Hilo rojo l
Descendencia...
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La noche era tranquila en Karakura, había una hermosa luna adornando el cielo nocturno, una brisa refrescante y un ambiente de completa paz.
Todo era tranquilo, excepto en la casa Kurosaki, ya que una habitación en lo particular emitía una pequeña luz.
Ambos estaban en la silla del escritorio, besándose desenfrenadamente. Ichigo tenía a Rukia fuertemente abrazada por la cintura, besándola como si fuera un animal hambriento, dando sutiles gruñidos y suspiros de placer. Rukia silenciaba sus suspiros con los labios de Ichigo, besándolo de la misma forma que él lo hacía con ella, sus manos se aferraban con fuerza a su cabeza, como si de esta forma se asegurará de que Ichigo no se atrevería a dejar de besarla.
No era la primera vez que ambos se encerraban en la habitación del muchacho a besarse apasionadamente, pero si la primera en que la casa estaba completamente sola y por primera vez podían experimentar lo que era estar juntos sin sentir esa adrenalina a ser descubiertos por algún miembro de la familia y para ser sinceros, aquello no les desagradada.
Ichigo tomo con más fuerza la cintura de Rukia y comenzó a mover sus piernas de tal manera que hicieran fricción, provocándola y seduciéndola para que ella le pidiera mucho más. Ella ya no podía respirar, por lo que ella se separó de él, tenía la vista ligeramente nublada y de sus labios salía un delgado hilito de saliva. Pero poco le duro el gusto de respirar ya que de nuevo Ichigo tomo sus labios de forma agresiva, mordiéndolos y delineándolos con la lengua.
Rukia ya no aguantaba el maldito calor que crecía dentro de ella, así que ya desesperada tomó la sudadera de Ichigo y la jalo hacia arriba y así dejando a la vista su pecho desnudó. Ella no dudo en pasar sus manos por el bien formado cuerpo de Ichigo obteniendo unos cuantos suspiros por parte de él.
E Ichigo en venganza paso descaradamente sus manos por el bien formado trasero de Rukia, sintiendo su forma, moldeándolo a su gusto. Quizás eso le costaría caro, pero bien valdría la pena.
-Rukia...
Esa maldita voz llena de lujuria la estaba volviendo loca. Quería tenerlo ahora mismo, quería estar con él y sentir su calidez natural, por eso ella misma tomo el borde de su camiseta y empezó a quitársela, pero justo cuando estaba por sacársela de la cabeza, les llego un golpe de realidad.
-¡hijo mío! ¡Trajimos la ce...!
Rukia dio un grito ahogado y salto del susto aun con su camiseta a medio sacar, Ichigo se cayó de la silla y por obviedad se llevó a Rukia con él.
Ichigo no se esperaba eso ¿qué carajos hacia su papá parado en la puerta como si nada? Estaba que tronaba de coraje e impotencia, aún tenía la respiración agitada y estaba haciendo todo lo humanamente posible por no arrancarle la cabeza a su progenitor. Rukia intento ponerse de pie pero Ichigo se lo impedía con su abrazo sumamente protector, tenía el rostro completamente rojo, no podía ser posible tanta humillación. Por lo que ocultó su rostro en el cuello de Ichigo.
-¿¡Y TU QUE MIERDA ESTAS HACIENDO AQUÍ VIEJO IDIOTA!?
-¡pero qué orgullo!-gritó Isshin emocionado desde la puerta-¡Masaki! ¡Por fin nuestro hijo se ha convertido en hombre! ¡Seremos abuelos pronto! ¡Nuestro hijo tendrá descendencia hermosa!
-¡DEJA DE DECIR ESTUPIDECES! ¡¿POR QUÉ NO TOCAS LA MALDITA PUERTA VIEJO PERVERTIDO?!
-lo siento hijo mío, pero... ¿yo que iba a saber que mi hijo ya hacia cosas de adultos con mi amada tercera hija?-le pregunto su padre con cierto tono de picaría-ahora entiendo porque insististe en quedarte, hijo pervertido.
-¡CON UNA MIERDA, SAL DE AQUÍ!
-Ichi-nii ¿por qué gritas así?- Yuzu apareció en la puerta preocupada seguida por su melliza.
¡Genial! ¡Más humillación! Pensó Rukia, esto sería el final de la poca dignidad que le quedaba.
-¿le pasa algo a Rukia-chan? Esta muy roja-digo Yuzu aun más preocupada.
Rukia se encogió aun más, estaba segura que ahora mismo estaba pagando una especie de Karma.
-no creo- hablo la otra melliza- por lo que veo Rukia-chan está en buenas manos. Por lo general Karin era muy reservada en cuanto a esos temas pero de vez en cuando disfrutaba de meter en aprietos a su hermano mayor.
-¡YA SUÉLTAME IDIOTA!-le grito Rukia a Ichigo ya a punto de un colapso. Ichigo la soltó y ambos se pusieron de pie, rojos hasta las orejas y con su dignidad hasta el suelo.
-¡nada de eso hijas mías! ¡Su hermano se ha convertido en hombre!
-¿cómo?-volvió a preguntar Yuzu.
-¡CÁLLATE!
-no es penoso decir la verdad, pronto, hijas mías tendremos bebes perfectos gracias a nuestros genes y a los de Rukia-chan.
-¡DEJA DE DECIR ESTUPIDECES!- le grito Ichigo que estaba a anda de convertirse en asesino.
-¡no son estupideces! ¡Se hombre y acepta lo que haces!
-¡NO VOY A ACEPTAR NADA, VIEJO IDIOTA!
-Ichi-nii no seas tan frío, puedes herir los sentimientos de Rukia-chan. Si vas a ser su marido debes de darle su lugar y tratarla con amor-lo regaño Yuzu con total seriedad.
-¡¿M-MI MARIDO?!-grito Rukia paralizándose en su lugar. Todos los presentes miraron a Ichigo.
-¿¡No le has propuesto matrimonio?! Eres una deshonra para la familia Kurosaki.
-¿DE QUE MIERDA ESTÁN HABLANDO AHORA?
-¿no te piensas casar con Rukia-chan? No puedo creer que seas tan idiota-esta vez fue Karin quien lo ataco.
-¡NO ESTAMOS EN EDAD PARA CASARNOS!-fue la simple excusa que se le ocurrió a Ichigo.
-¿y acaso no piensan en el futuro?
-¡YA DEJENOS EN PAZ!
-Ichigo, hijo mío, si no te casas con Rukia-chan morirás amargado y virgen. Ya que tu padre idiota interrumpió el momento.
-amargado quizás, pero virgen lo dudo...-comento Rukia pensativa.
-¡CIERRA LA MALDITA BOCA, ENANA DEL DEMONIO!
-¡NO CALLES A TU FUTURA ESPOSA HIJO IDIOTA!
-¡VIEJO CHISMOSO!
-¡EXIBICIONISTA! ¡TAPATE DE UNA MALDITA VEZ!
Rukia estaba ajena a toda esa guerra verbal que se desato sin medida, estaba sumergida en sus propios pensamientos ¿Una Boda? Vaya que sería algo de locos, aunque no estaba cien por ciento segura de si hablar con él de ese tema sería una buena idea, ya que seguramente saldría también el tema de los mundos diferentes y de una separación y todas esas cosas que los ponían tensos. Por el momento solo se enfocaría en disfrutar cada día a su lado, de amarlo con cada fibra de su cuerpo y de hacerlo feliz.
Aunque la idea de estar en una linda casa con dos niños parecidos a Ichigo pero con el color de su pelo y sus ojos... No le desagradaba del todo. Sonrío débilmente quizás su noche de desenfreno total tendría que esperar pero tenía que admitir que ser parte de la familia de Ichigo sería algo divertido y si en ella estaba dejar mas descendencia Kurosaki... No estaría nada mal.
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¡HOLA!
Bueno, aquí reportándome con un nuevo proyecto, una serie de Drabbles completamente Ichiruki (¡YEAH!) Sinceramente no se cuantos capítulos serán, supongo que los que mi imaginación me den.
Espero les guste y lo disfruten tanto como yo al escribirlo.
Muchos besos y abrazos.
Atte. Isabella.