Bleach no me pertenece es propiedad de Tite Kubo y yo solo tomo a los personajes para fines de la historia.
Advertencias: este fic es un semi universo alterno ubicado después de la batalla final contra Yhwach, estoy haciendo caso omiso al "canon" por lo que este fic es totalmente Ichiruki.
.
Capítulo 1. Rutina.
.
.
El sonido de la puerta de papel al correrse llamó la atención de Rukia, casi por inercia se volvió para ver al intruso que osaba pisar su cocina. Una vista poco convencional de Ichigo fue lo que obtuvo, el pelinaranja emitiendo un largo y tedioso bostezo, por no decir algo ruidoso ¿si aun tenía demasiado sueño entonces por qué se había levantado tan temprano y más aun siendo un domingo por la mañana cuando no tenían que ir al cuartel hasta medio día?
Sí, incluso los shinigamis tenían permitido un pequeño lapsus de descanso de sus obligaciones, al menos Kyoraku había sido muy -por no decir bastante- indulgente en ese aspecto, aunque personalmente para Nanao esa no era más que una excusa de holgazanería del comandante.
—Son las seis de la mañana Ichigo, regresa tu trasero a la habitación—le reprendió Rukia tratando de ocultar el tono de diversión que amenazaba con salir, ciertamente Ichigo tenía un aspecto deplorable.
No importaba lo mucho que Ichigo tratara de guardar las apariencias, las bolsas que comenzaban a formarse debajo de sus ojos eran una prueba irrefutable de su cansancio. Los entrenamientos, el papeleo y las misiones eran el devenir del ahora Shinigami y teniente de la división trece. En repetidas ocasiones Rukia lo había encontrado en algún lugar desierto del cuartel, al principio la Shinigami creyó que Ichigo era un holgazán, sin embargo poco después entendió el verdadero motivo detrás de sus acciones, ella como capitana debería ser muy perspicaz en ese aspecto.
Otro bostezo se abrió paso sin que Ichigo pudiese evitarlo—No estabas—profirió con el seño fruncido evitándose dar más explicaciones suponiendo que con esas simples palabras daría a entender su punto a Rukia.
Los ojos de Rukia rodaron ante la afirmación, Ichigo en ocasiones era demasiado infantil -como ahora- conocía de antemano esa manía suya, una vieja costumbre que adquirieron en el tiempo que llevaban de casados. Tantear el futón y buscar la calidez del otro.
—Ó—la menuda Shinigami entrecerró los ojos en dirección al pelinaranja—el hambre te despertó.
—Claro que no enana—los brazos de Ichigo volaron hasta su pecho, adquiriendo así un aire ofendido ante las palabras de la chica, el hambre no era un motivo poderoso para despertarlo tan temprano aquel día, es decir, ni siquiera cuando era un adolescente sus instintos primitivos lograban removerlo de su cama un sábado o domingo por la mañana, no, todo era culpa de esa enana y su ausencia.
No obstante la negación de Ichigo se vio opacada por el sonido de su estómago al demandar alimento, atrayendo así la mirada de Rukia y la del propio Ichigo al causante directo de su ahora vergüenza. El muy traidor había osado dejarlo en evidencia, su pequeño orgullo se tambaleó por unos breves segundos al ver la sonrisa triunfal en el rostro de la morena.
—Entonces el sonido de hace un momento fue obra de un Hollow ¿no es cierto?
—Olvídalo enana, iré a darme una ducha—Ichigo se volvió en dirección a la puerta, dándole la espalda a Rukia, esa enana osaba burlarse de las reacciones de su cuerpo ¿qué si el hambre le hubiese despertado aquella mañana? Era totalmente justificado al no haber probado bocado alguno la noche anterior.
Rukia se encogió de hombros, conociendo a Ichigo, ésta solo era una pobre excusa para salir de ahí y evitar alguna otra burla por parte de ella, sanando así la punzada a su pobre ego herido. Idiota.
—Por cierto Ichigo ¿podrías verificar su Kenji aun duerme? Todas las mañanas he escuchado unos sonidos extraños salir de su habitación—y por decir "todas" se refería a cada día sin falta, Rukia trataba de identificar los sonidos que se escuchaban en la habitación de su hijo sin ningún resultado. Inclusive podía sentir un leve incremento de su energía espiritual.
En repetidas ocasiones le había comentado aquello a Ichigo, no obstante el pelinaranja le aseguraba que dadas las circunstancias, la opción más razonable era que el pequeño fuese bastante inquieto al dormir o hablara en sueños. Pero ciertamente el pelinaranja conocía las verdaderas razones del barullo matutino en la habitación contigua.
—Ya te lo he explicado muchas veces enana—insistió él tratando de apaciguar el desconcierto en el semblante de Rukia.
—Pero la energía…
— ¿Recuerdas lo que nos dijo Urahara?
¿Recordar algo de lo que el tendedero había dicho? ¿Cómo olvidar cualquier cosa que él dijera?
— ¿Hablas del poder espiritual de Kenji?—oh por supuesto, eso debía ser. Según el "sexi tendedero" -como el mismo solía nombrarse- su pequeño desarrollaría en algún momento sus poderes espirituales siendo hijo de Ichigo era de esperarse que esa incontenible energía espiritual desbordante del Shinigami fuese transmitida a su hijo—pero aun tiene cinco años Ichigo, es demasiado pronto para que él…
¿Demasiado pronto? Se preguntó Ichigo, ¿la enana de verdad había dicho eso? De antemano el pelinaranja se había dado cuenta de algo; Rukia resultaba demasiado sobreprotectora con Kenji en ciertos aspectos, el asunto de los poderes era uno de ellos. Tal vez ya era tiempo de plantearle el punto a Rukia.
—He estado pensando en un par de cosas Rukia—comenzó, tanteando el terreno. "Vamos Ichigo solo es Rukia" se dio ánimos ciertamente la mirada de fastidio que ella le daba no lo alentaba a continuar pero sabía que debía hacerlo en algún momento y tal vez este lo fuese—tal vez va siendo tiempo de que Kenji comience con los entrenamientos.
Silencio. Nada. Esa era una mala señal viniendo de Rukia ¿verdad?
—Debes estar bromeando Ichigo, Kenji aun es un niño y no creo que…
—Incluso Byakuya está de acuerdo en ello—inquirió Ichigo con mayor certeza.
Esperen un momento. ¿Byakuya e Ichigo estando de acuerdo? ¿En qué clase de mundo paralelo vivía? ¿De qué se había perdido? Si algo era certero era que su hermano e Ichigo eran totalmente incompatibles.
— ¿Nii-sama te ha comentado algo al respecto?—cuestionó Rukia volcando todo su interés en la respuesta de Ichigo.
Éste se limitó únicamente a rascar la parte trasera de su nuca en un gesto de nerviosismo tan típico en él—no exactamente—vio a Rukia voltear los ojos de nuevo—pero dijo algo sobre Kenji siendo un digno Kuchiki y excelente Shinigami en un futuro así que creo que eso es un sí—tal vez su cuñado no había sido tan explicito en ese aspecto pero conociendo al noble, Ichigo supuso que el Kuchiki sería el primero en aprobar dicha decisión al ver el potencial del niño.
Rukia se dijo entonces que tendría que hablar con su hermano al respecto, sí, eso haría.
—No lo sé—estaba un tanto dubitativa al respecto ¿sería una buena idea iniciar a su hijo como Shinigami? ¿Era eso lo que el pequeño quería también o era solo decisión de Ichigo?—ya veremos—su voz adquirió un tono inflexible que Ichigo descifró con facilidad.
Él ni siquiera se molestó en decir nada más, dando zanjado el tema con Rukia. Sabía cuando Rukia levantaba ese pequeño muro entre ambos y era en esas ocasiones en las que no se molestaba en insistir, ya abordaría el tema en otro momento cuando ella estuviera más receptiva. Mascullando un par de palabras abandonó la cocina para ir directamente al baño, en verdad necesitaba esa ducha.
…
— ¿Hueco mundo?—preguntó Ichigo con un pequeño sobresalto. Ir a hueco mundo esa tarde solo significaba una sola cosa. Encontrarse con el idiota de Grimmjow y el acoso de Nell. Honestamente prefería permanecer en el cuartel haciendo el papeleo de las misiones de la semana que ser hostigado por Grimmjow la mayor parte del tiempo incitándolo a batallas sin sentido tal como lo hacía Kempachi constantemente.
—Sentaro te acompañara—Rukia se acomodó el Haori, a pesar de los años aun le quedaba algo grande y no es que hubiese crecido un par de centímetros en ese tiempo, si al caso solo su cabellera se había alargado dándole una apariencia más madura y discordante a la de su difunta hermana.
Sentaro, por supuesto. Ichigo supuso entonces que no solo sería fastidiado por el molesto espada sino que también lo haría Sentaro durante el trayecto. Algo peculiar en el Shinigami adjudicando su actuar al parecido que Ichigo representaba para él con su antiguo teniente Kaien Shiba, quien por cierto el pelinaranja solo conocía por relatos y anécdotas que Rukia le había contado en varias ocasiones cuando algunos rumores sobre ellos habían surgido en el cuartel ante la "aparente elección de Rukia" para con Ichigo.
Ella le había dejado muy en claro que su decisión nada tenía que ver con el bizarro parecido que ambos parecían tener y él naturalmente le creyó siendo que si ese fuera el caso, Rukia sería entonces más gentil con él como solía serlo con el Shiba. Cosa que por supuesto no sucedía, para su desgracia.
— ¿Tú no irás?—preguntó algo receloso. Ichigo siempre se preguntaba ¿Por qué las encomiendas más tediosas quedaban a su cuidado la mayoría de las veces?
—Tengo asuntos que atender en el cuartel Ichigo—se justificó adivinando los pensamientos de Ichigo y antes de que éste reprochara algo más ella se adelantó—tenemos nuevos reclutas esta mañana y les daré una pequeña inducción para probar sus capacidades.
—Entonces te quedaras toda la tarde de pie observando a una horda de shinigamis entrenando ¿no es así enana?—para Ichigo era más simple de esa manera, Rukia solía exagerar un poco las cosas en algunas ocasiones aunque ella lo negara, esa por ejemplo era una. No importaba cuanto negara Rukia el parecido con Byakuya, éste sin lugar a dudas se hacía presente.
— ¿Está poniendo en duda mi autoridad Kurosaki?—las manos de Rukia volaron directamente a su cadera asumiendo una posición retadora.
—En absoluto Rukia—ok no le seguiría el juego a la enana, después de todo Ichigo no quería ganarse alguna paliza de la pequeña Shinigami, Rukia podía ser de tamaño compacto pero su fuerza física podía ser descomunal cuando se lo proponía.
Un semblante de satisfacción se instaló en Rukia junto a una mirada triunfal dirigida exclusivamente hacia Ichigo. En esa relación era demasiado obvio quien mantenía el mando y para nadie en toda la sociedad de almas, el mundo humano e incluso hueco mundo era claro que Ichigo no era ese alguien.
—Bien será mejor que reúna a mis hombres para irnos de una vez—soltó con total resignación. "trabajo era trabajo" después de todo.
Rukia lo instó a salir, ella por su parte necesitaba terminar con algunos registros de los nuevos reclutas para después reunirse con ellos en el área de entrenamiento.
.
.
Continuará…
Y la pregunta del millón aquí es ¿Por qué rayos estoy escribiendo esto si se suponía que me tomaría un hiatus del IR? Pues ni yo misma lo sé. Esta idea de repente llegó a mi cabeza después de ver Bones (que por cierto se ha vuelto mi pequeña obsesión desde entonces) de hecho este pequeño fic está basado en un episodio que vi justamente hoy.
Aclaro y es muy importante este fic será muy pequeño, de tan solo tres capítulos nada más. El resto lo subiré en el transcurso de la próxima semana y sí, en este fic Ichigo y Rukia están casados viviendo en la sociedad de almas, en los próximos capítulos daré algunas pistas de lo que le sucedió a los demás pero sin profundizar bastante en ello.
Gracias por leer y espero saber sus opiniones chicos hasta la próxima…
