Disclaimer: Demashitaa! PowerPuff Girls Z y sus personajes no me pertenecen.
Demashitaa: Kasai.
Adevertencias: Esta es la continuación de una de mis historias, Demashitaa: No Hai. Creo que no es necesario leer la anterior para entender está, pero sería mejor que así fuera.
Aclaraciones para aquellos que no han leído No Hai:
Identidades secretas de los chicos: Brick: Makoto Him, Boomer: Hotaru Him, Butch: Koiji Him.
Resumen, Demashitaa: No Hai.
Tres años después de la desaparición de los villanos en la ciudad de Tokio, las chicas llevaban una vida cotidiana normal. Sin embargo, pronto, los villanos aparecen de nueva cuenta con poderes mucho más avanzados de los que ellas recordaban. El secreto de su inesperado poder, era que todos los villanos se habían unido a un tirano llamado Taiga, que deseaba la muerte de las chicas y no solamente eso, sino la destrucción de Tokio. Pronto, los RowdyRuff Boys son obligados a infiltrarse en la vida cotidiana de las tres chicas, sin embargo, ellos no contaban que terminarían formando una amistad mucho más fuerte que el odio que les tenían, traicionando a su líder, y luchando contra él, a lado de las que antes habían sido sus peores enemigas.
Al final, después de una intensa lucha interna, Brick decide unirse a las PowerPuff Gilrs Z.
Así es mi vida Hoy
-¡Boomer, idiota, la cámara está grabando!
El rubio sentado en el banquito frente a la cámara dejó de mimar y admirar a su pectoral para dirigirle una mirada de reproche a la pelinegra detrás de cámaras y acomodarse la camiseta como debía ir. Tosió levemente para disipar su incomodidad al haberse visto descubierto.
-¡Ya lo sabía! Solo me limpiaba un poco. –Tras un insulto por parte de la pelinegra, el chico se reacomodo en su lugar y sonrió a la cámara. -¡Que tal, Yo soy…
Se vio interrumpido por un jalón de oreja de una molesta pelirroja.
-¿Pero qué diablos te pasa? –Le recriminó el rubio a la chica, masajeando el lugar afectado.
-¡Lo ensayamos por meses, y tú lo arruinas! ¡Deberías estar detrás de cámaras, inepto!
Tras un minuto de analizar la situación el chico parpadeó y sonrió con nerviosismo.
-Eh, por eso decía… yo… voy… ¡Voy a tomar agua!
Boomer salió como disparado por un cohete de escena, dejando a la pelirroja parada en el medio.
-¡Disculpen este pequeño error, fueron unas fallas técnicas! –Dijo, nerviosa. -¡No se preocupen, todo sigue como estaba!
Utonium suspiró.
-¡Corten!
Esta vez, el pequeño banquito tenía un reflector blanco y nadie estaba sentado en el. Él profesor Utonium saludaba a la cámara alegre.
-¡Hola a todos! ¡Bienvenidos sean! ¡Es un placer para nosotros presentarnos aquí, con la segunda entrega de nuestra saga Demashitaa, Demashitaa: Kasai!
Kaoru le oprimió el botón de aplausos, que resonaron por el pequeño set. Era azul marino, donde había un pequeño banquito, ubicado justo frente a la cámara.
-Siéntanse cómodos, los invitamos a que conozcan cómo ha sido la vida de nuestros queridos protagonistas durante estos últimos dos años. –Dijo Utonium. Más aplausos resonaron. –Como recordarán hace dos años nuestros queridos y valientes héroes lucharon contra un poderoso hombre llamado Taiga que buscaba destruir la ciudad y todo aquello que pasara delante de él. Gracias a los dioses, nuestros chicos terminaron con esa pesadilla y crearon un nuevo equipo, formado por los RowdyRuff Boys y las PowerPuff Girls Z. ¡Y sabemos que están ansiosos por volver a encontrarse con ellos, así que, no perdamos más el tiempo! ¡Estamos dispuestos a responder todas sus dudas sobre lo que ha pasado en los últimos dos años!
Los aplausos volvieron a resonar en el improvisado set.
-¡Y Con ustedes: De un metro setenta y cinco centímetros, dieciocho años de edad, cabello pelirrojo y su inseparable gorra: Brick Him, mejor conocido como Makoto Him!
El aludido entró sonriendo con digna arrogancia de él, sentándose en el banquito y acaparando la cámara entera.
-¡Se suponía que yo sería la primera, profesor!
-¡Calla pelirroja histérica, arruinas mi entrada! –El chico carraspeó y volvió a sonreír. -¡Hola queridos admiradores, sé que habían estado deseando saber de mi de nuevo, pero, es importarte hacernos desear!
-¡Creído!
Him decidió ignorar cualquier comentario de la pelirroja y algún otro susodicho fuera del set, para continuar con su presentación.
-Como habrán escuchado y podrán darse cuenta, soy Brick Him, el grande. O como normalmente me conocen en mi vida cotidiana, Makoto Him. Recuerden que como personas superpoderosas debemos tener una identidad secreta que nos permita mantener una vida medianamente normal. Y bueno, como deberán acordarse hace dos años peleamos contra el mal, si, aunque suene algo imposible viniendo de mí. Y vencimos a un tirano llamado Taiga. Como recordaran quedamos Trágicamente atados a estás…
Una botella de agua le golpeó la cabeza.
-¡Gustosamente unidos! –Se corrigió. –Maldición, solo fue un error de dicción. –Sobó el lugar afectado y miró mal a la pelinegra. –Como decía, quedamos gustosamente unidos como equipo a las PowerPuff Girls Z. Al principio la gente no creía que nosotros realmente quisiéramos ayudar, por lo que nos vimos en la necesidad de cumplir una sentencia durante unos meses por "los desastres" que habíamos causado. Aunque ahora, debo decir que estas personas babean el piso por donde pasamos.
Brick se acomodó la gorra, que había sido desacomodada y sonrió con superioridad a la cámara.
-Durante estos últimos dos años, como deberán imaginarse, hemos entrenado duramente para mantener la ciudad tranquila, que debo admitir, ser un héroe no es tan malo como me lo habían llegado a pintar, aunque debo confesar que a veces tengo mis momentos de debilidad en los que deseo asaltar alguna viejita o… ¡Es broma, maldición! –Se apresuró a corregir al ver a la pelinegra a punto de lanzar una nueva botella. – ¡Solo bromeo, loca!
Kaoru, detrás de cámara le advirtió con ademanes nada propios de una señorita. El chico la ignoró completamente.
-Como decía. Ser un héroe no resultó ser tan malo como mamá me lo había contado y mucho menos el bastardo de Taiga. ¿Recuerdan a ese idiota? Respondiendo a una de sus preguntas: El bastardo se ha ido. Su misma codicia terminó con su vida. Como sea… Al final resultó ser bastante genial ser un héroe. ¡Puedo destruir cosas sin ninguna consecuencia!
Está vez, Kaoru asintió sonriente detrás de la cámara, Momoko le dedicó una mala mirada.
-Y tenemos una vida bastante buena. Incluso esas visiones desaparecieron, aunque bueno, aún hay algunas que me preocupan, pero al parecer, todo quedó en el olvido. Claro, lo único que lo arruina es que tengo que asistir a la escuela como requisito, ya saben, ideas locas del vejete del alcalde. Pero aunque odio levantarme a estrepitosas horas de la madrugada y memorizar miles de cosas inútiles: ¡Me encanta competir con la histérica pelirroja y demostrarle que soy mejor que ella en todo, eso incluye, sorprendentemente: la escuela!
Esta vez logró esquivar una libreta rosa.
-Además, como sabrán, Asashi Teishi, aquel chico que me instruyó en el club de música se ha ido a la universidad y sí, yo, Makoto Him, soy el encargado del grupo desde hace un año. Y creo que eso responde a una de sus preguntas: Claro, soy un músico. He llegado a componer mis propias canciones ¡El mejor que sus oídos de mortales van a llegar a escuchar alguna vez! Lo sé, soy prácticamente irresistible. ¿Quién no estaría de acuerdo? ¡Soy Brick Him: Guapo, atlético, encantador…
-¿Van a dejar que siga diciendo está sarta de babosadas?
-¡No seas envidiosa, rosita! –La chica se adentró al set, tapando la cámara y en el proceso al chico con su cara. -¡Oye!
-¡Siguiente!
El profesor Utonium intentaba por todos los medios ignorar los gritos de Brick y Momoko, peleando por la intromisión de la pelirroja minutos atrás.
-Ahora, con ustedes, una de nuestras heroínas: ¡La más rebelde, pelinegra, de un metro sesenta y cuatro de altura y altamente calificada para dejar inconsciente a Mojo Jojo de un golpe: Kaoru Matsubara, mejor conocida como Buttercup!
La chica entró saludando hacía la cámara, con una sonrisa de oreja a oreja.
-¡Que hay! –La pelinegra alzó un pulgar. -¡Lo sé, tiempo sin vernos! ¡Pero no hay mucho que contar; sigo pateando el trasero de los monstruos y estos tres críos de aquí. Sobre todo el de Butch!
-¡Eso no es verdad, energúmena!
-¡Cállate idiota! Como decía: Le pateo el trasero todo el tiempo. Aunque debo admitir, que no ha sido tan malo hacer equipo nosotros seis, y creo que se vio demostrado en la última batalla en la que derrotamos al idiota de Taiga. Así como quedó demostrado quienes son las mejores.
-¡Claro que los RowdyRuff Boys! –Kaoru ignoró las tres voces y siguió con su cháchara.
-Por cierto, sigo siendo la capitana del equipo de futbol, femenil, claro está. Y aunque la última vez que nos vimos, fuimos descalificados de la competencia por causas mayores –El idiota de Taiga–, Esta vez seremos los campeones de la gran copa de la C.E.D.
Alzó su puño, en señal de una futura victoria.
-En fin. Estoy intentando contestar todas las preguntas y dudas que nos enviaron, pero debo decirles que algunas fueron muy idiotas. ¡Una chica fuerte y audaz como yo, no puede tener intereses amorosos, para mí son solo pérdida de tiempo! ¡Mucho menos con este tarado, el imbécil de Butch! Así que no, no es posible que algo haya pasado entre… iug, no. Ese va detrás hasta de una escoba con falda. Así que despreocúpense, está chica estará libre siempre. Y no, aun no uso ninguna falda.
-Pero deberías.
Resonó una voz que hasta el momento había sido la única capaz de mantenerse serena, como habían acordado durante los ensayos.
-Nah, ignoren a Miyako. Como decía todo aquí, a pesar de haber pasado un par de años, sigue de la misma manera. ¡Hasta mi estatura! No como la de estos tres mastodontes, que parecen crecer un centímetro por día.
-¡Envidiosa!
-¿Envidia de este trío de holgazanes? ¡Ni muerta! Como sea, se que no van a creerlo, pero tampoco nos ha resultado mal la convivencia entre nosotros, por lo menos no tan mal como se pensaba que sería, de hecho…
-La chica admite que no puede vivir sin nosotros.
Kaoru frunció el ceño, y sonriendo forzadamente a la cámara se levantó.
-Ya vuelvo.
-¡Calma loca, que solo eran un par de bromas!
El profesor Utonium se apresuró a hacer presencia.
-Yo… por motivos de… eh…
-¡Ven acá idiota!
-Por algunos problemas del reparto... se suspenderá momentáneamente la transmisión… eh… ¡Ya volvemos!
-¡Desearas no haber nacido!
-¡Eso veremos, verdecita!
La cámara se tornó negra.
Minutos después, se volvía a enfocar el banquito blanco. Momoko, al ver que el profesor prefirió quedarse detrás de cámaras donde pudiera controlar a los cinco restantes, decidió entrar sin ser presentada.
La pelirroja saludó cortésmente a la cámara, con una amable sonrisa.
-¡Hola a todos! Es un gusto poder verlos de nuevo, han pasado ya dos largos años desde la última batalla, y contrario a lo que dice Kaoru, creo que las cosas han cambiado bastante. De hecho, mucho.
Acomodó su falda para proseguir.
-Como recordarán, la última vez logramos derrotar a este desagradable hombre Taiga, y gracias a ello, descubrimos que podíamos hacer equipo con los RowdyRuff Boys, lo cual no resultó tan catastrófico como creímos que sería. Después de todo no son tan malos chicos.
-Damas y caballeros, admiren como esta terca chica acepta de una vez por todas lo genial que somos.
-¡La evidencia está grabada!
La pelirroja, hasta ahora calmada, se tomó el puente de la naríz, respirando dificultosamente.
-¡Maldición, retiró lo dicho, estos chicos son una molesta plaga en el… –Carraspeó, calmándose. –Eh, muy bien. Como ya saben, ahora somos equipo. Y hasta ahora han hecho un buen trabajo protegiendo a la ciudad, incluso de su peculiar madre. Porque sí, tal como lo habíamos pensado dos años atrás, los villanos huyeron tan solo fueron libres de Taiga y al poco tiempo comenzaron a meterse en líos, sobre todo para "Cobrar venganza por la traición de los RowdyRuff Boys" Sin embargo, A estos tres chicos la gente les ha tomado algo de aprecio y…
-¡Nos aman!
La pelirroja suspiró.
-Bueno, todo ha resultado mejor de lo esperado. Al principio fue algo difícil que confiaran en ellos, pero últimamente todo ha ido de maravilla. ¡Oh! –Dijo, como si recordara algo de suma importancia. –Solo para aclarar, Brick mentía. Siempre, SIEMPRE, he sido la primera de la clase. Tanto, que ahora soy ayudante del profesor en el laboratorio junto a Peach y Ken. Todo el tiempo estamos intentando crear nuevas cosas para nuestro entrenamiento, e intentamos cumplir las peticiones de los chicos, aunque sean algo descabelladas. Como eso que pidió Butch el otro día, la maquina portátil de hamburguesas o no sé qué para batallas.
-Es justificable.
-¡Cállense maldita sea! –Renegó desde su lugar. Después titubeó hacia la cámara. –Lo lamento, estos chicos sacan lo peor de mí. Bueno, deben de saber que confiscamos todas las sustancias escondidas en el laboratorio de Taiga y todas se encuentran aquí, a salvo. Estos dos años todo ha estado muy tranquilo, incluso, aquellas temibles pesadillas, que resultaron ser visiones, pasaron, y aunque algunas nunca se cumplieron, espero que nunca lo hagan. Sé que me quejo mucho de estos chicos, pero haría cualquier cosa por ellos y por las chicas. Además, ahora soy la capitana del equipo de animadoras y…
Brick asomó la cara en la cámara, tapando a la pelirroja y mostrando su venganza por la intromisión en su momento.
-¡¿Pero qué te…
-Me gustaría decirles que ha dejado su adicción al azúcar, pero no es así, chicos.
-¡Oye!
-Además esta enana sigue midiendo un metro sesenta y tres.
-¡Brick, te voy a…
-¡Siguiente!
Miyako saludaba enérgicamente a la cámara, ignorando completamente la pelea de sus dos líderes respecto a la venganza del pelirrojo sobre su amiga.
-¡Buenos días, tardes, o noches, según sea el horario! –Dijo, sonriente. -¡Soy Miyako Gotokuji, mejor conocida por los ciudadanos de Tokio como Bubbles, la PowerPuff Azul! Es un placer estar de nuevo aquí, con ustedes. Para empezar, responderé una de sus preguntas: Nadie ha salido absolutamente con nadie en estos últimos dos años. Así que… todo sigue como antes.
Dijo, sonriente.
-Y Como pueden ver muchas cosas han cambiado. Los chicos ahora forman parte de nuestro equipo, lo cual ha traído muchos cambios buenos para la ciudad. Momoko ya lo dijo, pero al principio fue muy difícil aceptar el cambio para todos. Sobre todo para los chicos y los ciudadanos, pero poco a poco los chicos se ganaron la confianza de la ciudad, además de que cumplieron una pequeña sentencia, de la cual, bueno, no me corresponde hablar a mí.
Al fondo se escuchó que todos comenzaban a enfrascarse en la dichosa discusión de los rojos. Ella sonrió.
-Y, aunque todos digan que peleamos como perros y gatos, nos llevamos bastante bien. De hecho, hemos creado lazos muy fuertes, aunque ninguno lo admita. Después de todo, la enorme batalla con Taiga, si dejo algo bueno. Como pueden imaginarse, sigo estudiando, y ahora todos estamos por cursar nuestro último año escolar antes de ir a la universidad. Ahora soy encargada del departamento de dibujo y diseño, mientras que soy compañera de Brick en el departamento de Música, ya que él es el encargado de dicho departamento. Nos congeniamos bastante bien, de hecho, hay veces que nos quedamos practicando ya que todos se han ido.
La rubia se tornó algo seria.
-Y… Seguramente todos pensaran que el asunto por aquí está muy tranquilo.
Gotokuji se acercó a la cámara aprovechando que todos estaban metidos en un lío causado por Brick y Momoko y bajó la voz como si fuera a contar un secreto.
-Pero la verdad, es que he tenido unos presentimientos muy extraños últimamente.
La chica puso una mano alrededor de su boca como si fuera a contar un secreto.
-Como recordarán, algunos de nosotros desarrollaron algunas habilidades especiales. Las visiones de y Brick y Momoko y los presentimientos de Boomer y míos. Aún no sabemos si esas habilidades se han ido, pero últimamente me he sentido muy extraña, como si encontrara algo en el aire, pero… no quiero preocupar a nadie…
-Hey, rubia, ¿Qué tanto le secreteas a la cámara?
-¿Eh?, ¿Yo?, ¡Nada! ¡Solo la estaba limpiando!-Se excusó. -¡Bueno, ha sido un placer hablar con ustedes, nos estaremos viendo!
Y la chica, salió corriendo, dejando el banquito vacío.
Ahora que todos habían resuelto el problema entre los líderes, Butch se sentó en el banquito, señalándose a sí mismo. Tenía un pequeño corte en la mejilla, producto de su reciente pelea con la pelinegra y el cabello desordenado.
-Bueno, después de la salida tan extraña de esta chica, me toca a mí, ¡El irresistible Butch! ¡El más fuerte de los seis héroes aquí presentes! Porque sí, ahora aunque sea extraño, somos héroes, no villanos. Tengo que soportar todos los días a este chico encerrado en cuerpo de mujer: ¡Kaoru Matsubara!
-¡Una palabra más, y te quedas sin descendencia!
-Y si, como pueden ver esta chica sigue siendo una amargada.
-¡Y tú eres un metro setenta y cinco de idiotez!
-Bueno, también le molesta que sea nueve centímetros más alto que ella. Como se imaginaran, sigo siendo el capitán del equipo de futbol varonil, y las cosas han estado muchísimo más fáciles ahora que el idiota de Ken Kimura no volvió a la escuela jamás. Al parecer nos teme más de lo que aparentaba. Siempre supe que era un cobarde. Y bueno, la nenita ya lo dicho, pero, este año pelearemos por la copa de la C.E.D. el año antepasado fue por Taiga y el año pasado volvimos a fracasar, pero esta vez, ¡la obtendremos!
Los vítores se escucharon detrás de cámaras.
-Y seguramente no lo recordarán, pero ahora vivimos en un lujoso departamento frente a nada más y nada menos que el laboratorio del profesor. Toda nuestra vida es más sencilla. Solo tenemos que cruzar la calle y ese enorme jardín inservible del laboratorio y voilà: Desayuno, comida y cena servidos. Porque, entérense, mis hermanos y yo, no cocinamos absolutamente nada. ¡Y al profesor le gusta alimentarnos, así que todos ganamos!
El profesor Utonium, que dirigía la cámara se lamentó con un suspiro.
-Y solo para aclarar, yo no voy detrás de cada escoba con falda, como dijo Kaoru. ¡Las chicas se me lanzan, que es diferente! –Detrás de cámaras se escucharon algunas risas y uno que otro insulto. –Pero bueno, eso no es el tema. Aunque, deben aceptar, bola de idiotas, ¡Que he reducido mi número de salidas!
Butch los apuntó a todos y cada uno de ellos, acusadoramente. El silencio se hizo un par de segundos, hasta que Boomer habló.
-Bueno, él tiene un punto.
-Cállate, Boomer.
Butch asintió, triunfante.
-Kaoru solo busca difamarme, pero no le hagan caso. Está amargada. Y loca. Como una cabra. Una cabra muy anciana y…
La pelinegra entró fúrica al set, haciendo callar al pelinegro.
-Oye, que solo bromeaba…
-¡A bromear con tu abuela, idiota, a mí me dejas en paz! –El pelinegro se levantó, dispuesto a defenderse de la ojiverde. El profesor comenzó a alterarse ante la posibilidad de una pelea ante las cámaras. Pero no fue necesario alterarse demasiado. Pronto, una enorme burbuja atrapó al moreno y el hilo de un Yo-Yo atrapó a Matsubara, llevándoselos rápidamente entre gritos e insultos.
Utonium se presentó nervioso frente a las cámaras.
-¡Lamentamos realmente esto, es solo una muestra de… eh…
-¡Deja que le ponga las manos encima al idiota y verá quien es Kaoru Matsubara! ¡Suéltenme!
-¡Siguiente!
Después de haber sacado a Butch y a Kaoru del set, entró un jovencito vestido con una bata de laboratorio, ya no tan reducida como solía ser años antes, y con su inseparable mascota-amigo.
-Buenas tardes para todos ustedes. Es un placer estar de nuevo aquí. –El chico sonrió educadamente a la cámara, con tanta formalidad como si tuviera 30 años. –Tal vez algunos no puedan recordarme, pero mi nombre es Ken, hijo del profesor Utonium. Como pueden ver, ahora tengo quince años, y si, aunque debería ir en la escuela secundaria*, trabajo como científico en el laboratorio de papá… eh, es decir, el profesor Utonium.
-¡Y yo soy Peach! ¡La mascota del laboratorio, wan!
-Exacto. Peach es una gran compañía para todos. En realidad, no hay mucho que contar por mi parte, ya que gran parte de mi tiempo lo paso en el laboratorio. El único hecho relevante es que pude conservar una amistad de aquella vez en la que asistí por única vez a la escuela: Kuriko Akatsutsumi…
Las risillas divertidas no se hicieron esperar detrás de cámaras.
Ken temió lo peor.
-¡Son novios, se gustan, se besan, se pasan el chicle…
-¿Qué es besarse, wan?
-¿Qué? ¡Basta! –Bramó, sonrojado hasta por los cabellos por la canción tan comprometedora y ridícula. La verdad era que él seguía siendo muy vergonzoso respecto a esos temas. –Eh, no les hagan caso, chicos, solo bromean. Es solo que Kuriko suele venir a molestar al laborato…
-¡Termina esa oración y te partiré en dos, Ken! ¡Solo yo insulto a mi hermana!
-Va-vale. –El chico pasó saliva. –Decía que, ehm… Kumiko viene seguido de visita y ellos siempre malinterpretan las cosas. Y, por mi parte, son las cosas más relevantes que tengo que decir, así que, m-me retiro.
Cuando el chico caminó hacia ellos se pudieron escuchar claros cantos que comprometían los intereses amorosos del jovencito. Peach seguía preguntando qué significaba besarse.
Ahora, frente a la cámara y sentado en el banquito, aparecía un joven de cabello castaño e imperturbables ojos color miel, sonriente y curioso.
-¡Hola a todo el mundo detrás de la pantalla, espero que puedan recordarme! –El chico amplió su deslumbrante sonrisa. -¡Pero por si no saben quién soy, mi nombre es Misaki Sasaki, el mejor amigo de Hotaru Him, el ahora capitán del equipo de baloncesto! Por alguna razón que desconozco este sexteto de chicos me mantuvo encerrado en un cuarto, ¡Como si no pudiera saber de lo que estaban hablándoles! ¡Bah! ¿Qué secretos podrían tener que su pobre amigo no podría escuchar? ¡Ni que fueran los héroes de la ciudad!
-No seas dramático, Sasaki.
-Lo lamentamos Misaki.
El chico despreocupó a los dos rubios con la mano.
-Solo bromeaba. Excepto por lo del cuarto, de verdad me tenían ahí. –El chico se despeinó con una mano. –Como sea, Crean o no posible, estos seis chicos han podido por fin, llevarse… decentemente. Y, lastimablemente, este ángel que tienen frente a ustedes, es muy comúnmente metido en sus alborotos. Aún sigo sin entender como la escuela no ha explotado, ya que estos chicos comparten clase.
-¡Serás un ángel caído, desgraciado!
Misaki ignoró a Koiji.
-Aún sigo siendo parte del equipo de baloncesto, y si, sigo salvándole el pellejo a Hotaru de sus grandes embarradas en temas amorosos. Ya saben, soy un don Juan y todo eso, el chico me necesita para todo. –Un insulto nada bonito por parte del rubio que parecía bastante abrumado y sonrojado ante las miradas expectantes de todos fue ignorado de nuevo por el chico. –Y, creo que es todo, como verán no hay mucho que decir, han pasado dos largos años, pero estos chicos siguen teniendo el cerebro tan pequeño como un cacahuate.
-¡Sasaki, fuera!
-¡Diablos, solo bromeo!
Ahora que Misaki había sido sacado a rastras de la sala donde estaban compartiendo sus experiencias, y estaba encerrado en el dichoso cuartito para que no escuchara nada que sus oídos de humano normal no debían escuchar, el banco se encontraba completamente solo.
Algunas voces oponiendo resistencia se escuchaban detrás de cámaras.
-¡Ningún hermano mío actúa como una niña, ahora entra al maldito set y pon tu trasero en el estúpido banco!
El rubio se vio empujado por su hermano pelirrojo a escena.
Se asomó apenado a la cámara, sonriendo con nerviosismo, aún seguía un poco nervioso por el error del principio. Lo habían dejado al último como castigo.
-¡Hola!… de nuevo. –Dijo, sentándose en el banquito. –Eh, bueno, ya sabrán quien soy. Mi nombre es Hotaru Him, conocido mejor como Boomer Him, el relámpago azul de Tokio. –El rubio sonrió con orgullo, más confiado. -¡Me llaman así porque soy el más rápido de los seis, y además, soy el más alto!
-¡A nadie le importa oxigenado creído!
-¡Tres centímetros no son nada!
El rubio sonrió condescendiente, sonrisa que al escuchar la voz de Ken, se convirtió en una mueca de angustia.
-Pero oye, Boomer, no te olvides de responder esta: Sí Taiga ya había desaparecido ¿Por qué nunca te declaraste a Miya...
-¡T-Tú, cierra la boca, niño! –Espetó apuntándole con el dedo. Claro que conocía la pregunta, él mismo las había leído, pero no podía permitir que se pregonara a los cuatro vientos. Era muy comprometedora. -¡N-Nadie te preguntó nada! ¡Y además la respuesta es simple! ¡Yo no estoy enamorado de nadie! ¡N-Nadie! Y-Yo… ah.
El rostro del rubio se había tornado completamente rosa, clara evidencia de su vergüenza. ¿Por qué esas locas chicas lo dejaban en evidencia con sus preguntas? ¡Maldición, que Miyako estaba ahí! Ella no podía saber que estaba enamorado de ella.
-¡Vale rubio, cálmate! ¡Nadie te está acosando! ¿Sí?
-V-Vale. –El chico se calmó. –Ya les habrán dicho, pero las PowerPuff Girls Z y los RowdyRuff Boys Z, después de años enteros de peleas literalmente a muerte, se unieron para formar un equipo y sí, lo crean o no: mantener la tranquilidad de la ciudad. Aunque el costo fue limpiar retretes y basura de la ciudad como castigo. Tareas estúpidas para probar que realmente queríamos ayudar. Ahora las cosas están perfectamente bien.
-¡Se veían tan lindos de conserjes!
La voz burlesca y chillona de Momoko supo que sus hermanos le darían una buena paliza tan solo el profesor dijera ¡Corten! Por haber recordado aquello. Se limitó a continuar.
-Bueno, eh, como les decía tenemos una buena amistad ahora. Nos trajo muchas cosas buenas, aunque si, como mi hermano Makoto, o Brick, dijo, tenemos que asistir a la escuela, lo cual es bastante molesto. Pero gracias a eso pude mantener mi amistad con Misaki y de hecho ahora es muy buen amigo del grupo. Además, ahora soy el capitán del equipo de baloncesto. Y debo decir que bueno, pueden estar tranquilos, esta vez el entrenador no es ningún espía de algún enemigo mortal. Pero después de todo lo que ocurrió años atrás, ahora estamos mucho más a la defensiva de lo que sucede a nuestro alrededor.
El chico bajó la voz.
-De hecho, no he dicho nada, pero últimamente he tenido estos presentimientos…
-¡Otro que se secretea con la cámara!
-¿Qué? ¡Solo la estaba limpiando!
-¡Lo siento, yo ya he dicho eso!
-Bien hecho, rubia. –Dijo fastidiado.
-¡Por Dios! ¡Estamos arruinando esto! –Chilló Momoko, entrando a escena, a un lado del rubio, que seguía sentado en el banquito. – ¡Paren de entrometerse cada que alguien abre la boca para decir algo!
-¡Mira quién habla, estas en medio de la toma!
-¡Tú también, Butch!
-¡Les dije, un metro setenta y cinco de idiotez! –Recordó Kaoru.
-Estoy de acuerdo. –Se metió Brick. Boomer levanto la mano.
-Y yo. –La rubia, que aún seguía detrás de cámaras, se acercó a los chicos y soltó un suspiro.
-Acabamos de entrometernos en la escena de Boomer.
-¡Acaban de entrometerse en mi escena!
-Cállate Boomer. –Le espetó Brick. –Solo te sientas para hacer idioteces.
-¡No es verdad!
-Olvidé decir que mi cumpleaños es el 15 de Noviembre. –Señaló el pelinegro. –Por si quieren darme un regalo o algo, ya saben.
-A nadie le importa, Butch.
-¡Claro que importa porque es mi cumpleaños también, cualquier regalo es aceptable! –Dijo el pelirrojo, asintiendo junto a su hermano mediano.
-¡También es el mío!
-Eso sí, a nadie le importa, Boomer. –Dijo Brick, acomodando su gorra. Boomer le respondió una palabra nada bonita.
-¡Pues ya que estamos repartiendo cumpleaños el mío es el 13 de Octubre!
-¡Kaoru!
-¡14 de Abril!
-¡Miyako!
-¡Y el de Momoko es el 10 de Febrero, aunque no lo diga!
-¡Cállense todos!-Chilló la pelirroja.
El profesor Utonium, viendo que las entrevistas había resultado un fiasco, se metió en escena, abarcando toda la cámara.
-¡Eh, bueno, chicos, ha sido un gusto estar aquí con ustedes! ¡Originalmente, yo también iba a contarles un poco de nuestras vidas pero… eh… -Dirigió su mirada atrás, donde la disputa entre los superhéroes estaba en su punto máximo. Difícilmente lograría quitarlos de ahí. –Por el momento esto ha terminado. ¡Cómo ven algunas cosas han cambiado, pero seguimos siendo los mismos e incluso mejorados! ¡Esperen nuevas noticias de nosotros próximamente en: Capítulo 1: ¡Dos años después de la batalla!
-¡Cierra la boca, Brick! ¡Estoy segura que crecí más este año!
El hombre le hizo una señal a su hijo para que apagará la cámara, pero al parecer, Ken no parecía inmutarse.
-¡Vete al infierno, Butch!
-¡Nos veremos allá, preciosa!
-¡Hey ustedes seis! ¿Qué diablos pasa allá afuera? ¡Sáquenme de aquí, secuestradores!
-¡Me debes tres centavos, Boomer!
-¡Prepárate para morir, Brick! ¡Hyper Blossom!
-¡CORTEN!
Laboratorio Utonium, 12:00 A.M.
Un apuesto chico estaba desparramado en el suelo de un cuartito con paredes sumamente blancas, viendo el techo en la negrura de la noche. Aun no paraba de hablar solo con las cuatro paredes.
-Chicos… -Misaki se apegó más a la puerta del cuartito donde estaba encerrado. –Esto ya no es divertido… ¡Quiero salir, mis padres me van a matar! Y…. tengo mucha hambre….Y ganas de ir al baño…
Silencio.
-¡Chicos!
¡Miss Nutella aquí, reportándose después de una larga temporada de desaparecer en alguna galaxia lejana, llena de aventuras con mounstruos y dioses griegos!
¡Que emoción! No puedo creerlo. Hace exactamente un año, un 7 de Agosto terminé Demashitaa: No Hai. Es por eso que escogí esta fecha de publicación. Y diablos, siento que fue hace un mes, no un año xD. ¡Como sea, los he extrañado bastante! ¡Creo que soy la más emocionada de todos de publicar esto! Solo quiero decirles algo que considero importante. Ya entré a la universidad, lo cual, me temo, al igual que muchos autores de aquí, eso absorberá demasiado mi tiempo. Es por eso que no quería publicar a menos que tuviera 10 capítulos completos y escritos, lo cual les garantiza bastantes meses de publicaciones en tiempo jaja. Espero que eso me de tiempo a mi también para escribir unos pocos capítulos más. Como sea, solo espero que puedan ser pacientes si me llego a atrasar en alguna publicación.
Como sea, han pasado dos años en la vida de nuestros chicos. ¡Los amo! ¡Ya extrañaba publicar de ellos y sus vidas! Como veran hay algunas cosas que siguen iguales, y tal vez aun no es claro, pero hay cosas que sucedieron durante estos dos años que ya se irán enterando. Espero haber respndido a todas las preguntas que hicieron, creo que así lo hice... es decir, hicieron xD.
En fin, creo que solo queda decir que las publicaciones serán cada dos semanas. Así que nos vemos en dos semanas, con nuevas aventuras. Debo admitir algo: Sin darme cuenta, me he enfocado bastante en los verdes, esta vez. Tal vez por que en el fic pasado los tenía un poco abandonados. Es decir, habrá de las tres parejas -y algunas sorpresas xD -pero los verdes serán más participativos que la ultima vez.
Como sea, espero poder llenar sus expectativas con este fic, me esforzaré por darles lo mejor de mi con mis escritos. Y muchas gracias por ser pacientes y esperar por mi.
En fin, ya no los molesto más xD Deben tener cosas que hacer.
Por fin, después de algún tiempo, vuelvo a recitar esta línea:
¡Nos leemos, besos embarrados de Nutella para todos!
Miss Nutella.
P.D. Se aceptan sugerencias y comentarios.
