¡Hola! Aquí estoy con una nueva historia, pero esta más corta. Se trata de una loca idea que me surgió de repente mientras leía un libro policial, bastante aburrido, así que no se los recomiendo, sin embargo me sirvió para que me inspire en esta idea. Será una historia corta, dura solo cinco capítulos, pero es bastante buena, espero su opinión y muchas gracias por leer.
CONTIENE SPOLILERS
Atención: la historia transcurre en el periodo entre el rompimiento de Lavander y Ron, y el momento entre que Ginny y Harry comienzan a salir. Por lo tanto: ¡Dumbledore esta vivo!
Espero sus reviews
YOGINNY
¿QUIEN MATO AL HELECHO?
CAPITULO 1: EN HONOR A DOROTHY PREST-JEPPERDY
Ginny miro ofendida hacia todos lados de la pequeña habitación. El lugar era horroroso. Pequeño, maloliente, húmedo y por sobre todo poco iluminado. La escasa luz que entraba por sobre una rendija solo lograba iluminar los rostros de los ocupantes de la habitación.
Sentados en un círculo, se encontraban nueve Gryffindor, con los rostros cansinos y visiblemente irritados. La tensión que rondaba la sala, se podía cortar con un cuchillo
-Lo siento-dijo Neville cerca suyo. Era la segunda vez en menos de diez minutos que la mano izquierda de Neville se deslizaba demasiado cerca de Ginny. O más bien, de ciertas partes de Ginny.
-¡Quita tu mano de ahí, Neville!-le advirtió Dean enojado. Ginny escucho a Harry carraspear del otro la habitación. Ron a su lado ronco aun más fuerte.
-¡Que alguien lo despierte!-exigió Seamus molesto.
-¡Déjalo tranquilo!-intervino Lavander, apoyando una mano sobre el hombro de Ron.
-¡Sacale tus manos de encima!-grito Ginny completamente furiosa.
-¿Y si no quiero?
-Te la sacare yo-dijo otra voz, desde el otro lado del pelirrojo. Lavander gruño algo incomprensible por lo bajo, mientras Hermione sonreía.
-Esto es una idiotez-dijo Parvati parándose de su lugar-¡yo no hice nada!
-Cualquiera lo puede haber hecho-sentencio Dean parándose también-¡Vamonos Ginny!
-¡No me digas que hacer!-grito la pelirroja al tiempo que la puerta se volvía a abrir. Todos se quedaron en silencio mirando a la persona que acababa de entrar.
-Buenas noches-dijo el celador del colegio, Argus Filch, sosteniendo un farol en su mano izquierda y sonriendo ampliamente-¡Weasley!-grito, y Ron se movió rápidamente en su lugar.
-¿Que nos van a castigar?-pregunto Neville asustado.-Creía que hablaríamos con alguien que intentaría encontrar al culpable.
-Por eso mismo estoy aquí…-dijo Filch al tiempo que caminaba hacia la única silla que quedaba desocupada.
-¿Usted hablara con nosotros?-pregunto Seamus.
-Lo que me faltaba-dijo Ginny cruzándose de brazos. Era sabida su mala relación con el celador, todo desde su primer castigo, el segundo día de clases en su segundo año.
-Claro que si-dijo el hombre con orgullo, mientras acariciaba a su horrible gata entre sus manos-fue idea del profesor Dumbledore…finalmente parece estar recapacitando.
-¿Dumbledore se volvió loco?-pregunto Ron moviéndose en su lugar.- ¡Seguro que querrá colgarnos de los dedos, o golpearnos con algunas cosas cortantes y dolorosas!
-¡Por supuesto que no!-dijo Filch enojado mirando al pelirrojo con furia.-Soy un psicólogo certificado…-pero fue interrumpido.
-¿Psico-que?-pregunto Ginny riéndose.
-Psicólogo-dijo Hermione mirando al hombre sorprendida.-Pero…pero, ¿Cómo?
-Filch es un squib-sentencio Harry cruzado de brazos. El celador se paro de su lugar furioso y miro al chico de la cicatriz con los ojos rojos.
-Eso no explica lo de ser psicotico-dijo Ron.
-Psicólogo-lo corrigió Dean.
-Por eso…-asintió Ron.
-Estudie en un colegio muggle-informo el hombre volviendo a su lugar- y Dumbledore considero que yo soy el más capacitado para descubrir quien fue el culpable…
-¡Nosotros no fuimos!-grito Parvati.
-¡Silencio Patil!-dijo Filch con arrogancia-lo único que tenemos claro es que el culpable esta en esta habitación.
-¿Porque no contrataron un detective, entonces?-pregunto Harry que sonrió al ver a Ginny reír por lo bajo-¿Que nos va a hipnotizas para sacarnos la respuesta?
-No seria mala idea-dijo el hombre. Claramente tenía a Harry entre sus alumnos menos queridos.-Pero vamos a hacerlo a mi manera…
-Dudo que sea una buena manera-sugirió nuevamente el pelinegro. Filch solo lleno sus pulmones de aire y miro a sus acompañantes.
-¿Porque no empezamos en presentarnos?-le dijo mirando visiblemente a Ron, que bostezaba descaradamente, y que puso cara de no escuchar bien.
-¡Si ya nos conocemos!-dijo Seamus irritado.
-¿Que quiere que diga?-pregunto Neville que era el primero sentado a su lado.
-Su nombre completo y el porque esta aquí-dijo Filch seriamente. El resto de los chicos habían comenzado a hacer comentarios sobre la locura del celador.
-Bueno-empezó el Gryffindor-mi nombre es Neville…
Filch hizo unos movimientos circulares con los brazos y guió al resto de los presentes en su respuesta.
-¡Ho-hola Neville!-dijeron todos, extrañados.
-Y estoy aquí…porque ¿me obligaron?
Filch resoplo indignado. Ginny que estaba del otro lado se enojo, sabiendo que era su turno.
-Hola, soy Ginny Weasley-dijo en un tono bastante irritado-y estoy acá porque me parece mucho más divertido que estar sentada en la sala común leyendo una revista.
Todos rieron. Salvo Filch.
-Hola soy Dean-dijo el chico sentado junto a Ginny-y estoy acá porque Ginny vino…sino ni me aparecía.
Harry bufo algo por lo bajo. Hermione lo miro inquisidoramente, arrugando el entrecejo. Segundos después, sonreía triunfante.
-Hola soy Finnigan, Seamus Finnigan-dijo el chico desarreglándose el pelo-y estoy aquí porque Snape me agarro justo cuando estaba intentando escaparme.
-Gracias por la sinceridad-dijo Filch.
-De nada.
-Hola, soy Parvati Patil-dijo la chica junto Seamus cruzando las piernas seductoramente-y estoy aquí porque me culpan de algo que yo no hice, y como no quiero que me castiguen por algo que yo no hice, vine.
-Hola soy Lavander Brown-dijo la morena junto a esta, apenas termino de hablar Parvati-y estoy acá culpa de…de alguien…
Todos la miraron sorprendidos. Al parecer Lavander conocía al culpable, pero no parecía dispuesta a decir el nombre.
-Weasley-dijo Filch incitando al pelirrojo a hablar.
-¿Si?-pregunto Ron haciéndose el desentendido. Hermione le lanzo una mirada de reproche y Ron, resignado, se presento-Soy Ronald Weasley y estoy aquí porque…en realidad nose.
-Porque cometió un crimen…-dijo Filch levantando las cejas acusadoramente. Ron negó con la cabeza y se cruzo de brazos.
-Yo soy Hermione Granger-se apresuro a decir la castaña junto a Ron- y estoy aquí porque tanto el director Dumbledore, como la profesora McGonagall lo consideran oportuno.
-Y por ultimo…-dijo el celador mirando a Harry de soslayo.
-Yo soy Harry Potter y estoy aquí porque tengo un problema con el alcohol.
-¡Hola Harry!-dijeron Ron, Ginny, Dean, Seamus, Lavander y Parvati a coro. Hermione se enojo con la respuesta. Neville pareció no comprender, y Filch gruño una maldición por lo bajo.
-¿Y ahora?-pregunto Ron mirando a todos lados.
-Ahora-dijo Filch-voy a descubrir al culpable.
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Punto de vista de Filch.
La pequeña reunión que había establecido el director Dumbledore era, en su opinión, una tortura. Si algo odiaba Argus Filch era las reuniones masivas de alumnos, sonriendo, a lo mejor planeando una u otra forma de quebrantar las leyes, o quizás, haciéndolo en ese preciso momento.
Filch tomo a la señora Norris de la pequeña mesa sobre su escritorio, donde la gata reposaba, y abrazándola a su cuerpo, salio de su despacho.
Los pasillos estaban abarrotados de alumnos, que habían salido de sus clases antes del horario normal, para presenciar el acto. Camino por unos pasillos, llamándoles la atención a varios alumnos, secuestrando dos pergaminos sospechosos, dos varitas truchas y cinco anteojos loco-ojos de la tienda Weasley.
No extrañaba a esos gemelos, ni siquiera un poquito.
Cuando llego al patio interno, una brisa fresca le golpeo el rostro, obligándolo a cubrirse el cuello con su capa, y a sujetar con más fuerza a la gata entre sus brazos.
En el centro del patio, se ubicaba una pequeña tarima. Albus Dumbledore, Minerva McGonagall y Severus Snape se encontraban en el centro, hablando por lo bajo. Algunas sillas se encontraban al frente del escenario, seguramente para ser ocupadas por los profesores. Y al costado se encontraba el objeto en cuestión.
Un helecho. Era todavía medio pequeño, con las hojas verdes oscuras, los tallos algo cortos, pero bastante frondoso. A su costado un cartel levitando anunciaba "En memoria de Dorothy Prest-Jepperdy". Un primitivo vallado se desplegaba a su alrededor, como indicándole a los alumnos que no se debían de acercar.
Filch sabia que si se lo proponían, saltarían el vallado y destruirían el helecho, de cualquier forma.
Camino pesadamente hasta quedar a un costado del escenario, mientras poco a poco el patio se iba colmando de alumnos bulliciosos. Filch los miro con expresión severa mientras comenzaban a agolparse cerca de él. De lejos distinguió al grupo de profesores que se ubico en las sillas, mientras Dumbledore, sonriéndoles alegremente, daba por iniciado el acto.
-Amigos míos-dijo el anciano hombre-nos encontramos hoy aquí para honrar a una vieja amiga y compañera.
Dumbledore señalo el helecho con su mano izquierda, mientras McGonagall se limpiaba una pequeña lágrima. Filch cayó entonces en la presencia de la que era su mayor enemiga en ese momento: Ginny Weasley.
-¡Malditos Weasley!-murmuro por lo bajo.
-Dorothy fue profesora de Hogwarts hace muchos años-explico Dumbledore cuando el aplauso seso-Enseñaba Herbologia, y era una excelente bailarina, como la profesor McGonagall podrá corroborar…
El murmullo se hizo presente. Algunos rieron, otros aplaudieron, incluso Filch llego a escuchar un ¡Que muestre lo que aprendió! Y un coro que sonó a ¡Que baile, ¡Que baile! Y Filch identifico a la pequeña malicia colorada gritando junto a otro grupo de Gryffindor de su año.
-Estoy seguro que en otro momento a la profesora le encantara bailar para nosotros-más gritos y silbidos-pero hoy nos encontramos aquí por otra ocasión.
Filch vio recién entonces a Harry Potter y sus dos amigos, el pelirrojo Weasley y la chica de los dientes grandes, unirse al acto hablando algo por lo bajo. No le gustaba nada como se miraban.
-Huelo conspiración…
-Dorothy era una excelente mujer, profesora y ecologista-continuo Dumbledore-por eso es un honor para nosotros proclamar a este pequeño ejemplar de Helectus en honor a nuestra querida amiga…un aplauso para la profesora Dorothy Prest-Jepperdy en su cien aniversario…
Todos aplaudieron. Filch solo aplaudió interiormente, ese era el preciso momento en que las masas comenzaban a dispersarse y a hacer aquello que habrían planeado. Y todo lo que el sospechaba paso.
Unos cuarto de Ravenclaw comenzaron a empujarse tirando unas sillas. Potter salio corriendo detrás de Malfoy, mientras sus otros dos amigos se reunían con Longbotton, Finnigan y una chica rubia que según recordaba tenia por apellido Lovegood. La menor de los Weasley salio del patio interno, sin antes tirarle una mirada de odio, de la mano con Thomas.
Poco a poco los alumnos fueron dejando el patio. Cuando termino de despachar al último, sin antes dejar de confiscarle un turrón sangra narices, nuevamente cortesía de los gemelos Weasley, se acerco al helecho.
La plantita se movía con el viento, bailando de forma algo violenta, corriendo el riesgo de que sus raíces se desprendan y desaparecer del sitio que le fue designado. La verdad que era una planta común, mucho no le llamaba la atención, pero como a otras tantas cosas del colegio, era a el a quien le correspondería cuidarla.
Aunque tampoco le molestaría no tener que hacerlo.
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-¿Que tal si empezamos con usted Weasley?-pregunto con malicia el celador.
-¡Yo no fui!-grito Ron indignado.-Ni me importaba el helechuso ese, ¿porque lo haría?
-No le preguntaba a usted-dijo tranquilamente el hombre acariciando a su mascota-pero gracias por la información.
-Estoy segura que Ronnie no fue-dijo Lavander pasando un brazo detrás de Ron, mientras le lanzaba a Hermione una mirada de suficiencia que se noto hasta Londres.
-¡Nadie pidió tu opinión!-largo Ginny cruzándose de brazos.
-No deberías tratar así a Lav-Lav-dijo Hermione sonriéndole a Ginny e imitando su postura.
-¡Ron!-largo Lavander-¡Mírala como me insulta!
-¡Pobrecita!-dijo con malicia la pelirroja-No se sabe defender ella sola… ¡tengo tanto miedo! Ron me podría pegar…-dio llorando falsamente. Harry rió por lo bajo.
-¡Bueno basta!-grito Filch-¡No me interesan sus problemas adolescentes!
-Que noticia-largo Dean entre dientes.
-¡Weasley!-grito el hombre nuevamente.
-¡¿Que!-gritaron los hermanos al mismo tiempo. Filch solo miro a Ginny.
-Cuéntenos como hizo para incendiar el helecho…
-Yo no fui-dijo tranquilamente la pelirroja.
-Eso es verdad-dijo Dean-yo estuve con ella todo el tiempo la noche del incendio.
-Eso no es verdad-sentencio Parvati y esquivo la mirada de todos.
-Podría explicarnos como fue eso-dijo Filch sonriendo victoriosamente.
-Ginny también estuvo conmigo-dijo Parvati mirando a la pelirroja que parecía estar apretando los labios con extrema fuerza.-Y según recuerdo, también la vi con Harry.
-¿Y que hacia con Harry?-preguntaron Ron y Dean al mismo tiempo.
-Besarnos desenfrenadamente-dijo la pelirroja irritada, mientras Harry se volvía rojo fuego-¡¿Que íbamos a estar haciendo! ¡Estábamos hablando, nada más!
-Si, seguro-dijo Lavander.
-No te metas-le aconsejo Hermione, mirándola por sobre el hombro de Ron que se volvió a verla sorprendido. Hermione le sonrió de costado y se volvió al resto de la clase. Sin embargo, Lavander no dejo de mirarla.
-Que conveniente-dijo Filch con una semisonrisa que lo hacia ver como una calavera-Potter y Weasley… ¿Cómo hicieron para prender fuego al helecho?
Harry y Ginny comenzaron a hablar al mismo tiempo, lo que llevo a que nada se entienda. Harry pareció decir algo que hizo a Dean comenzar a hablar también moviendo los brazos, luego le siguió Ron, visiblemente rojo, Hermione, Lavander, Parvati…y Filch solo llego a escuchar un poco de lo que cada uno decía.
-…un mechón de pelo…
-…yo no fui…
-…porque ella es mi novia…
-…a insultar a mi hermanita…
-…prefecta de Gryffindor…
-…el cabello más bonito…
-¡Silencio!
-…los dientes amarillos…
-…llevándola a los matorrales…
-…la quaffle en la cabeza…
-¡Silencio!
-…un collar horrible…
-…un montón de pájaros…
-¡SILENCIO!
-…y me tiene cansado con su voz de canario afónico-termino Ron, haciendo que todos se vuelvan a mirarlo. Ginny soltó una risita.
-¡No puede ser que nadie me respete!-dijo el celador con la cara contorsionada de la furia-¡Yo soy la autoridad aquí! ¡Cuando yo digo silencio, todo el mundo se calla! ¿Entendido?
-Si…-se escucho decir a algunos. Filch se sentó, intentando acomodarse el cabello que se le había desparramado escandalosamente.
-Ahora…como parece que no llegamos a ningún lado con este método-dijo mirándolos inquisidoramente-voy a esperar, tranquilamente y en silencio a que el culpable se confiese.
Filch se sentó tranquilamente en su lugar, llevando las manos a su regazo y miro a los nueve Gryffindor. Neville estaba hecho un rollo en su lugar, Ginny estaba cruzada de brazos enojada, Dean parecía ofendido, Seamus jugaba con sus dedos, Parvati se miraba las uñas interesada, Lavander miraba a todos lados sospechosamente, Ron jugaba con el pie, Hermione parecía bastante nerviosa por el silencio y Harry cabeceaba casi dormido.
-¡Bueno!-dijo Lavander provocando que todos la mirasen.- ¡No soporto más esta situación!
-¿Fuiste tu?-pregunto Parvati.
-Por supuesto que no-dijo Lavander acomodándose el cabello seductoramente-pero se quien fue.
-¿Quién fue, entonces?-pregunto Filch.
-Que entregadora…-murmuro Ginny por lo bajo, pero Lavander hizo de cuenta que no la escucho y comenzó a relatar su historia.
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Punto de vista Lavander
El cabello estaba exageradamente molesto esa mañana. Había probado todo para alisárselo, pero no lo había logrado. Cambio de peinado por quinta vez en el día, sujetándoselo en una alta cola, al mismo tiempo que pasaba junto al patio interno del colegio, rumbo al Gran Comedor.
Miro por los grandes ventanales, esperando ver el helecho que Dumbledore había colocado hacia dos días, cuando otra imagen llamo su atención.
Harry se encontraba junto al helecho bailando lo que parecía una rara música muggle, moviendo los pies de forma rara y agitando los brazos sobre su cabeza. Pero entonces una ráfaga de rojo la hizo mirar un poco más allá, y esa imagen la dejo menos conforme.
En el banco, junto al árbol próximo al helecho, se encontraban Ron y Hermione hablando muy cerca uno del otro. Lavander se horrorizo, eso no le gustaba nada. La escenita se venia repitiendo muchas veces esa semana desde que Ron había salido de enfermería.
Salio al patio, hecha una furia, mientras veía como Hermione ponía una mano sobre la pierna de Ron y lo miraba seductoramente. Cruzo a grandes zancadas la distancia que los separaba y tiro a Hermione de la mano que tenía en la pierna de su novio, hasta que la tuvo frente a ella.
-¡¿Que crees que estas haciendo!-preguntó con una voz demasiado dulce para pertenecerle. Recién ahí, noto como los ojos de Hermione estaban pintados de un negro oscuro, la boca en un rojo furioso y el pelo todo desarreglado.
-Intentado seducir a Ron-dijo Hermione en una voz de feme fatal digna de una película muggle que claramente no era la suya.
-Pero yo le decía que no-dijo Ron-le decía que estoy enamorado de ti, Lav mi vida.
-Oh, Ron-dijo Lavander-yo ya sabia que me amabas.
-Pero yo haré todo lo que haga falta para separarlos-dijo Hermione mientras comenzaba a reír como histérica, meneando la cabeza hacia atrás, y abriendo los brazos a sus costados.
-Nunca lo lograras-le dijo Ron en un tono de caballero medieval-Lucharemos por nuestro amor.
-Eso es-dijo Lavander abrazándose a Ron y mirando ambos hacia el infinito con los ojos brillosos.
-¡Saca tu varita, entonces!-dijo Hermione a la chica-¡Y veremos quien gana el amor de Ron!
-No Hermione-dijo la desafiada-no quiero lastimarte, no quiero romper las reglas del colegio.
-¡¿A quien le importan las reglas!-grito la castaña meneando su varita.
Hermione apunto con su varita a Lavander y tiro varios hechizos que Lavander esquivo hábilmente, saltando por los aires, y con demasiados reflejos para ser real. Ron mientras tanto, no dejaba de alentar a Lavander gritándole cosas como te amo y quiero ser el padre de tus hijos.
-Protego-dijo Lavander ante el último hechizo de Hermione que estaba mucho más despeinada que antes y que tenia los ojos rojos.
-Incendio-dijo Hermione tirandole a Lavander el hechizo. La chica lo esquivo, pero el helecho, que se encontraba justo detrás suyo, se prendió fuego lentamente.
-Lavander, ¿te encuentras bien?-preguntó Ron preocupado y corriendo hacia ella.
-Estoy bien, mi amor, nuestro amor es victorioso-dijo Lavander. Hermione miro el helecho y empezó a reír como loca.-Hay que apagarlo.
-¡Nadie lo apagara!-dijo mirándolos a los dos chicos-¡Esto no termina aquí! ¡Volveremos a vernos, Lavander Brown!
-Cuando quieras, Hermione Granger-contesto Lavander, al tiempo que la castaña salía corriendo en dirección al castillo, con movimientos bastante desarticulados.
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-¿Hermione?-pregunto Neville asustado.
-¡Yo no fui!-dijo la chica mirando a Lavander furiosa.
-¿Que hacías bailando junto al helecho?-preguntó Ginny mirando a Harry con las cejas levantadas.
-Yo…yo no estaba bailando-dijo tornándose carmesí. Todos lo miraron sin comprender.
-Pero la señorita Brown, aquí presente-intervino Filch- dijo ver, claramente, a la señorita Granger quemar el helecho…
-Pero…pero…-dijo Hermione.
-Hermione no fue-sentencio Ron mirando a Lavander recriminatoriamente.- ¿Realmente creen que es capaz de hacer eso? ¡Es imposible!
-Yo tampoco creo que haya sido ella-dijo Harry, mientras Ginny y Neville, asentían con la cabeza-ella no diría ¡Que importan las reglas!-dijo Harry tratando de imitar la voz que Lavander le había puesto a Hermione.
-¿Y que me dicen entonces del Lucharemos por nuestro amor, de Ron?-pregunto Ginny-nadie es tan cursi.
-Ron no tiene sentimientos como para decir algo así-dijo Harry.
-¿Es todo una mentira, entonces?-preguntó Seamus, mirando a Lavander con una ceja levantada.
-¡Claro que no!-dijo la chica-puede…puede ser que haya exagerado un poquito las cosas…pero fue ella quien lo incendio…
-Es una grave acusación contra la señorita Granger-dijo Filch sonriendo-ella es prefecta, podría llegar a perder el cargo.
Hermione comenzó a llorar. Ron le paso un brazo por sobre los hombros, pero inmediatamente se lo saco, al notar lo que había hecho.
-¡Yo la vi!-siguió Lavander-¡La vi junto al helecho segundos antes de que se prenda fuego! ¡Tuvo que ser ella!
-¡Yo…no…fui!-dijo Hermione entre hipidos.
-Lo siento señorita Granger-dijo el celador-pero parece que no tiene como defenderse…
-¡Claro que tiene!-dijo Ginny-Ella no fue…porque yo se exactamente quien prendió fuego al helecho…y esta sentado en esta habitación.
Espero que les haya gustado, es una historia bastante loca, no tiene mucho romance, pero si detalles pequeños. Espero sus reviews!