¤ Prompt: Buenos tiempos.
¤ Extensión: 445.
¤ Advertencia: Ligero shonen ai, spoiler de los últimos caps del manga. Final raro.
¤ Notas: Describo a Marco como yo lo veo, así que disculpen el OoC. Y no, no son imaginaciones suyas, mis títulos no parecen tener nada que ver con los fics LOL. Hecho para el DTM de Crack&Roll.
Marco no se altera, no deja que la situación lo supere. Él es una persona calmada y muy segura de si mismo, sin llegar a ser pretencioso. Es el comandante de la primera división de Shirohige y siempre está conciente de ello, por lo que se comporta a la altura, queriendo demostrar que es digno de tal título.
Por eso esta ahí, en esa guerra cruel, como si no pasara nada grave en realidad. Él sonríe, dice una que otra frase, hace uso de su poder con maestría, todo sin una pizca de nerviosismo. Y sabe que no es el único, su padre es el ejemplo, Jozu el que los secunda. Pero él también sabe que toman aquello demasiado serio, que ninguno está completamente tranquilo, no cuando está en juego la vida de un hijo, de un hermano. Porque a ellos no les importa lo que significa aquella guerra. Ellos solamente quieren rescatar a Ace, traerlo de nuevo a su lado, como antes (como siempre).
Pero hay algo que logra alterar a Marco, que le hace perder por unos instantes esa sonrisa tranquila y le obliga a demostrar un poco de la angustia que le carcome. Y eso es cuando Ace se quiebra, sólo un poco, cuando le grita desesperado a su hermano que se marche, que no se quede en aquella batalla que no le corresponde, que no arriesgue la vida por su culpa.
Pero es también cuando siente respeto por ese chico, porque manda a callar a Ace, que le dice que no le importa la situación, él lo salvará porque son hermanos. Y Marco los compara, sin poder evitarlo, y se pregunta a dónde se fue toda la vitalidad, la confianza y la alegría que tanto caracterizan a Ace.
Los buenos tiempos le parecen tan lejanos, y la duda de si volverán a vivirlos se instala en su mente. No porque dude sobre si rescatarán a Ace o no, sino porque sabe que esa guerra traerá consecuencias, y Ace llevará una carga sobre sus hombros que no merece.
Pero ahora eso no importa. En esos momentos sus sentimientos y pensamientos deben estar en segundo lugar y sólo tiene que concentrarse en pelear, en cuidar a ese novato y ayudarle a su padre y aliados a abrir camino para acercarse a Ace.
Los buenos tiempos van y vienen, dejando recuerdos cálidos y agradables. Marco se asegurará que Ace vuelva a tenerlos, olvidando así todo el sufrimiento que esa batalla le está provocando. Porque está decidido a que nada vuelva a opacar el brillo que ese chico siempre ha poseído de forma natural. Al fin y al cabo Marco es la calma en persona.
¿Review? :3