis favoritas, y sabe muy bien con pan tostado, uhmmm, ¡Ups! Pero mira que hora es, ya es muy tarde, debo irme a la escuela o llegare tarde a clases.
—Es verdad hija, date prisa, Helga debe estar esperándote como siempre en la parada del autobús.
—Esta bien mamá, nos vemos en la tarde.
—Adiós hija.
Cielos, esta vez sí que se me hizo tarde, pero debo admitirlo, adoro el pan tostado con jalea de piña y además… ¡Hey un momento! ¿Qué hacen ustedes ahí? Vaya, por lo visto se ve que llevan rato ahí, ¿verdad estimados lectores? Y supongo que esperan les cuente una nueva historia ¿verdad? Pues lo siento, en esta ocasión no tengo historia que contar, la verdad hace mucho que no sucede nada nuevo, así que, temo decirles que perderán su tiempo si esperan algo, yo por mi parte los dejo aquí, si quieren quedarse ahí en su asiento y observar, háganlo por mi no hay ningún problema, yo hare como que no están presente, por cierto, para los que aun no me han ubicado, yo soy Phoebe Heyerdahl y la señora con la que estaba hablando hace un momento era mi mama, Reba, bueno, ahora si los dejo puesto que ya casi llego a la parada del autobús.
—Hey… hey Helga, ¿Cómo estás?
—Buenos días Pheebs, hoy amaneciste de muy buen humor.
—Nahhh, solo un poco, la verdad es que hoy me alegraron el día con un par de noticias.
—¿Noticias?
—Si, hoy por la mañana llegó la renovación de mi suscripción a mi revista favorita.
—Aja y luego.
—Uhmmm, ¡tuve un desayuno excelente!
—Excelente eh, ¡oye un momento! Esa no es noticia ¿por quien me tomas?
—Lo sé, lo sé Helga, tienes razón, la verdad mi desayuno no fue una noticia, es solo que disfrute mucho el pan tostado con jalea de piña que mamá preparo hoy.
—Vaya Pheebs, jalea de piña, bueno, al menos tú si desayunaste algo.
—¿Qué? ¿Otra vez volvemos a los malos ayunos?
—No que va, eso es cosa del pasado Pheebs, la verdad es que se me hizo tarde por estar… ehmmm, ¡pensando en algo!
—Si como digas Helga, en fin, si quieres compartimos mi almuerzo, aunque advierto que solo hay pan tostado y jalea de piña.
—Bueno, peor es nada, ahora vámonos ahí viene el autobús.
Cielos, como ya lo saben, la chica con la que estoy platicando es Helga Pataki, mi mejor amiga de toda la vida. Han pasado ya casi dos años desde aquel desastroso cumpleaños que ¡Rhonda! nuestra nueva mejor amiga, le organizo a Helga, ja, ja, lo recuerdan, si, si, lo se, lo se, se que dije que no les iba a contar ninguna historia, pero en fin, a veces suelo cambiar de opinión y como cada momento de nuestras vidas siempre significa una nueva historia, pues que mas da, lo cierto es que recién me llego a la mente el recuerdo aquel de cómo Helga y Arnold salieron a toda prisa del salón de fiestas, recuerdo que un policía los detuvo en la comisaria, a Helga por causar disturbios y a Arnold por causar disturbios ¡vestido de chica! Bueno, ese no fue el problema, la realidad fue que en su discusión hubieron forcejeos y por ende voltearon por completo un carro de Hot-Dogs y al no saber que hacer ambos salieron huyendo, y también de paso perseguidos por dos policías que fueron testigos del incidente, pobrecillos, pero en fin, la supuesta feliz pareja aún sigue teniendo sus desacuerdos, aún siguen discutiendo y peleando como siempre, pero en secreto claro está, según creo yo, se aman mutuamente, mucho mas de lo que se imaginan, entiéndase lo que quieran, todo es valido, en fin, tal vez mas adelante les cuente una parte importante de su historia, porque ohhh sorpresa, Helga ya me contó lo que sucedió aquel día en la feria, ehmm, hablo pues de un hecho que se mencionó en la historia pasada, Mermelada de Frambuesa, ja, ja, ja, pero no se los contare en este momento.
La relación real que hay entre ese par de tortolos sigue siendo hasta para mi, un secreto a voces, vaya, regresando al tema anterior, la historia que quizás corresponda en esta ocasión es diferente empezando por…
—¡Bueno días a todos!
Empezando por Rhonda Wellington Lloyd, nuestra gran amiga, mírenla, ahí viene, haciéndose notar como siempre.
—Ya, ya, cállate princesa y ven a sentarte, ah hola Nadine –respondió Helga con su típico tono de siempre.
—Buenos días Helga —saludo Nadine.
—Vaya Helga que bien te vez ¿Dormiste bien anoche?
Quien hizo este último comentario fue Rhonda, y justo cuando lo hizo, y para colmo con una curiosa expresión de malicia, de inmediato he comprendido a lo que Helga se refería con eso de que se la paso pensando en ¡algo! Debo admitir que creí que se refería a ¡ustedes ya saben quien! Y por lo visto me equivoque ¿o tal vez no?.
—Buenos días Phoebe —me saludo Rhonda.
—Buenos días chicas ¿Hay alguna novedad? —pregunte de la forma mas natural que pude.
—Uhmmm, por el momento de mi parte no —dijo Rhonda—, pero hay alguien quien si tiene una que otra novedad.
En ese momento, Rhonda, después de mirarme, miro a Helga quien a decir verdad, de momento no le presto nada de atención a lo que ella había dicho.
—Bueno, y se puede sabe exactamente ¿a qué te refieres? —le pregunte yo muy intrigada.
—A nada específicamente —Rhonda me respondió—, realmente solo cosas insignificantes, nada fuera de lo normal, salvo el hecho que…
Al parecer Rhonda estaba por decir algo que no debía, pues en ese momento Helga reaccionó como toda una fiera.
—¡Rhonda Lloyd! Te lo advierto princesa, si dices algo, te juro que te arrepentirás —dijo mi amiga casi en un susurro—, es en serio.
—De acuerdo, tú ganas —respondió Rhonda—, además, creo que el autobús no es un buen lugar para hablar sobre cosas de chicas, en fin, vámonos Nadine, sentémonos más atrás, ya que el aura negativa de esta chica contaminara mi belleza, ja, ja, ja, este debe ser un día ¡de esos días! Ja, ja, ja.
—Cállate Rhonda, no seas indiscreta —exclamó Nadine, a lo cual todos obviamente entendimos el doble sentido de lo antes mencionado.
—Hay Nadine, ni que fuera nada extraño ¿o qué? No somos chicas, a todas nos pasa, Ja, ja, ja.
—Lo siento Helga —se disculpo Nadine—, iremos más atrás.
—Por mi hagan lo que quieran —respondió Helga un tanto molesta y a la vez, avergonzada.
Por favor, denme paciencia. Era cierto que la relación entre Helga y Rhonda desde hacía ya unos cuantos años atrás, había mejorado bastantísimo, pero hay días en los que de verdad no se tolera a ninguna de las dos, la verdad, no se que es lo que está sucediendo, pero algo me temo que Rhonda sabe sobre Helga, y eso desafortunadamente, es una real bomba de tiempo.
—¡Oye Phoebe! —escuche de pronto el llamado de mi amiga.
—Si Helga —respondí de inmediato.
—Necesito hablar contigo de algo ¿nos vemos mas tarde a la hora del almuerzo?
—Si, claro Helga, pero ¡oye! ¿Qué tienes? Hace rato te veías bien, ¿Por qué el cambio tan repentino?
—No es nada Phoebe, solo que de un momento a otro no me he sentido muy bien, creo que no me cayo muy bien la cena de anoche.
—¿Quieres que te acompañe al medico o algo por el estilo?
—No, gracias Phoebe, no es tan grave, a propósito, ¿has visto a ese torpe cabeza de balón?
—No Helga, y ahora que lo mencionas tampoco he visto a Gerald.
—Si claro, pues como Gerald ya tiene un auto, no creo que se digne a viajar más con nosotros los pobres.
—Ya, ya Helga, mas tarde los veremos.
—Como digas, a propósito de cosas y demás ¿Que haremos esta tarde? recuerda que hoy es viernes de películas ¿iremos al cine? —pregunto mi amiga.
—Claro que si —le respondí—, bueno de hecho ya había planeado ir con Gerald pero si quieres puedes venir con nosotros, es mas, invitemos a Arnold, así será una cita doble.
—Ja, ja, ¿cita doble? —Respondió Helga con cierto sarcasmo—, no me hagas reír Phoebe, sabes muy bien que entre Arnold y yo no hay nada.
—Si, como no —le dije a Helga con el mismo tono de sarcasmo.
—Está bien, está bien Pheebs, ya se que todos saben que hay algo entre nosotros, nada confirmado claro, es solo no quiero verlo, al menos no hoy, es mas, mejor disfruten ustedes su cita, no quiero terminar siendo un mal tercio.
Hoy Helga de verdad que no se ve muy bien. La verdad lleva un tiempo que ha estado un poco extraña, y realmente me preocupa mucho pues, a final de cuentas Helga siempre ha sido una chica enérgica, se le ha ido quitando lo gruñona con la edad, bueno, tener casi 18 años es motivo suficiente para ajustar el mal carácter que la represento durante mucho tiempo.
—¡Phoebe! ¡Phoebe!
—Eh, ¿qué sucede Helga?
—Phoebe, deja de pensar en no se que y date prisa, ya llegamos.
Bueno, es oficial, Helga tiene algo raro, quizás Rhonda tenga razón, a lo mejor no es un día cualquiera, quizás sea un día de ¡esos días! Pero ni hablar, así es la vida de nosotras las chicas, por cierto, miren, ahí vienen Arnold y Gerald, y adivinen quien viene manejando, Arnold.
—Chicos, chicos por aquí —grite llamando la atención de Arnold y Gerald cuando baje del autobús.
Vaya, creo que esto será divertido; como se los acabo de comentar, el que maneja es Arnold y créanlo, es pésimo en la materia, fue bueno quizás con los carritos GoKart cuando era niño, pero ahora, es simplemente terrible. Que irónico, recuerdo que alguna vez me entere que quien enseño a montar la bicicleta a Gerald, fue Arnold, y ahora es Gerald quien le da clases de manejo a Arnold.
—Con cuidado, con cuidado, pisa el clutch, despacio y suéltalo mientras pisas el freno —decía Gerald, mientras le daba las indicaciones a su amigo—, así, así, excelente Arnold, pronto podrás manejar tu solo. Aquí nos estacionaremos.
—Gracias Gerald —esta pequeña clase de hoy fue muy ilustrativa.
—No me lo agradezcas viejo, además aun me debes la compostura del faro que estrellaste.
—Si, si ya lo sé Gerald, lo sé.
—Como sea —hablo Gerald—, hoy mejoraste mucho.
Bueno, quizás debo retractarme un poco, nahhh, la verdad es que Arnold es pésimo en esto de conducir, pero Gerald es buen maestro, desafortunadamente eso no quito el hecho de que en la segunda clase, Arnold echó la reversa y choco contra un poste estrellando por completo el faro posterior derecho del auto de Gerald, lástima, era un auto nuevo, en fin me acercare a saludarlos.
—Hola chicos ¿Cómo han estado?
—Bien, gracias Phoebe ¿y tú? —respondió Arnold.
—Igualmente gracias, por cierto, Helga te estaba buscando.
—Con que buscándome —respondió Arnold con un cierto aire de indiferencia—, pues bien, si la vez, dile que ya estoy cansando de las bromas pesadas que seguido me hace, la de la otra noche fue el colmo, es mas, si la vez, dile que no me has visto en todo el día.
—¿Qué no ha visto a quien, Cabeza de balón? —Llego Helga de improviso.
Vaya que Helga es muy hábil en el arte de ocultarse, por cierto, ¿dónde se había metido? de repente la deje de ver un momento y recién aparece de la nada.
—Ah, hola Helga, adiós —y lo increíble del mundo paso, Arnold saludo a Helga de forma muy indiferente, se dio la vuelta y siguió su camino.
—Hey un momento, ven aquí Arnoldo ¡Arnold! ¡Arnold! —Arnold se fue caminando rápidamente y Helga por consiguiente detrás de él.
—Vaya, ¿qué rayos le estará pasando a todos?
—No lo sé Phoebe —me respondió Gerald—, no lo sé, solo que sé que algo hizo Helga que puso a Arnold muy molesto, en fin, debió ser alguna broma suya, de esas que le hace siempre, solo ignóralos Pheebs, ya verás que al rato se contentan y se olvidan de todo esto.
—Y si no, ¿Qué pasara entonces? —le pregunte a Gerald con poco de preocupación.
—Pues en ese caso, yo invito el almuerzo de toda la semana.
—De acuerdo —le dije a Gerald—, trato hecho.
Continuara...
Muy bien mis estimados amigos y amigas, justamente hoy después de 8 meses de ausencia, por fin he vuelto, mi retiro provisional/indefinido, por el momento solo duro 8 meses, los cuales me han dado la posibilidad de pensar y reflexionar sobre muchas cosas respecto a, tanto mi vida personal, mi carrera profesional y por su puesto mi papel como personaje y escritor en este mundo virtual. Mi retiro consistió en gran medida, para lograr condiciones que pusieran en orden mi cabeza, realmente mi ultima historia "Crónicas de Helga Geraldine Pataki" me dejo algo dañado de la cabeza y casi por completo, la musa de la inspiración me abandono; afortunadamente ha vuelto y pues, ahora les presento esta nueva historia que espero en verdad les agrade a todos y espero de todo corazón, poder conocer sus valiosos comentarios y reviews.
Ante todo muchas gracias y esta historia en su totalidad esta completamente dedicada a mi amiga y "fan numero uno" isabelita emoxxa, amiga mía, gracias por todo tu apoyo, en verdad gracias pues es por ti y tu amistad y el de "Mora" también, motivos por el cual me anime a regresar por estas fechas tal y cual lo había prometido.
Disfruten la historia, como verán, el retiro funciono también para modificar mi estilo de redacción literaria así que, espero que les agrade, y que la lectura les sea mas amena y fluida.
Nos vemos en la próxima actualización que sera el día Lunes 24 de Junio de 2013 a esta misma hora.
Soy Bkpets y les digo:
Haiii-Houuu... ¡Listo y Confirmado! Bkpets es quien los saluda y ahora se despide.
