Diferentes decisiones
Resumen: Edward y los Cullen llegaron a tiempo, pero James ideo otro plan maestro a ultimo momento… que pasara con Bella ahora?
Disclaimer: La idea original, los personajes y varias cosas mas son de Meyer, el resto es mío (lo cual es bien poco) y no busco ganar ni medio centavo, así como tampoco robarle seguidores . (Karlita egocéntrica al 100)
1. Otra decisión.
La puerta se abrió de par en par y por ella entro Edward, quien se abalanzo sobre James separándolo de un tirón de la mano de Bella, arrojándolo hacia donde estaban Emmett y Jasper.
El ver a Bella en ese estado fue un duro golpe para los Cullen, pero se sobrepusieron rápidamente. Carlisle y Alice se adentraron igual de rápido que los otros en la habitación y se acercaron a donde estaba Edward arrodillado en un charco de sangre, sangre perteneciente a Bella quien se removía inquieta aun estando inconsciente.
James había logrado poner un espacio entre el y los dos otros vampiros, su mente maquinaba mil y unas ideas para librarse de esos dos inútiles y acabar con Edward, pero cuando escucho que el que parecía ser el líder decir que la ponzoña se estaba extendiendo con rapidez tomo una arriesgada decisión. Rápidamente se precipito en el estrecho espacio que había entre Emmett y Jasper, esquivó a Edward, quien se había parado de golpe al verlo acercarse, y con gran presteza tomo el cuerpo inconsciente de Bella en sus brazos y corrió lo mas veloz que podía hacia la calle, sabiendo que los cinco vampiros los seguían de cerca.
Corrió lo más rápido que pudo a lo largo de la calle, pasando con tal rapidez que ningún mortal lo notaba. Pero sabía que si seguía corriendo el olor de la sangre de Isabella haría que fuera fácil rastrearlo. Frenó de golpe no mucho después, justo al lado de un hombre que se estaba subiendo a un BMW azul, sonrió de lado mientras empujaba a aquel hombre y se subía el al coche, dejando a la chica en el asiento del copiloto. Encendió el coche y arrancó, presionando a fondo el acelerador para huir de ahí. Miro de reojo a Bella, notando como, aun estando inconsciente, se retorcía de dolor.
Freno dos calles después para que una mujer pelirroja de aspecto bastante salvaje se subiera al asiento trasero y volvió a arrancar, pisando nuevamente el acelerador a fondo para desaparecer por la calle.
El olor de la sangre de la chica los invadía por completo al estar en un lugar cerrado, pero gracias a los años de práctica lograron sobreponerse a la tentación y dejaron que la transformación prosiguiera.
- Como los perderemos, James? - pregunto la mujer, su vos aunque dulce, daba miedo por el tono gélido.
- No saldremos del coche para evitar que el olor atraiga a otros vampiros y nos iremos de la ciudad, lo más lejos posible para evitar que nos encuentren y que ella trate de volver con ellos en cuanto despierte. – dijo James de modo inexpresivo, con la mandíbula fuertemente apretada, esforzándose al máximo para evitar saltar sobre Isabella y beber de esa deliciosa sangre.
